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andysmilescar-blog · 7 years ago

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ÁNGELES

CAPITULO UNO

Primera parte

Canciones del episodio:

1_Over you de Miranda Lambert (Andy)

https://www.youtube.com/watch?v=aM97SV1gW38

‘’Dicen que en la vida de cada persona cae del cielo alguien en el momento cuando más perdido te encuentras.

Que cuando el camino deja de tener sentido, cuando las puertas se cierran, tus sueños se esfuman y tu cabeza se siente llena de dudas inclusive de quien eres, de que haces aparece en tu vida alguien para que todas esas preguntas que quedaron sin responder, se resuelvan… a lo menos por un tiempo. Mamá solía decirme aquella frase cada vez que empezaban los cambios, que nos volvíamos a mudar para comenzar de cero. Una forma simple de hacer una despedida algo no tan triste. ‘’Los cambios nos definen mucho, pero no del todo, toma esta nueva oportunidad como un viaje, una nueva aventura’’ Aunque nunca supuse que aquella frase tomase tanta importancia en mi vida para representar exactamente lo que hoy representa.

Dicen que ese ángel que aparece en tu vida, no se parece en nada a ese modelo de perfección que siempre esperaste. Pero que sin embargo es él quien te enseña exactamente lo que necesitabas. Un ángel que te propone la vida para arte una tregua por todo el dolor que has tenido que sobrellevar.

Pero dicen que los ángeles son del cielo y que solo bajan por momentos para enseñarte valiosas lecciones que logren encaminar tu vida y que cuando todo está donde debería estar, ellos simplemente se van tan rápido como aparecieron’’

---Inicio del Episodio---

Las aves cruzaron el cielo de invierno que cubría Saint Paul.

Había pasado un año desde que el ángel que llegó a la vida de Andy se esfumó en la nada. 365 días que la sonrisa que había recuperado se perdió y sus ojos no volvieron a brillar de la misma manera. El menor estaba recostado sobre su cama como la mayoría de los días. Como la mayoría de los días desde hace un año.

Desde aquel fatídico accidente el chico de ojos azules se recostaba en su cama exactamente a las seis de la tarde luego de encender una vela de vainilla y miraba el techo, pensando en que tal vez esas estrellas fosforescentes que estaban pegadas a la madera de su dormitorio, le harían creer que todo era un mal sueño. Un mal sueño que se prolongó demasiado. Porqué fingir que nada era real era lo que mejor podía hacer para no quebrarse, para sobrellevarlo en vida.

Lo curioso del chico es que cuando su novio se fue, sus ojos se apagaron automáticamente que ni siquiera hubo tiempo para llorar, fue demasiado rápido, demasiado doloroso como para poder expresarlo en lágrimas o en cantidad.

‘’Dicen por eso que el verdadero llanto es el que ni siquiera puedes soltar’’

Pero hoy toda la sensación de vació se incrementaba ya que se conmemoraba un año desde lo que ocurrió en la vida del joven. Mientras intentaba dormir sin ser molestado aprovechando que su madre había viajado como voluntaria hacia Haití para ayudar tras una catástrofe.

Así que ¿Por qué no usar la vela de vainilla? La vainilla siempre fue el aroma favorito de Tyler de todos modos. De alguna manera se sentía tan abrigado cuando estaba rodeado de aquel aroma. Además había prometido a mamá que estaría bien… porque siempre estaba bien, nunca fue una opción preocuparla a ella o a los demás. Y por esa razón era tan especial aquella sensación en la vida del menor. Todo marchaba como él quería, la soledad acompañaba casi todos los días, una soledad que era obligada por el mismo, puesto que el dolor era lo único que tenía de aquel hombre.

Y así eran sus días, y esperaba que fuese este igual a los anteriores, hasta que su móvil comenzó a vibrar sobre el mueble.

Andy: ¡No estoy! – cortó de inmediato para volver a cerrar los ojos, al menos hasta que el teléfono volvió a vibrar. – ¡Joder! Para que me llaman a esta hora, sabes que odio que me fastidien. Sobre todo precisamente hoy.

Annie: Andy, precisamente por esa razón te estoy llamando, me preocupa como estés, nos preocupa como estés. (Annie era una morena de cabello negro con la cual se habían vuelto cercanos el último año de secundaria) –El joven sabía que sus amigas lo estimaban mucho pero el dolor era algo que le gustaba sobrellevar solo. Y aunque aquellas chicas lo intentasen una y otra vez atravesar aquel círculo de Andy había sido uno tras otro intento fallido.

