#Rebanada de vida
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Que distante se presente el día
Para darme cuenta de lo solo que hábito el mundo
Alquiler en un estrato tres de Bogotá
El colchón es una rebanada de pan
Vivir con extraños en una habitación sin ventanas en el centro de Quito
Tomar buses para ahorrar el dinero del avión.
Dormir en una terminal de Cali
Perder 50 dólares
La soledad me acompañó hasta que conocí a ese amor que terminó quemado.
A las almas no les importa el devenir del tiempo
Cierro los ojos y es un velo de colores y neurosis
Duele la cabeza
Observas al cuerpo corrompido por el trabajo
Que no honra, no dignifica.
Crecen varices a los 29
Se cae el pelo en la ducha
El fenómeno de enflaquecer por falta de afecto
Que ni los amantes más acérrimos al acto del placer logran satisfacer
Y te da asco el cuerpo
La pequeña muerte no llega
La terapeuta dice que el cuerpo bloqueado es un síntoma del rechazo al gusto de vivir.
Y tengo la garganta seca en la madrugada
El insomnio
El dolor
La nostalgia
La cruz en el pellejo
Sueñas con amores ya rechazados
Duelen los rostros familiares que se aproximan a lastimarte el espíritu
Rencorosa es la vida
La enfermedad de vivir así, ocupado cada día en evitar pensamientos malvados
Correr huyendo del verdugo
Encontrarse en la habitación gigante
Dormir en medio de la cama
Sentirte abandonado
Estar totalmente solo.
Luis García - 2024
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El algoritmo muestra algo que me atrae inevitablemente: un pastel de tres leches que, en medio, en lugar de mermelada de fresa o albaricoque, tiene una rebanada de flan o de algo que parece flan y que en Venezuela llaman quesillo (probablemente no sea flan).
Pinche pastel, me llama, me llama, lo digo en voz alta, Este pastel me está llamando, y alguien en la oficina me escucha, y alguien más escucha a esa persona escucharme, se oyen susurros, desfilan pasos en dirección a mi cubículo, Anda, Ala, vamu, vamu, vamu al Bolillo a buscar el pastelito.
En El Bolillo no venden el pastel que quiero, eso yo lo sé porque a) no está en Venezuela, b) conozco El Bolillo como la palma de mi mano, c) ya me habría enterado; pero me gusta la convivencia y echar coto con estas personas mientras afuera la tarde refresca los treinta y cinco grados de la primavera que en Houston es un ultraverano.
No consigo el pastel, pero descubro una sección donde hay cuatro budines: budín normal, al que en El Bolillo llaman retaceado, budín de elote, otro budín que no recuerdo y budín de algo que intuyo que es manjar pero que en la caja me explican que es budín de arroz con leche. ¡Budín de arroz con leche! La verdad es que parece pura maicena, pero por eso mismo también es como primito del pastéi de Belem y de la crema pastelera. Alguien me extiende una cuchara (y esa sonrisa de ay nanita, agárrate que ahí viene lo bueno) y fum, la descarga de humilde y sencilla deliciosidad. Me lo voy comiendo de a poquito en el trayecto de regreso, disculpándome por las moronas mientras la dueña del carro me asegura que no hay problema, que no existe ni el más mínimo insignificante minúsculo problema.
Va va va va.
Me gusta ese budín porque me traslada exprés al manjar de mi casa, engrudo de canela y pasitas descansando su dulzura en la estufa que se entibia. Lo prefero así, exprés, como el metrobús que de noche va directo a Tepalcates sin hacer parada en Etiopía, porque no me gusta hacer parada en la memoria, no me gusta pensar en el budín de Coatepec y en sus implicaturas, y deliberadamente elijo decir implicaturas y no implicaciones. El otro día, a propósito de la atracción que, igual que los algoritmos, inevitablemente ejercen en mí las figuras de autoridad, acabé contándole a Perla los pormenores de aquella historia que no llegó a serlo puesto que no estuvo enmarcada en los límites convencionales de la narratología: inicio, desarrollo, conflicto; sino que fue algo más derivativo, un spinoff, la libreta de Becerra que se alimenta en paralelo mientras se escribe una novela, un whatif.
Libreta = Blog. Este blog. No crean que no me percato de cómo engroso líneas y líneas mientras mi proyecto verdadero descansa en segundo plano.
