#esto es un grito de ayuda
Explore tagged Tumblr posts
Text
The Lorax spanish dub ⋆ fun facts(?) ⋆
═════════════════════
┈─ Hello! This post is completely different from my other posts, but I wanted to share this since it's like 6am, and it seems like I can't draw anything good lately. 🤷 So I need a distraction.
Tricky title, this is just other roles their actors and actresses have done.
I had to say, the images here don't belong to me. Credits to their original creators.
﹏﹏﹏﹏﹏﹏﹏﹏﹏﹏﹏﹏﹏﹏﹏﹏﹏﹏﹏﹏﹏
1.- Ted - Alfonso Herrera.
﹏﹏﹏﹏﹏﹏﹏﹏﹏﹏﹏﹏﹏﹏﹏﹏﹏﹏﹏﹏﹏
2.- The Once-ler - Arturo Mercado (Jr.)
✦ A fun fact here: Old Once-ler is voiced by Arturo Mercado, and young Once-ler is voiced by Arturo Mercado Jr. They're father and son.
﹏﹏﹏﹏﹏﹏﹏﹏﹏﹏﹏﹏﹏﹏﹏﹏﹏﹏﹏﹏﹏
3.- Audrey - Sandra Echeverría.
✦ These obviously aren't all the characters she has done. I didn't find any image of her characters, so I had to take a screenshot from the wiki. 🤕
﹏﹏﹏﹏﹏﹏﹏﹏﹏﹏﹏﹏﹏﹏﹏﹏﹏﹏﹏﹏﹏
4.- Grammy Norma - María Santander.
﹏﹏﹏﹏﹏﹏﹏﹏﹏﹏﹏﹏﹏﹏﹏﹏﹏﹏﹏﹏﹏
5.- Once-ler's mom - Patricia Palestino.
﹏﹏﹏﹏﹏﹏﹏﹏﹏﹏﹏﹏﹏﹏﹏﹏﹏﹏﹏﹏﹏
6.- O'Hare - Axel Kuschevatzky.
✦ He doesn't have a lot of characters. But they're all villains!! That's interesting, ig(??
﹏﹏﹏﹏﹏﹏﹏﹏﹏﹏﹏﹏﹏﹏﹏﹏﹏﹏﹏﹏﹏
𖦹Extra 1
✦ Danny Devito voices The Lorax in spanish too! Also, other languages as well.
𖦹Extra 2.- Brett - Pablo Sosa.
✦ The most disturbing fact I found... 💔 /hj
Bobby nooooooo
#lorax fandom#the lorax#onceler fandom#onceler#the onceler#onceler 2012#once ler#lorax movie#the lorax movie#lorax 2012#oncie#oncelings#lorax#lorax 2023#spanish dub#cursed#ay no#ay noo#esto es un grito de ayuda#pobre bobby 🙏🙏#eu ya me olvide si es que he publicado algo que no sean dibujos#??????#ni idea
23 notes
·
View notes
Text
tenía tumblr abandonado desde hace 3 años Tengo q actualizar las etiquetas a las q sigo
toda mi estadía en tumblr me acostumbré a q nadie q me conociera en internet me siguiera acá para poder publicar las cosas q me gustan y ver las cosas q me gustan realmente sin sentir vergüenza o miedo así q agradecería q no vean mis publicaciones si gracias jahdjdj
1 note
·
View note
Text
creo que lo único que me hace querer una pareja es poder llamarle para que me ayude a levantarme del inodoro cuando se me duermen las piernas
#el coso donde te lavas las manos esta flojo y si pongo mi peso ahi se cae.#esto es un grito de ayuda se me durmieron las piernas#nero habla
5 notes
·
View notes
Text
según yo hoy iba a hacer drafts, pero terminé por hacer fichas de muses que llevó todo el año haciendo y parece que nunca terminaré, pero aún así me dan ganas de abrir un starter con una de las muses que recién subí lololol
#es esto desahogo o un grito de ayuda? idkkk#pero al menos ya me puse al corriente con lo de clv de la primera gen veda jajaja#( shut up. kei — mun talks )
0 notes
Note
Me imagine a enzo y su novia en el escenario que escribiste ayer donde el le daba nalgadas hasta que tenga el culo rojo y ella está puro lagrimear AHORA IMAGÍNATE ESTO este mismo escenario donde ella comienza a llorar fuerte y desesperarse. Enzo se da cuenta de esto y enseguida frena y la sienta en la cama pero ella esta tan sensible que el roze también la hace llorar, la culpa y lo mal que se sentiría enzo de lastimar a su novia de verdad 100% el se pone a llorar por esto
No se si los ask tienen que ser tan específicos jajaja pero lo estaba pensando y quería compartir la angustia
+18! Posible subspace.
Enzo no suele medir la fuerza que utiliza en la cama porque sabe que sos capaz de detenerlo en cualquier momento, ya sea con una palabra de seguridad o dos toques sobre cualquier parte de su cuerpo en caso de que no puedas hablar.
Sólo te habrá escuchado pedir que se detenga en dos o tres ocasiones aisladas porque jamás permite que llegues al punto de quiebre real. Está acostumbrado a hacerte llorar y que pierdas la capacidad de hablar o formas oraciones coherentes, pero...
Luego de una serie de 10, 15 o 20 nalgadas (perdió la cuenta luego de que dejaras de contar debido al estado desastroso y patético en el que te encontrás) deja de oír tu llanto y oye tus gritos ahogados contra el colchón. Está a punto de continuar y arañar las marcas que parece haber grabado a fuego en tu piel, pero tu respiración agitada es alarmante.
Toma tu mandíbula para examinar tu rostro -en cuanto logra apartarte de las sábanas humedecidas con lágrimas y saliva-, su preocupación llevándolo al borde del pánico. La forma en que temblás no es normal y mucho menos lo es tu expresión, con tus párpados enrojecidos cerrándose e impidiéndole ver si en tus ojos llenos de lágrimas hay aún algún atisbo de lucidez.
Te ayuda a reincorporarte y cuando logra hacer que te sientes el infierno se desata, aunque de manera gradual. Al principio sólo te estremecés y tu rostro se contrae en una mueca de dolor, pero luego tu cuerpo se encoge súbitamente y ve cómo tomás aire antes de que un grito ensordecedor abandone tus labios.
Intenta calmarte, recordarte que respires profundamente y exhales en cuatro tiempos, todo mientras sus manos apenas tocan tu cuerpo para no abrumar aún más tus sentidos. No comprende qué te mantiene tan alterada (se reprocha tal pensamiento porque ¿acaso no acaba de castigarte brutalmente?) hasta que ve la forma en que tus dedos se enredan en la sábana y la fuerza que ejercés con tus brazos, como si quisieras ponerte de pie y tus piernas no respondieran.
Se reprende mentalmente al empujarte contra el colchón, pero es la única forma que viene a su cabeza para lograr que te recuestes sobre tu costado. Examina la piel de tus muslos y tus glúteos y oh... Le encanta ver la impresión de su mano en tu cuerpo, la forma en que los vasos sanguíneos debajo de tu piel se rompen y afloran en la superficie diversos tonos de rojo y violeta, pero no es el momento de apreciar su obra.
Sus manos sobre tu cuerpo hacen que te sobresaltes e intentás huir pero te detiene sujetándote con fuerza. Repite tu nombre una y otra vez, los tiernos apodos que suele dedicarte fuera de la cama, masajea tus brazos y tu espalda para obtener una reacción. Cuando tus ojos encuentran su rostro se esfuerza por no perder tu atención y hace un gesto con su mano para que imites la forma en que respira, apenas perceptible con tu visión borrosa.
Eventualmente dejás de llorar y tu respiración vuelve casi a la normalidad -sin contar los espasmos que aún sacuden tu cuerpo y algún que otro pequeño sollozo-, pero aprisionás su muñeca entre tus dedos y tus uñas dibujan marcas en su piel cuando intenta ponerse de pie. El dolor lo obliga a morderse la lengua pero le parece más que justo, así que se estira hasta que sus extremidades duelen para tomar algo de la mesita de noche.
Negás con la cabeza al ver el producto, aterrada.
-Por favor, amor, te va a aliviar- jura mientras vuelve a colocarte sobre su regazo. El aroma a menta del bálsamo que utiliza sobre lesiones de este tipo normalmente hace que le ardan los ojos, pero en este momento la irritación en los mismos es producto de las lágrimas que intenta no derramar.
La culpa lo corroe mientras masajea tu piel con movimientos circulares y al oír tus quejidos.
(Perdón, creo que cuando leí la definición de drabble mi cerebro interpretó "Todo lo que puedas escribir pero si no le ponés portada no cuenta como one-shot").
#letters to enzo#deep in thought#deep answers#enzo vogrincic#enzo vogrincic smut#enzo vogrincic x reader#lsdln cast
55 notes
·
View notes
Text
Mientras los residentes avanzan apresuradamente hacia sus respectivos refugios, una presencia distinta comienza a marcar el aire. El sonido de motores se mezcla con el caos de las calles, y poco a poco se distingue el retumbar de camiones militares acercándose. Dos helicópteros se deslizan sobre el pueblo, sus hélices cortando el aire con fuerza, dejando un rastro de luz en la penumbra. El alivio que algunos sienten al reconocer la presencia de la fuerza militar es inmediato, pero también hay incertidumbre. ¿Será esto una ayuda real o una última medida desesperada?
El primer camión se detiene con un chirrido de frenos en la calle principal, levantando una nube de polvo. Es un vehículo blindado, imponente, pero lo que realmente captura la atención es el segundo camión. Este está repleto de hombres uniformados, armados hasta los dientes, con sus rostros ocultos tras máscaras. Al bajar, se posicionan rápidamente, desplegándose con una coordinación precisa, cerrando cualquier salida visible.
El sonido de las armas se mezcla con los gritos de los infectados que avanzan sin cesar por las calles. Los hombres comienzan a disparar, apuntando a las primeras oleadas que se aproximan. Los disparos retumban en el aire, los cuerpos caen, pero no se detienen. A cada paso que retroceden los infectados, más parecen surgir de las sombras, de los rincones oscuros de la ciudad. Los helicópteros giran sobre el pueblo, iluminando las calles con destellos cegadores, mientras los soldados refuerzan las barricadas, colocando bloqueos en las entradas a los vecindarios.
Pero a medida que los residentes se agrupan en sus refugios, una sensación extraña se hace presente en el aire. La duda que había flotado mientras los camiones militares se posicionaban sigue latiendo en el fondo de sus mentes, pero el sonido de los disparos y los helicópteros se va desvaneciendo. La seguridad del refugio, aunque temporal, ofrece algo que el caos exterior ya no puede. Dentro de las paredes, la angustia comienza a disiparse, aunque las preguntas sobre el futuro persisten. En ese silencio, hay una certeza: la ayuda ha llegado, al menos por ahora. El pueblo está sellado, pero por un momento, la lucha parece haberse quedado fuera.
20 notes
·
View notes
Text
TWST: Lost in the Book: The Nightmare Before Christmas - Episodio 1-5 (traducción español)
Lost in the Book with Tim Burton’s The Nightmare Before Christmas ~ El comienzo de Halloween ~ Episodio 1 - ¡Pesadillas entrelazadas!
Episodio 1-5 – Celebremos este encuentro con un beso
[ ♪ ]
BOSQUE
LEONA: ¿Y tú quién eres?
???: Encantado de conocerles.
SKULLY: Mi nombre es Skully J. Graves.
Celebremos este encuentro con un beso.
No… Quizás no sea el mejor momento para decir algo así.
JAMIL: Creo que no lo estás entendiendo.
SEBEK: Pareces sospechoso. Como hagas algún movimiento raro, ¡ya sabes lo que te espera!
SKULLY: Nunca pensé que nadie me hechizaría antes de presentarse.
JADE: Jamil y Sebek no dudan en actuar, han conseguido contenerle en cuanto han comprendido la situación.
MALLEUS: Un extraño lugar y extraños atuendos, además de una cría humana extraña…
VIL: Lo mires como lo mires, me da mala espina.
SEBEK: ¿Has dicho que eres Skully? Responde claramente o tu vida peligrará.
¿¡Todo esto es obra tuya!?
SKULLY: ¿Cómo podría?
Yo sólo estaba mirando un mercadillo de libros usados en Pueblo Piedemonte, y cuando quise darme cuenta estaba en este lugar y con esta ropa.
Lo último que vi en el pueblo fue… eh… eh… Ah, sí, un libro extraño.
RIDDLE: ¿Que viste un libro extraño en el mercadillo de Pueblo Piedemonte? O sea que estás en la misma situación de nosotros, ¿no?
AZUL: Bueno, eso dice él…
SKULLY: ¿Ustedes cómo han llegado aquí? ¿Vienen de Pueblo Piedemonte?
EPEL: Pueees, somos de Night…
JAMIL: ¡ESPERA!
EPEL: ¡Buf!
SEBEK: ¡Imbécil, no reveles nuestra identidad a un completo desconocido! ¡No puedes ser tan confiado!
JAMIL: Exacto. Esto es una emergencia, será mejor no revelar nuestra información personal y descubrirnos…
GRIM: ¡Yo soy el gran Grim!
YUU: Yo soy Yuu / Y va y dice su nombre…
SKULLY: Encantado de conocerles, Grim y Yuu.
JAMIL, SEBEK: ¡Pero bueno!
LEONA: Estos no tienen ni una pizca de cuidado…
SKULLY: Veo que desconfían de mí. Bueno, es comprensible.
Ustedes se conocen desde hace tiempo. Parece que estoy solo otra vez… (aquí también).
No les preguntaré más detalles, pero me gustaría que al menos me dijesen sus nombres.
Si no, ¿cómo podré saludar a gente tan maravillosa?
Por favor, se lo suplico encarecidamente…
TODOS: …
RIDDLE: … Queda declarado el estado de emergencia. ¡Convoco una reunión de delegados y subdelegados!
LEONA: Sí. A ver si saco algo de provecho de esa poca cabeza que tenéis.
*se van*
SEBEK: Delegados y subdelegados…
Es decir, ¡todos menos nosotros, los de 1º!
YUU: Confío en ellos… / Me siento un estorbo…
EPEL: Me siento aliviado y frustrado a la vez… ¡Ah!
Si-sigue ahí atado mirándonos…
GRIM: Tiene una cara de pedir ayuda a gritos que no puede con ella…
TODOS: ¡Qué mal rollo!
—
RIDDLE: Y bien, ¿cómo lidiamos con esta persona?
TREY: No estoy seguro… nuestra memoria es vaga, así que tampoco podemos negar lo que dice.
IDIA: No, no no no no… No puedo confiar en alguien tan turbio ni en broma. ¡Habla como un viejo!
AZUL: Y lo dice el que habla como un samurai.
Parece que tiene más o menos la misma edad que nosotros, aunque se pasa de cortés…
JADE: Puede que esté mintiendo o puede que no.
JADE: Podría “preguntarle” cordialmente su situación… ¿o es demasiado pronto?
VIL: ¿Sí? Yo creo que no hay más que hablar, haz que desembuche. Cuanto antes, mejor.
JAMIL: Vil, eres más brusco de lo que aparentas. Creo que aún es pronto para recurrir a la fuerza.
LEONA: Bueno… tenga segundas intenciones o no, podremos controlarle fácilmente si se da la ocasión.
MALLEUS: Sí. Tenemos todo lo necesario.
LEONA: En resumen… ¿vamos con ese plan?
TODOS: *asienten*
[ ☆ ]
Siguiente → Episodio 1-6 ⏰
↪ Lista de capítulos
˚ ༘♡ ⋆。˚ ༘♡ ⋆。˚ ༘♡ ⋆。˚ ༘♡ ⋆。˚ ༘♡ ⋆。˚ ༘♡ ⋆。˚
⚠ Por favor, no uses mis traducciones sin permiso. Puedes usarlas con créditos ⚠
˚ ༘♡ ⋆。˚ ༘♡ ⋆。˚ ༘♡ ⋆。˚ ༘♡ ⋆。˚ ༘♡ ⋆。˚ ༘♡ ⋆。˚
¡Espero que os haya gustado y podéis sugerirme correcciones en los comentarios o mensajes!