Andy: Estoy bien, Annie no tienen que preocuparse por mí. –Se calmó tal vez admitiendo que ellas no tenían culpa.

Annie: No estás bien, no lo estás y es justo que no lo estés pero queremos ayudarte, queremos al mismo Andy que tenía un comentario irónico y una risa demasiado contagiosa. Queremos al Andy que era feliz.

Andy: Annie…

Susurró el menor con esa sensación amarga recorriendo su garganta, cuando hablaban de querer volver a ser como antes para aquel pelinegro era casi como si intentasen borrar a Tyler de alguna forma y era por eso que no quería voltear la página, quería aferrarse al recuerdo, al menos hasta cuando ya no pudiese recordarlo. Pero esforzarse tanto también le pasaba la cuenta y sus ojos se empezaron a ver más y más cansados.

Annie: ¿Qué?

Andy: Te voy a cortar ¿sí?- No dijo nada más antes de apretar el botón de colgar, cuando Andy se saturaba solía utilizar la calma como un escudo así que simplemente decidió cortarle para no gritarle. Pero no pasaron ni cinco segundos cuando el teléfono volvió a sonar.- ¡QUÉ! –respondió en un grito.

Dakota: Andy, (Dakota era la amiga desde que iniciaron la secundaria y aunque solían chocar el uno con el otro constantemente se las arreglaban para no toparse tanto y llevarse mejor) estamos preocupadas es todo. Solo queremos que sigas viviendo tu juventud tienes apenas 19 años, entiendo que las cosas con Tyler pasaran como pasaran, pero te aseguro que él estaría más feliz si tan solo lo intentaras.

Andy: Ya lo intenté…

Dakota: No lo suficiente. Puedes hacernos un favor a todas y dejar de sentirte atormentado toda la vida, es horriblemente frustrante ayudarte y que simplemente no te importe.

Andy: No has pensando tal vez ¿no sé? ¡Que no quiero tu ayuda!

Dakota: Ya, pero nos deprimes a nosotras. –soltó sin pensarlo mucho. Algo muy común en la personalidad de aquella chica, que era tan cruel y exigente que muchas veces sobrepasaba la paciencia del mundo.

Andy: Adiós. –cortó y el móvil volvió a vibrar, a estas alturas estaba demasiado fastidiado así que simplemente desarmó el teléfono que resultaba más rápido que apagarlo. –Joder… -murmuró rodando los ojos antes de volver a cerrarlos.

En el otro lado de la ciudad Annie y Robbin miraron a Dakota alzando una ceja, estaba claro que en vez de mejorarlo solo lo había empeorado.

Dakota: En mi defensa estaba depresivo antes de que yo le hablara.

Annie: Recuérdame no volver a dejar que hable con Andy ¿sí? –miró a la chica de piel tostada y labios gruesos de nombre Robbin, quien era amiga de Andy desde la primaria)

Robbin: Hecho.

---Cambio de Escena---

Para nadie era un misterio lo del aniversario del luto de Andy, y por mucho que intentasen animarlo nunca había sido fácil sacarlo de su zona de confort. En casa de otra de las amigas del chico; Debbie y Sunshine estaban intentando animarlo por medio de un postre.

Debbie y Robbin conocieron al chico primero que la mayoría, y aunque Andy nunca midió sus amistades en tiempo si no en calidad, no podía quejarse realmente de esas dos sobre todo de Debbie, la castaña clara, que era demasiado temperamental y de sentimientos frágiles, aunque curiosamente se tomaba todo con demasiada ligereza al menos sobre su propia vida.

Debbie: Luego de verter media taza de azúcar se revuelve durante tres minutos… ¿siempre me confunde son tazones o tazas?

Sunshine: ¿No viene con dibujos? (Sunshine en cambio era la más alta del grupo y también conoció al pelinegro solo que un año antes de Annie, cabello castaño y con un bajo perfil sobre la vida y sobre ella misma.)

Debbie: Es el libro de mamá, ella misma anota las recetas. Aunque creo que esta es la receta de la tia Julieth. (mamá de Andy)

Sunshine: ¿por qué no pones un video?

