#el regreso de las golondrinas
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#Yin Ru Chen Yan#Return to Dust#Li Ruijun#Wu Renlin#Christina Hai#póster#cartel#cinema#movie#film#filme#cinefilia#cinephile#cine#drama#El regreso de las golondrinas
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"El regreso de las golondrinas": la historia de amor imposible de comprender para Occidente y que China censuró
Asisto a un milagro en una sala de cine medio vacía con aire acondicionaado y calma envasada al vacío en los Renoir Plaza de España. Me emociono al ver una película llena de significado, cargada de futuro. Participo en la emocionante liturgia del buen cine, y para mí, es sinónimo de cine emocionante. Inesperadamente, sin pretenderlo, sin grandes alaracas de la crítica, sin ir con unas…
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Tráiler (V.O.S.E.) de "El regreso de las golondrinas" (2022), de Li Ruijun. La humilde y sencilla Ma, y el tímido Cao, han sido expulsados de sus respectivas familias y obligados a contraer un matrimonio concertado. Ahora tendrán que aunar sus fuerzas y construir un hogar donde sobrevivir. En medio de la adversidad, comienza a forjarse entre ellos un vínculo, ya que tanto Ma como Cao, en sintonía con los ciclos de la Tierra, se crean un refugio en el que pueden prosperar. ESTRENO: 14 JULIO 2023.
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¿Qué mundos tengo dentro del alma que hace tiempo vengo pidiendo medios para volar?”.
-Alfonsina Stoni
22 de mayo de 1892
Natalicio de Alfonsina Storni
El 22 de mayo de 1892, en Capriasca, Suiza, nacía la poeta argentina, Alfonsina Storni. Nacida en el extranjero debido a los negocios cerveceros de su padre Sanjuanino, fue anotada con el nombre de Alfonsina Storni Martignoni. De regreso a la Argentina la familia comienza a padecer penurias económicas, prueban instalando un café en Rosario donde Alfonsina limpia y sirve las mesas. A los 12 años escribe su primer poema pesimista y desesperanzador, lo deja debajo de la almohada de su madre que al leerlo la somete a una golpiza para que entienda que la vida es bella.
La muerte de su padre y el desinterés de su madre por su manutención la obligan a trabajar en una fábrica de gorras y también como cantante y corista. Consideró en varias oportunidades quitarse la vida, pero al recibirse de maestra recuperó el amor por la vida y comienza a publicar sus primeros poemas en revistas de Rosario. Mientras aún trabajaba como empleada en una tienda se publica su primer libro "La inquietud del rosal". La publicación de su segundo libro "El dulce daño", llegar a directora de un colegio y hacerse conocida en los ámbitos literarios parecían elevar su autoestima, pero solo hicieron aflorar un comportamiento errático y neurótico. Cada libro que editaba era un éxito de crítica y motivo de admiración de sus pares, hasta Federico García Lorca no perdió la oportunidad de conocerla.
Tuvo una muy cercana relación con Horacio Quiroga, salían, leían y escribían juntos, aunque siempre negaron que su relación tuviera tintes amorosos, decían que era mutua admiración. En la cima de su carrera descubre que padece cáncer de mamas, su íntimo amigo Benito Quinquela Martín la acompaña a todas sus consultas y la apuntala anímicamente antes y después de su operación. La mastectomía a la que fue sometida, dejó tremendas cicatrices físicas y emocionales, si bien ella ya poseía un desequilibrio emocional, este se acrecentó hasta no poder dominarlo.
En octubre de 1938 se traslada al hotel de una amiga en Mar del Plata, escribió varias cartas a sus familiares y envió el poema "Voy a dormir" al diario la Nación. La madrugada del 25 de octubre se dirigió a la playa La Perla y ya no se la volvió a ver hasta que horas después dos obreros la encontraran flotando ya sin vida en las aguas de esa misma playa.
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Date a volar
Alfonsina Storni
Anda, date a volar, hazte una abeja,
En el jardín florecen amapolas,
Y el néctar fino colma las corolas;
Mañana el alma tuya estará vieja.
Anda, suelta a volar, hazte paloma,
Recorre el bosque y picotea granos,
Come migajas en distintas manos
La pulpa muerde de fragante poma.
Anda, date a volar, sé golondrina,
Busca la playa de los soles de oro,
Gusta la primavera y su tesoro,
La primavera es única y divina.
