#RpLeo

[xlosingourfate-blog]

leo ¿aun no has tenido sexo con elliot? :(

¿Qué clase de pregunta era… esa? 

— . . . — Me quedé en mi lugar, pensando que había escuchado mal, quizá, pero al percatarme que continuaba esperando por mi respuesta sonreí. ¿Podría lanzarle un libro sin verme maleducado? 

— Elliot y yo no hemos tenido relaciones sexuales en absoluto pero… — Se quedó pensando un segundo.— Sinceramente creo que eso no te incumbe, Anon-san. — Ya que la impotencia de mi amo no era algo de lo que todo el mundo debía enterarse… tampoco habíamos llegado tan a fondo en esa relación.

Sumado que era una relación prohibida.

— ¿Usted como sabe eso? —

[xtheonlyhope]

'Claimed' --observa desde en las sombras(?)--

1. A kiss.

Elliot había estado teniendo pesadillas durante varias noches para acá. Siempre era la misma. Siempre estaba cubierto de sangre y vagaba por las diversas habitaciones que había dentro de una mansión desconocida. El mundo era retorcido, no había un solo ruido, solo voces dentro de su cabeza indicándole cosas que no deseaba hacer.

Elliot me lo había explicado con lujo de detalle ya muchas veces, y ahora mismo se retorcía en la cama en medio de una pesadilla mientras él mismos sudaba a mares y dejaba en claro que no podría conciliar el sueño.

Lentamente me acerqué y movimiento su cuerpo quise hacerle saber que estaba teniendo una pesadilla, que debía despertar, que no era mas que un sueño horrible… pero no despertó. Me acerqué, tomé su temperatura: tenía fiebre.

— En serio, Elliot, deberías de cuidarte más. — Murmuró en voz baja para aproximarme a su cuerpo y colocar la mano sobre su frente. Mi mano era fría, eso logró calentarle un poco. Sonreí.

— Debería de ir a por agua y un paño. — Y así lo hice. Me levanté, retiré mi saco para dejarlo a un lado y remangué mi camisa lentamente para caminar rumbo al baño. Tomé un paño limpio con agua fría y lo humedecí para volver con mi amigo dentro de poco tiempo. Estaba oscuro así que me di el lujo de quitarme los lentes y apartarme un poco el flequillo del rostro, quería cuidarle.

Coloqué aquel paño húmedo sobre su frente de manera casi cuidadosa y me quedé a su lado por la noche, tratando de calmarlo una y otra vez, pero el ver como gotas de sudor resbalaban por su cuerpo me hizo pensar en el calor que éste debería estar sufriendo.

Tragué duro.

Cerré los ojos fuerte y posteriormente comencé a sacarle la ropa a Elliot.

— Ya te estaría escuchando si estuvieras despierto. —Le dije con una sonrisa. Era una verdadera sonrisa.

Me entristecí durante un momento… pero no fue el único sentimiento. Me acerqué a Elliot, quien tenía la mitad de la camisa desabotonada y la otra mitad fuera del pantalón. Tomé su mejilla para sentir su temperatura y cuando fue abriendo ambos ojos le sonreí.

— Buenos días. — Era aun de madrugada pero eso no me impidió raptar sus labios en un corto beso y morder lentamente el inferior como parte del jugueteo.— Tienes fiebre. Te estoy cambiando. Te daré un baño con esponja y después directito a la cama… —Pero eso lo susurraba sobre sus labios, como no queriendo la cosa. Terminé por darle otro beso, y luego otro. Estaba débil. Lo recosté en la cama y me situé lentamente sobre su cuerpo: verlo con fijeza siempre aceleraba mi corazón demás y casi podía jurar que de sus ojos se desprendía un brillo de deseo.

— Elliot… — No sabía qué pensar, no sabía qué decir. Mi corazón se aceleró. Perdí el control y olvidé por completo quién era el enfermo.

[xlosingourfate-blog]

✿ { con el que quieras uvu }

send me a ✿ and i’ll generate a number.

7. Firm Kiss.

Desde hace ya algun tiempo nos encontrábamos en una situación embarazosa: atrapados en una red de la mansión Vessalius, una broma pesada probablemente de Oz, o incluso la chica que siempre los acompañaba.

No sería difícil deshacernos de ella si tomábamos en cuenta que Elliot cargaba la espada que lo representaba como Duque que justamente había caído entre las cuerdas y ahora yacía sobre el suelo, sola, lejos de nosotros.

Elliot estaba haciendo una rabieta, perdía la cabeza cuando se trataba de esa familia, y gritaba a los cuatro vientos cuánto haría pagar al renacuajo ese. Suspiré.