Debbie: Las recetas siempre cambian, yo quería hacerle las galletas que siempre hace mi mamá.

Sunshine: ¿Esa receta no es la de la mamá de Andy?

Debbie: Lo es. Pero no quiero molestar a tía Julieth sé que está ocupada con eso de la ayuda en las catástrofes.

Sunshine: Mmmh… Pues yo creo que es una taza.

Debbie: ¿Y si es muy poco?

Sunshine: ¿Entonces un tazón?

Debbie: ¿y si es mucho?

Sunshine: Entonces ponle lo que quieras, eres increíblemente estresante, ya entiendo porque Andy decidió alejarse de todas. No sé cuál de nosotras está más loca.

Debbie: Él era igual a nosotras, por eso nos llevábamos tan bien. –Ambas se quedaron en silencio varios segundos.

Sunshine: Annie está texteando.

Debbie: ¿Qué dice?

Sunshine: Que viene en camino.

Debbie: Pregúntale si son taza o tazón.

---Cambio de Escena---

Andy estaba en la cocina de su casa, con el control de la televisión sobre la mesa un pote de cereal con leche y el teléfono en su oreja, hablaba con su madre.

Andy: Lo sé, estoy bien mamá no tienes nada de qué preocuparte… está bien, saludos a todos, cuídate mucho. –cortó y siguió mascando el cereal dulce que solía comprar siempre que se sentía deprimido, que básicamente era siempre. Todo estaba bien hasta que en las noticias empezaron a hablar de un accidente automovilístico, tragó saliva y miró su plato de comida mientras movía la mandíbula más y más lento hasta finalmente perder el apetito. Salió el exterior de su casa y dejó la leche en un plato que tenía para un gato que si bien no era suyo siempre venía a buscar algo de comida a la casa del chico.

Para cuando se levantó apareció su prima Ebba. Ella era hija de su madrina y tía al mismo tiempo. Una chica con rasgos muy similares al pálido chico de cabello negro.

Ebba: Es bueno ver que has salido de tu cuadrado de confort.

Andy: Tengo que alimentar al gato de la vecina.

Ebba: ¿Todavía viene?

Andy: Si, me hace compañía y juega con limón. –Limón era el hurón de Andy que se lo había regalado su mejor amigo para su cumpleaños 17. -¿Qué te trae por aquí Ebba? No es que me moleste tu presencia pero...

Ebba: Lo sé, lo del año. No vine por eso ambos sabemos que cuando necesitamos ese espacio es mejor no forzar para entrar o terminarías golpeándome, o algo parecido. –Andy asintió. –En realidad vine porque la tía Julieth me pidió que viniese, no quería que estuvieses solo a sí ella estaría más tranquila y yo lo pasaré genial porqué estaré con mi primo favorito de todo el mundo.

Andy: Soy tu único primo. –Alzó una ceja sin creerlo mucho.

Ebba: Si tuviera más primos seguirás siendo el favorito. –Argumentó sacándole una leve sonrisa al chico.

Andy: ¿Tengo alguna opción?

Ebba: No, probablemente llame tu madre para preguntarte si ya llegué.

Andy: Odio que ni siquiera me pregunte por mis cosas, pero está bien, al menos tú no intentas constantemente picar la herida. –La dejó entrar y cuando cerraron la puerta ella no pudo evitar preguntar sobre aquel último comentario.

Ebba. ¿Es eso lo que hacen las chicas?

Andy: No intencionalmente, pero que me llamen diciendo una y otra vez que necesito seguir adelante me hace sentir… no muy bien –miró el suelo. . -Sabes, es como si no importase que se haya ido.

Ebba: Eso no es cierto Andy, a todas nos agradaba Tyler nos hacía feliz verte tan feliz. –El pelinegro asintió y su prima le tendió sus brazos para un fraternal abrazo. Si bien eran primos siempre se habían mirado realmente como hermanos, sus madres siempre habían estado juntas por lo que ellos habían hecho lo mismo, básicamente crecieron juntos y fueron compañeros durante toda su educación primaria y secundaria.

Andy: !Estoy bien Ebba! Enserio.

---Cambio de Escena---

Michael el único amigo hombre de Andy, un atractivo chico moreno de ojos marrones que conocía a al ojos azules desde que tenían siete años, y aunque solo coincidieron el último año de secundaria juntos. Se encontraba lanzando una pelota de tenis hacia el cielo una y otra vez. Todos estaban en la casa de Debbie esperando que aquellas galletas salieran del horno antes de partir a verle al chico.

