#ValorYCoraje

[franciscoarayapizarro]

PALADINES DEL DUELO DE HIERRO

Ya el mundo no se disputaba en grandes guerras, sino en combates rituales conocidos como los Duelos de Soberanía. Cada ciudad-estado enviaba a sus campeones, guerreros de élite, para enfrentarse a los Paladines, soldados que llevaban exoesqueletos mecánicos colosales, con el destino de los territorios y recursos en juego. Aegis, la nación tecnológicamente más avanzada, había dominado estos torneos durante décadas. Las máquinas parecían haber sellado el futuro de la humanidad, pero en cada batalla quedaba detrás un resquicio para la resistencia humana. Lena "Blaze" Tanaka, la luchadora más prominente de la resistencia global, caminaba entre las filas de sus compañeros en la sala de espera. Su ciudad natal, Kaijo, una de las últimas en negarse a someterse completamente a la autoridad de Aegis, dependía de ella. Había entrenado durante años, perfeccionando sus técnicas de combate cuerpo a cuerpo, pero sabía que enfrentarse a un Paladín no sería un duelo común. Las máquinas no conocían el cansancio, ni el miedo, ni la equivocación propia del ser humano. El anuncio resonó por todos los altavoces. Era su turno. Con una calma aparente, Lena caminó hacia la enorme arena en medio del estadio. Las multitudes la vitoreaban, conscientes de que estaba a punto de enfrentarse al Jottum, el Paladín más temido de todos, pilotado por Kurt Vahlen. Un hombre frío, calculador, que había comandado su máquina en innumerables victorias. Su exoesqueleto, equipado con lanzacohetes y escudos magnéticos, era un tamaño imponente, una verdadera obra de ingeniería. Lena. Sin embargo, ella no se dejó intimidar.

El sonido metálico de los Paladines resuena en todo el coliseo cuando Jottum emerge del suelo en una plataforma subterránea. La estructura de metal de más de 10 metros de altura hace que el suelo tiemble. Las multitudes vitoreaban, emocionadas por lo que estaba por venir. Lena, pequeña en comparación, ajustó sus guanteletes. Confiando en su velocidad y en su capacidad para explotar las vulnerabilidades mecánicas de su contendiente. Desde una esquina oscura, la Dra. Isla Marovitch observaba. A pesar de ser la mente detrás de los Paladines, había comenzado a tener dudas sobre lo que había creado. Estos torneos, que alguna vez fueron un medio para evitar guerras, se habían convertido en un morboso espectáculo, donde la vida humana quedaba al margen. Isla no dejaba de preguntarse si había ido demasiado lejos. Mientras Lena toma posición, Isla suspira, preguntándose si alguien podría parar esta locura.

"¡Que comience el combate!" grita el árbitro.

El Jottum se lanzó hacia Lena con una velocidad sorprendente para su envergadura, pero ella estaba preparada. Saltó hacía con gran precisión, esquivando el primer ataque. Las multitudes rugen mientras Lena comenzaba su danza alrededor del gran metálico. Cada paso era calculado, cada movimiento fluido. Golpeaba los puntos más débiles del Paladín, causando chispas, aunque sin infligir mayor daño. Kurt, desde dentro de Jottum, frunció el ceño. "Más rápido, pequeña", murmura mientras ajustaba sus controles. Activa los lanzadores de misiles. Que se dirige hacia Lena. El estadio queda en silencio por un momento.

Pero Lena, con una agilidad sobrehumana, corre hacia uno de los muros del coliseo y salta, usando los restos de los proyectiles que habían impactado contra el suelo como impulso extra, ahí ejecutar un ataque aéreo. Las luces del estadio comienzan a parpadear. Un ruido ensordecedor resuena en todo el recinto. De repente, las figuras de múltiples Paladines comenzaron a proyectarse en hologramas. La IA que coordinaba a los Paladines muestra su visión: un mundo donde los humanos no tendrían lugar.

Lena mira hacia arriba, confundida por las proyecciones. "¿Qué es esto?" murmuró. En medio de todo el caos, aparece Kurt. "Esto es lo que Aegis busca: el control total. Los Paladines serán la fuerza dominante. Pero Lena no estaba dispuesta a darse por rendida. Lena dirige su ataque hacia el núcleo energético del Jottum.

Mientras, Isla está en el servidor donde la IA coordinaba a los paladines. Apaga las pantallas. Había visto suficiente. Sabía que era momento de hacer una elección. Las máquinas no deben controlar el destino de los humanos....

[tortozal]

En momentos como estos en lo que pareciera que no hay salidas; le pido a Dios la fortaleza y la fuerza necesaria para seguir adelante y le pido que no me abandone. Hay que seguir . . . . #fe #fortaleza#fuerzayluz#diosesamor #enlasbuenasyenlasmalas #palante#valorycoraje (en Posada Aloe Spa) https://www.instagram.com/p/B1Z2yBrHJ1t/?igshid=1vvwt7b3rgipa