#twisted wonderland#twisted wonderland traducción español#twst#twst traducción español#twst fan translation#fan translation#traducción español#twst: lost in the book the nightmare before christmas#jamil viper#leona kingscholar#riddle rosehearts#vil schoenheit#azul ashengrotto#idia shroud#trey clover#jade leech#grim#epel felmier#sebek zigvolt#malleus draconia#skully j graves
19 notes
·
View notes
Text
Yandere platónico Nanami y lector@: escondite(TRAUDCCION)
Pedido:Esta es mi última petición y espero que disfrutes de tus vacaciones. ¿Puedo solicitar más Nanami platónico Yandere en el que un día le grita a lector y deciden esconderse de él dentro de la casa y Nanami piensa tontamente que escaparon? Sólo salen después de escuchar el alboroto.
Kento había tenido un mal día, uno bastante malo, lo dejo irritable y definitivamente sin ganas de hacer mucho. Simplemente llegar y pasar tiempo con (Lector@).
Pero eso no fue excusa para lo que pasó después
(Lector@) ya se había acostumbrado bastante al... estilo de vida que Kento le obligo hizo mantener por su seguridad y protección, sin embargo seguía siendo una persona joven, seguía aprendiendo cosas--
Por lo que no había forma en la que supiera que retomar una pequeña discusión que habían tenido más temprano (sobre la academia de hechiceria. Incluso después de los acontecimientos de Kioto y Geto, querían volver a la academia, ¿cuándo cuál era el punto? Los de su año habían sido expulsados. ¿Esperaban que los enviaran solos? de ninguna manera)) habria sido la gota que derramó el vaso a la calma escasa del hombre. Terminando la interacción de un solo y contundente grito en su dirección.
Kento no pretendia gritar ni sonar brusco, pero toda la tension acumulada del dia, las horas extra y el hecho de que solo queria descansar y no lidiar con nada mas le hizo no darse cuenta de que Lector@ no solo se sobresalto, sino que se hecho para atras, en miedo...
no otra vez...
Kento ya había pasado por esto al principio, cuando recien los trajo a casa, como se alejarian de el, se sobresaltarian cuando el intentara acercarse o darles afecto, cuántas veces intentaron escapar de casa...los castigos que le siguieron--
Todo habia valido la pena hasta ahora, finalmente lo estaba aceptando como padre, a quererlo de vuelta, a verlo de forma similar a cuando el lo supervisaba en la academia--
y el lo arruino.
Se prometio a sí mismo que cuando regrese de este turno, le compensará lo de ayer (ya esperando que quiera salir de su habitación para esa hora) y así arreglar las cosas y no volver a empezar de cero.
Lo que no esperaba cuando regresó fue darse cuenta de que había dejado la puerta abierta... y sintió que el poco color que tenía en su rostro se le escapaba...
Entró rápidamente y revisó el cuarto de Lector@, estaba abierto, no había nadie, se fue a su habitación, nada, debajo de su cama, nada, no había nadie en la cocina ni en la sala, sacó todo, hizo un gran lío y nada.
y como se había portado tan bien había apagado las cámaras de seguridad por un rato. así que si se había ido no tenía idea de adónde fue....
Lector@ había huido, todo por su culpa.
todos los posibles escenarios empezaron a aparecer en su cabeza, que pasaria si ell@ se topaban con alguna maldicion? se habian desacostumbrado demaciado a pelear por estar viviendo con el, estaria indefenso! nisiquiera se habian curado adecuadamente de los eventos del año pasado! o estando solo por ahi, en japon, con hambre, con frio, con todos los deprabados que ahi por ahi...
¿deberia pedir ayuda a los demas hechiceros?¿pero que pasa si ven la relación que el tiene con Lector@ de mala manera? ¿o si Gojo se enteraba que el los mantenia bajo llave cuando le dijo que se alejara de ellos?¿y si le dice a las autoridades normales?malinterpretarian todo y querrian apartarlos de el!¡o peor!¡regresarlos a la academia donde correrian mas peligro!
Kento empezo a entrar en panico, se puso de rodillas, se tiro del pelo y, como ayer, dejo salir un grito de pura frustración ante la situación, pero con muchas mas emociónes que solo ira.
desesperacion, tristeza, miedo, incertidumbre--
fue entonces cuando lo oyo.
como algo se movia en su cuarto.
aún si el busco a Lector@ a fondo de todo su departamento, no busco en lugares que, por mera costumbre, no veia por ser obvios, como el armario. y ahora de oia como alguien caminaba desde su cuarto hasta donde el estaba (el living, hecho un desastre) y cuando esa persona aparecio se dio cuenta...era Lector@.
ell@ lo miraron fijamente antes de soltar un pequeño "escuche mucho ruido..."
Nanami estaba perplejo, pero trato de componerse rapido y actuar "normal" mientras de poniande pie y se dirija a ellos con paso lento. los asustó una vez, no lo haria de nuevo.
Kento estaba asombrado de que Lector@ haya decidido solo esconderse ¿se habra dado cuenta que la puerta estaba abierta?¿era una especie de plan?¿o era sincero? no importaba ahora.
Nanami casi no aguantaba las lágrimas cuando se puso mas a su nivel para darles un abrazo mientras susurraba lo que mas temia "..pense que te habias ido...".
afortunadamente, mientras ellos le regresaban el abrazo, pudo darse cuenta de que no tendría de que preocuparse. ellos no se irian.
el los acostumbro mucho a depender de el, ellos lo aman, el lo sabe, muy en el fondo ellos lo aman tanto como el a ellos, saben que aqui es mejor, que hace esto por su bien, como buen padre. no lo dejaran porque saben que no tiene sentido hacerlo...el los encontrara tarde o temprano...no pasaron juntos por tanta miseria para parar ahora...
ellos estaran juntos.
se aseguraria de ello, apartir de ahora, pase lo que pase.
____
Gracias por leer ❤️
#drabbles#genero neutro#jjk#jjk x reader#jjk x y/n#jujutsu kaisen#jujustu kaisen#jujutsu no kaisen#español#neutral reader#platonic yandere#yandere platonic#platonic yandere nanami#yandere nanami x reader#yandere nanami#nanami x reader#jujutsu nanami#jjk nanami#platonic nanami#spanish
24 notes
·
View notes
Text
Familia al instante (parte 3)
La ayude a comodorase sentada contra las almohadas mientras yo prepare todo lo necesario podía escucharla gemir mientras se esforzába por traer a su bb al mundo. Cuando tuve todo volví y pude verla pujando se veía tan sexi. Me posicióne entre sus piernas y ví como ya casi asomaba la cabeza del bb. Le di ánimos y le dije que ya todo acabaría y tendría a su hijo en la próxima contracción la cabeza comenzó a asomarse ella grito pues era obvio que esta era la parte más dolorosa un gran empujón más y la cabeza salió completamente revisé el cordón y todo parecía estar en orden. La ayude a que tocara la cabeza para que se de ánimos y puje una vez más con todas sus fuerzas y eso hizo y finalmente el bb salió completamente era una niña la limpie con una toalla y corte el cordon. Ella la recibió y llorando me agradeció. Yo iba a retirarme pero me dijo que aún no terminaba yo solo la mire y note que su vientre seguía rígido así que ahi lo comprendí eran dos bbs.Ella me pidio ayuda para pararse dejando a la bb recostada en la cama pues luego de beber leche de los pechos de su madre se había dormido. Nos dirigimos al baño ella se metió debajo de la regadera y yo hice lo mismo detrás de ella. Comenzó a mover sus caderas apoyada en mi sentía sus tetas contra mi pecho mientras mis manos estaban en su cintura. ella agarro una de mis manos y la coloco en su entrada pidiendome que vuelva a tocarla y eso hice meti dos dedos y se sentía apretada a pesar de haber tenido un bb ella se aferró mientras yo.movia mi mano y otra contracción venía. Ella acabo en mi mano con un sonoro gemido y yo comencé a tocar mi erección pues dolía ella lo noto y sin decir nada se arrodillo en la ducha con sus piernas bien separadas agarrando mis muslos y se lo metió en la boca no puede evitar maldecir pues se sentía muy bien ella realmente sabía cómo hacerlo. Comenze a moverme lentamente dentro de su boca y a ella pareció gustarle así que agarre sus cabellos y la movi a mi ritmo cuando otra contracción hizo que se aferrará más a mis muslos y gimiera sobre mi polla eso me volvio loco y acabe dentro de su boca ella se trago todo sin decir nada. La escuche gemir nuevamente y esforzarse estaba pujando al segundo bb . Me agache con ella en la ducha y ella se quedó a 4 con el agua callendo en su espalda. Pude sentir al bb muy cerca sabía que sería más rápido otra contracción más y la cabeza salió todo estaba en orden así que en la siguiente salio completamente era un niño ella se sentó exhausta mientras yo buscaba la tijera y una toalla para el bb. La cargué estilo nupcial a ella y al bb y los acomode en la cama la cual le puse sábanas limpias. Ella se acostó con sus bb y me hizo señas de que me metiera con ellos pues había estado en su momento más íntimo yo dude no sabía ah dónde nos llevaría esto pero algo en mi quería quedarse con ellos saber que estarían bien así que finalmente me metí en la cama y la abrace por detrás rápidamente ambos nos quedamos dormidos pues había sido un dia de grandes emociones. Sin pensarlo ese día había encontrado a mi familia pues ahora dos años después estábamos esperando nuestro tercer bb y seguramente lo tendríamos en casa tal y cómo la primera vez.
#contractions#giving birth#birth denial#birth fiction#birth kink#pregnant#inconvenient birth#birth roleplay#pregnant roleplay
8 notes
·
View notes
Text
El Dolor del Bullying en la Comunidad LGTBIQ 🏳️🌈🏳️⚧️
▪️Cuando escuchas por primera vez la palabra "maricón" dirigida hacia ti, es como una cuchillada al corazón. Recuerdo estar en el patio del colegio, rodeado de niños que se reían mientras pronunciaban esa palabra con un odio que no comprendía. "Eres bollera porque no te ha follado un hombre en condiciones" era otra frase que resonaba en los pasillos, dichas con una crueldad que me hacía sentir menos humano, menos digno de amor y respeto.
El bullying en la infancia y en la adolescencia no es solo un conjunto de palabras hirientes; es una forma de violencia que deja cicatrices profundas. "Puto travelo", "monstruo", son etiquetas que te marcan, que te persiguen, que te hacen sentir que no tienes lugar en el mundo. Para quienes somos parte de la comunidad LGTBIQ, estas palabras no son solo insultos, son balas que se incrustan en el alma y nos paralizan.
Crecí sintiéndome diferente, no por elección, sino porque el entorno me lo recordó constantemente. Cada "maricón" y cada "bollera" susurrados a mis espaldas se convertían en un recordatorio de que nuestra existencia era vista como un error, como algo que debía corregirse o, peor aún, ocultarse. A medida que los años pasaban, el miedo a ser quien realmente soy se arraigaba más profundamente. Me convertí en un experto en construir muros a mi alrededor, en esconder mis verdaderos sentimientos por miedo a ser rechazado.
La adolescencia, una etapa ya de por sí complicada, se volvió un infierno. Las palabras crueles de mis compañeros no solo me herían en el momento, sino que se quedaban grabadas en mi mente, repitiéndose una y otra vez. Me convencí de que era un "monstruo", que no merecía amor ni comprensión. Esta autoimagen destructiva moldeó mi vida, mis decisiones, y la forma en que me relacionaba con el mundo.
Pero hoy, mirando atrás, entiendo que aquellas palabras eran un reflejo del odio y la ignorancia de los demás, no de mi valía como persona. Cada "puto travelo", cada "eres bollera porque no te ha follado un hombre en condiciones" eran intentos de apagar nuestra luz, pero en mi caso no lo lograron. Porque a pesar de todo, seguí adelante. Encontré mi fuerza en mi vulnerabilidad, en aceptar quién soy sin disculpas.
El bullying en la comunidad LGTBIQ es una sombra que amenaza con seguirnos toda la vida, pero también puede ser una fuente de fortaleza. Aprendí a rodearme de personas que me aman por quien soy, no a pesar de ello. Aprendí que mi identidad es algo hermoso, digno de celebración, no de vergüenza.
Si pudiera decirle algo a mi yo más joven, le diría que esos insultos no definen quién eres. Que tu valor no está determinado por la ignorancia y el odio de los demás. Le diría que, aunque el camino sea duro, hay luz al final del túnel. Y esa luz, eres tú.
Pero no puedo ignorar la realidad más dura, el gran elefante en la habitación que nadie quiere ver. Cada año, miles de adolescentes LGTBIQ sufren tanto que sienten que la única salida es quitarse la vida. Las palabras hirientes, la exclusión, el odio, llevan a muchos a una desesperación tan profunda que se sienten sin esperanza. Estas pérdidas son una tragedia inmensa, un grito de auxilio que como sociedad estamos fallando en responder.
Si estás leyendo esto y te sientes solo, herido o desesperado, por favor, busca ayuda. Habla con alguien de confianza, un amigo, un familiar, un terapeuta, o llama al 024 y pide ayuda. No estás solo. Tu vida importa. Eres valioso y digno de amor exactamente como eres. No dejes que el odio de otros apague tu luz.
MesDelOrgullo #StopBullying #DerechosLGTBIQ
12 notes
·
View notes
Note
Que pasaría si....?
Mexica reviviera en nuestro mundo actual, y se encontrará con SEDENA
Una historia rapidita, si puedo pedirle 🥺🥺🥺
Tengo una historia sobre ello, es mas es parte del canon de la historia original, pero como aun no lo expongo al 100% te pondré el que pasaría si Mexica revive de la nada y busca su venganza sobre los indígenas que buscaron matarlo.
_____________________
(Para darle mas poder, Centro esta aun desaparecido, por lo cual solo están los hermanos Norte y Sur)
SEDENA se encuentra en la estación principal militar, estaba a punto de salir, al escuchar gritos y pedidos de ayuda, al llegar al punto de origen de todo el caos, sus ojos se iluminan, como si viera a un dios, como si viera a alguien poderoso, sus ojos estaban admirando, a su viejo amor, su Tlatoani Mexica.
-Al fin una cara que conozco- Mexica avienta al suelo con violencia a un joven soldado- No sabes lo preocupado que estoy al ver a puro invasor en nuestro hogar Océlotl, creí que habíamos perdido todo, pero me alegra ver que sigues vivo.
SEDENA estaba maravillado, verlo vivo con la misma imagen de siempre lo hizo arrodillarse ante su gobernante, sin siquiera quitarle la vista de encima.
-Mi...mi Tlatoani....realmente es usted...-Aun no podía confirmar, el recuerda el pasado, recuerda su muerte y lo que termino en guerra, oírlo, verlo caminar, verlo sonreír por su presencia, era todo increíble.
-Claro que lo soy Océlotl, levántate, necesito tu ayuda.- SEDENA se levanta rápidamente, aun con las piernas temblándole, esperando que petición le haría su antiguo gobernante.- Océlotl, dime...dime donde está esa estúpida?
SEDENA se queda en silencio, a quien se refiere, se preguntaba internamente, intentado pensar en lo que hacia enojar a su Tlatoani.
-Dime Océlotl, donde están Tlaxcala, donde está para hacerle pagar por lo que nos hicieron, y eso junto a todos los demás que la siguieron, dime donde esta-Ante su petición lleno de ira, SEDENA estaba congela, es verdad, la razon de su muerte fue algunos indígenas que aprovecharon para eliminar a los hermanos, aunque el sabe que hay otros factores, no le sorprendería que Mexica recordara solamente eso.
-Mi Tlatoani, yo...-Mexica lo agarra de la camisa y lo jala hacia el.
-Te ordene dudar?, yo no lo recuerdo, yo te ordene que ¿me digieras donde esta esa estúpida de Tlaxcala? y con ella a todos los demás, incluyendo a ese estúpido Hispano, no te estoy pidiendo nada complicado Océlotl- SEDENA estaba preocupado, por una parte entiende su ira, pero algo dentro de el ya no es la misma que antes, todos estos años conviviendo con tantas personas, conociéndolas como un soldado y ahora como un guía, le dio a entender las razones que Norte y Sur eran para ellos y al mismo tiempo lo que era Centro tambien.
-Yo, lo siento, antes le hubiera dado todo lo que me pidiera, pero ahora...no puedo...no puedo hacerlo-Mexica alza a SEDENA, era tan fuere como lo recordaba, incluso si se ve la diferencia de tamaño, Mexica podía alzarlo sin problema y dejarlo totalmente indefenso en el aire.