Michael: Sigo pensando que es una mala idea.

Debbie: Tú siempre crees que son malas ideas Michael.

Michael: Lo conozco desde que tengo siete años. Puedo asegurarte que cuando lleguemos solo lo haremos sentir peor, además recuerdan cuando fui a buscarlo hace un mes me lanzó agua con la manguera del patio.

Dakota: Michael, con lo horriblemente estresante que eres incluso yo te arrojaría agua… pero hirviendo. –El chico solo rodó los ojos.

Annie: Además tienes ese sentido del humor muy negro.

Michael: De que hablas soy muy gracioso.

Robbin: Le dijiste que Tyler no era tan atractivo.

Michael: Intentaba ser amable. Quería que se riese y me dijese algo como ‘’Ni que tú fueras un adonis’’

Annie: Acéptalo Michael eres la peor persona para alegrar curiosamente al único chico que te importa lo suficiente como para sentirte mal.

Michael: Es mi hermano, siempre he sido muy protector con él. –Todas la miraron como si no supiesen los verdaderos sentimientos del moreno por el ojos azules, puesto que el último año de secundaria Mike se había dado cuenta que estaba interesado emocionalmente en aquel muchacho.

Mientras Sunshine no se despegaba del móvil.

Sunshine: Ebba dice que Andy salió de su cuarto. Pero que si alguien menciona un lo siento, ella misma los despellejará vivos. Intenten no meter la pata.-Todos miraron a Dakota y Michael.

Dakota y Michael: ¿Qué?

---Cambio de Escena---

Andy y Ebba seguían compartiendo historias de la secundaria, había mucho material como para toparlo en una sola noche, en el fondo el pelinegro agradecía la visita de su prima que le permitía olvidarse de su dolor.

Andy: ¿Y cómo está Dallas?

Ebba: Como siempre por aquí y por allá, ya conoces a mi hermano, Ahora está con papá trabajando en unas cosas de contabilidad. No lo entiendo ¿a quién pueden gustarle los números?

Andy: A ellos claramente. ¿Y las cosas en la universidad cómo van?

Ebba: Bien, siempre me felicitan por mis lienzos. –hubo un silencio antes de mencionar otra cosa. -¿Cuándo retomarás los estudios?

Andy: No lo sé, sigo algo asustado de volver.

Ebba: ¿Andy Howells asustado?

Andy: Solo no lo menciones… Es un secreto.

Ebba: Deberías venir a mi taller de arte, mi profesora estará feliz de recibirte y al menos te servirá para despejarte y que salgas un poco, tomar aire fresco no te hará nada de mal. –Andy estaba por negar, pero su prima le interrumpió. –Antes de que me respondas piénsatelo ¿sí? –Y el muchacho inspiró y expiró rindiéndose a su prima.

Andy: Está bien. –respondió resignado. –Entre esas risas que solían sacarse entre primos escucharon la puerta tocar, afuera de la casa estaban todos los amigos de Andy, al menos los que estaban en la ciudad.

Dakota: Feliz cumpleaños. –dijo la chica con una sonrisa.

Andy: Estoy de cumpleaños en abril Dakota.

Dakota: Cállate y disfrútalo, maldito aguafiestas. –mencionó refunfuñando dejando las bolsa de galletas en las manos de Andy. Mientras entraban uno tras otro a la casa del chico.

Andy: Las echaría si no fuese porque Ebba hizo muy evidente que terminarían llegando aquí.

Annie: Solo queríamos venir a verte.

Andy: ¿y para que las galletas?

Debbie: Por cortesía, supongo. Tú siempre que no vas a ver llevas un jugo en caja. O llevabas puesto que básicamente ya no nos vas a ver.

Andy: ¿pueden dejarse de estas mierdas y ser honestos?

Michael: Pero Andy.

Dakota: Bien quieres honestidad chico listo, te daré honestidad.

Annie: Dakota, cierra la boca.

Dakota: No, tú quieres que seamos honestas, lo diremos. Hace un año que las cosas cambiaron y lo admito estás en tu derecho, pero ni siquiera nos hablas, no nos saludas, no nos vas a ver y cuando nosotras venimos nos haces sentir incomodas con todas tus frases melancólicas y toda la mierda que nos lanzas.