Historia o no, admito que estuve contenta, acaso porque prolongué un estado de embriaguez perpetua, alcohol mezclado con adrenalina, algo que no volvería a hacer nunca pero que definitivamente volvería a hacer siempre.
Una semana entera más tarde, es de nuevo viernes. En la taquería pido mis albóndigas bien caldosas, me gusta que les pongan chayote y que las desborden de arroz adentro y afuera, es un privilegio encontrármelas en sopa, que no las preparen a la italiana, que no se hagan las europeas. Se hace de noche y va llegando una mesa de diez, y luego dos mesas de cuatro, y la mesera se olvida de ofrecernos postre. No importa, igual ni quería, y hubiera estado tentada a decirle que sí cuando en realidad querría decirle que no.
Con Codelo decidimos (vamu, vamu) ir al Bolillo por el postre. Recorro las cuatro cuadras pensando en la maicena y azuzando el recuerdo de la ollita de manjar pandeada, un asa deforme, achicharrada, y la otra inexistente, un tornillo apenas. ¡Pero ya no lo venden! La sección de budines está clausurada, lo único que sobrevive es la bandeja de budines normales, los de Coatepec, los del Resobado, los de esa ansiedad que no era mía pero se me contagiaba, despertar a las nueve de la mañana y notar que la vida había empezado desde las seis, la propensión al fallo, las atribulaciones que más tarde empezaría a padecer por mi cuenta. Ay, mi doc, cuántas cosas te perdiste tú de mí y cuántas yo de ti, y qué desperdicio.
No quiero comprar budín normal, pero lo compro. No es como el de mamá ni como el del Resobado, tiene coco y está rico, simulación barroca de un pastelillo hecho de restos. También me compro una semita salvadoreña para irme deslizando lentamente al sur, rumbo a Venezuela, rumbo al quesillo que después de todo resulta que sí es un flan.
¿Cuántas líneas más me atreveré a escribir antes de ponerme a hacer lo que debo?
¿Cuántas más estarías dispuesto a leer?
¿Cuántas más hasta apropiarte de las implicaturas?
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Al fin me libre de ti.
Cuándo tenia 7 una tía me dijo que tenia mi trasero grande porque estaba gorda, nunca antes había sentido que estaba gorda hasta ese día.
Veía a mi mamá todos los días llorando frente al espejo y diciéndose asquerosa, gorda, fea, siempre estaba haciendo dietas y ejercicios para no verse "gorda".
Que tenia que cuidar mi alimentación porque mi contextura era gruesa y si me descuidada podía subir de peso y no me podía ver así.
Que si quería comer algo alto en grasas después tenia que hacer 20 abdominales para no subir esas calorías.
A los 10 conoci a "Ana y Mia".
Y así a los 13 años vomitaba cada noche y usaba fajas, con ana y mía todo iba a estar bien.
Una vez llamaron a mi papa del colegio porque estaba palida y me veía débil, le preguntaron si a caso no comía, si dijo él, "se come todo, le sirvo en la cama, es así su color", asi que la inspectora le dijo que me pusiera algo de maquillaje ya que no era atractiva para los hombres si me veia asi, pues me compro un rubor y eso disimulo un poco más.
Si uso ropa ancha no se me notará la figura, si me siento y pongo un cojín o la mochila, no se notarán los rollos.
Así a los 14 tomaba Jugos licuados y me compraba orlistat ilegal para tener diarrea todo el tiempo (ahora explico mis problemas digestivos) no comía, pues "nada sabe mejor que estar delgada", usaba la ropa de hermana ( que es 9 años mayor) para no tener que ir a probarme ropa, ya que, me daba miedo no ser talla 12.
En los espejos me veo gorda, me peso diario y me siento gorda.
¿Porque subo tanto de peso? Porque bajo tanto de peso? Si como algo engordo, como mucho ni así engordo.
Poco a poco era cada vez más pequeña, soy cada vez más deforme, hasta que no tenía fuerzas para seguir, el maquillaje y la ropa no fueron suficientes, el suero no fue sufiente, los suplementos no fueron sufientes, estaba desapareciendo y aunque se veía, nadie me decía nada y asi me compare una y otra vez con las demás, llegaba a sentir odio de las niñas que podían ponerse y probarse lo que quisieran sin preocuparse de su peso.
¿Porque no soy sufiente? Será porque no soy linda? Será porque no soy delgada? Porque soy demasiado delgada? Tal vez si fuera más delgada seria más linda, tal vez si tuviera más figura seria más linda.