-Que dijiste? como puedes defender a estos invasores? como puedes darme la espalda Océlotl? -SEDENA sentía se le dificultaba cada vez mas respirar, era tambien verdad, Mexica nunca acepta una discusión de nadie, menos de sus soldados a quienes entreno con toda su alma, claramente sus acciones eran una traición.
-HERMANO! DETENTE!- Atrás de ellos aparecía Quetzalli, alzando sus alas- Suéltalo ya, esto no debe de ser así.
-Tu otra vez, te dije que yo recuperaría lo que TÚ perdiste, por tu culpa perdimos todo, y ahora tambien a nuestra gente,-con esa ultima frase ve a SEDENA- Como quieres que no enfurezca con TÚ fracaso hermano.
-Ellos ya no son lo que era antes, pude verlo con mis propios ojos, las diferencias existen pero coexisten, y como coexisten las guerras solo existen por diferencias que son normales...-Quetzalli intenta razonar, pero Mexica no escucha.
-No me importa-Arroja a SEDENA lejos de ambos hermanos- Yo no quiero conexión o unión, eso solo los débiles las quieren, quiero venganza, quiero lo que me arrebataron, lo que cuide con tanto esmero y pase días y noches luchando, quiero a mi verdadera gente, no a estas abominaciones que no conocen su lugar, quiero a mis soldados...-Cuando iba a moverse a ver a SEDENA una pistola estaba apuntado su cabeza, dejando solamente confundido, de quien pudo llegar a el sin siquiera sentir su presencia, Quetzalli tambien estaba asombrado.
-Estas ya no son tus tierras Xiuhtecuhtli- GAFE tenia a Mexica con una pistola en la cien, Mexica alza su mirada para verlo, aunque su rostro estaba cubierto, reconocía perfectamente su ecencia.
-Kuautli...eres tu-GAFE no responde inmediatamente.
-Hace tiempo que no uso ese nombre, con tantos que me han dado, incluso no se cual era mi nombre...gracias por recordármelo mi general, pero repito, esta ya no son tus tierras....-Mexica ríe, por debajo, incrédulo que incluso ya perdió a su mejor guerrero.
-Que te paso, te hice para que nunca me desobedecieras, y e aquí al único de los dos que me apunta con un objeto, que paso Kuautli, que paso con tu familia y contigo.
-Están muertos.
-Y no quieres vengarte de los que los mataron.
-No.-Mexica hace una mueca de ira ante sus palabras cortante.
Claramente su persuasión hacia la fidelidad de GAFE era nula, era claro, el ya no era su soldado mas fuerte y al no seguirlo, no tiene oportunidad ya de convencerlo, pues el a aceptado a alguien mas a quien serle fiel.
-Porque me hacen esto, porque soy el único que busca esto!
-Hermano, por favor, esta ya no es nuestro, nosotros morimos, y eso es la única verdad.- Quetzalli intenta acercarse a su hermano, pero este lo aparta aun mas.
-NO, esto no lo quiero, no voy a aceptar esta perdida que TÚ nos impusiste- Mexica intenta atacar a su hermano, pero es se agacha al escuchar el disparo de GAFE.
-Si es así como piensas, entonces no tengo mas opción que obligarte a estar quieto mi señor...-Gafe pelea contra Mexica, aun si este no lo muestra por completo, Mexica tenia una fuerza descomunal, y con un golpe mataría a GAFE sin problemas- Despierta SEDENA, necesito que recapacites, México Norte y Sur nos necesitan, no podemos abandonarlos ahora, no ahora...
SEDENA nota que GAFE le da un arma, en su mente nunca imagino que le dispararía a Mexica, pero había algo de razon, dejar que Mexica mate a las personas que no tengan la esencia, era dejar morir a los únicos lideres que les quedan.
Su fidelidad a México Centro se mantenía, pero el ya no esta, y sus únicos lideres eran Norte y Sur, traicionarlos, seria lo mismo que traicionar a las personas que los acogieron y les dieron una nueva vida, sean buenas o malas, eran sus nuevas vidas.
Así ambos se abalanzan hacia Mexica, disparos por todo el lugar, intentando mantenerlo lejos porque un solo error y este podía sacarles el corazón de un solo puñetazos.
Mexica alzo su alas para volar y ser aun mas versátil en el cielo, pero su hermano tambien entro a la pelea, dejando ver que ambos hermanos, aunque Quetzalli era mas débil aun podían darle pelea, mientras GAFE y SEDENA lo distraían por debajo.
Ya lo tenían acorralado, pero este se reusó a ser detenido, y causo una luz intensa segando a todos, para luego desaparecer.
Quetzalli baja con tranquilidad, agotado tambien por pelear con su hermano, era complicado y era difícil, y ahora mas ya que huyo.
Quetzalli solo suspira de la frustración, hasta que voltea a ver a sus antiguos soldados, que ambos, ambos estaban arodillados frente a el.
-Estoy feliz de volverlo a ver mi Tlatoani- Dice GAFE, con una voz mas suave ante Quetzalli.
-Yo ya no soy su Tlatoani, peri ese derecho cuando perdí la guerra, así que levántese, no es necesario.-Los dos se levantan, pero aun así SEDENA abraza a Quetzalli, y GAFE quita sus cubrebocas y gafas para mostrar su rostro a su antiguo jefe. -awww, ustedes dos siguen siendo muy dulces conmigo a pesar de mi fracaso. Como podría yo odiarlos.
-Tu pelea fue lo mejor que pudiste hacer, ya había enfermedades graves a través del aire, y muchos indígenas tenían armas mas fuertes gracias a España...
-España?...
-Hispano....-Recuerda SEDENA.
-Oh...si...creo que lo recuerdo bien...hablemos cuando capturemos a mi hermano, su ira n ose detendrá all��...-Ambos soldados asienten con la cabeza, activando un alerta para todo el pais, llamado la atención tanto de México Norte como Sur.
Continuara??? ( Realmente no XD)
Como darle un final mas, los hermanos mexicanos se unen a GAFE y SEDENA, al ver a Quetzalli que era casi la viva imagen de Centro, ambos lloran, Quetzalli los consuela, incluso ambos recalcan que tiene la misma voz suave que centro les daba a ellos cuando hablaban fuera de lo político.
Después buscan a Mexica y entre los 5 lo retienen, mas aun cuando Mexica nota la fuerza descomunal de Norte, que aunque no era tan fuerte como la de el, aun así ella podía darle el puñetazo de dios y hacerle por lo menos sufrir un poco (jajajaja)
Espero y te guste 💛🧡💜
#countryhumans#countryhumans méxico#senig063#countryhumansméxico#countryhuamns méxico sur#senig#countryhumans azteca#countryhumans mexica#militaryhumans#militaryhumanssedena#militaryhumansgafe
18 notes
·
View notes
Text
Tenía esto escrito hace unos cuantos días ya pero después de la noticia no oficial de Ona y después de ver la final de la Copa de la Reina estoy lo suficientemente contenta como para publicarlo.
No es muy largo, 1.700 palabras
ANSIAS
POV: T/n
Hoy es la gran final, habíamos conseguido clasificar al United para la FA Cup y jugábamos contra el Chelsea en Wembley con las entradas agotadas prácticamente. Era una locura.
Íbamos en el bus de camino al estadio y lo único que se veía por la calle eran personas con las camisetas de su equipo preferido, gente con banderas o bufandas celebrando y esperando ansiosos el partido.
Estaba con los auriculares mirando por la ventana y moviendo la pierna izquierda para arriba y para abajo rápidamente como de costumbre pero no me di cuenta de eso hasta que una suave mano que conocía muy bien se puso sobre está y la tranquilizó.
-Bebé- Dice Ona suavemente y me quito un auricular- Tranquilizate
-Estoy tranquila, amor- Le aseguro- Solo estoy ansiosa. Además debería ser yo la que tranquilizara, eres tú quien va a jugar este partido no yo.
Me mira un momento y apoya su cabeza en mi hombro
-Lo sé- Suelta un suspiro.
- Lo vas a hacer increíble, nena- Le aseguro- Siempre lo haces. Además lo bueno de estar en el banquillo es que voy a ver lo sexy que te pones cuando te pones a correr o alguien te enfada.
Me muerdo el labio imaginandomelo y se ríe.
Bingo t/n lo has conseguido.
-Eres increible- Niega con la cabeza pero se acurruca más a mi.
-¿Qué? No me puedes culpar de apreciar a mi sexy y preciosa novia
Seguimos hablando un poco y yo suelto un par de chorradas más para distraerla hasta que llegamos al estadio.
Todas van bajando poco a poco del bus y yo espero a bajar la última después de Ona.
Ambas vamos inmersas en nuestra música pero siempre pendientes de la otra.
Cuando llegamos al vestuario cada una va a lo suyo poniéndose la ropa de entreno pero una vez estamos todas Marc entra y da instrucciones, Zelem también y luego todas nos vamos animando entre todas.
Al salir al campo corriendo se nos recibe con un montón de aplausos y algún que otro abucheo. Los preparadores nos indican ejercicios y aunque yo los hago de manera más floja para no hacerle más daño en el muslo y intentar quitarme energía no funciona. Sigo estando ansiosa.
Y el equipo lo sabe, saben que no voy a poderme estar quieta ni un minuto y me dan alguna tarea para distraerme mientras aún estamos en el campo o cuando llegamos al vestuario.
Pero eso ya no es posible cuando están preparadas en el túnel para salir.
Choco las manos con todas hasta llegar a mi objetivo
-Machacalas a todas, bebé- Hacemos el saludo previo al partido de siempre.
-Siempre- Asegura con la mente puesta en ganar- No molestes mucho a las chicas.
-No te prometo nada- Digo medio enserio y medio en broma.
Me voy al banquillo y me siento en medio de Lucía y Vilde.
El juego empieza y ya me estoy mordiendo las uñas, creo que me van a durar 2 minutos. Luego moviendo la pierna en el filo del asiento, los brazos, los puños.
En el segundo 20 Russo mete gol, todas nos levantamos a celebrarlo pero es anulado por fuera de juego.
-OYEEEE, PERO HAS VISTO LA PIERNA QUE LE HA METIDO A ONA- Grito saltando de mi asiento enfadada- ¿DÓNDE ESTÁN LAS GAFAS?
Pita falta. Bien
Veo que a mi novia le cuesta levantarse del suelo y esta tocándose el tobillo del golpe.
-Levanta Ona- Susurro para mi y cuando lo hace me siento pero sin dejar de moverme.
-¿Puedes estaré quieta ya?- Dice de mala manera Rachel.
-Menos mal que no la tienes al lado- Dice Vilde- Pero relájate, esa no son formas- Me defiende.
-Tienes razón, lo siento t/n- Dice - Pero el partido está tenso y verte a ti no ayuda.
La primera parte finalizó 0-0.
En el vestuario Marc dió indicaciones y algunas sugerencias de como podían meterse en la defensa rival.
El descanso finalizó y el juego siguió. El Chelsea en el minuto 57 metió a Harder y Ingle y me temí lo peor.
Mi intuición era correcta, cada que Harder tocaba balón hacia alguna jugada peligrosa o sino se la pasaba a Kerr y lo intentaba ella.
En el 61 Marc decidió meter a Rachel por Parris para cambiar el juego arriba. No era el mejor partido de la número 22.
Pero fue inevitable. 7 minutos después Harder dio una asistencia a Kerr y ella pues la clavo en el fondo de la red.
Los fan del Chelsea saltaron de sus sitios, los del United se llevaban las manos a la cara y yo pues me cagaba en todo.
Se reanudó el partido. Los ánimos del equipo cambiaron, buscaban cualquier cosa para meterse en área rival pero el Chelsea obviamente se había convertido en un muro y encima tenían a Kerr y Harder en su mejor momento, así que eso era una masacre total de idas y venidas, mini infartos de corazón y yo que no me podía estar quieta.
-PERO ESTÚPIDA ¿Y ESE GOLPE? ¿VENÍA DE REGALO O QUE?- Ona estaba en el suelo por un golpe aposta que le hicieron para llevarse el balón- PUTA REITEN
En el 75 no puedo más y me dirijo al entrenador.
-¿Puedo calentar? No puedo más.
-No deberías.
-Oh vamos- Me enfado- Vas a meter a Lucía en poco y no te quedan muchas más opciones, quedan 15 minutos. Dejame intentarlo.
Mira un momento el campo y suspira
-Ves.
En el minuto 88 la arbitra dió el visto bueno para que entrará y me cambié por Galton.
En ese momento Ona le había quitado la pelota a Kerr y hizo un pase largo que le llegó a Lucía y esta me la paso a mi pero un segundo después estaba en el suelo. Carter me había derribado, sentí una molestia más fuerte de la que ya tenía en el muslo pero me levante enseguida cojeando un poco pero lo ignore.
Todas me estaban mirando con preocupación, sobre todo Ona.
-Vamoooos solo quedan 6 minutos- Grito señalando el marcador con el tiempo extra y eso hacen que todas espabilen
Minuto 94 el balón lo conduce Kerr, Ona en dos movimientos logra quitárselo y corre como nunca por la banda.
Minuto 95 la número 2 sigue corriendo hasta que levanta la cabeza y nos ve a todas esperando el remate. En un momento la pelota vuela alto con un buen efecto, salto con todo lo que puedo olvidándome del dolor y estiro el cuello más de lo posible.
Noto que choca en mi cabeza y apunto a la portería.
Berger no puede hacer nada. El balón esta dentro de su arco.
Me da tiempo a mirar el marcador antes de que todas se echen encima mio. Minuto 95 con 49 segundos.
-Yeeeeeesssss fukeee - Grita Russo en todo mi oído pero me da igual.
Corro hacia el corner
-Siiii joderr- Grito toda eufórica a los fanáticos y hago un gesto con las manos para que animen más fuerte.
Siento alguien saltando en mi espalda y rodeando sus brazos en mi cuello. Instintivamente le agarro las piernas.
-Esssaaa eeeesss bebé, tio- Me da un montón de besos en la mejilla.
Se baja y me giro
-Gracias a ti- La arbitra pita el final- Ahora vamos a terminar esto.
Los entrenadores tienen unos 10 minutos para seguir dándonos indicaciones
-¿Cómo esta tu muslo?- Es lo primero que pregunta Marc
-Bien- Miento pero no pienso abandonar ahora.
-T/n- Me advierte Ona
-Voy a seguir, no pienso abandonar ahora- Me mantengo firme- Además soy la delantera que esta más fresca aunque me moleste la izquierda. Las otras están agotadas y las del equipo rival también- Miro un momento al rival- Si hay alguna oportunidad es ahora.
-Bien, quiero pases filtrados desde ambas bandas a Russo, Rachel y T/n. Sobre todo de la banda derecha- Mira a Ona que asiente firme.
-Bien, he notado que Eriksson tiene una leve molesta en su derecha pero intenta ocultarlo- Informo.
-No quiero ni que Kerr ni que Harder puedan respirar ni dar un paso. En un momento crean una ocasión de gol y no lo queremos.
Todas asentimos a lo dicho y nos ponemos en círculo con la mano en medio.
-Uno, dos y tres, Uniteeed
Nos colocamos en nuestras posiciones y el balón rueda.
Las defensas azules estaban muy pendientes de mi y me hacían entradas cada vez que podían. El muslo poco a poco iba cediendo y dolía más pero yo me volvía a levantar ignorando las miradas de advertencia de todos.
Nuestras centrales y laterales habían hecho un buen trabajo parando a la australiana y danesa.
Quedaban son 5 minutos del tiempo extra y estábamos igual, si eso no se movía iríamos a penaltis y no me gustaba nada.
En un momento la pelota rebotó en una Blue y salió por el área de fondo.
Córner a favor.
Zelem se preparó para lanzarlo
El balón entre chutes y rebotes salió fuera del área y le cayó a Ona.
Me desmarqué rápido saliendo del área y tenía el hueco perfecto para chutar.
Ona lo vio y rápidamente estaba en mis pies la pelota y de estos salió volando a la portería.
Berger la rozó con los dedos pero no llegó.
Gol
1-2 y quedaba 1 minuto. Solo uno para poder levantar la copa.
Salí corriendo hasta la banda donde me esperaba la catalana con una sonrisa enorme.
En un momento todos y digo literalmente todos, incluidas las del banquillo y el equipo técnico están encima mio y chillandome.