Robbin: Dakota cállate… -susurró intentando detenerla.

Dakota: Andy, eres nuestro amigo y nos preocupas. Pero mientras más intentamos acercarnos más pareces alejarte. ¿Estamos haciendo mal?

Andy: Es sólo que no quiero tu lástima Dakota. No la necesito.

Dakota: No es lástima Andy, es preocupación. Solo queremos al viejo Andy. Rendirle tributo a Tyler no te hará bien. Él no va a regresar, por mucho que lo desees, por mucho que todas lo quisiéramos así. Andy, él se fue y es todo… él que se quedó eres tú. Depende de ti mantenerte con vida o morir también. Y se prologó un silencio dóne sólo se escuchaba la respiración del pelinegro.

Andy: Váyanse. –susurró.

Annie: Andy solo queríamos.

Andy: ¡FUERA DE MI CASA! –Todo el mundo salió, pero antes de irse Dakota lo quedó mirando y negó con la cabeza al sentirse decepcionada por como actuaba al chico cada vez que intentaban llegar a él. Ebba le quedó mirando algo triste por ver a su primo tan equivocado

Andy: En momentos así desearía que mi relación con ellas acabase igual como acabó la de Mel. –Su prima no dejaba de mirarlo. -¡Qué! –Le reclamó azotando la puerta. –Tú te salvas porque mi mamá te obligó a estar aquí. –y subió a su cuarto.

---Cambio de Escena---

En el regreso a casa de Debbie las expresiones eran muy diferentes entre sí. Annie estaba molesta con Dakota por su falta de tacto. Dakota estaba fastidiada con la actitud depresiva y agresiva de Andy, Debbie estaba triste porque ni siquiera probó las galletas, Robbin no sabía que pensar aún estaba algo choqueada y Sunshine simplemente sentía pena por aquella forma de sacarla de casa.

Mamá de Debbie: ¿Cómo les fue? –Todos se encogieron de hombros.

Michael: Solo para que conste, están muy buenas. –admitió llevando una de las galletas dulces a su boca para disfrutarlas, Debbie le sonrió desganada pero agradecía el intento por animarla.

Dakota: ¿Quién se cree que es para echarnos como si fuéramos perros?

Annie: Corta ya.

Dakota: Sabes que tengo razón Annie.

Robbin: En realidad Andy no espanta así a los animales le gustan mucho. –Nadie prestó atención a aquello realmente.

Annie: Digo que basta, solo has metido la pata más y más.

Dakota: Estoy intentando animarlo.

Annie: Pues no lo parece, es como si le culparas.

Dakota: ¿Enserio no lo entiendes? Vaya que son lentas. –protestó. - Él se culpa a sí mismo.

Annie: ¿Qué quieres decir?

Dakota: Andy no está sufriendo aún porque lo extrañe Annie, sé que lo hace mucho, pero se está mortificando porqué se siente culpable. Es una forma de castigarse

Annie: No entiendo.

Dakota: Es que son muy estúpidas. –soltó. -El día del accidente, ese 21 de noviembre de hace un año, antes de que ocurriese todo ellos habían planeado casarse, Tyler le pidió matrimonio simbólico me lo contó esa misma noche por un mensaje donde salían hablando ambos. Luego pasó todo y Andy quedó en coma durante 3 días, para cuando se despertó Tyler ya estaba bajo tierra. No hubo un luto, no hubo un adiós para Andy, simplemente fue como si jamás hubiese existido. Como si despertase de un largo sueño y solo fuese eso. Un sueño.

Annie: ¿Por qué no nos dijiste esto antes? –Dakota se encogió de hombros.

Dakota: Supongo que no es una historia muy feliz.

Debbie: ¿Crees que siendo una idiota servirá de algo?

Dakota: Mi intención es hacer explotar a Andy, que se quiebre y simplemente lo suelte, lleva un año reteniendo el dolor. Y ya no sé cómo ayudarlo Annie. Sé que parezco insensible es solo que estos 12 meses lo he intentado de una u otra forma y nada parece funcionar.

Annie: No tenía ni idea.

Dakota: Nadie lo sabía. En ese sentido nos parecemos mucho él y yo. No tienen por qué saber que nos hace daño. –Todos se quedaron algo incomodos por como narró los acontecimientos Dakota, e incluso Michael sintió una leve presión en la garganta.