Mueres de sed: no he de oprimirte tanto...
Anda, camina por el mundo, sabe;
Dispuesta sobre el mar está tu nave:
Date a bogar hacia el mejor encanto.
Corre, camina más, es poco aquéllo...
Aún quedan cosas que tu mano anhela,
Corre, camina, gira, sube y vuela:
Gústalo todo porque todo es bello.
Echa a volar... mi amor no te detiene,
¡Cómo te entiendo, Bien, cómo te entiendo!
Llore mi vida... el corazón se apene...
Date a volar, Amor, yo te comprendo.
Callada el alma... el corazón partido,
Suelto tus alas... ve... pero te espero.
¿Cómo traerás el corazón, viajero?
Tendré piedad de un corazón vencido.
Para que tanta sed bebiendo cures
Hay numerosas sendas para tí...
Pero se hace la noche; no te apures...
Todas traen a mí...
-Alfonsina Storni
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Un sol
Alfonsina Storni
Mi corazón es como un dios sin lengua,
Mudo se está a la espera del milagro,
He amado mucho, todo amor fue magro,
Que todo amor lo conocí con mengua.
He amado hasta llorar, hasta morirme.
Amé hasta odiar, amé hasta la locura,
Pero yo espero algún amor natura
Capaz de renovarme y redimirme.
Amor que fructifique mi desierto
Y me haga brotar ramas sensitivas,
Soy una selva de raíces vivas,
Sólo el follaje suele estarse muerto.
¿En dónde está quien mi deseo alienta?
¿Me empobreció a sus ojos el ramaje?
Vulgar estorbo, pálido follaje
Distinto al tronco fiel que lo alimenta.
¿En dónde está el espíritu sombrío
De cuya opacidad brote la llama?
Ah, si mis mundos con su amor inflama
Yo seré incontenible como un río.
¿En dónde está el que con su amor me envuelva?
Ha de traer su gran verdad sabida...
Hielo y más hielo recogí en la vida:
Yo necesito un sol que me disuelva.
-Alfonsina Storni
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Quisiera esta tarde divina de octubre
Alfonsina Storni
Quisiera esta tarde divina de octubre pasear por la orilla lejana del mar; que la arena de oro, y las aguas verdes, y los cielos puros me vieran pasar.
Ser alta, soberbia, perfecta, quisiera, como una romana, para concordar con las grandes olas, y las rocas muertas y las anchas playas que ciñen el mar.
Con el paso lento, y los ojos fríos y la boca muda, dejarme llevar; Ver cómo se rompen las olas azules contra los granitos y no parpadear; ver cómo las aves rapaces se comen los peces pequeños y no despertar; pensar que pudieran las frágiles barcas hundirse en las aguas y no suspirar; ver que se adelanta, la garganta al aire, el hombre más bello, no desear amar...
Perder la mirada, distraídamente, perderla y que nunca la vuelva a encontrar: y, figura erguida, entre cielo y playa, sentirme el olvido perenne del mar.
-Alfonsina Stoni
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Las fronteras del Caribe son móviles: están donde está ese mestizaje creativo que se multiplica tanto en islas como en tierra firme. Las islas de Derek Walcott que la golondrina negra se está llevando siempre de regreso a África. Es un territorio cultural hecho con la música más rítmica y más sentimental del mundo, con las religiones sincréticas que visten a los santos africanos con mantos y coronas de santos católicos. Un territorio que es una invención constante de la literatura, de las lenguas, de las artes culinarias.
Sergio Ramírez Mercado, "El Caribe somos todos"
#nicaragua#Sergio Ramírez mercado#Sergio Ramirez mercado#realismo magico#realismo mágico#estoy leyendo#literatura en español#literature blog#Derek walcott
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Pensamientos en solitario...
Que sucedió con la niñez que creía que duraría mucho más para jugar en el patio del recreo, en el pasto de la casa de mi abuelo y que pasó que se me han ido las imágenes de ayer
Como las formas de las nubes en los cielos como la hora de la siesta y la quietud y con el canto de torcazas en la luz en el calor de los veranos con desdén por el camino del regreso
A nuestra casa, que pasó con esos primeros versos que escribí, con las canciones e ilusiones que bebí con esa soda bendecida de un vino nuevo que mi padre alentó para mí.