Hasta que las ojeras nunca más se quitaron. No llegué a los 17.
Un día se noto, ya mis huesos eran tan débiles que se quebraron y mi cuerpo ya no tenía fuerzas para respirar o moverse.
Y yo lo único que quería era ser bonita.
Esta no es mi historia (completa) pero pudo haber sido, me ha costado años conformarme con mi cuerpo, pase años subiendo y bajando de peso que mi cuerpo esta lleno de estrías y problemas gastrointestinales, hasta que al fin dije basta, ha sido un largo camino para asumir mi tca y querer cambiarlo, para poder comer sin culpa, para sentirme bien al "tener algo en mi estomago", y no sentir satisfacción cada vez que pasaba un dia sin comer o luego de cada vomito, no tener atracones de comida para luego sentirme culpable por no poder comer solo una rebanada del pastel, (Quizás por eso mi rechazo a lo dulce) y terminar comiendolo todo, varios en este camino han sido un pilar fundamental, pero entendí que el pilar más fundamental es mi mente, aun no se como viviré mi vida sin él trastorno, los momentos en que no te atormenta se sienten tan pacíficos, pero cortos, y lo busco aunque no lo halla sentido, cual una relación tóxica, estoy tan acostumbrada a verme gorda o deforme, a no vivir mi vida como merezco, sin el, si mi TCA.
Aun me queda largo camino por recorrer, pero aun así agradezco poder hoy estar dado el primer paso.
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Primeros pasos
¡Alto ahí, desconocido! Noto que se encuentra mal, parece que sufre un agudo caso de aburrimiento con secuelas de insatisfacción y pequeñas muestras de pérdida de interés en su día a día. No, esto NO es otro de esos anuncios sobre pastillas o productos mágicos que supuestamente le cambiarán su vida en un chasquido de dedos. Ésta es sólo una pequeña “promo” para invitarlo a inyectarse una sola dosis de los desvaríos de este humilde bloguero o, en otras palabras, invitarlo a probar “a slice of me” (una rebanada de mí).
Pero bueno, ¿A qué lo estoy invitando realmente? A una aventura viajera y gastronómica con su autor anónimo en turno que semanalmente los dejará pidiendo más y más hasta reventar de originalidad… o al menos eso espero.
Antes de adentrarnos en la nebulosa que llamo “cerebro”, permítanme explicarles la razón detrás de que los plague de mis experiencias turísticas: ¡Una tarea!
No les mentiré, el deseo de escribir y hablar sobre comida me ha llamado la atención toda la vida, principalmente porque desde que era pequeño tenía viajes constantes con mi mamá. Papá vivía lejos de nosotros así que mi infancia me la pasé mayormente en terminales de autobuses, comiendo lo que sea que podían ofrecerme, desde un sándwich en bolsita que incluía mi boleto de camión hasta pizza toda mal preparada por la prisa con la que se hizo. Es curioso, de niño tenía muchos problemas gástricos, el reflujo y mi píloro subdesarrollado no me dejaba conservar una gran cantidad de alimentos dentro de mi ser, pero la comida “viajera” jamás me hizo el daño que uno esperaría.
De ahí mi idea de hablarles sobre viajes y alimentos, porque para mí siempre han ido de la mano, ahora bien, el hecho de que me dejaran una tarea que me permitiera expresarme bastante al respecto lo veo como el destino diciéndome: “Órale pues, ya no tienes excusas. Escribe algo bonito”. Así que este soy yo escuchando al destino, al fin y al cabo, no hay nada más bello que hablar sobre “vómito” en mi primera entrada de este difuso blog, ¿cierto?
Entonces estén al pendiente, pronto volveré a llenar su vida de color. ¿Qué color? Aún está por verse queridos lectores y lectoras. Disfruten su semana, aliméntense bien, pero no demasiado, dejen un espacio para…“a slice of me”.
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"Vértigo Vitíligo"
Puedo ver a través del agujero de una puerta como brilla el ojo de alguien ¿De quien será?