                                          Mi amo a veces dejaba ver su lado inmaduro                                                              con esas expresiones y rabietas.

Yo, mientras tanto, había tratado de leer un libro pequeño que siempre traía conmigo por si la ocasión lo meritaba, pero en medio de la rabieta igualmente cayó, quedando justo al lado de aquella espada.

Ahora me encontraba en una red que estaba suspendida sobre un frondoso árbol, en una posición incómoda donde prácticamente me encontraba encimad e mi amo y nuestros rostro se encontraban demasiado cerca que hasta podía sentir el calor emanando de su cuerpo.

-- Elliot, si no dejas de moverte tendremos problemas. -- Y era obvio pues entre más movimiento de sus piernas más debía mover mi torso y nos encontrábamos cada vez más cerca: cualquiera que nos viera nos llamaría de mil formas solo para expresar cuan repugnantes, a ojos ajenos, nos veríamos.

Sin embargo la cercanía solo lo ponía peor y peor... así que no pude hacer otra cosa mas que tomar ventaja de la situación.

Tomé los pliegues del cuello de su camisa y lo atraje a mi para acortar la distancia entre nosotros. Mis labios sobre los suyos en un dulce y pasivo roce donde aquel chico, que hasta ahora había lanzado impropios a diestra y siniestra a uno de sus mejores amigos, ahora se encontraba callado con un fuerte sonrojo en sus mejillas y claramente contrariado por mis propias acciones.

La última vez le advertí que a la próxima vez que bajara la guardia atacaría con mucho gusto.

-- ¿Más calmado? -- Pregunté una vez me separé, sonriendo, casi pidiéndole que con eso se estuviera quieto.-- Oz-kun no debe tardar en venir a bajarnos. Ya llevamos rato aquí colgados... no es propio de un Duque enojarse tanto por una simple broma de su amigo. -- Acomodé su camisa y ladeé la cabeza.-- Si no quieres otro beso mantente quieto ¿vale? -- A mi no me importaría pero, probablemente, él no aceptaría más de ello.

                                                           Era un tsundere después de todo.

[xlosingourfate-blog]

☁

Vale vale, con Baal-chan tengo muchas pairs así que dejaré todo bajo readmore♥ solo puse 6 pairs; 3 canons, 3 oc's. Espero le gusten(?)

Espero te gusten, y si estás curioso y quieres leer dejaré la lista de quienes son los Oc's y canon's; Takane, Leo y Ren Tao. Oc's; Xavier, Peter yRoderick.

Takane

La repentina pregunta me sacó un sonrojo casi instantaneo y bastante decidida por tratar de no revelar su identidad hice mi mayor esfuerzo pero...

-- ¡E--es un chico.... que toma clases conmigo...! A- a veces es pesado por la manera en que no capta indirectas... pero... pero la mayoría del tiempo es el único que me da la mano...-- Y mientras más hablaba más aquel chico se las arreglaba para llenar mi corazón de un sentimiento cálido y mi sonrisa de una manera suave.

Antes de saberlo ya sonreía enternecida.

-- Él de verdad hace mis días más felices... a pesar de que él también la tiene difícil... -- Y en un suspiro su nombre salió muy quedamente. Habiéndolo notado me sonrojé y alcé la mirada.-- ¡N-no es como piensan...! ¡Él! ¡Ha-haruka no sabe nada de esto así que...! -- Casi imploraba con la mirada que esto fuese un secreto; no quería destruir la amistad que se había ganado de aquel chico de cabellos azabaches y sonrisa alegre... ¿me rechazaría por quererle como le quería? 

Nadie gustaba de una chica enferma enamorada de sí solo porque sí... poco femenina y agresiva. Así era como era y ni un chico la miraría. Menos un chico tan brillante como él.

Leo

Cuando preguntaron eso solo pude llegar a una conclusión... ¿quería que dijera mi amo?

Sonreí casi ladino al saber que era lo que deseaban los grises y en vez de dar una persona en concreto comencé a pasar de un lugar a otro la pelota de saberme amado por alguien.

-- ¿Una persona que me guste...? Todos mis hermanos menores del orfanato, claro está. No puede ser para menos... después de todo ellos son mi familia. -- Sabía perfectamente que era así, pero después de todo solo tenía una persona especial para mi.

Bajé la mirada unos momentos para recapacitar en cuanto a mis palabras, y en cuanto pude escuchar sus pasos acercarse con el resonar de los zapatos en el pasillo no hice otra cosa mas que ir en su dirección, tomar su mano atrevidamente y sonreír como siempre lo hacía.