Por qué las tardes de paseos con mi madre por el rio se murieron como el ocaso que tomo mis sombras que también se fueron.
Quizás la mar esa lejana de una Necochea sorprendente donde mis ojos se bebieron ese mar y su gran playa por primera vez , me esté esperando y no sabe que mi padre ya no está
Y ahora en la mañana quiero ver la sonrisa de mi hijo al mirar las cosas que le gustan que tal vez sea esa misma sonrisa que esboce cuando el amor adolescente me decía que no tenia el viento ganas de parar, como mis ganas de tenerla no se fueron , que ha sucedido que las horas ya no son como eran en aquel tiempo que nos pasó que los relojes de pulsera ya no tienen que decir y que los parques ya no guardan corazones en los árboles, como expresar, la primavera no festeja en los septiembres hoy por hoy
Y los minutos y sus segundos callan la verdad, la soledad en una radio que no tiene las canciones que detrás de aquellas noches sin dormir cante sonriente para ella o para mi
Como las golondrinas vi partir los compañeros, los camadas de un servicio militar que con verdes pantalones desfilamos y aún recuerdo el cuerpo a tierra y la necesidad de libertad cuando creíame un soldado descubrí que con el tiempo un niño fui jugando a ser mayor precipitadamente adolescente que adolece el dolor por no poder crecer a tiempo y eso no fue lo importante en esos tiempo
De canción de caminatas de cansancio e ilusión.
Cuando comienza un nuevo tiempo para guardar las horas nuevas en trabajos e intentar con relaciones dibujar muchas sonrisas y nacer a nuevas cosas por doquier creciendo a tiempo en el ayer
Hoy lo recuerdo y la distancia aun es mayor de lo que pienso disfrute y sin control de todas las maneras que el tiempo es, voy caminando más despacio por la vida me siento sobrio como un vino
Que se sirve en la penumbra para pensar en lo queda todavía , seguro sé que un poco más intentaré acompañar por el camino a mi querer pero lo sé que lo que viene es el final y todo los escritos que dejé y los recuerdo que se llevan en la piel eso seguro llevare y que mi recuerdo quede por ahí detrás de unas mañana con el roció de un verano y las canciones que tanto me ha gustado , mientras resuenen en la tarde en horas de la siesta volveré , seguro pueda para cantarlas una vez , sentirme libre desde el alma al corazón y murmurar lo que se siente al ya nos ser más que recuerdos y cenizas en el viento.
(lrsh)
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He escrito un texto un poco más personal que de costumbre para hablar de una película que me ha sorprendido para bien y que me ha despertado muchos recuerdos.
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🎬🍿 Benvinguts a la cinquena entrega de CINEJAU, presentat per Jau Fibla! Aquí tenim les esperades estrenes de la setmana! 🎉 😎 Prepareu-vos per la missió impossible de Tom Cruise! En Jau ja ha vist la peli i ens dona la seva opinió! 🚀 💥 Però això no és tot, Pixar contraataca amb "Elemental" i el nou curt del món de "UP": La cita de Carl. Una aventura emocionant que no us podeu perdre! 🏞️🎈 I no podem oblidar les altres pel·lícules en cartellera: "Esperando a Dalí", "El caso Braibanti", "Nada", "El regreso de las golondrinas", "Entre las higueras", "El hombre sin culpa" i "Viento sur". 🎞️ 🎥 Quina selecció! No us perdeu aquest fantàstic programa de cinema en català! 🎞️😄 https://youtu.be/SIZi8jVUvVE
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ALBERTUCHO regresa tras diez años con un concierto histórico en La Riviera.
Albertucho está de regreso después de una largo parón de más de diez años desde que lanzara su último álbum en 2012. Un referente en el rock de autor nacional regresa con su potente sonido y sus letras desgarradoras. Y, como no podía ser de otra manera, lo hace por todo lo alto: con un concierto único el próximo 30 de noviembre en la emblemática sala madrileña La Riviera, en la que promete ser una cita inolvidable del artista sevillano con todos sus seguidores. Tal como la ocasión merece, no dejarán de sonar sus temas más míticos marca de la casa que el autor rockero andaluz quiere volver a compartir en directo con toda esa gente que está deseando verle de nuevo sobre los escenarios. No estará solo, una banda con músicos originales y grandes artistas le arroparán en este día tan especial, lo que aportará más fuerza y energía a unas canciones que llavábamos mucho tiempo echando de menos y que ya forman parte del insconsciente de una generación.