-JA JA- Grito- QUIEN ESTÁ AHORA CELEBRANDO EEEEHH
Un minuto después estaban pitando el final y todos corrían por todos lados celebrando y gritando menos las Blue obviamente que tenían una mirada de derrota y algunos me miraban con admiración sorprendentemente.
-Ollleeeeeeeeeeeee- Salta alguien a mi espalda otra vez- Tengo a la mejor novia delantera del mundo.
-Y yo a la mejor asistente y lateral derecho- Río y voy caminando para ir saludando al rival.
Celebramos con el público dando varias vueltas con música, banderas...
Yo tenía sobre mis hombros la bandera catalana y podía ver a los ingleses volverse locos lo que me hacia bastante gracia.
-Ya podemos volver a casa, tranquilas- Dice Ona en mi oído cuando me abraza.
-Si, ya lo echo de menos, las echo de menos- Le doy un beso tierno.
#espwnt#futbol femenino#futfem#woso#woso imagine#onabatlle#ona batlle x reader#ona batlle#woso soccer#woso fanfics#ona batlle imagine
80 notes
·
View notes
Text
CAP 31 - CHOQUE DE EMOCIONES
¡Maldita sea! Esto va a explotar en cualquier momento. No puedo soportar más estar encerrada en este lugar, atrapada en esta oscuridad tanto física como emocionalmente. ¡Desearía poder salir de aquí! De repente, Maxwell aparece detrás de Bertrand, curioso por saber qué está ocurriendo. Sus ojos se encuentran con los míos, llenos de preocupación.
|| Bertrand, ¿sabes cuáles son las últimas noticias? Encontré a mi hermana || exclama Drake, y tanto Maxwell como yo intercambiamos una mirada inquieta. Drake no puede estar a punto de revelar el secreto.
|| ¿¡Lady Savannah!? || La boca de Bertrand casi cae al suelo, pero rápidamente se recompone y se aclara la garganta || ¡Oh, vaya! Esa es una espléndida noticia... Supongo que ella está bien… ¿No? ||
|| Claro que está bien, pero no vengas ahora como si te importara || responde Drake con sarcasmo, alejándose de Bertrand con una mueca de ira. Puedo notar que está tratando de contenerse, y realmente se lo agradezco.
|| Pero claro que me importa, Drake. A todos nos importa. Su desaparición fue un misterio || replica Bertrand.
|| ¿Quieres saber algo más, Bertrand? Ella me confesó todo lo que pasó entre ustedes dos || dice Drake, acercándose más a Bertrand, enfrentándolo cara a cara || ¡Ella estaba tan enamorada de ti! ¿Cómo pudiste dejar que se fuera con el corazón roto? ||
Bertrand me mira, notando la preocupación en mi rostro, y luego dirige una mirada confusa hacia Drake.
|| Drake, yo traté de alcanzarla… Te juro que la busqué, pero Savannah se esfumó… ||
|| Pero no se esfumó para todos, Bertrand, porque Maxwell sabía dónde estaba || exclama Drake con rabia, mientras Maxwell deja escapar un grito de sorpresa.
|| ¿MAXWELL?... ¿Cómo es eso posible? || responde Bertrand asombrado, volviéndose hacia Maxwell con indignación y acercándose a él. Maxwell intenta retroceder, pero Bertrand lo atrapa en el proceso. Maxwell lo mira con temor || Maxwell Percival Beaumont… Dime que este hombre miente || exige Bertrand, pero Maxwell no encuentra las palabras para explicar, mientras la ira de Bertrand se intensifica.
|| Este… yo… || balbucea Maxwell, claramente nervioso, y antes de que pueda pensar en algo, Drake interviene.
|| Para que lo sepas, Maxwell tuvo el corazón para apoyar a mi hermana, y eso es más de lo que tú hubieras hecho || Drake se acerca a Bertrand con una mirada amenazante.
|| Pero no entiendo, ¿apoyarla? ¿De qué hablas, Drake? || pregunta Bertrand, visiblemente confundido. Maxwell lo mira y responde nerviosamente.
|| Mis “gastos excesivos” … La mayoría del dinero iba para Savannah ||
|| Bueno, es un alivio saber que no lo gastabas en cosas ridículas... Pero… no entiendo. Yo no sabía que ella estaba en necesidad... necesito saber por qué le enviabas dinero. ¿Qué fue lo que pasó? || Bertrand mira a Maxwell y a Drake, su rostro una mezcla de preocupación y confusión. Drake exhala lleno de enojo.
|| ¡NO LO SÉ! Tal vez porque necesitaba ayuda para criar a tu hijo ||
|| ¡¿Drake?! || exclamamos tanto Maxwell como yo. Nuestros ojos se agrandan al escuchar sus palabras. Comprendo su enojo y tiene todo el derecho a sentirse así, pero no debería haber revelado el secreto de su hermana. La situación se complica aún más. Drake me mira y lágrimas brotan de mis ojos mientras niego con la cabeza, pero ya es demasiado tarde. Ha soltado un secreto que no le correspondía divulgar. Bertrand retrocede un paso, casi perdiendo el equilibrio.
|| ¿Un... un hijo...? ¿Tengo un hijo? || Su mano se aferra a la mitad de su rostro, lleno de sorpresa y espanto || ¿Savannah estaba embarazada? Pero yo no lo sabía... Drake, tienes que creerme || Sus ojos suplican a Drake || Yo no lo sabía ||
Mi corazón se hunde más en la tristeza y sinceramente no estoy segura de cuánto más puedo soportar esta noche. Intento agarrar el brazo de Drake para sacarlo de allí, pero él se aparta de mí y se acerca de nuevo a Bertrand con pasos largos y decididos.
|| Claro que no lo sabías... || dice Bertrand, su voz llena de una mezcla de incredulidad y resignación || Savannah me dijo que le diste un largo discurso sobre cómo ustedes dos NUNCA podrían estar juntos ||
|| No entiendes, Drake... La última vez que la vi, lo que le dije fue por otra razón, no por el embarazo... Las cosas no fueron así... Ella debió haber entendido mal ||
|| ¡NO ME VENGAS CON ESA MIERDA! || La voz de Drake retumba en el espacio, casi un rugido de frustración, y la gente alrededor comienza a notar nuestra presencia. Con rapidez, Drake se lanza hacia Bertrand y lo agarra por el cuello. Suelto un grito agudo y me precipito entre ellos, desesperada por detener lo que parece inevitable.
|| ¡Drake, por favor! || imploro, intentando contenerlo mientras Bertrand, con los ojos entrecerrados, no muestra intención de escapar.
|| ¡Tú le rompiste el corazón! || exclama Drake, pero cuando intento rápidamente tocar su brazo para separarlos, él me empuja sin escucharme.
|| Porque ustedes, los nobles, piensan que pueden jugar con nosotros, los plebeyos, y desecharnos cuando se cansan o creen que no somos suficientes para ustedes. Pero, aunque no quieras, ¡tendrás que responder por ello! || Termina diciendo con notable furia en los nudillos, que se vuelven blancos por la presión de su mano.
|| ¡DETENTE, DRAKE! || grita Maxwell, saltando para contener la mano de Drake.
|| ¡QUÍTATE DE MI CAMINO, MAXWELL! || responde Drake con intensidad.
|| Basta, Drake || grito con fuerza, pero él parece estar completamente transformado. Ni siquiera me mira ni escucha, así que decido gritar con toda la intensidad que puedo: || ¡DRAKE, DETENTE! || Finalmente, logro captar su atención. Las lágrimas corren por mi rostro, pero mi voz permanece firme || ¿Crees que esto es lo que Savannah querría? ¿Verlos pelear entre ustedes? ||
Drake baja la mirada y abre la boca como si fuera a hablar, pero luego decide callarse.
|| Por supuesto que no le gustaría... || interviene Maxwell, con los ojos vidriosos por las lágrimas. Sebastián se mueve rápidamente para interponerse entre Drake y Bertrand.
|| Esto fue suficiente. Todos afuera || ordena Sebastián.
|| Gracias, Sebastián || responde Bertrand, ajustándose el abrigo y sonriendo || Ya era hora de que restablecieras el orden aquí ||
|| Esto incluye a usted, Su Excelencia... || agrega Sebastián, agarrando el hombro de Bertrand.
|| ¿Qué? ¡Pero si yo no he hecho nada malo! || reprocha Bertrand.
|| Quizás no, Su Excelencia, pero este incidente ya ha causado suficientes disturbios. ¿Realmente necesitan avergonzarse más frente a la mitad de la corte? || Dijo Sebastián. Rápidamente escudriñé a mi alrededor y noté los susurros entre los hombres, claramente sobre lo que acababa de suceder. Los ojos de Liam se encontraron con los míos, llenos de preocupación y confusión. Me miró con tristeza, pero rápidamente aparté la mirada y negué con la cabeza, sintiéndome avergonzada. Honestamente, me siento humillada por la escena que hemos creado; si no hubiera insistido en venir esta noche, esto no habría ocurrido.
No logré obtener las respuestas que necesitaba; esta noche fue un completo fracaso. Drake intentó tomarme del brazo, pero me solté bruscamente, mirándolo con ira. Necesitaba salir de allí, no podía soportarlo más.
**
Con determinación, me alejé del bullicioso club, encontrando mi camino hacia el solitario estacionamiento. Cada paso resonaba con la furia que ardía en mi pecho, mis ojos centelleando de rabia contenida. Drake, con la mirada llena de preocupación y remordimiento, salió tras de mí, tratando de alcanzarme antes de que me alejara demasiado.
Mis pasos resonaban en el pavimento mojado por la lluvia reciente, mi respiración entrecortada por la mezcla de emociones que me empujaba hacia la salida. El ambiente en el estacionamiento era tranquilo. Drake, con el ceño fruncido y el corazón latiéndole con fuerza, finalmente me alcanzó entre los coches.
|| Brown, espera || llamó, su voz llena de urgencia y remordimiento. Me detuve, girándome hacia él con los ojos centelleantes de furia contenida.
|| Déjame en paz, Drake || espeté, mi tono cortante y lleno de dolor. Drake vaciló por un momento, sintiendo el peso de mis palabras, pero luego dio un paso adelante, decidido a enfrentarme.
|| Maldita sea, Brown... Lo siento... fui un completo idiota || murmura Drake con pesar en la voz.
|| Drake, ¿qué rayos te pasó? Jamás te había visto comportarte así. Sé que han sido días muy difíciles, pero no se justifica tu comportamiento. ¿Cómo se te ocurre contar un secreto que no te corresponde? || exclamo con decepción y tristeza. Mis emociones están a flor de piel, pero me esfuerzo por mantener la compostura.
|| Lo sé, Brown. No debí decir nada y no tengo excusas... Yo... yo lo siento || responde Drake, su voz apenas audible mientras evita mi mirada.
|| Sé que lo sientes, Drake, pero debes tratar de controlar tus emociones. ¿Qué dirá Savannah al saber que se lo dijiste a Bertrand? || pregunto con un tono cargado de preocupación y reproche, buscando una respuesta que explique lo inexplicable. Drake agarra con sus manos sus cabellos sosteniéndose la cabeza.
|| No sé qué vaya a decirme… Qué decepción. Todo ha salido mal. Es desalentador saber que las personas en quienes confías te traicionan. Primero los Beaumont, luego Sebastián, y ahora yo decepcionaré a Savannah... Maldición, ¿podemos confiar en alguien aquí? || exclama con frustración, apretando los puños.Me acerco a él, un poco más calmada, tratando de comprender su reacción y sus sentimientos.
|| Tranquilo, Drake, no te preocupes. Lo hecho, hecho está. Será mejor volver || digo con tristeza, intentando consolarlo.
|| Si quieres, te acompaño para dejarte, pero yo no quiero volver aún || me dice con firmeza, mirándome a los ojos.
|| ¿Y a dónde quieres ir? || pregunto, intrigada por su decisión.
|| A un bar donde hay muy buenas bebidas, pero sobre todo, donde no habrá ni un solo noble. Ahí es donde iré || responde, y lo miro con preocupación. Nota mi expresión y añade || Brown, entiéndeme… Necesito escapar, quiero estar lejos de este mundo de dos caras y de todas sus malditas mentiras ||
|| Drake, ¿crees que huir mejorará la situación? || pregunto, con una mezcla de curiosidad y preocupación. Él solo levanta los hombros sin darme respuesta || Sabes qué, en ese caso, yo voy contigo. Me vendría bien un poco de tiempo para respirar también. Parece la cura perfecta para todo este drama ||
|| ¿Estás segura? || pregunta, sorprendido por mi decisión.
|| Completamente || respondo con firmeza, y su expresión se ilumina con una chispa de esperanza.
Ambos entramos en la limusina, y Drake le da la dirección al conductor para que nos lleve. Mientras nos dirigimos al bar, siento que, a pesar de todo, estamos juntos en esto y que, de alguna manera, encontraremos una salida a esta tormenta de traiciones y decepciones.
**
Momentos después, llegamos al Highlander Scottish Pub. Al entrar, el ambiente cálido y acogedor del lugar nos envolvió. Las paredes de madera oscura estaban adornadas con cuadros de paisajes escoceses y estanterías llenas de botellas de whisky. La tenue luz de las lámparas colgantes daba al bar una atmósfera íntima y relajada. Un grupo pequeño de clientes conversaba animadamente, y una suave música celta se escuchaba de fondo.
Nos sentamos en una de las mesas junto a una ventana con vista a la calle adoquinada.
|| ¿Has venido antes? || le pregunto, admirando el entorno.
|| Algunas veces, cuando me he quedado en Paris || responde Drake, ya mucho más relajado.
|| ¿Lo encontraste en una de tus expediciones en solitario mientras Liam se encontraba atrapado en fiestas elegantes? || bromeo, intentando aligerar el ambiente.
|| Así es, además me he acostumbrado a estar solo... Este bar es excelente para encontrar una bebida de calidad, que es justo lo que necesito. Además, sé que ningún noble se atrevería a entrar aquí, por eso es mi favorito || comenta Drake quien se dirige al camarero con elegancia y dice en francés fluido: || Une bouteille de whisky et deux verres, s'il vous plaît || mientras hace un gesto al camarero y ordena en excelente francés una botella de whisky. El camarero asiente con cortesía y se retira momentáneamente, regresando poco después con la botella de whisky y dos vasos. Drake toma la botella con decisión y sirve el licor en ambos vasos con destreza, mientras una sonrisa satisfecha se dibuja en su rostro. Al probarlo, el aroma exótico del whisky llena mis sentidos, trayendo consigo una calidez reconfortante || ¿Y qué opinas del sabor? || pregunta Drake, observándome con interés.
|| No puedo negarlo, está delicioso || respondo, sonriendo sinceramente.
|| Sabía que te iba a gustar... El whisky es una de las mejores bebidas, y de hecho, las bebidas son un lenguaje más universal que la comida. Solo hay que saber qué es lo que uno quiere y te lo servirán || explica Drake, balanceando el licor en su vaso con una expresión reflexiva y una mirada de complicidad || Aunque disfruto de mis aventuras en solitario, aprecio mucho que me acompañes y no me dejes solo, Brown ||
|| Drake, no necesitas agradecerme. Ojalá hubiera estado aquí antes para hacerte compañía... Cuando lo dices así, parece que no disfrutabas mucho de estar solo || comento con curiosidad e incertidumbre.
|| ¡Vamos, Brown! No empieces a sentir lástima por mí. Aunque también me hubiera gustado que estuvieras aquí antes || responde Drake mirándome fijamente y haciendo que baje la mirada. No sé por qué me siento nerviosa || Demonios, estaba bien por mi cuenta antes de que aparecieras || añade con un tono algo áspero.
|| ¿No me digas que te estoy causando problemas, Señor Walker? || pregunto burlonamente para aligerar el momento incómodo mientras sostiene mi mirada.
|| Pues déjame decirte que estoy aquí para quedarme un buen rato, y lamentablemente vas a tener dificultades para deshacerte de mí || exclamo, pero su mirada sigue firme en la mía.
|| Supongo que no es tan malo tenerte cerca de vez en cuando, y en cuanto a deshacerme de ti, Brown... creo que nunca lo haría || responde con certeza Drake.