---Cambio de Escena---

Esa noche Andy no dejó de pensar en cómo había tratado a sus amigas, nunca había actuado de aquella manera pero su dolor lo estaba cegando hasta algún punto de no pensar mucho en lo que brotaba por su boca. De pronto el silencio fue invadido por una sutil lluvia que cubrió todo Saint Paul. Ya sin no poder conciliar el sueño nuestro chico se abrigó con la intención de agilizar las piernas un poco, tal vez caminar le haría bien y le devolvería el agotamiento.

---Comienza a sonar ‘’Over you de Miranda Lambert’’---

La introducción del tema Andy avanzaba por la ciudad tranquilamente, escuchando el sutil ruido de las gotas caer contra la capucha de chaqueta. Se acomodó un poco su chasquilla hacia atrás antes de inspirar profundo.

Weather man said: 'it's gonna snow', By now I should be used to the cold... Mid-February shouldn't be so scary, It was only December,.

El pelinegro comenzó a cantar mientras la música simplemente la dejaba llegar por medios de sus audífonos amarillos marca ‘’Sony’’. No había lágrimas, pero si había una gran melancolía en la forma de cantar que tenía el chico de los ojos apagados.

I still remember the presents,the tree, you and me

Andy mordió su labio inferior aguantándose la sensación triste, cerró sus ojos y los abrió algo húmedos.

But you went away, How dare you?, I miss you, They say I'll be okay, But I'm not going to ever get over you...

Un suspiro antes del coro, cada paso lo hacía sentir ligero pero de una forma muy pausada. ¿Nunca has sentido que se mueven al ritmo de la música? Así era para el joven. Los flashback volaron a su cabeza como siempre desde hace un año y recordaba aquellos momentos, en como Tyler armaba una navidad llena de magia para nuestro chico, ya que era su época favorita.

Living alone, here in this place, I think of you and I'm not afraid, Your favorite records make me feel better, Cause you sing along with every song, I know you didn't mean to give them to me...

La magia se fue el día en que Tyler murió y las cosas nunca volvieron a ser lo que fueron. Podía verse a sí mismo sonreír para tranquilizar a su madre. Como el mundo se volvió vació, lo suficientemente agotador de soportar todo el día, por eso nuestro chico solía encerrarse no tenía que creer que debía seguir cuando realmente no sabía cómo hacerlo.

But you went away, How dare you?, I miss you, They say I'll be okay, But I'm not going to ever get over you...

Se detuvo en la plaza principal donde vio a una chica esperar bajo lo que quedaba de techo con su mochila sobre su cabeza, y apareció su novio con un paraguas lo suficientemente grande para ambos y tras darle un suave beso se esfumaron hasta quien sabe dónde.

It really sinks in, you know, When I see it in stone...

Mordió su labio inferior por el interior, y se quedó recordando como Tyler solía venir a buscarlo bajo la lluvia. Lo extrañaba tanto.

But you went away, How dare you?, I miss you, They say I'll be okay, But I'm not going to ever get over you...

No supo ni cómo llegó a terminar sentado en las escaleras de un edificio cubriéndose de la lluvia que se había tornado mucho más fuerte. La canción terminó a medida que el ruido del agua contra los tejados se hacía más fuerte hasta finalmente cubrir todo rastro de melodía.

Andy: Excelente. –dijo con sarcasmo mientras miraba el aguacero.

---Cambio de Escena---

La lluvia caía enfurecida sobre Saint Paul en Minnesota. Nuestro chico miraba las goteras moviendo su pie derecho aburrido, ya cuando estaba demasiado agotado de esperar que el agua dejase de caer, se decidió a irse a casa de todos modos, no llevaba mi 10 metros avanzados cuando desde un auto le gritaron. Volteó, pero no se percató al inicio de quien se trataba.

Josh: ¡Howells! –gritó un hombre con una gabardina. -¿Qué haces bajo la lluvia? –Andy entrecerró los ojos intentando ver atrás de esos faroles y se percató de que era su ex profesor antes de que congelase su carrera.

Andy: ¿Señor Brackner? –preguntó cubriendo su frente para poder difuminar la luz que llegaba sus ojos, mientras el agua humedecía sus cabellos y mojaba su pálido rostro.

Fin de la primera parte.

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