El día era tormentoso, los rayos partían arboles como un cuchillo partía una rebanada de pan, ya era tarde, los chicos del colegio ya habían pasado. Mientras esperaba que el agua caliente, me acerque al living para tomar una revista que compre tras volver del trabajo, en el momento que me agache recordé que cuando era chico me tenia que subir en una silla para poder alcanzar el estante de las revistas del aparador, en la disociación, la pava empezó a sonar con su característico chiflido y yo no hice mas que apurarme, no obstante…
Un sonido rechinante proveniente de fuera me atrapo, me acerque al ojo mágico de la puerta, en donde observe detenidamente como la lluvia colapsaba en la canaleta, el porche se llenaba de viejas hojas anaranjadas y un viejo hombre se acercaba al umbral, llegue a pensar que se estaba refugiando de la lluvia, es por eso que no me moleste en echarlo, ya que seguramente se iría prontamente, sin embargo, aquel extraño señor se quedo mirando a la puerta durante un largo tiempo...
Pasaban las horas, me exasperaba sentado en el diván del living, inquietaba saber que había alguien ahí, llegue a tomar varias tazas de té y "leía" una y otra vez el mismo párrafo de la revista, el cual hablaba de cierta farándula que me era indiferente antes, sentía cierta tensión en el aire...
Hasta que en un momento el silencio inquietante de la habitación se vio interrumpido por el crepitar invasivo de las hojas putrefactas del otoño, me acerque a la mirilla de nuevo, en donde pude ver con cierto vértigo como los ojos brillantes y celestes de aquella persona se acercaban a mi ojo, si pudiera describirla, diría que es raro, se encontraba vestido con una parca y un pantalón que cuadruplicaba el ancho de su torso, tenia un extraño bigote de dos colores y una sonrisa muy blanca, pero esa no era la cuestión. Rápidamente me aleje de la puerta pegando un brinco hacia atrás, y en cuestión de milisegundos saque conclusiones del por qué aquel hombre observaba tanto mi casa.
Llegue a encontrarme perplejo varios minutos, cuando dé repente empecé a escuchar fuertes golpes con un prolongado intervalo que se volvía eterno entre cada uno, sin pensarlo dos veces, agarre una vieja replica de un arma, se trataba de una Beretta 92, no tenia ni idea de armas, jamás había tomado una en mi vida, esta se encontraba expuesta en una repisa, le pertenecía al inquilino.
Fue así, que me arme de valor y abrí la puerta, amenazándolo con disparar si no se iba, pero... No había nadie.
.27. "Te amo"
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Una (no tan) buena rebanada de pastel
Título: Una (no tan) buena rebanada de pastel.
Pareja: Wanda Maximoff & Steve Rogers (Amistad).
Palabras: 627 palabras.
Rating: B.
Square: B4 “Compartiendo una rebanada de pastel realmente decadente”.
Sinopsis: Wanda y Steve querían platicar y disfrutar una rebanada de pastel.
Advertencias: rebanada de pastel horrible, rehúso de servicio de cafetería.
N/A: Esta es mi entrada para el bingo de Marvel Rare Pair Round 2 2023. Annie MRP-066.
También puedes leerlo en Wattpad y Ao3.
Si te gusto por favor vota, comenta y rebloguea.
No doy ningún permiso para que mis fics sean publicados en otra plataforma o idioma (yo traduzco mi propio trabajo) o el uso de mis gráficos (mis separadores de texto también están incluidos), los cuales hice exclusivamente para mis fics, por favor respeta mi trabajo y no lo robes. Aquí en la plataforma hay personas que hacen separadores de texto para que cualquiera los pueda usar, los míos no son públicos, por favor busca los de dichas personas. La única excepción serían los regalos que he hecho ya que ahora pertenecen a alguien más. Si encuentras alguno de mis trabajos en una plataforma diferente y no es alguna de mis cuentas, por favor avísame. Los reblogs y comentarios están bien.
DISCLAIMER: Los personajes de Marvel no me pertenecen (desafortunadamente), exceptuando por los personajes originales y la historia.
Anótate en mi taglist aquí.
Otros lugares donde publico: Ao3, Wattpad, ffnet, TikTok, Instagram, Twitter.
Tags: @sinceimetyou @black23 @unnuevosoltransformalarealidad @azulatodoryuga
Había pasado mucho tiempo desde que Steve Rogers y Wanda Maximoff se habían visto por última vez y sobre todo platicado como en los viejos tiempos. Después de los eventos devastadores de la última batalla contra Thanos, los Vengadores se dispersaron en diferentes direcciones para sanar sus heridas y seguir con sus vidas, arreglar algunas cosas pendientes, así como readaptarse como lo habían ya hecho una vez. Pero la amistad entre Steve y Wanda era especial, y siempre encontraban la manera de reunirse cada cierto tiempo.