|| Gracias || respondo sonrojada mientras coloco un mechón de cabello detrás de mi oreja, notando que Drake me observa fijamente por un momento antes de apartar la mirada. Decido rápidamente cambiar de tema || Dejando todo el drama de esta noche, debe haber sido un gran alivio encontrar a Savannah después de todo este tiempo. Aunque juzgando por lo que sucedió con Bertrand, supongo que has estado pensando bastante en ello ||
|| Honestamente... || exclama apretando el vaso || Ojalá pudiera dejar de pensar en eso, pero no puedo. En efecto, es un alivio haberla encontrado, pero me he preocupado por ella todos los malditos días desde que desapareció y nunca dejé de buscarla. Y enterarme de que la respuesta estaba delante de mis ojos duele... Pero más que dolerme que Maxwell supiera dónde estaba, me duele que ella no quisiera contármelo ||
|| Drake, sé que esto apesta, pero es lo que Savannah pidió. Trata de ponerte en su lugar. Tal vez solo quería evitar un problema mayor o evitar una pelea como la de esta noche || respondo, tratando de consolarlo. Drake simplemente alza los hombros y mira su bebida. Toco ligeramente su hombro, haciendo que me mire.
|| Tal vez tengas razón. Pero odio que ella pensara que necesitaba protegerse de mí. Sé que no siempre soy la persona más fácil de llevar... || comienza a decir, pero lo interrumpo rápidamente.
|| ¡Muy cierto, eh! || exclamo riéndome mientras tomo un sorbo de whisky || Tus actos explosivos no es que sean de gran ayuda || Él me devuelve una media sonrisa y pone los ojos en blanco mientras niega con la cabeza || ¿Contarle tú mismo sobre su hijo a Bertrand? Savannah va a matarte || añado.
|| Tienes razón. ¡Mierda! Ella va a sentirse fatal, pero no pude controlarme… Me gustaría pensar que podría haber estado ahí para ella de alguna manera, pero después de esta noche, siento que no puedo confiar en nadie || dice Drake con frustración.
|| ¿Hablas de Sebastián? || pregunto, y Drake asiente con la cabeza || Lo lamento, sé que él era como familia para ti ||
|| ¡Maldita sea! || exclama Drake, bebiendo el resto de su bebida y pasando el dedo por el borde del vaso || No es solo que estuvo con nosotros cuando éramos niños. Cuando mi padre murió, Sebastián lo dio todo. Se convirtió en el pilar de nuestra familia, incluso reemplazando a mi madre en muchos aspectos. Pensé que siempre podría contar con él. Y ahora descubrir que está involucrado en el complot contra ti... es una traición indescriptible. No entiendo cómo pudo hacerme esto después de todo lo que hemos pasado ||
|| Lo siento mucho, Drake || digo con sinceridad, estirándome a través del espacio entre nosotros y apoyando mi mano en su brazo.
|| Yo también, Brown, yo también lo siento… Aprendí hace mucho tiempo que no podía confiar en ningún noble, pero al menos teníamos a Sebastián cuidándonos desde adentro. ¿Y ahora? Pensé que lo conocía, y resulta que está involucrado en el complot contra ti. Maxwell ayudó a esconder a Savannah y Bertrand es el padre de mi sobrino… ¿Ves por qué no puedo confiar en nadie? || pregunta Drake con amargura.
|| Drake, no creo que hayan querido lastimarte a propósito. Sé que todo esto es difícil, pero quiero que recuerdes algo importante || digo, pero Drake me mira con confusión. || Quiero que sepas que estoy aquí para ti. Puedes contar con eso. No importa lo que pase, prometo estar para ti ||
De repente, su mirada se ilumina, aunque sus ojos están llenos de súplica.
|| ¿Lo prometes, Brown? || me pregunta.
|| Lo prometo… Además, ¿por qué crees que estoy contigo ahora? || le respondo con una sonrisa.
|| Tú… Tú significas mucho para mí, Brown. Muchas gracias || Drake levanta su mano y retira un mechón de cabello de mi frente mientras nos miramos fijamente. Luego, parpadea rápidamente, quita su mano de mi rostro y aclara su garganta || ¿Sabes? Me tranquiliza que sigas a mi lado a pesar de mis arranques y arrebatos ||
|| Siempre me quedaré a tu lado, Drake. Alguien tiene que hacerlo. No iba a dejar que pasaras esta noche deprimido y solo || Sirvo más whisky en nuestros vasos y levanto el mío || Declaro oficialmente prohibido todo drama cortesano hasta mañana. Esto es un bar y no vamos a desperdiciar el tiempo ||
|| Entonces eso significa… ¿Más tragos? || pregunta Drake con una chispa de emoción en los ojos.
|| Exactamente, y mucho trago. Pero podemos aprovechar el momento y jugar... ¡un juego de bebidas! || De repente, siento el efecto del alcohol aumentar en mi cuerpo cuando todo comienza a calentarse a mi alrededor.
|| No, no puede ser, Brown… No quiero ningún juego ||
|| ¡Vamos, Drake, anímate! ¡Ni siquiera sabes de qué se trata el juego! ||
|| Ya tengo la sensación de que estás a punto de explicármelo, ¿verdad? || dice con una sonrisa resignada.
A pesar de todas las bebidas que Drake ha tomado, parece mantener la cabeza fría mientras la mía empieza a dar vueltas.
|| Así es, mi querido caballero… El juego se llama… ||
@tessa-liam, @kingliam2019, @choicesficwriterscreations
If anyone else wants to be tagged, just let me know. I hope you enjoy this wonderful love adventure.
#choices trr#choices the royal romance#choices#liam x mc#trr fanfic#liam x riley#trr liam#trr fanfiction#novela romantica#liam rys
5 notes
·
View notes
Text
La heredera del Infierno
Aviso: el significado de la runa Isa lo saqué de aquí. Es el mismo link del capítulo dos de la historia.
Regreso a Buenos Aires y el dios del fuego.
–¿En qué te metiste mujer?
–Ni siquiera yo sé –Adelina no sabía cómo explicarle a Mariano lo que habia ocurrido –. ¡Au! Cuidado con lo que haces con mi pierna.
–Pediste mi ayuda. Bancate lo que se viene.
Adelina casi le da un puñetazo a su amigo cuando desinfectaba la herida de la pierna. Le sacó el pus y después de abrirla, hecho una gran cantidad de agua oxigenada. El líquido se volvió blanco como la nieve e hizo que la joven mirara de la peor forma al chico. Mariano usó aguja e hilo y tras terminar de coser la herida, la cubrió con vendajes. El muchacho siguió con el vientre y rostro de Adelina.
Estaban en los cielos luego de abandonar la cabaña del conocido de Mariano. Activó el piloto automático para ayudar a curar los golpes de Adelina. A medida que se alejaban de tierra firme, todo se volvió diminuto hasta casi desaparecer.
–Te dieron flor de golpiza.
–Lo sé.
La chica hizo una mueca ante el ardor del agua oxigenada en su cara.
–Explícame ¿Cómo un tipo con barbijo te hizo esto? –La mirada del chico se tornó preocupante–. Y ¿por qué no me queres mostrar lo que ocultas en los vendajes del brazo y el abdomen?
–Lo voy a decir cuando salgamos del maldito país –La chica siseó e hizo otra mueca de dolor–. ¡Arde la puta que te parió!
–Te pasa por pelearte con locos y raritos.
Se hizo un silencio incómodo entre los dos y Adelina no paraba de evitar la mirada analítica de su amigo.
–Deja de mirarme de esa forma –su tono intentó ser serio–. Que hayas intentado tener un título en psicología no te hace un psicólogo.
–Los pocos años que estuve me permitieron analizar a las personas y ese buen conocimiento, por mi desgracia se lo transmití a Daniela y a vos. Para que sean chismosas y a la vez inteligentes –sus ojos se posaron en los de Adelina–. En el Abismo encontraste algo más que un loco y rarito.
–Lamentablemente tenes razón.
–Obvio que sí, soy Mariano Baldor, siempre tengo razón.
Adelina mostró una sonrisa y él terminó de pasar el agua oxigenada por las heridas de su rostro y guardó todo su equipo de medicina. Mientras, la joven intentaba ponerse de pie y sentarse en el asiento del copiloto. El silencio se hizo presente una vez más.
–¿Conoces alguna guerrilla o grupo terrorista llamada Lin Kuei?
–Entre mis compañeros no escuchamos ese nombre ni por asomo.
–Creo que ese grupo me atacó, porque ese maldito del barbijo dijo que no debía saber la existencia del Lin Kuei.
Adelina observó a Mariano, quería ver un ápice de confianza en él sobre las palabras de ella. Si creía en sus dichos le era un misterio, pero en sus ojos había tristeza por otra cosa.
–¿Terminaste con tu novia?
–Ibamos tan bien y me dejó –dijo con tristeza –. No sé en qué fallé.
–En ser apurado.
–Dormi un rato y cuando lleguemos a Buenos Aires hablamos mejor –el tono del chico cambió tan rápido que la joven no pudo discutir contra él.
A los pocos minutos, Adelina cayó dormida en el asiento de copiloto. Las mismas visiones que tuvo en las montañas se apropiaron de sus sueños y los gritos de los muertos despertaron a la chica. Le molestaba que ya no pudiera tener un sueño pacífico sin que algo no vivo la persiguiera alguna manera.
La noche había tomado el cielo y algunas estrellas se dispersaban aquí y allá acompañadas por las nubes. Vio que estaban cerca de Argentina. Unos destellos iluminaban el país en diversas provincias y lo que parecía pequeño se convertía en algo más grande. Los destellos se transformaron en edificios con las luces de sus departamentos encendidas, farolas de calle de color naranja o blanco y algunos autos pasando aquí y allá. Fue ese momento en el que Adelina tuvo paz, estaba en casa.
Tras unas horas, Mariano llegó al hangar y aterrizó sin hacer demasiadas locuras. Adelina supuso que fue para no atormentarla más de lo que ya estaba. Fue un viaje cansador y había muchas cosas que contar sobre el tiempo en el que estuvo ausente.
El edificio donde vivía Adelina estuvo a la vista después de viajar en la camioneta de Mariano. La inundó la sensación de seguridad y hogar, algo que le alegraba bastante. Ningún Lin Kuei se meterá a su casa e intentará matarla. Lo que sí le dio escalofríos fue el vagabundo que estaba en la puerta. Su mirada blancuzca siempre lograba encontrar los ojos de Adelina, aunque intentara desviar su mirada penetrante y analítica. La hizo sentirse pequeña como si estuviera frente a alguien superior e intocable.
Mariano y Adelina entraron al edificio y subieron las escaleras. La subida le molestó un poco en la pierna y el vientre, pero no provocó que sus heridas se abrieran. Una vez que llegaron a la puerta del departamento de Adelina, pudieron percibir el olor a comida. Abrió la puerta y vio a Daniela, de espaldas, preparando la cena.
Resaltaba bastante con su cabello pelirrojo y la ropa que se había puesto. Una remera verde con el personaje de Jolyne Cujoh y pantalones holgados. La chica se dio la vuelta para ver a los recién llegados con una mirada tranquila.
–Te dieron una buena cagada a palos –su tono fue de lo más normal.
–Lo sé –avanzó hasta la cocina y saludó a Daniela–. Hasta Mariano me lo dijo.
–¿Qué te pasó? –la chica apagó las hornallas y acercó la comida a la mesa–. Mira que me dieron peleas, pero a vos te masacraron.
Los tres se sentaron en el pequeño comedor. Las empanadas de carne humeaban en la tabla y Daniela ofreció una para cada uno. Sentir el sabor de la masa y la humeante carne en su paladar fue una nostalgia para Adelina. Luego de disfrutar esos momentos de dicha, ella comenzó a contar lo que vio en Arctika. Los Lin Kuei, las ruinas nórdicas y los objetos que encontró. Hasta mostró las fotografías que había tomado y tanto Daniela como Mariano la miraron de forma paranoica.
–¿Estás segura? –el tono de Daniela era de duda–. Esos Lin Kuei deberían estar en las noticias, sobre todo como vos decís, un grupo armado.
–Ese es el problema. No están. Los busqué en los libros y no se los menciona. Tampoco en alguna noticia –Adelina volvió a sentarse y apoyó las manos en la mesa–. ¿Podrías buscar cuando tengas tiempo algo sobre esas personas?
–Veo que puedo encontrar.
–Yo también quiero ver si algunos de mis contactos saben de esas personas.
Adelina agradeció la ayuda que sus amigos iban a brindarle. Después de terminar la cena y compartir un momento entre amigos, guardaron las sobras y volvieron a sentarse esperando que Adelina terminara de relatar lo que faltaba de la historia.
–No solo fue esos Lin Kuei lo que encontré en Arctika.
–Sí, también las runas y la daga. –Mariano gesticuló con las manos dramáticamente sobre los objetos mencionados–. Lo que no estás contando es sobre qué ocultas en tu mano vendada.
–Las escrituras del lugar hablan de Sultin, el cuchillo de Hela –la muchacha mostró las inscripciones en la pared de las fotografías –. Creo que fue eso lo que encontré.
–¿El cuchillo de una diosa? –la voz dudosa de Daniela y su rostro no miraban bien a su amiga–. ¿Te fumaste algo en esas montañas o qué?
–No sé si es verdadero o no –comenzó a sacarse los vendajes–. Pero de lo sí estoy segura es que maldito cuchillo me hizo esto en cuanto lo toqué.
Una vez que los vendajes de Adelina se aflojaron de su cuerpo y los tatuajes pudieron verse. Los rostros de sus amigos cambiaron a preocupación ante los dibujos en la piel. Daniela inspeccionó el brazo de su compañera antes de volver hablar:
–Por favor, decime que no te drogaste con algo potente –sus ojos no pararon de recorrer su herida–, y que por eso tenes esto en el brazo.
–No lo es –puso la daga cubierta con el trapo en el centro de la mesa–. Esta arma me hizo el tatuaje.
–Es una locura Adelina. –Mariano intentó mantener un tono relajado.
–Juro por Dios que no estoy mintiendo –desenvolvió la daga con sumo cuidado con una servilleta de papel entre los dedos–. No solo me hizo un tatuaje, sino que vi cosas…
–Es imposible que este cuchillo de miles de años perdido en lo más profundo del Abismo y te hiciera…
En cuanto los dedos se acercaron al artefacto, la mano de Adelina apretó rápidamente la muñeca de Mariano y la alejó. El gesto y la paranoia reflejado en el rostro de la joven hizo que el chico apartara su extremidad tanto del arma como de su amiga.
–Lo digo en serio Mariano. No es chiste lo que estoy diciendo –el tono de Adelina se volvió firme.
Relató todas las alucinaciones que padeció por culpa del arma. Los susurros, los muertos y sus rugidos y la mujer del féretro. Las expresiones en el rostro de los amigos de Adelina cambiaban con cada palabra que emergía de la boca de su amiga.
–Es imposible –Mariano no pudo camuflar su confusión, mientras se soltaba de Adelina.
–Que sí lo es –buscó en los rostros de sus amigos una pizca de confianza–. Creo que Sultin fue traicionado, algo parecido como le ocurrió a la espada de Frey en el mito. La runa Isa no solo representa el hielo, sino también la traición, emboscadas, desastres… Incluso encontré un mapa en esas ruinas.
–¿Un mapa? –cuestionó Daniela.
Adelina desenvolvió el papel con sumo cuidado y sus amigos lo observaron detenidamente. El rostro de una mujer rodeado por una serpiente y un lobo, las runas en los bordes y la bolsa diminuta en los mares de España y Francia.
–Creo que esto hizo enojar a esa mujer o el cuchillo lo hizo, no lo sé… Por favor tienen que creerme.
Tanto Daniela como Mariano se miraron entre ellos. No pudiendo expresar con palabras que era un delirio las palabras de Adelina, pero tampoco negar que salió con vida del Abismo. Pensaban que quizás fuera ese el precio a pagar por salir de allí con vida.
–Voy a tomar esto con las pinzas –Mariano se puso de pie en camino a la puerta–. No quita que quizás sea verdadero.
Se marchó a ahogar sus penas por el rompimiento de su antigua novia y antes de irse les propuso hacer un asado el fin de semana para quitar el estrés. Adelina solo pudo negar con la cabeza, una sonrisa adornó en su rostro y vio a su amigo irse con un tono triste y melancólico que sería olvidado a los pocos días o quizás horas.