El propio Albertucho ha querido anunciar a su público una fecha tan importante:
"Amigos del rock callejero, El 30 de noviembre, igual que volvieron las golondrinas a los balcones, volverán a vuestros oídos esas canciones con las que nos desgañitamos juntos hace más de 10 años. Volverán con la misma energía y la electricidad que nos apasiona. Será en La Riviera, una sala mítica madrileña que servirá de punto de encuentro para volver a vernos las caras. Será un concierto único con una banda de rock impresionante, una puesta en escena brutal y un repertorio clásico de vuestro Albertucho. Cantar con vosotros de nuevo “El ángel de la guarda”, “Frío”, “Pelos de gato” o “Mentira” será una experiencia maravillosa que jamás olvidaremos. Vamos a revivir juntos esa vida sin reloj que, por un rato y con la magia de la música, nos hará eternos. Date prisa no te vayas a quedar fuera.
Un abrazo grande, salud y rock’n’roll"
Entradas ya disponibles AQUÍ.
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Alambres electro-psicotrópicos [y otros poemas]
Andrés Gómez
Alambres electro-psicotrópicos
como garrapatas aferrándose al hueso
una dosis en caída libre
y los puños de la tierra azotándome las palabras
y los puños de la tierra desfigurándome el recuerdo
que siempre vuelve como sendero irresoluto
ante la inmensidad de la próxima calada
espasmos contrarrevolucionarios
acicalándose en la vértebra
que aún reside lacónica y furibunda
en nuestros cuerpos semi-reformados
cualquier acto de rebeldía frente al espejo
posee consecuencias poéticas
al doblez de cualquier pensamiento suicida
se esconde la irremediable esperanza
de volver a nacer
de ser vomitado otra vez
en el asfalto metafísico
que atraviesa las ciudades
renacer de las alcantarillas
como un sinsentido paseando
en la inercia de las masas
la suspensión momentánea de la sombra
en algún viaducto del tiempo
la sombra que escondo debajo
de una
grieta en el
espacio
le temo a la continuidad de mis palabras
al quebrado fluir de mi figura
huyo de los protocolarios gestos
le abrazo a la soledad sus entrañas
ante el temor de perderme
de no recordar el movimiento de mis labios
con la lengua
y quedarme petrificado
en el húmedo desliz del tiempo
a la mitad de mi último porro
mi piel tensada en la pared
mientras me desvisto de la sombra
que ya tengo arrugada de llevarla arrastrando
sobre las fisuras del llano
mi piel abierta en el marco de las horas
con las heridas aún palpitantes
se queda tirada sobre el camino
mientras las garrapatas me arrebatan los huesos
las r a j a s menudas de mi alma
deshaciéndose en el amanecer
y mis ojos aceitunados
flotando en mi cabeza
repleta de nada
t e m b l o r
ya dudo de que mis uñas
sigan aferradas al dedo
a la espina dorsal
al cuerpo impoluto
que se sale de la carne
estática como mojiganga
t e m b l o r
t e m b l o r
en el baile de los cínicos
las figuras forman jeroglíficos
donde se invoca al toro (traidor)
para disfrutar de nuestra muerte
junto al diablo
la vibración de la tierra acicalándome
y yo me refugio en su silueta temblorosa
.
Sitio ausente
Me reconstruyo cada día
en el sopor clandestino
de una soledad rancia
las piezas de siempre
el mismo dolor en la entrepierna
la innegable existencia del espacio
en blanco
el acotamiento de mi cuerpo en cada
bemol
de la calle
no soporto más que mis ojos se regeneren
luego de las pesadillas
que mis recuerdos vuelvan
depurándome los huesos
y que al final de la noche
solo sea una cristalización inexacta
de una sombra cualquiera
.