Era cálido día de verano en Brooklyn, Wanda y Steve habían quedado de encontrarse en la cafetería que solían visitar. Steve llegó primero y eligió una mesa en la esquina, donde podía observar a la gente pasar mientras esperaba a su amiga. No pasó mucho tiempo antes de que Wanda apareciera en la puerta, se veía más animada que la última vez, tal vez comenzaba a recuperarse de todo lo que había ocurrido en su vida. Steve se puso de pie para recibirla con un cálido abrazo.
—Ha pasado mucho tiempo —Steve dijo con sinceridad.
Se sentaron y empezaron a ponerse al día. Wanda le contó sobre su tiempo viajando por diferentes países, aprendiendo sobre otras culturas y ayudando a las personas con sus habilidades. Mientras tanto, Steve le compartió sobre cómo había estado involucrado en proyectos para ayudar a los veteranos de guerra a reintegrarse a la sociedad.
Después de un rato de conversación, se dieron cuenta de que nadie los atendía, Steve se levantó para ver lo que ocurría, no obstante regresó cabizbajo, tal parecía que no los iban a atender.
En cuanto le informó a Wanda, salieron del lugar. La última vez que se vieron, Steve le prometió que iban a comer una rebanada de pastel. De alguna manera estaban acostumbrados a ser rechazados de algunos lugares, sabían que no en todos los sitios a donde fueran serían bien recibidos después de lo que ocurrió, sabían que muchas personas no estaban felices.
Con una leve sonrisa, Wanda sugirió que buscaran otra cafetería cercana. Aunque la última experiencia no fue agradable, ambos estaban decididos a disfrutar de esa anhelada rebanada de pastel. Caminaron juntos por las animadas calles de Brooklyn, recordando algunos momentos divertidos de sus aventuras pasadas, lo que hizo que la atmósfera se llenara de un ligero sentido de nostalgia.
Finalmente, encontraron una pequeña pastelería con un ambiente acogedor y tranquilo. Se sentaron en una mesa junto a la ventana, y un amable camarero se acercó para tomar su orden. Sin pensarlo mucho, Wanda y Steve pidieron dos rebanadas de pastel de chocolate.
El camarero regresó con la orden, y ambos se miraron con anticipación. Llevaban tiempo esperando ese momento, y parecía que finalmente se cumpliría su deseo. Tomaron sus tenedores y dieron el primer bocado.
Sin embargo, algo no estaba bien. Las expresiones en sus rostros cambiaron al instante, y compartieron una mirada confundida. El pastel no tenía el sabor delicioso que esperaban, en realidad, tenía un gusto extraño y desagradable. Pero en lugar de quejarse o dejarlo de lado, decidieron encontrarle un lado positivo a la situación.
Steve rio suavemente y dijo—. Bueno, al menos es una experiencia memorable, ¿verdad?
—Sí, sin duda lo es. Creo que este será el pastel más singular que hayamos compartido —Wanda asintió, con una sonrisa en sus labios.
Aunque el sabor del pastel no era el esperado, la plática fue amena. Ambos entendían que, a veces, las cosas no salen como uno las planea, pero eso no significaba que debieran dejar que eso arruinara el momento.
Terminaron el pastel intentando continuar con positivismo. Después de salir de la pastelería, continuaron caminando por Brooklyn, disfrutando de la brisa veraniega.
Tal vez la siguiente ocasión que se vieran, sería mejor.
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Mclover
Rica combinación de crujiente tocino,frescos jitomates, lechuga, cebolla, rebanada de queso , picosita salsa habanero ranch y dos carnes 100% de res en un esponjadito pan cubierto de ajonjolí y un toque de amor agridulce.
Autora: Paola Romero
Una infidelidad a las 4:13 de la mañana …
Un hombre inundado en penas y alcohol es perseguido por un corazón en llamas, corazón capaz de incendiar con la mirada todo lo que se le interponga.
•Pendejooo por qué lo hiciste ! ?
•No pensaste en mi? !
•En nosotros!
•Pendejoo! Dame la puta cara!
Un mar de lagrimas inundaba el alma de Marcela.
Cada palabra era disparada con intención de causar la muerte de Rubén. Un te odio de su amada rota cumplió la misión .