Luego de que Mariano se fuera, el silencio rondó entre las dos chicas. Cada una haciendo sus tareas respectivas antes de prepararse para la cama. No hubo charlas graciosas ni chismes de los vecinos, solamente un silencio de muerte.
–¿No me crees verdad?
–Pienso que es consecuencia de la bomba de humo –Daniela estaba en el baño–. Quizás lo que viste sea por un componente de lo que llevaba y el tatuaje, posiblemente, una advertencia de esos Lin Kuei.
Adelina intentó mostrar confianza ante los dichos de Daniela, pero estaba segura que lo que presenció no fue por una simple bomba de humo. Fue verdadero, al igual que el dolor hecho por la daga. No quiso discutir más sobre el asunto y solamente deseó que el día llegara a su fin.
–Antes de que me olvide –Daniela gritó mientras buscaba en su habitación–. Tus pedidos de Japón. No pude encontrar lo que me pediste, pero algo similar sí.
Adelina abrió la envoltura de regalo y en sus manos tuvo una caja de una figura de Alucard y la revista de Shuumatsu no Valkyrie. Se sumergió tanto en Arctika y los muertos que había olvidado esos pequeños pedidos.
–Gracias Dan-Dan –abrazó a su amiga a pesar de tener las dos manos con los regalos–. Sos la mejor.
Lin Kuei y la muerte podían esperar.
Pasaron un par de días desde la llegada de Adelina a Buenos Aires y faltaba poco para el fin de semana para que Mariano hiciera asado en el departamento de las chicas. Aún así, eso no liberó a Adelina del trabajo como arqueóloga. Gracias a la ayuda de Pablo, el encargado del museo, pudo conseguir el contacto de Agustín para darle las actualizaciones sobre Arctika. Evitó mencionar la daga nórdica y el mapa, no quería que esa cosa afectara a otras personas.
No iba a arriesgarse a que el arma consumiera a otros hasta matarlos. Si lo que las escrituras de la pared sobre el cuchillo, Sultin, eran ciertas, Adelina preferiría ser precavida. Tampoco le agradaba mucho meter a sus amigos en este embrollo de los Lin Kuei, pero era mejor no estar sola enfrentándose a algo desconocido.
Por miedo a que la daga y el mapa cayeran en manos equivocadas, guardó un señuelo en el cajón de la mesita de luz, mientras que la verdadera daga la ocultó en un pequeño hueco de ladrillo tapado por la roca y pinturas sin terminar. Repitió lo mismo con el mapa, cambió los puntos de ubicación de la hoja amarillenta y lo ubicó en una caja oculta en su biblioteca. El mapa original lo escondió en la misma pared de ladrillo donde estaba la daga.
En los días que estuvo en el departamento, a veces, Adelina podía ver a los muertos aparecer y desvanecerse ante los ojos de la joven. Otras ocasiones la mujer del féretro la miraba fijamente cuando iba hacer las compras. También, los sueños de la chica se volvieron confusos aterradores, la mujer gritaba siempre sus acusaciones y el aullido de lobos no paraba de invadir sus oídos como si los animales estuvieran en su cuarto.
Esos momentos de confusión y miedo siempre eran opacados y olvidados por sus amistades. Mariano y su pena por no tener una relación duradera. Daniela y sus divagaciones sobre una nueva noticia que contar de alguna provincia o alguna parte del mundo.
En la noche del viernes, Adelina siguió buscando por todos los lugares conocidos sobre Hela y su cuchillo, pero no hubo ningún resultado. Por el lado de Mariano, tampoco encontró respuestas de los llamados Lin Kuei. Daniela no tuvo buenas noticias para Adelina:
–Lamento decirte que esos Lin Kuei no existen –Daniela se frotó los ojos después de estar mucho tiempo con la computadora–. Si son reales, es un grupo armado muy reciente y le falta poder. En ninguna base de terroristas más buscados se los menciona, literalmente son fantasmas.
–Que cagada –Adelina soltó su lápiz de dibujo.
Un trueno se escuchó a los lejos. Daniela se puso de pie acercándose a la ventana de la cocina.
–Se viene una tormenta horrorosa –cruzó los brazos mientras miraba los relámpagos–. No creo que Mariano venga mañana a la noche hacer asado. Dicen que el clima va a estar así todo el fin de semana.
–Es Mariano. Es impredecible –el tono de Adelina intentó ser normal–. Una vez vino del conurbano en plena noche, andando en bicicleta y borracho. Gritaba que el One Piece estaba en Argentina y que podía pasar las paredes como caricatura, y se estrelló contra la pared de ladrillo.
–¿Cuándo fue eso?
–Hace un año y me sigue dando vergüenza y a la vez gracia. –Adelina sonrió ante el recuerdo.
–¿Tenes foto de eso? –el rostro de Daniela tenía una sonrisa de oreja a oreja.
–Busca en mi celular –Adelina siguió perfeccionando su boceto–. De milagro no se rompió los dientes. La foto que me mandó él debe ser de cuando estaba huyendo de los ladrones.
–¿Intentaron robarle?
–Sip.
Daniela buscó en el celular de su amiga las imágenes de ese acontecimiento tan bizarro. Después de encontrarlas, le devolvió el aparato a su dueña y siguió con sus asuntos.
Al poco tiempo la tormenta estuvo encima del edificio y los truenos fueron lo único posible de escuchar. Las gotas pasaron de ser unas pocas a miles y chocaban contra las ventanas. Las chicas tuvieron que cerrar todo para evitar que los pisos del departamento se mojaran. Una vez que todas las ventanas se cerraron, se prepararon para irse a dormir.
Daniela estaba frente al espejo pasándose el óleo para el cabello en los cortos tirabuzones pelirrojos, mientras Adelina esperaba a que su amiga terminara sus cuidados capilares. Tras varios minutos, la pelirroja se fue a su habitación dejando el baño libre. El agua caliente recorrió el cuerpo de Adelina y pasó jabón por todas partes. Luego se enjuagó el cabello necesitaba sacarse el estrés por la investigación y los dibujos. Salió de la ducha y Adelina se vio en el espejo.
La melena negra y lacia comenzó a formar hondas tras cepillarlo. El tatuaje de los huesos de la anatomía del esqueleto seguía dibujado en su piel y a pesar de que dejó de dolerle, era un recordatorio de que quizás iba a morir sino buscaba respuestas. Las ojeras debajo de sus ojos heterocromáticos eran muy notables, no había dormido tratando de buscar algo sobre la diosa nórdica de la muerte.
Adelina acercó su rostro al espejo cuando su ojo derecho comenzó a destellar de un verde esmeralda. Su iris se iluminó hasta volverse una pequeña llama. La muchacha se enjuagó la cara inmediatamente y volvió a enfrentarse a su reflejo. Esta vez su ojo derecho no ardía de color verde, sino que la mujer del féretro la observaba fijamente. Su mano huesuda tocó el hombro de Adelina y antes de que pudiera gritar desapareció por los gritos de Daniela.
–¿Estás bien Ade?
–Sí, estoy bien… –sus ojos volvieron a su reflejo– solo estaba buscando jabón para las manos.
–Están en el armario. Dejé de ponerlos en el tocador porque se caían.
–Bueno.
Salió del baño velozmente y fue a su dormitorio dándole una despedida a Daniela. Una vez cerrada la puerta, no tuvo ni una pizca de tranquilidad. Los escalofríos y el miedo al ver a esa mujer la iban a consumir por completo y deseó que todo fuera un mal sueño. Despertar sin tener que haber conocido a Agustín y el anonimato de su amigo, no haberse tenido que enfrentar al tal Smoke ni sufrir estas alucinaciones.
Se cubrió con las mantas y comenzó a leer el libro que tenía en su mesita de luz. Le faltaba poco para terminarlo, pero eso no ayudó a que pudiera relajarse. Pasó página tras página hasta que los párpados le pesaron y su mente no pudo seguir con la lectura. Dejó el libro en la mesita, se acomodó y por fin sus ojos pudieron cerrarse.
Adelina soñó con la mujer del féretro, una vez más. Estaba de pie con la cabeza abajo y su cabello negro cubría toda la cara. La joven comenzó a acercarse a la mujer, con paso lento, pero escuchaba sus susurros. Casi imposibles de percibir a menos que estuviera muy cerca.
–Heredera y elegida, elegida y heredera. El dios del fuego vendrá pronto. Tu camino está marcado, sangre y locura serán para los enemigos de mi carne –Adelina pudo escuchar mejor las palabras–. Tomaron algo que no les pertenece. El orden de la muerte fue alterado, manipulado, corrompido. Mi carne tiene que regresar al trono.
–¿Quién es usted? –Adelina tragó saliva– ¿Es Hela, la diosa de la muerte?
–Tomaron algo que no les pertenece. El dios del fuego mostrará los pasos –la mujer se contorsionó y Adelina se alejó–. Me quitaron todo. Los objetos a encontrar son el camino al trono para mi carne. Los enemigos deberán arrodillarse y suplicar misericordia.
La mujer siguió contorsionándose, los huesos que crujían llegaron a los oídos de Adelina y fue un sonido espantoso. El tatuaje de la anatomía del esqueleto comenzó a pudrirse y revelar carne en descomposición. Se acercaba a la muchacha, pero ella se retrocedió. Del sitio negro, los muertos se congregaron y se deleitaron con la escena. De las sombras los lobos se quedaron observando a la muchacha, estudiando sus movimientos. Las exhalaciones abruptas de la mujer al aproximarse más y más a Adelina, la aterraron y le produjeron escalofríos.
–¡LADRONES! –el grito hizo que Adelina callera al piso y se alejara de la mujer– ¡LO PAGARÁN CARO! Me quitaron todo. Lo que una vez se dividió volverá a unirse y será fuerte. ¡LADRONES! Mi carne los perseguirá hasta el final de los tiempos ¡LADRONES!
Adelina sintió que los muertos se abalanzaron sobre ella y gritó para alejarlos. Pateó, golpeó, rasguñó y fue en vano. El aullido de los lobos se hicieron presentes como un canto espantoso. Los gritos de la mujer se escuchaban más cercanos y Adelina sintió que las manos de la mujer estrujaron sus tobillos. Los muertos se alejaron y la mujer miró a la joven. El ojo derecho irradiaba fuego verde esmeralda y gritó con todas sus fuerzas:
–¡LADRONES!
Adelina despertó bañada en sudor. La tormenta no había parado y los truenos seguían resonando por toda la ciudad. Vio la hora y eran cerca de las nueve de la mañana. La chica dejó su celular sobre los libros y miró el techo pensativamente. Odió con todas sus fuerzas los sueños que tenía y se maldijo así misma por la ineptitud de sus actos en la montaña, el no haber huido cuando tuvo la oportunidad.
Se levantó de la cama y le dio inicio a su día. La tormenta no dio un ápice de detenerse, cuando parecía que iba a cesar volvía a arremeter con todo. Daniela y Adelina creyeron que las ventanas iban a romperse en mil pedazos y que la luz se cortaría.
La mañana pasó tormentosa y al mediodía se prepararon algo liviano por si a Mariano se le ocurría hacer una locura de hacer un asado en pleno diluvio. Tras terminar de comer, lavaron los platos y los secaron para hacer una siesta.
Los fines de semana eran casi los únicos días mayormente libres de preocupaciones y locuras del trabajo de las chicas. Podían ir a donde quisieran por esos dos días. Caminar, comprar, salir a tomar algo, cualquier cosa, pero el clima no estuvo del lado de ellas.
Durante la tarde aparte de dormir, se quedaron leyendo cada quién sus libros pendientes y ordenando las bibliotecas con música compartida entre las muchachas. En un momento tocaron la puerta y era Mariano con anteojos, remera, pantalón y ojotas mojadas. También en sus manos cargaba bolsas repletas de bebidas y algo de picada.
–¿No te diste cuenta que hay una tormenta encima de nosotros? ¿verdad? –dijo Daniela de forma obvia.
–Lo sé, pero aun así vine a comer con ustedes –el chico mostró una sonrisa y los paquetes–. Me pareció ver hace tiempo atrás milanesas y yo tengo antojo de milanesas con papas fritas, porque no puedo darme el lujo de comer un choripán.
–No vamos a comer hasta más tarde – dijo Daniela–. Confórmate con escuchar chisme y música.
Mariano entró y fue hacia la heladera a guardar las bebidas y la picada, después fue al comedor y sentó junto con las chicas. La charla duró hasta el anochecer y la música la pusieron cuando la tormenta se volvió más fuerte y el cielo se oscurecía. Contaron anécdotas, opiniones de celebridades y algunos chismes de colegas del trabajo.
La tormenta no cesaba entre el diluvio, los truenos y relámpagos, el trío comenzó a prepararse su cena al compás de las canciones reproducidas del celular mediante el parlante. Adelina sacó las milanesas y calentó el aceite, Daniela peló las papas y Mariano sirvió las bebidas al mismo tiempo que preparaba la picada.
En un momento, el celular de Daniela reprodujo Devil Woman y ella acompañó en coro en el estribillo a Mariano. Adelina no paró de reír ante esas locuras, mientras cocinaban y después de presionar, la chica se les unió y el dúo victoreo ese pequeño atrevimiento. Vio a Mariano y Daniela bailar como si estuvieran en un club, se movían tan a la par que Adelina sintió felicidad. Prefirió no unírseles, bailar frente a sus amigos le daba vergüenza, con cantar era suficiente para ella.
Por esos instantes dejó de importarle sus sueños macabros y los tatuajes. Olvidó a los Lin Kuei y al dios del fuego. Cantar mal y pasar con sus amigos en un día de tormenta era más de lo que podía pedir y no iba permitir que le quitaran eso.
El vagabundo miraba fijamente una ventana del edificio. Más concretamente hacia uno en el que se escuchaba música y tres jóvenes disfrutando. El vagabundo sonrió ante ese momento y rememoró tiempos anteriores con viejos amigos de líneas de tiempo pasadas. El hombre dio media vuelta y de sus manos comenzaron arder sin quemar la carne. Sus extremidades se movieron y el fuego naranja y azul, como línea recta, se dirigieron hacia la nada y formaron un círculo.
Del portal salieron tres hombres vestidos de combate, llevando un color diferente. Uno vestía de azul y tenía mechones sueltos del rodete de su cabello. Se podía sentir frialdad y su mirada reflejaba superioridad. El hombre a su costado iba de amarillo con un tatuaje de escorpión en el brazo. Portaba un kunai atado a una soga e irradiaba calidez. Y detrás de ellos había un joven llevaba un traje negro ceniciento con un karambit y un cuchillo de caza en el cinturón. Su cabello era del color del humo y arriba de uno de sus ojos grises tenía una cicatriz trazando su ceja y un poco de su frente.
Los tres se inclinaron y unieron un puño a su palma reverenciándose al vagabundo que se había sacado su capa. Su cabello negro, atado en un medio rodete les hizo un además para que el trío se pusiera de pie.
–¿A quién buscamos en estos territorios, Lord Liu Kang? –el hombre de azul preguntó–. Ya tenemos a muchos representantes para el torneo.
–Falta un último campeón para que participe –se volteó una vez más al edificio–. Más bien campeona.
Los tres condujeron sus miradas hacia donde dirigía la de Liu Kang. El departamento dónde se oía la música y a jóvenes riendo. Se pudo ver por las ventanas a una chica de cabello negro, largo y lacio mirar lo que cocinaba en la olla y al mismo tiempo vislumbrando a sus dos compañeros cantar.
–Vamos Adelina –dijo la chica de cabello rojo y corto–. No seas amarga. Copate y canta. No nos dejes así.
–Sí, dale –el muchacho rubio y de cabello largo alentó–. Después seguís mirando la comida.
Unas estrofas cantadas por el dúo siguieron insistiendo a que la chica llamada Adelina cantara. Tomaron unos trozos de lo que parecía carne para después beber y seguir entonando las letras.
–Dale Ade –siguió insistiendo la chica de cabello rojo–. …Then I looked in those big green eyes/And I wondered what I'd come there for…
La joven de cabello negro se resignó y comenzó a cantar al mismo tiempo que la pelirroja:
–She's just a devil woman –el rostro de su compañera sonrió más de lo que podía.
–With evil on her mind –el muchacho cantó.
