#es culpa de tomi :$ por inventarse cosas en su cabeza

[satcmis]

satomi piensa en aquella historia de las mujeres que son reemplazadas por espíritus crueles y vengativos, se pregunta si en algún momento ella ha sido presa de lo mismo o en donde aprendido a embotellar la ira y dejarla ahí, añejándose, siempre tan presente, buscando excusas irrelevantes para dejarla salir a flote. quiere responder, por supuesto que sí, seguirá en esa postura, sí, tiene el resto de la eternidad para quedarse enfadada, pero la pregunta en respondida por sus labios sellados a cal y la única señal de que las palabras la han alcanzado es el retroceso en pasos, la creciente distancia, cree que es un caso perdido, que definitivamente es el ciervo que escapa, pero el siguiente referente provoca uno de esos sentimientos irracionales, imposibles de contener o cambiar. “¿y qué si paso el resto de mi vida así? ¿no te parece que ambos tenemos tiempo de sobra?” echa una risita desdeñosa, ofendida y herida “no quiero una disculpa tuya, no te creería no por un segundo,” ella misma se sorprende por la amargura en las palabras y el nudo que se forma en la base de su garganta, quiere dejarlo ir, pero no es capaz, y lo que sea que te lleve a hacer confesiones en fiestas de mala muerte se abraza a su pecho y le muerde las entrañas, maldice lo que sea que la lleva a pronunciar: “¿no te das cuenta? soy tan reemplazable como cualquier otro, es día pensé que no saldría de ahí- y cuando te vi, yo pensé- pensé que tu y yo-” mirada que se fuga a un punto lejano del salón, el resto de las explicación que se atora en la faringe, y “no quiero tus disculpas, roman” reitera, volviendo a él “no necesito nada de ti” aun tratándose de una mentira, mantiene el montón levantando, convenciendo a ojos espectadores, convenciéndose a sí misma. no quiere conversar acerca del horripilante atiendo, ni de que los compromisos son realidad encargos de su sire, ni de la música que le da dolor de cabeza, ¿y es eso si quiera posible?, en realidad, añora el vacío de su departamento, el anonimato de vivir en uno de los millones de rascacielos que existen en esa ciudad.  “me da igual lo que tu quieras, me da igual por qué estés en este sitio o si tienes ganas de discutir” frase que llega a una terminación natural, palabras equivalentes a decir ‘vete al diablo’, proveniente desde el más profundo de los deseos. satomi le mira el rostro, estudiando los rasgos a contraluz, los distintivos familiares que le hacen resaltar entre la multitud, como le gustaría poder olvidarlos, ser verdaderamente inmune a la lealtad o añoranza proveniente de la forma en la que sobreviven. y aquí, con una punzada en el pecho imaginaria, con horror descubre una certeza primordial, de esas que te deja nauseabundo y tambaleante. “¿sabes que es lo peor?” de sus cuerdas vocales se apodera ahora una risa resignada, similar un bufido, sumamente breve, pero delatador “a pesar todo, tu eres el único con quien puedo hablar, a pesar de todo, yo no puedo odiarte” lo que la deja en pie frente a camino sin escape, y supone que hay una tregua pendiendo en algún lugar oculta de esas palabras, sin embargo, por el momento, afirmación sola la deja más irritable, es presa de uno de esos malestares febriles. “no deberíamos estar aquí” esta a punto de darse la medía vuelta, pero como si sus palabras hubiesen accionado un mecanismo para hacer la incomodidad aun más evidente, a lo lejos se escucha ese chillido, y el revuelo de la multitud la devuelve a la cercanía de su compañero, la incertidumbre que por inercia le obliga a alzar la mano en busca del tacto de su piel, pero al darse cuenta, al recordar la ultima vez busco algún consuelo en él, las fuerzas se le escapa, dejando caer la extremidad. “roman-” llamado echado con urgencia, carente de aliento . / @romaahn

separa los labios para rechistar que sí, era un pensamiento suyo, el que venus haya sido su mentora las últimas ocho décadas no significaba que no podía generar una opinión por cuenta propia. sin embargo, se percata a buen tiempo que aquellas son provocaciones. palabras que sólo alguien con los conocimientos de satomi sabría cómo dirigirle motivada desde el resentimiento. ' ¿seguirás tomando esta postura? ' el ápice de su lengua repasa su labio superior. si en algún momento se vio tentado en tomárselo personal, es lo suficientemente moderado como para no demostrarlo y bajar la guardia. ' ya han pasado varias semanas. ¿qué necesitas? ¿una disculpa? ' le mira apenas por encima del hombro. se lo daría si eso buscaba, aunque no lograría ni siquiera un efecto placebo. ' mira, mi ropa no tiene absolutamente nada de malo. tenía unos compromisos antes de recibir la invitación, no es como si este lugar exigiera una etiqueta para hacer presencia, ' se excusa con cierta defensiva porque a él sí le gustaban sus vestimentas, ¡le hacían ver bien! pero claro, siempre evitando agregar el nombre de su sire para no darle más material de dónde señalarle. porque sí, había salido para resolver asuntos de venus. ' en todo caso, estoy aquí para observar, nada más. no intento discutir con nadie, ni siquiera contigo. ' o mejor dicho: mucho menos con ella. no podía hablar de aprecios pero sí de compromisos, y con satomi sentía uno bastante fuerte como vástagos del mismo clan. ' no quiero estar en malos términos contigo. ¿tengo que resignarme a que todo lo que diga será tergiversado desde el resentimiento? vamos, sé que no te sientas cómoda aquí. hoy estamos en el mismo barco. ' @satcmis