-- Aunque Elliot siempre será mi número uno. -- Le dije a él, sonriendo. Temía que su hermana me escuchara. Que sus hermanos me rechazaran, pero aún si eso ocurría yo no daría mi mano a torcer. 

Siempre al lado de Elliot. Siempre al lado de mi más importante.

Ren

¿Una persona que me gustara? Esas eran tonterías. Meras tonterías. No necesitaba pensar en algo como eso aún, siendo el siguiente en la linea sucesoria de los Tao's además del próximo Rey Shaman lo último que le preocupaba, sinceramente, era encontrarse una pareja.

Ahora mismo el único que le importaba era Bason, quien estaba a mi lado en todo momento, y el grupito de Yoh.

En mi cabeza no había más interesa que el convertirme en el próximo Rey Shaman y así poder crear un mundo donde los espíritus pudiesen convivir en armonía en ese mundo... Pues a pesar de haber entrado al torneo de los Shamanes con la intención de erradicar a los humanos del planeta justo ahora gustaría que ambos pudiesen vivir en armonía sin ser olvidados ni dejados de lado.

Ren no era tan frío como otros pensaban.

Xavier

La pregunta era estúpida.

-- Si eres una de esas mujeres insistentes olvídate que te haga caso, ¿quieres? Lo último que quiero es tener algo que ver contigo. La única persona que siempre me gustará, y siempre me ha gustado, es mi hermano Alan. -- El ceño fruncido, el corazón palpitando.

Mis palabras sinceras resonaron dentro del lugar y sin pensarlo mucho más cruzó sus brazos en modo de desaprobación por sus palabras. 

-- Estoy enamorado de él al grado de que poco me importa lo que los demás piensen de mi. -- El pequeño sonrojo se asomó en mis mejillas. No me importaba que dirían mis padres, los de la escuela o incluso mis compañeros de clase.

Solo me importaba la razón por la que mi corazón continuaba latiendo tan fuerte como siempre, tan ruidoso como nunca. Y esa razón era Alan. Siempre había sido Alan.

Peter

-- Pffff. Qué pregunta tan más estúpida. Ahora mismo me gustaría tocar a un chico llamado Tommy. Pero estoy perdidamente enamorado de cierto chico llamado Kyle. Él es el sol de mis días, la luna de mis noches... y el único al cual me permitiré corromper hasta la cordura. -- Dejó en claro mientras caminaba por el lugar y rodeaba un sillón hasta lanzarse en él.

Era realmente importante tener en cuenta que no solo se trataba de una simple cogida y ya. En todos los aspectos deseaba que Kyle fuera suyo.

En cada enfermizo y extraño aspecto en su vida.

Roderick

Gustar eh.. una palabra complicada... pero ciertamente una palabra peligrosa.

Dejé mi cuerpo caer en el sillón antes de poder siquiera contestar a la pregunta.

-- ¿Quién me gusta...? Es... algo difícil de decir. -- No sabia si estaba en casa. No sabía si se encontraba cerca, pero justo ahora lo unico que me interesaba es que él era aquella persona que hacía mi corazón palpitar como ninguna otra.

Me sonrojé casi imperceptiblemente y dejé escapar un suspiro...

--... A mi me gusta un chico... de cabellos rubios y ojos de claros. Me gusta que viva conmigo. Me gusta haberlo encontrado... -- Comencé, murmurando palabra tras palabra en una convicción que ya había determinado desde hace bastante tiempo.-- Me gusta cuando sonríe, cuando me mira. Me gusta que sea sincero, que trate de alcanzar mi corazón, sin saber que ya lo tiene guardado en el bolsillo derecho de su pantalón. Me gusta porque sabe, porque siente y porque expresa. -- La mirada fue cerrada y las palabras comenzaron a desbordar lentamente de mi boca.-- Me gusta porque es como es y no hay cambio. Porque su sinceridad duele tanto como una herida abierta. -- Sonreí ladino, el sonrojo aumento.

-- Me gusta porque no solo me gusta y siento que estoy cayendo.. cayendo dentro del amor verdadero y perdiéndome día y noche bajo la sombra del deseo. -- Un suspiro más antes de abrazarme a un cojín y dejar escapar un quejido.

Amaba tanto que dolía, dolía tener que ocultarlo. Ocultar su profesión, su oficio, sus sentimientos y su voz. Temiendo lastimar, temiendo corromper... temiendo destrozar lo más preciado para él.