De la raíz del llano
A veces me siento un mezquite
serio y arrugado en el llano
observando la sombra
que me rehúye del hueso
un hueso de palo quebrado
un hueso forjado de frío llanero
digo a veces porque en otras
soy una rata de lodo
clavada en el paisaje
como una espina
en la planta del pie
pero siempre regreso
a la raíz
un pedazo de nube olvidada
en el suelo
una piedra enmohecida
en el camino
el canto de un grillo devorado
por las hormigas
y a pesar de todo
el corazón siempre regresa
a donde latió primero
en ocasiones sueño que siento que soy un mezquite
amortajado y enlodado
con las ramas chuecas
y que separo las raíces
y me rasco las vainas que me cuelgan
por los dientes astillados
arranco las raíces del suelo amarillo
las lombrices me observan extrañadas
y de mi nariz vuelan las golondrinas sucias
con el pico mocho y el vuelo quebrado
acaso menos que la corteza que me cubre
como un manto de mariposas
lo hace a veces
o el aullido de un coyote abandonado
en ocasiones no entiendo porque sueño que siento que soy
todo menos el coyote abandonado por su jauría
no tengo nada de coyote
y no es abandono si yo he decidido
salir corriendo de la coyotada
ahora simplemente me imagino mezquite
en el árido soto despelucado
a la orilla de un río seco
a lo lejos puedo ver cómo brillan las tunas
estrellas en un llano despejado
y yo apenas sintiendo que en el pecho
me nace un corazón aterronado
___
Andrés Gómez (Silao, Guanajuato, 1996)
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... ALEJANDRA MORALES ... Poesía ❤
Callada, quieta, trama su muerte…
Vuelo,
viento,
ala,
son ahora palabras.
Tranquila come los dedos
de su amante que no la amó.
Y se aúpa
para ver todo de más lejos...
No cree en los cuentos,
porque la niña
que fue, ya no la recuerda.
Está perdida.
Desde antes.
Y mira sin entender los caminos
sembrados de migas
y de nombres...
¿Hay algo mas siniestro
que pequeños
y ternurosos pájaros
devorándose las señales del regreso?
Y ya no va a volver.
Tanto inventarse pieles,
nombres,
vidas
para fingirse otra.... una menos olvidable.
Ya no va a volver.
Guarda apenas este instante,
no encierra
este ahora,
no señala el día...
para olvidar no hay fechas.
Alinea los retazos que le quedan,
alisa su pelo,
su vestido...
ese dolor irresuelto,
esa manera de decantarse por lo absoluto.
(en la bruma del pasado una gota
se soñaba lluvia,
solo por desconocer los refranes
que rezan
que una golondrina no hace verano)
No se santigua porque ya no sabe,
no reza
porque se quedó sin dios,
sin estampita para besar bajo las sabanas,
sin santo y seña...
No precisa
ceremonias para cruzar la puerta.
La que nunca estuvo en vos
ya no va a volver.
alejandramorales
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La Verdad de Katya || Self Para.
ft. Roman Kuznetsov.
Menciones: Carlo Bianchi, Eve Lynch, Sergei Kuznetsov ( @skydxvies )
El verano al interior de California sur le gustaba a Katya, aún cuando a su hermano no tanto. Le gustaba poder quedarse hasta las siete de la tarde en la piscina, que a las ocho aún hubiera luz y podía sentarse con los pies en la orilla junto a Roman, pataleando el agua suavemente y viendo como las partículas amarillas de polen se hundían en pequeños remolinos.
—Desearía que me hubieran advertido—soltó la chica, mirando el color de las uñas de sus pies bajo el agua.
Roman, reclinado hacia atrás apoyado sobre sus propios codos, levantó las cejas por sobre sus lentes de sol—¿Quiénes? ¿El qué?
Katya alzó la vista, paseándola por el vasto jardín de la mansión Kuznetsov, con sus camas de flores, los árboles flanqueando el pasto, el invernadero reflejando los últimos rayos de sol en el cristal, la banca columpio que colgaba del viejo roble. Iosif corriendo de un lado a otro persiguiendo a las golondrinas que a esa hora se abalanzaban sobre la piscina para robar traguitos de agua.
—Tú. El tío. Hace un año, pensaba que eran posiblemente los dos hombres más estúpidos que había conocido. Mafiosos adultos, enamorados como idiotas. Me parecía una tontería. Pero en el fondo, les tenía envidia—admitió, frunciendo el ceño levemente—Los veía...No lo sé, seguir con sus vidas, pasando página de la pequeña familia rota que siempre fuimos ¿No? Y yo me quedaba atrás; demasiado fría, demasiado insensible. Preguntándome qué se sentía, deseando poder sentir algo parecido. Nunca me advirtieron que el precio por sentirlo era tan alto. Esto de los sentimientos...No se siente bien. Es una mierda.