Las chicas entonaron las letras, seguido del joven hasta que el estribillo terminó y el chico continuó con el canto. Mientras tanto, los cuatro extraños miraban desde abajo la escena. El chico vestido de azul como el de amarillo tenían una primera impresión bastante pobre de las muchachas y su amigo. Por otro lado, el hombre de negro ceniciento le causó gracia y a la vez extrañeza que esa mujer de cabello negro fuera la misma que le había dado una pelea hace unos días en las montañas y saltado hacia el vacío.
–Adelina Acosta puede ser una de las campeonas de la Tierra –Lord Liu Kang puso sus manos en su pecho–. Es una mujer que valoriza la estrategia, el conocimiento para el combate y estudiar al enemigo, Bi Han.
–No parece una mujer de conocimiento, Lord Liu Kang –el hombre de amarillo se acercó más a Liu Kang–. Quizás no esté a la altura como no lo está el señor Cage.
–Las apariencias suelen ser engañosas, Kuai Liang –el vagabundo avanzó hacia las puertas del edificio–. Ella sola dio una buena pelea a Tomas y uno de sus aprendices.
–Es muy ágil, hermanos –el chico de cabello ceniciento se acercó más a sus hermanos–. Logró escalar, entrar a Arctika y luego saltó al vacío en esas ruinas que encontró en nuestro hogar.
–Un acto suicida e impertinente, Tomas –espetó el de azul–. Un Lin Kuei no haría semejante locura.
–Como he dicho, Bi Han, las apariencias suelen ser engañosas y ella tiene un gran camino que recorrer junto con los demás representantes.
Los tres dejaron de contradecir al hombre, sobre todo Bi Han con una mirada de amargura. Vieron a Lord Liu Kang abrió las puertas y los tres lo siguieron. Llegaron hacia donde estaba el ascensor y al lado se hallaban las escaleras. El hombre de ojos blancos se dirigió hacia estas y los tres ninjas lo acompañaron hasta llegar al piso donde se escuchaba música y risas estruendosas.
Daniela Ramoter apenas pudo escuchar el timbre y se acercó al pequeño agujero de la puerta para ver quién era la persona molestando a horarios tan imposibles en un sábado tormentoso. Su ojo café observó detenidamente a las cuatro personas que molestaban y vio a cuatro hombres extraños. El que estaba frente a la puerta tenía medio rodete y una banda de color negro y otros detalles atado a la frente, y ojos blancos. Su vestimenta parecía ser tradicional de China y blanca. Uno de los extraños vestía de azul, otro amarillo y el último negro ceniciento. El cabello fue lo más sorprendió a Daniela, ya que era del color del humo… ¿cabello ceniciento?
¿Traje de combate extraño? ¿cabello del color del humo?
Smoke.
Era imposible que hayan podido encontrar a Adelina ¿cómo lo hicieron? La chica apartó su ojo del agujero de la puerta. Su sonrisa se apagó y vio a su amiga charlando con Mariano sin ningún inconveniente. Esto era un gran problema y una porquería. Se acercó rápidamente al sillón sacó la escopeta que tenía oculta. La cargó y se dirigió hacia sus amigos.
–¿Dónde tenes el rifle? –preguntó apresuradamente Daniela.
–En mi habitación –la muchacha fue hacia la mesa donde se encontraba el televisor y de los cajones sacó dos ametralladoras–. ¿Qué pasa Daniela? Estas asustando.
–Creo que ese pelotudo al que te enfrentaste en las montañas nos encontró.
El rostro de Adelina palideció.
–¿Cómo?...
–No sé y no sé con certeza si es él –Daniela le entregó las ametralladoras a Mariano–, pero creo que se trajo a la caballería.
–¿Cuántos más se trajo? –el muchacho cargó las armas.
–Tres y no son agradables –el sonido del timbre sonó una vez más–. Voy a tratar de hacerme la idiota. Mariano te quedas en la cocina y oculta bien las armas, serán nuestro ataque sorpresa si se llegan hacerse los picantes. Vos quédate en tu habitación con ese rifle cargado y listo para disparar.
–No voy a dejarlos aca y morir por mí –Adelina se levantó–. Yo los metí en este lío, yo también voy a pelear.
Daniela revoleó los ojos y supo que su amiga no iba a ceder, porque los tres eran así. No toleraban ver a uno de sus seres queridos hacer locuras.
–Esta bien –Daniela fue hacia la puerta–. Si no puedo despistarlos abrís la puerta de tu habitación mostras el rifle y vemos que ocurre después.
–¿Ese tu plan? –la voz de Mariano se notó la confusión.
–Es lo mejor que podemos hacer con poco tiempo.
El timbre volvió a sonar.
–¡YA VOY! –el grito de Daniela.
Adelina corrió hacia su habitación y tomó su rifle ubicado debajo de su cama. Buscó los cartuchos y cargó el arma con mucho sigilo. Su oreja se pegó hacia la madera de la puerta y pudo escuchar la conversación. Rezó para que esos cuatro extraños fueran una falsa alarma y seguir con una noche tranquila.
–Lamento la tardanza. La humedad hace que la madera se infle y cueste abrirla –la voz de Daniela se volvió normal–. El partido de Boca no es hasta dentro de unos días señores.
–Buenas noches –un hombre habló–. Lamentamos interrumpir su noche, pero estamos buscando a Adelina Acosta.
–No me suena ese nombre, señor. –Daniela sonó muy convincente–. ¡Mariano! ¿Conoces a una Adelina?
–¿A quién? –Adelina se alegró de que Mariano interpretara bien su papel de sordo.
–Adelina Acosta.
La muchacha escuchó los pasos de su amigo dirigiéndose a la puerta.
–No escuché ese nombre. Lamentamos no poderlos ayudar caballeros, que tengan una linda noche.
El corazón de Adelina había comenzado a relajarse, pero antes de que pudiera girar el picaporte, el timbre volvió a sonar en el departamento.
–Sabemos que Adelina Acosta esta aquí, Daniela Ramoter –el hombre habló una vez más y su tono siguió tranquilo–. ¿Nos permites pasar?
–Mira flaco –el tono de Daniela se tornó oscuro y amenazante–, no sé quién sos ni me importan tus putos subordinados y tampoco sé como conseguiste mi nombre. No sé quién es esa Adelina Acosta y váyanse de mi casa.
–Queremos darle una propuesta a su amiga.
¿Una propuesta? ¿Qué se refería ese extraño? Adelina apretó más su rifle contra su cuerpo y le quitó el seguro al arma. Agudizó más su oído.
–Esta es la propuesta que te doy hijo de puta –la voz de Mariano se volvió amenazante–. Ahora ándate vos y los pajeros que tenes atrás.
–Es una falta de respeto dirigirte de esa forma al Gran Maestro de los Lin Kuei.
Todo el departamento se enfrió y Adelina sintió escalofríos en toda la columna. Escuchó las quejas de sus amigos y el rechinar de la puerta. Salió de su escondite y apuntó hacia la entrada donde estaban los invasores. Al igual que ella, Daniela y Mariano apuntaron hacia los invasores. Sus miradas eran calmas para la sorpresa de Adelina.
Ella pudo analizar mejor a Smoke que en las montañas. En su cinturón no solo tenía el karambit sino también un cuchillo de caza y bombas de humo. Usaba la distracción como ataque y un buen manejo en las armas blancas. Tendría que usar la fuerza de Smoke a su favor. El chico de amarillo llevaba en el cinturón un kunai unido a una soga, traería problemas si quería usar a Daniela o Mariano como rehén para que Adelina cediera. El hombre de azul le fue más difícil de analizar, no poseía ningún arma. Lo único que pudo sacar de él era el más fuerte. Por último, el cuarto hombre le resultó familiar. Los ojos blancos del extraño analizaban a Adelina, Mariano y Daniela, no solamente su exterior sino también su interior. Parecía conocer más cosas que ellos no sabían, como si fuera testigo de sus vidas.
–Te pondré en tu lugar, insolente –gruñó el ninja de azul–. Tu amiga no debió entrar a territorio Lin Kuei.
–Ponele voluntad a tus amenazas, la puta que te parió –Mariano apuntó hacia el ninja–. No te metas conmigo, sino queres que te de un boleo en el orto.
Los tres estuvieron atentos a cualquier movimiento brusco que hicieran alguno de los atacantes. El frío de la habitación les dio escalofríos. El ninja de azul miraba con mala cara Mariano desde que le contestó mal y este avanzó hacia él. El chico sin dudarlo le disparó con las ametralladoras, pero las balas nunca atravesaron el cuerpo. Una pared de hielo se interpuso entre las balas, invocada por las manos del extraño.
Adelina, Mariano y Daniela quedaron estupefactos por lo que acaban de presenciar, pero no tuvieron tiempo para reaccionar ya que el ninja de azul atacó a Mariano. Él logró defenderse usando los antebrazos y logrando asestarle varios puñetazos a su contrincante, luego de perder las armas. Pero esa defensa trastrabilló cuando el hombre vestido de azul usó sus poderes para crear agujas de hielo. Mariano se escudó con una silla que tomó en su retirada y corrió hacia el ninja para poder atacarlo. Le asestó el asiento en toda la cara y este calló al suelo.
Daniela apuntó hacia el oponente de Mariano, pero antes de poder disparar, el kunai del ninja amarillo interceptó la escopeta y empezó a tirar para sacarla de las manos de la chica. Tomó ventaja de eso y apunto hacia el chico, este logró esquivar el disparo por los pelos. Daniela tomó el cuchillo de la mesa y cortó la soga antes de que el kunai le volviera a causar problemas.
El hombre de amarillo se abalanzó rápidamente hacia Daniela y ambos cayeron sobre la mesa, y esta se rompió por el peso de los dos. La joven intentó forcejear y poder darle un golpe a su contrincante con la escopeta. Sus intentos fueron en vano, puesto que el extraño alejó el arma. Daniela aprovechó la aproximación del rostro de su enemigo para escupirle y liberarse de él. Con un sonido de disgusto el chico retrocedió y Daniela tomó ventaja para darle un golpe con la culata del arma.
Por el lado de Adelina, mantuvo firme el rifle para evitar que Smoke no se lo quitara. La chica tenía que encontrar una forma de sacarle el cinturón antes de que usara las bombas de humo como distracción. Adelina vislumbró a sus pies un mantel, luego de que Daniela alejara al ninja de amarillo tras haber roto la mesa. La joven levantó el mantel con rapidez y lo lanzó a la cara de Smoke. Cuando el rostro del chico fue cubierto, Adelina se abalanzó hacia él dándole un puñetazo y le quitó el cinturón. Luego, le dio una patada que alejó al hombre de ella y tiró muy lejos la ventaja con la que contaba Smoke.
–¡Ya basta! –gritó el cuarto extraño y de su cuerpo salió fuego azul y naranja.
Los seis dejaron su riña, pero Mariano seguía sosteniendo la silla como un bate de beisbol.
–Dame un segundo –dijo el muchacho mientras extendía el dedo índice. Volvió a golpear con la silla a su contrincante tumbado en el suelo y este solo pudo soltar un gruñido–. Listo ahora sí.
–Suficiente Mariano Baldor –el extraño lo retó como si fuera un niño–. No vinimos aquí a saldar asuntos por errores. Hemos venido a darle una propuesta Adelina Acosta y que podría cambiar el rumbo de su vida.
Adelina no soltó el arma, pero sí se quedó atónita con las palabras de ese extraño.
–Tu cara me resulta conocida…
–¡Es Hefesto con aspecto de Bruce Lee! –exclamó Daniela automáticamente–. El dios del fuego según los griegos.
–No lo es Daniela –Adelina bajó el arma–. En los mitos tiene la cara deformada y está rengueando por como Hera lo tiró del Olimpo. Este tipo ni de cerca cumple con la descripción de Hefesto.
–En efecto Adelina, no soy Hefesto, –apaciguó las dudas de las jóvenes–. Soy Liu Kang, dios del fuego y protector de la Tierra.
“El dios del fuego tiene la respuesta” “El dios del fuego vendrá pronto” “El dios del fuego mostrará los pasos”. El cerebro de Adelina comenzó a girar sus engranajes ¿El dios que la mujer del féretro hablaba? ¿Le iba a dar respuestas a sus tatuajes?
–Sos el vagabundo que estaba afuera –dijo Adelina.
–¿Cómo que protector de la Tierra? –preguntó Mariano.
–Vinimos a ofrecerle a Adelina un camino como uno de los campeones de la Tierra –Liu Kang se acercó a los tres jóvenes–. Es un camino que puede cambiar su vida.
Adelina desconfiaba de las palabras de Liu Kang, pero tampoco era tonta para no creerse que ese hombre era un dios y no un producto de su imaginación. Literalmente de su cuerpo salió fuego. Sus subordinados también tenían dones bastante peculiares. Bajó el arma y les preguntó a los extraños:
–¿Tienen hambre?
–Nos gustaría poder acompañarlos en su cena –dijo Liu Kang.
Después de preparar la pequeña mesa que tenían en el comedor, Adelina, Mariano y Daniela fueron hacia la cocina y cada quién se dividió las tareas para la cena y ayudar con las heridas de sus “invitados”. Adelina cortó más salame y fiambres para la picada y al mismo tiempo freír más milanesas y papas, al compás de Sex de Starbenders. Mientras que Mariano y Daniela ayudaron con las heridas a los tres ninjas y tanto el ninja de azul como de amarillo miraban con hostilidad las acciones del dúo. Nadie confiaba en nadie y a cualquier movimiento estaban listos para asesinar.
–Necesitan hielo para esos golpes, fans de Boca –dijo Daniela mientras sacaba las bolsas congeladas–. Esto les puede ayudar y para vos tenes el baño a la izquierda.
–Me llamo Kuai Liang –respondió el ninja de amarillo–. ¿Por qué crees que necesito el baño?
–Porque te escupí en la cara –Daniela sonreía mientras iba hacia donde estaba Mariano–, y creo que no te gustaría tener el olor y la sensación de mi saliva en toda la jeta, aparte de que es asqueroso lo que hice. Además de una buena demostración de mi gentileza, por más que me hayas roto la mesa, que cuesta casi un ojo de la cara comprar una nueva y decente.
Kuai Liang no pudo contradecir los dichos de Daniela y se dirigió hacia el baño, mientras que el ninja de azul miraba de manera hostil a Mariano. Seguramente la golpiza con la silla debió afectarle el orgullo. Por otro lado, Smoke se acercó por detrás a Adelina que estaba pérdida en sus pensamientos, la comida y la música.
–Perdona –ante las palabras Adelina apuntó con el cuchillo la garganta del joven–. Quería saber dónde tiraste mi cinturón. No pensaba molestarte.
–Busca –contestó agresivamente la chica y se volteó para seguir cortando el salame–. Dios te dio el don de la vista, úsalo.
–No era mi intención enojarte porque hallamos roto tu mesa.
–Te estás equivocando de mi porqué –Adelina volteó una vez más y se subió la remera para que el chico viera su vientre cicatrizado y parte de sus tatuajes–. Por esto estoy enojada, porque el mamerto que se va a sentar a mi mesa es el mismo que intentó matarme.
–Lamento haberte causado esa herida –dijo el chico, se notó la aflicción en su voz–. Debí esforzarme en evitar que saltaras y convencerte de que salieras de Arctika.
–Veremos si te ganas mi perdón, Smoke –dijo Adelina en un mal tono.
–¿Cómo sabes mi título?
–Cuando me oculté de vos y de tu amigo escuché una de sus conversaciones y supe tu apodo –Adelina sacó una milanesa de la olla y escurrió el aceite–. Todavía lo recuerdo porque no sabía si vos y tu grupo terrorista iban a matarme.
–No somos malos.
–Seguro y yo soy Goku –contrarrestó Adelina sarcásticamente.
Liu Kang intentó apaciguar la situación ofreciendo ayuda a la joven, pero ella se negó amablemente. Mariano y Daniela se curaron mutuamente las heridas hechas por la riña, pasándose hielo por los golpes y revisando si no tuvieron algún contratiempo.
Una vez que Adelina terminó de cortar los fiambres, servirlos en la mesita del comedor y ofrecer bebidas, continuó friendo las milanesas y las papas. Luego preparó la ensalada y cortó los panes para armar sanguches. Cuando las milanesas terminaron de freírse, la joven las puso en los panes y les agregó ensalada para acompañar. Luego llevó los platos a la mesita del comedor y los siete comenzaron a comer.