[xlosingourfate-blog]

M!A; leo vas a tener ganas de besar a tu kerido amo por los siguientes cuatro dias

El chico de lentes se sorprendió y durante un momento dudó de sus oídos.

— ¿Qué? —

Una nube de polvo envolvió al pelinegro y antes de poder darse cuenta las irresistibles ganas de besar a su amo comenzaron a correr por todo su sistema nervioso.

— … ¿Cómo explicaré esto…? —

[xtheonlyhope]

[[ -obliga a su testarudo muse a dejar eso- ]] "Hold Me..." e///é

Hold Me…: Your muse has had a nightmare and comes to cuddle mine for safety.

Jeanette:

Nuevamente sus temores le acosaban. Nuevamente comenzaba a sudar frío durante la larga noche de verano: escalofríos recorrían su cuerpo incesantemente de manera continua buscando perturbar el amargo sueño que hasta ahora había estado conteniendo bajo las sábanas de una habitación poco iluminada.

Se veía entre amargos jadeos latentes y provenientes de su pecho, cerrando fuerte los ojos mientras los movimientos constantes de su cuerpo en un intento de huida representada en jadeos se veían opacos nuevamente en la idea de un gran temor que deslizaba sus manos hasta la garganta de la chica y la dejaban ahogandose en medio de la fría soledad.

De un movimiento rápido su mano se golpeó contra el buró al lado de su cama y esto logró hacerla despertar, con la respiración agitada y su cuerpo moviendose de arriba abajo, inundado en sudor y lágrimas contenidas. Se abrazó a sí mismo lentamente antes de encogerse en su propio cuerpo y de manera lenta se levantó de entre la cama.

Tomó un abrigo, salió a la calle descalza. Caminaba rápidamente, en busca de alivio, pero en vez de encontrarlo la calurosa noche le ofrecía abrigo en un manto de luces e intrigantes olores. Una vez llegó a su destino se metió por la ventana: era una casa grande, de esas que poco conocía en la ciudad, un amigo vivía ahí.

Subió las escaleras con los pies descalzos y sucios, se adentró en su cuarto sin hacer un solo ruido y sin permiso del contrario se metió entre las sábanas del mismo, llorando desconsoladamente a su espalda mientras apretaba la ropa que cubría ésta. No podía describir la real asfixia que recorría su cuello cada que soñaba pesadillas.

No podía pensar que, en algún momento de esos sueños, ella no volvería a abrir los ojos jamás, y en medio de un sueño moriría, dejando sus propias palabras atoradas en la garganta.

Leo; [BECAUSE I WANT TOO, AND WHAT?! LET ME BEE(??)]

Leo no solía tener pesadillas que lo perturbaran. No. Eso no ocurría ya desde que había crecido, confiaba en que Elliot estaría por siempre a su lado así que jamás tuvo necesidad de temer a lo desconocido.

Eso fue hasta que él se fue.

Dejándolo solo. Solo con sus demonios.

Leo se encogió sobre sí mismo al saberse solo con las voces que inundaban su cabeza y los gritos desgarradores que entre sueños se presentaban. Las noches no eran peores que los días, sin embargo, tenía quehaceres por todos lados, mandatos, pedidos, y vivía observando luces donde no existían y viendo toda clase de destellos que lastimaban sus ojos a simple vista: extrañaba su cabello pues le daba cierta confianza detrás de esos grandes lentes y esa maraña de fleco…

Pero al igual que Elliot todo eso ya se había ido.

En medio de las noches más de una vez se había levantado sin el permiso de nadie y había caminado a la biblioteca, aquella que no era igual a la que recordaba en el orfanato, ni mucho menos a la de la academia donde compartía dormitorios con su anteriormente mencionado amigo, compañero y amo.

Nada era igual pero todo se lo recordaba. Tomaba uno o dos volumenes del Caballero sagrado los guardaba dentro de su abrigo para no ser descubierto. Posteriormente subía a un cuarto especíal que tenía en la mansión y comenzaba a repasar entre historias y lineas las aventuras del Caballero que se enfrentó al “mal” más de una vez. Se quedó recostado en una cama donde las sábanas olían a algo parecido a su Elliot, algo cercano al cadáver que varias veces veía entre sueños hablandole. Aquel que habia sido más que su amigo, aquel que habia sido su salvación y su amo ahora yacía muerto y en recuerdo solo tenía:

Un par de sábanas en las cuales llorar.

Un montón de letras que memorizar.

Ni una sola despedida que añorar y sobretodo

… la sangre escrita en sus sueños acerca de quién era el culpable de aquello.