—No sabía que te habías sentido así.
—Yo tampoco lo supe, en un principio. No me di cuenta hasta mucho después—levantó un pie del agua y se quitó las pelusas amarillos que se habían adherido a su piel—Hice lo que tenía que hacer en Florencia. No, hice lo que quería hacer. Quería esto, quería recuperar las cosas, volver a tener un puesto en esta mafia. En mi familia. Carlo...Carlo me golpeó de la nada. Nunca debió haber acabado así.
Su hermano no respondió nada, no en un principio. Katya se lo agradeció. Tenía demasiados pensamientos sobre lo sucedido entre ella y el italiano como para además cargar con los de alguien más. Cuando Roman finalmente habló, lo hice en relación a su comentario original.
—No es algo que se pueda advertir, la verdad—reconoció, no a modo de excusarse, sino en nombre de la verdad que su hermana parecía buscar—¿Cómo explicas que algo que se siente tan bien puede doler tanto? Juras que no quieres esto, estos sentimientos. Pero si los momentos buenos sobrepasan a los malos...Es como si te elevara, Kit-Kat. Puedes ver el mundo. Pero parte de esa visión, de esa euforia, pasa a depender de tu relación con alguien más. Y si caes, lo haces de gran altura. Yo he caído esa altura.
Una amarga sonrisa apareció en el rostro de la chica—Lo sé, estaba ahí ¿Recuerdas? Eras un idiota depresivo escuchando The Killers todo el día—rió un poco antes de ponerse seria otra vez—¿Cómo sobrevives la caída?
Roman se encogió de hombros—Dos opciones. Una, todo vuelve. La persona que quieres, la relación, la recuperas. Dos...Eventualmente dejas de sentirlo. Lo superas y sigues con tu vida. Aunque por mucho tiempo, pareciera que estarás atrapado en el círculo para siempre. O tal vez ese era sólo yo.
No lo era. Katya sentía eso, estaba atrapada en el círculo, en un corral en el que no veía salida, no había escapar de lo que sentía por Carlo contra toda sensatez. Y mucho menos la posibilidad de recuperarlo.
—Tú no traicionaste a Eve—suspiró—El tío nunca superó a Mila, y eventualmente volvió también. Tampoco la traicionó. Yo traicioné a Carlo. Consciente, a propósito. Sabiendo que no confiaba en mi ni yo en él. Sabiendo que a pesar de ello, sentía algo por mi. Y yo por él—lo peor era que se había visto a si misma caer al abismo sin poder hacer nada para evitarlo, porque sin importar nada más, tenía que acabar con esa misión. Vio acercarse el suelo cada vez más y más sabiendo que ella se había lanzado por el borde y que abajo le esperaban estalagmitas.
“Kit-Kat” escuchó que su hermana la llamaba, y Katya finalmente giró la cabeza y miró a Roman, esperando que siguiera hablando.
—No es un error, a pesar de lo que nos han enseñado.
—Una familia de hijos de puta fríos—comentó la chica, antes de sonreír de lado—Una familia de hijos de puta idiotas es lo que somos.
Roman soltó una carcajada y rodeó los hombros de su hermanita, dejando un beso en su frente—Bienvenida de regreso.
La sonrisa de Katya se volvió sincera, un poco más alegre, apoyó la cabeza en en el hombro de su hermano y contó las golondrinas que bajaban a la piscina.
—Será mejor que nos vayamos a vestir decentes. Tengo que ir a recoger a Eve al periódico antes de que Yvetta comience a impacientarse de que la comida está lista y nadie está en la mesa—anunció Roman al cabo de un rato, tras chequear la hora en su celular.
Los hermanos se pusieron de pie y comenzaron a secarse los pies con las toallas de piscina. Desde el interior de la mansión, más específicamente desde el área de la cocina, podían escuchar a Yvetta gritarle a los pobres asistentes de cocina como si deseara fulminarlos con sus palabras.
—La primera cena familiar en mucho tiempo—rió Roman—¿Crees que sobreviviremos?