El silencio se podía cortar con un cuchillo, mientras que afuera la tormenta no cesó. Los relámpagos y truenos hacían que el cielo destellara y rugiera. Adelina, Mariano y Daniela miraron atentamente a los cuatro y estos igual.
–Apreciamos la hospitalidad que poseen –dijo el dios tras terminar su sanguche.
–No hay de que –respondió Adelina mientras masticaba una papa–. Ahora explícame, Liu Kang ¿a qué te referís con que soy campeona de la Tierra?
–Fue elegida para participar en un torneo que definirá la victoria de la Tierra contra el Mundo Exterior.
–¿Mundo Exterior? –preguntó Daniela mientras agarraba una rodaja de salame–. ¿Qué país ese es ese? No está en ninguno de los mapas.
–En efecto Daniela Ramoter –dijo el dios–, el Mundo Exterior es un reino entre los diversos que existen. Muchos de los habitantes prefieren que estemos en guerra con ellos, aunque estemos en paz, pero preferimos mostrar nuestra fuerza en el combate como símbolo de defensa. Además de contar con el clan Lin Kuei como defensores de la Tierra.
–Sinceramente creí que eran un grupo armado –dijo Adelina–. Intentaron matarme.
La mirada de la joven se posó hacia Smoke que comía rodajas de salame con queso como si fuera un manjar de ricos. Mientras que sus dos amigos apenas tocaron algo de la comida y observaban de forma crítica a los invitadores. Ante las palabras de Adelina, Liu Kang río.
–No lo son Adelina Acosta –el dios masticó otro sanguche–. Como mencioné antes, se dedican a ser nuestras defensas. Bi Han es el Gran Maestro del clan y tanto sus hermanos, Kuai Liang como Tomas son los mejores ninjas.
La mano de Liu Kang se extendió en el ninja de azul, Bi Han y este mostró orgullo a su título de Gran Maestro, al igual que el Kuai Liang, el ninja de amarillo. Pero Smoke, Tomas, fue el único que no mostró ese orgullo por su título, ya que seguía enfocado en la comida.
–Entonces ¿por qué fui elegida para este gran torneo con el Mundo Exterior? –preguntó Adelina.
–Porque tú mostraste unos valores y cualidades que pueden ser representados para ser una campeona de la Tierra –dijo Liu Kang como si hubiera dicho lo más obvio del mundo.
–¿Y nosotros? –preguntó Mariano.
–Si ustedes quieren ser parte de los campeones de la Tierra deben ir conmigo y Adelina a la Academia Wu Shi –la mirada de Liu Kang se dirigió a los amigos de Adelina–. Aprenderán tanto del Mundo Exterior como de los protectores de la Tierra.
–¿Irnos? –Adelina se quedó perpleja–. ¿Por cuánto tiempo?
–Unos meses –dijo Liu Kang mientras tomaba un poco de su bebida–. Necesitarán entrenar y pulir todas sus técnicas de combate.
–¿Y nuestros trabajos? –Daniela preguntó dejando el plato en la mesa–. Tenemos acá una vida. No podemos desaparecer sin más por unos meses. Las cuentas, mis noticias, la mesa. Por cierto, los tres, me deben una mesa… Corrección, nos deben una mesa.
–Estamos ocupados los tres –dijo Adelina–. Estoy con una investigación y si me ausento por mucho tiempo voy a perder la plata.
Abandonar todo por un torneo que ni siquiera tenía intenciones de participar. Había cosas más importantes en las que debía enfocarse, pero su cerebro volvió a trabajar y cuestionarse varias cosas. ¿Sería Liu Kang el que la mujer del féretro hablaba? ¿Podría sacarle los tatuajes o darle más información sobre la diosa Hela? ¿Sabría algo sobre algún desafortunado que enloqueció hasta morir por culpa del arma nórdica o de los otros dos artefactos que había visto en sus alucinaciones?
Adelina desconfiaba de los cuatro sujetos, no pensaba relatarle nada a Liu Kang sobre la daga o el mapa hasta ver si el dios era una amenaza o alguien en quien confiar. Tampoco les agradaba los tres Lin Kuei, sospechaba que en algún momento la matarían por haber entrado a sus tierras luego de ese torneo con lo que llamaban Mundo Exterior.
El dinero que iba a perder si se ausentaba por mucho tiempo era otra de sus preocupaciones. Había otros arqueólogos con las mismas habilidades que Adelina que podrían hacer que Agustín, su cliente, quisiera romper su contrato con ella.
–Este torneo pondrá un nuevo rumbo a sus destinos –dijo Liu Kang–. Sería un honor que los tres representaran a la Tierra.
–Me dejas un segundo hablar con mis amigos –dijo Adelina con una sonrisa, mientras se ponía de pie–. En privado.
Mariano y Daniela se pusieron de pie y al mismo tiempo se escucharon gritos de los vecinos. Adelina y Daniela revolearon los ojos y se sintieron avergonzadas porque sus invitados tuvieran que ver el lado malo de su departamento. El trío se fue al cuarto de Adelina.
–¿Qué opinan de lo que acabamos de escuchar? –preguntó la joven en cuanto la puerta se cerró.
–Esos tres del clan tiene una mina de oro de problemas –soltó Mariano señalando la puerta–. Valdría para una tesis de psicología y tener mi título sin tener que cursar devuelta.
–El de azul está lindo y el amarillo también –dijo Daniela–, pero no quita que quiero que nos paguen la mesa. Con lo otro no sé qué decir… es una locura que a la vez le creo a ese dios del fuego.
–Coincido con vos, Dani –habló Mariano y se cruzó de brazos–, esto es algo simplemente imposible ¿Un torneo? ¿Para qué? ¿Por qué se hizo?
–¿No escuchaste lo que dijo Liu Kang? –preguntó Adelina.
–No.
–Según él, para demostrar la fuerza ante el Mundo Exterior y mantener las defensas –Adelina se sentó en su cama–. Literalmente parece cierto lo que dice, le salió fuego del cuerpo y el de azul conjuró hielo de la mano y casi te mata Mariano.
–¿Vas a irte a ese torneo? –preguntó Daniela sin titubear y posó su mirada en la de su amiga. Al mismo tiempo se escucharon más gritos de sus vecinos.
–No lo sé –sacudió la cabeza–. Voy a perder plata y si vienen conmigo también van a perder mucha plata en esos meses que no sé cuántos van a ser, pero a la vez siento que me va a poder dar respuestas.
–¿Respuestas? –cuestionó Mariano.
–Los sueños que estoy teniendo me hacen dudar si debo ir o no –dijo Adelina preocupada–. La mujer del féretro varias veces hablaba de un dios del fuego que iba guiar el camino.
–Son sueños Adelina, simplemente representan un lado oculto de tu subconsciente como dice el maldito Freud –dijo el muchacho.
–Mariano, esos malditos sueños hablaron de Arctika y en ese mismo lugar una puta daga maldecida me hizo tatuajes y alucinaciones –Adelina mostró su brazo y abdomen–. Esas alucinaciones me siguen apareciendo a veces sobre muertos y esa mujer gritando una y otra vez. ¿Si se vuelven constantes hasta tal punto que no pueda diferenciar la realidad?
–Tendríamos que mínimo ponerlo en duda –dijo Daniela mientras daba vueltas–. Sí, esto de un dios es verdadero. Pero los sueños de Adelina pueden serlos y la daga, quizás, debe tener una maldición hacia cualquiera que la toque. Las alucinaciones no creo que llegarán al punto que estás diciendo, pero hay que ver si ese dios puede darnos alguna guía sobre cómo hacerlas desaparecer… digo, si aparecieron de forma mágica deben sacarse de forma mágica.
–¿Debería ir entonces? –preguntó Adelina.
–Iremos –dijo Mariano.
–¿Pero sus trabajos? –se alarmó la joven–. Yo puedo justificar con algo medianamente, pero ¿ustedes?
–Nos las ingeniamos. Van a ser unas buenas vacaciones.
–No lo sé –dijo Daniela con duda en su voz.
–Vas hacer entrevistas que no involucren riesgos y estar casi al pedo –contra ofertó Mariano.
–Está bien, me uno a la aventura.
–No me siento cómoda que ustedes vayan –dijo Adelina.
–Muy tarde, ya decidimos –dijo Daniela y una sonrisa adornó su rostro.
–Los Lin Kuei podrían representar a la Tierra en esta ocasión, Lord Liu Kang –escupió Bi Han–. Estos tres no pueden ser aptos para representarnos.
–Tienen verdaderas habilidades, aunque ellos no lo sepan –dijo Liu Kang tranquilamente.
Tomas se quedó en silencio viendo como la conversación entre el dios del fuego y sus hermanos continuaba. El joven de cabello grisáceo se enfocaba en la comida que sus hermanos apenas habían tocado, no sabía cómo ellos se negaban a probar estas delicias.
Le era un misterio cómo la misma chica a la que había intentado asesinar en Arctika tenía un gran talento en la cocina.
–Ella y sus amigos ni siquiera tienen una buena base de alimento para que puedan desarrollar una técnica de combate –dijo Bi Han.
–Ese amigo fue el que te dio un sillazo en la cabeza –dijo Mariano Baldor, mientras la puerta cerraba y Adelina Acosta y Daniela Ramoter miraban con mala cara al hermano mayor de Tomas.
–Eres un imprudente e inmaduro, un…
–Es una falta de respeto que los invitados insulten la comida del invitador –dijo Adelina agresivamente–. Si querías otra cosa, Gran Maestro, te hubieras ido a Palermo o a tu casa.
–Bi Han es suficiente –el tono de advertencia de Liu Kang hizo que el se contuviera.
–Señor Liu Kang, nos conmueve su propuesta sobre ser campeones de la Tierra –dijo Adelina–, y nos gustaría estar con usted en el torneo.
El dios sonrió ante esas palabras, al igual que Tomas. Sus hermanos mostraron duda en sus rostros, pero al menor no le importó mucho. Pensó que esas tres personas darían su mejor esfuerzo para representar a la Tierra.
Pero hubo algo que le hizo ruido en la cabeza y fue Adelina. Cuando la conoció hace unos días estaba alterada y llorando por la presencia de Tomas y su ayudante. Sospechaba que había encontrado algo en esas ruinas de las montañas… o vio algo que la aterrorizó.
Esas ruinas, ni los propios Lin Kuei conocían de su existencia y pasó sin mucha relevancia a los ojos de Bi Han. Pero a Tomas le causaron un verdadero terror. Cuando puso un pie en ese sitio, sintió que las dos estatuas de la entrada lo miraban como un invasor, alguien que vería muerte si no se marchaba de inmediato. Quizás la muchacha percibió lo mismo que Tomas o incluso más odio, le es un misterio saberlo en esos ojos tan misteriosos y extrañamente cautivadores.
–Me alegra que hayan tomado esa decisión.
–¿Cuándo nos marchamos? –preguntó Daniela.
–Mañana al atardecer los llevaré a la Academia Wu Shi –Liu Kang se puso de pie y Tomas y sus hermanos lo imitaron–. Lleven lo necesario.
Los cuatro se dirigieron a la salida y tras despedirse de los tres jóvenes se marcharon a las calles. La lluvia seguía, pero el aguacero se detuvo para ser una llovizna. Liu Kang fue hacia el mismo lugar donde antes había conjurado el portal y una vez más las llamas azules y naranjas formaron el portal. Los cuatro hombres se perdieron en esa negrura infinita completando así su misión.
#mk x reader#kuai liang x reader#scorpion x reader#sub zero x reader#smoke x reader#bi han x reader#tomas vrbada x reader#tomas x reader#mk1 x reader#heredera del infierno#liu kang x reader#tomas mk1#liu kang mk1#liu kang#mk x oc
9 notes
·
View notes
Note
Hola! ¿Cómo estás? He estado leyendo tu magic AU y estoy supeeer enamorado de ella <3. Quería preguntar, ¿Exactamente qué les pasó a Bobby y a Roier? ¿A dónde se dirigían antes del accidente?
Otra cosa un poco rara y fuera de tema, pero ¿cómo haces cuando tienes bloqueo creativo? Tengo algo que quiero escribir (tengo la idea, los personajes, todo!) pero cada vez que me siento a trabajar en ello, no logro escribir algo que me guste o que quede bien con el personaje. Llevo intentando escribir desde hace dos semanas, pero nada sale :( (esto es más un grito de ayuda que otra cosa/hj)
Magic au first!
So Roier and Bobby were on their way home from visiting Foolish and Vegetta and Leo for some of Bobby’s magic lessons when Roier checked his phone for half a second at a stoplight. But that isn’t what caused the crash. Truth is… Roier doesn’t remember what it was. He doesn’t remember at all, and nobody will tell him. But he’s decided that it was his fault because that’s what almost everybody around him has told him.
(Bobby’s magic accidentally misfired while he was practicing in the back seat of the car, and it magicked the car forward into traffic. This was after Roier spent half the car ride telling Bobby to stop fucking around, and, well. Yeah.)
As for writer’s block, I personally solve it by doing small things like my threads, or by playing dnd with my irl friends. But if I can’t work on a fic for a while, I just. Don’t work on it. I don’t want to burn myself out, so I don’t force myself to do what I know I can’t do.
Sometimes all you can do is wait it out
14 notes
·
View notes
Text
Me despido.
Si llegaste acá supongo que es porque seras una de las personas que hago reir con mis tonterías en twitter y haz visto que no he publicado más.
Mamá hoy ya no puedo más, abrazame una última vez y déjame ir, no quiero esta vida que estoy viviendo aunque me hayas dado todo junto con papá.
Nunca pensé que tendría en mente la idea de suicidarme. Yo la persona que siempre estaba ahí para todos aquellos que lo necesitaran y lo sigo estando incluso aunque me hayan lastimado muchísimo, aunque hoy esté rota y enojada por lo que me han hecho.
Si es tan cierto que "la vida sigue", puede seguir sin mi, todos aquellos que me rodean y rodearon alguna vez pueden seguir sin mi. Ustedes pueden seguir sin mi, mis supuestxs amigxs tambien, las personas que han estado en mi vida y ya no estan tambien. Pueden superar mi ausencia y mi amor que alguna vez le di.
Ojalá comprendan que el suicidio fue mi salvación y no fue un acto egoísta porque pensé en mi y mi alivio.
Como lei por ahi¿De qué sirve que me haga la fuerte? me estoy muriendo por dentro, estoy qué pido ayuda y nadie me escucha, todos me dejan en mi peor momento, nadie me acompaña en mis males, todos se han ido pese a lo que yo he ayudado y perdonado. No entiendo y tampoco me voy a poner a buscar una respuesta a esto.
Soy una buena persona o era buena persona antes de caer en tanta tristeza, soy detallista, le doy la mejor versión de mi a quien quiero, ayudo sin pedir nada a cambio. Tengo tantas cualidades y aún así siento que no sirven de nada. No importa cuánto me esfuerce o lo mucho que intente mejorar, nunca es suficiente para que alguien me elija o se esfuerce por mi. Siempre perdono a todos y cuando yo me equivoco me crucifican, me duele tanto no tener a alguien que me ame o quiera como yo, con tanta intensidad, con tanto cariño, con tanta compresión, con tantas ganas de acompañarlo.
Jamás soy prioridad. Siempre soy lo que sobra dónde sea que vaya. Me hubiera gustado aguantar hasta ver o conocer quién seria la persona que me amara durante toda mi vida y me acompañe en mis males así como yo en los suyos. O hasta conocer una amiga o amigo que sea super importante y sea capaz de salvarme. O me hubiera gustado más que nada no tener tanta tristeza dentro, verme tan apagada, tan dolida, no verme tan enferma tan joven, porque a mi? Todo esta mal en mi, incluso cuando pedí ayuda a los gritos a los 16 nadie me ayudó. Estoy tan cansada de todo, que por favor quiero alivio y descansar, no soy cobarde por querer morir, solo quiero no sentir dolor, ni tristeza, ni males, ni pensar. Ya no puedo ni expresarme en ningún lado porque todos me cuestionan algo, todos me insultan o acosan y ya estoy cansada de no poder expresarme
Hasta mi último momento supe que mis sentimientos no importan, lo que yo quiera no importa, LO QUE YO SIENTA NO IMPORTA.
Merezco sufrir por todas las cosas buenas que he arruinado y todo el daño que he causado aunque no lo veo tan así, siempre busque curar, y arreglar a todos. Pero la que estaba tan rota y sola era yo.
14 notes
·
View notes