Katya se echó la toalla húmeda al hombro, se calzó las sandalias y cogió su bolso de playa. Lanzó una última mirada hacia el sol que finalmente había comenzado a ponerse tras los árboles y sonrió—Siempre.
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Dentro. Aun no reconozco lo alterno solo esto que quiere ser nuestro. Y palpando me convenzco de que todo es vuestro. Canta y verás. Como las golondrinas se iran. Del andar... no nadan los peces que han vuelto a contracorriente estar De bajo Aun no reconozco mi asfalto que de pisar se gasta que de lamer se deslava Nadie vera el flechero que avisa el regreso. Nadie cantara de días palidos y bulerias asfixiantes.
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Undécima semana de bocetos digitales inspirados en el serial radiofónico “Cuando Juan y Tula fueron a Siritinga”
CAPÍTULO 51 - Pesadilla de El-Jormaz El-Jormaz tiene una pesadilla en la que recuerda la profecía que le hizo el Oráculo de Kransis en su juventud. Del viento Lar, “que la mariposa morirá a la sombra del dragón”. Del viento Sar, “que la sangre derramada por el cometa hará temblar tu propia sangre”. Del viento Mar, “que el gigante entregará su magia al niño y en ello cumplirá su destino”. Y del viento Zar, “que cuando todo esto se cumpla, verás la cara del enemigo de tu destino y lo amarás”. Al despertarse habla con el monje mudo, que fue quien lo acompañó al Oráculo, años atrás. El monje abandona la abadía para ir al rescate de Juan y Tula, a bordo de un destartalado globo.
CAPÍTULO 52 - Rescate Juan y Tula son rescatados por el monje, siguiendo las instrucciones de El-Jormaz. Mientras en su celda de la abadía militar del Decanato de Treval Sorj, El-Jormaz graba un cilal cifrado para Ban Taur, solicitando un informe completo de la situación política actual y recordándole que le debe su posición actual a su apoyo. Ban Taur es un marciano de Irala, un no nativo de Siritinga, y su ascenso al rango sátrapa fue una violación del protocolo burocrático tradicional. En ese momento Monatir y Sikarra entran en la celda, pero El-Jormaz logra ocultar su cilal. El-Jormaz le reprocha a Sikarra que ocultase a Tanom en lugar de matarlo, pero el sátrapa eunuco le recuerda que su orden exacta fue “hacerlo desaparecer”, y eso hizo. Monatir y Sikarra le hacen ver a El-Jormaz que su situación actual no es muy distinta a la Tanom, y que lo mantendrán oculto mientras deciden que hacer con el.
CAPÍTULO 53 - Largo viaje Juan y Tula viajan rumbo a Arenas en el viejo globo pilotado por el viejo monje mudo. Mientras tanto, Ban Taur dictar el informe que El-Jormaz le pidió. Al terminar entrecierra los ojos y tiene una especie de visión en la que ve a El-Jormaz, pero su silueta se distorsiona por la presencia de un hombre con un cegador disco de plata en vez de cara. [El serial no lo explica, pero creo que esto es el fruto de la magia del monje mudo, que es capaz de acceder a su mente] Después d ella visión, Ban Taur empieza a dictar un nuevo cilal para Sikarra, donde le informa de su comunicación con El-Jormaz.
CAPÍTULO 54 - Amanece en la Abadía Mientras camina por el claustro de la abadía, El-Jormaz dicta un nuevo cilal para Ban Taur, indicándole su intención de abandonar Siritinga, una vez su herida se haya curado. En ese momento los excrementos de una de las golondrinas dorada que vuelan sobre la abadía, manchan el hábito de El-Jormaz, que no puede contener una carcajada. Mientras tanto, Juan y Tula continúan su viaje de regreso a Arenas, y Tana se lamenta de vuelta en su exilio en Sima Sina.
CAPÍTULO 55 - La Luna Helada de Tingar En el Palacio Tirrell en SaucoGrís Monatir y Sikarra comparten un baño ritual, en el que el sátrapa informa a su señor de los planes de El-Jormaz y del destierro de Tana. En la abadía, El-Jormaz elude las preguntas del Abad Madoz, que no entiende que obligación secreta mantiene al gigante en Siritinga.
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Eleventh week of digital sketches inspired by the radio serial “Cuando Juan y Tula fueron a Siritinga” (When Juan and Tula went to Siritinga)
CHAPTER 51 - Nightmare of El-Jormaz El-Jormaz has a nightmare in which he remembers the prophecy made by the Oracle of Kransis in his youth. From the Lar wind, "that the butterfly will die in the shadow of the dragon." From the Sar wind, "that the blood shed by the comet will make your own blood quake.” From the Mar wind, "that the giant will give his magic to the child and in that he will fulfill his destiny". And from the Zar wind, "that when all this is accomplished, you will see the face of the enemy of your fate and love it." When he wakes up he talks to the mute monk, who accompanied him to the Oracle year ago. The monk leaves the abbey to go to the rescue of Juan and Tula, aboard a decrepit balloon.
CHAPTER 52 - Rescue Juan and Tula are rescued by the monk, following the instructions of El-Jormaz. While in his cell in the military abbey of the Treval Sorj Deanery, El-Jormaz records an encrypted cilal for Ban Taur, requesting a full report of the current political situation and reminding him that he owes his current position to his support. Ban Taur is a Martian from Irala, a non-native of Siritinga, and his rise to the rank of satrap was a violation of the traditional bureaucratic procedure. At that moment Monatir and Sikarra enter the cell, but El-Jormaz manages to hide his cilal. El-Jormaz reproaches Sikarra for hiding Tanom instead of killing him, but the eunuch satrap reminds him that his exact order was to "make him disappear," and that he did. Monatir and Sikarra show El-Jormaz that his current situation is not very different from Tanom’s, and that they will keep him hidden while they decide what to do with him.
CHAPTER 53 - Long Journey Juan and Tula travel to Arenas in the old balloon piloted by the old mute monk. Meanwhile, Ban Taur dictate the report that El-Jormaz asked for. When he finishes, he narrows his eyes and has a kind of vision in which he sees El-Jormaz, but his silhouette is distorted by the presence of a man with a blinding silver disc instead of a face. [The serial does not explain it, but I think this is the fruit of the magic of the mute monk, who is able to access his mind] After the vision, Ban Taur begins to dictate a new cilal for Sikarra, where he informs him of his communication with El-Jormaz.
CHAPTER 54 - Dawn in the Abbey While walking through the cloister of the abbey, El-Jormaz dictates a new cilal for Ban Taur, indicating his intention to leave Siritinga, once his wound has healed. At that time the droppings of one of the golden swallows that fly over the abbey, stain the habit of El-Jormaz, who cannot contain a laugh. Meanwhile, Juan and Tula continue their journey back to Arenas, and Tana laments back at her exile in Sima Sina. CHAPTER 55 - Tingar's Frozen Moon In the Tirrell Palace in SaucoGrís Monatir and Sikarra share a ritual bath, in which the satrap informs his lord of El-Jormaz's plans and the exile of Tana. In the abbey, El-Jormaz avoids the questions of Abbot Madoz, who does not understand what secret obligation keeps the giant in Siritinga.
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Folder manchado.
Se cazaba asi mismo cuando las golondrinas rodeaban su choza hecha de sal y arcilla.
Cantaban tenor cuando coros arcanos se escuchan y estremecen los oídos al estar dentro del cubo magnéticamente polarizado.
Las lágrimas recorren los oyuelos a manera de brindis cuando se ven los resultados del recuerdo que me estremece un puente nuevo siendo conectado al puente de Luxemburgo.
Los rieles de los trenes pasando las orillas del mar.
La luminosidad que bloquea la vista a causa del calor que sienten mis ojos al ver el ocaso sobre el hielo en las montañas bajas mientras sostenía mí reloj de bolsillo.
Los rieles de los trenes pasando las orillas del mar, el cargamento de placas se escucha cuando se asceniende a las altas montañas rocosas.
¿Que aves mensajeras llegarán a las copas de los arboles en los bosques donde ni los más entrenados cazadores se atreven a entrar, donde se sabe que los lobos bailan con osos cuando no son observados ?...
Por un mejor día te escribo las notas del viaje para que las entregues en tú reporte si no regreso del viaje en camello á los solitarios desiertos donde el alba es un grito dado por serpientes ocultas dentro de cuevas y las sombras de las rocas que hayan.
Publicación #507
Juan Daniel Alejandre Peláez (Ax Y’HAX)
Date: 11 de septiembre del año 2022 (TiempoMEXICO.GMT-5)
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