5:00 am muere hombre ahogado en penas y disparos de amor tintados de un falso odio.
Oscuro,
frío,
luz ,
mucha luz,
oscuro de nuevo ,
blanco.
Inhaló.
Rubén abre sus ojos de occiso, descubriendo por primera vez qué pasa después de morir, morir de amor.
Sentía su cuerpo pesado y su cara vacía, quien iba a decir que el amor Marcela era el que le daba la vida.
Días de muerto pasaban para Rubén.
Lunes de comer sin hambre
Martes de verse al espejo sin reconocerse
Miércoles de recuerdos que pesan y futuros que callan
Jueves de mariposas violentas en el estómago
Viernes de vacío
Sábado de oídos sordos y mirada perdida
Domingo de filosos sueños
Rubén vivió en su muerte semanas en bucle , pero antes de suicidarse con el filoso domingo y después de perderse en el turbulento sábado, nació en el hueco de las palabras un día , el día en que Rubén después de mucho revivió , una mirada brillante le devolvió el aliento… un nuevo corazón .
Conoció los ojos de Diana detrás de unas pequeñas ventanas transparentes que los enmarcaban , inmediatamente conoció su sonrisa y por último su voz;
- Hola buenas noches bienvenido a McDonalds, que gustaría ordenar?
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Bodegones
José Agustín Arrieta (1803-1874) — Naturaleza muerta con un loro y una gallina (1000x757)
Un bodegón, también conocido como naturaleza muerta, es una obra de arte que representa animales, flores y otros objetos, que pueden ser naturales (frutas, comida, plantas, rocas o conchas) o hechos por el hombre (utensilios de cocina, de mesa o de casa, antigüedades, libros, joyas, etc.) en un espacio determinado. Así pues, los bodegones son testimonios de una época, de la vida y la muerte. Esta rama de la pintura se sirve normalmente del diseño, el cromatismo y la iluminación para producir un efecto de serenidad, bienestar y armonía.
José Agustín Arrieta (1803-1874) fue un pintor mexicano prolífico reconocido, entre otras cosas, por sus pinturas de bodegones. Su naturaleza muerta resulta fresca, demuestra maestría técnica, y es una representación fiel (tanto como un bodegón lo puede ser) de escenas culinarias típicas mexicanas.
"Arrieta no pretendió transformar el concepto de la belleza simple y sencilla, al modo de la transformación perpetrada por Cézanne, sino que optó por obedecer a las normas de su vida modesta y casi artesanal. Arrieta constituye un monumento de honestidad sostenido por los cimientos de una cualidad pictórica poco común en el México de los días de la Academia." Gual, Enrique F. La Pintura de "Cosas Naturales".
A continuación recreamos el estilo de los bodegones de Arrieta con tres de las comidas usuales propias de nuestros hogares, en tres de las comidas principales: desayuno, comida, y cena.
En esta primer fotografía podemos observar una recreación del desayuno típico de su servidora, compuesto de cereal, fruta ligera, y un vaso de jugo.
En el segundo bodegón se aprecian elementos distintos: un plato de sopa (con forma de dinosaurio) acompañado de limón y un chile serrano, a su lado una hogaza de pan con una manzana y un vaso de agua, así como un vaso de agua a la derecha de la fotografía. En el fondo un sartén se asoma.
Finalmente tenemos al bodegón correspondiente a la cena. En este se puede observar una rebanada de rosca acompañada de una taza de chocolate caliente, aunado a los elementos empleados para elaborar el chocolate: leche, chocolate en tablilla, y canela. Tampoco podían faltar utensilios como el usual pocillo y cuchara de madera.
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My 14-year-old self (22 Dic 2015)
Lo comprendí todo, en unas horas que parecieron un santiamén. Tuve una de las epifanías más grandes que iba a tener en mi vida, I could feel it.
Eran alrededor de las tres de la tarde, y la acera ardiente quemaba la suela de mis sandalias.
Nos detuvimos a ver la carta de un restaurante que se encontraba sobre Ocean Drive; todas las mesas de los restaurantes se encontraban al aire libre, con sombrillas para impedir los rayos del sol. Todo era color verde oscuro, y nuestra vista eran tiendas de ropa al otro lado de la calle.
Pedí el carpaccio de salmón con alcaparras. Cuando mi papá lo vio llegar a la mesa, hizo una mueca de asco y me preguntó con desagrado "¿Te vas a comer eso? Está crudo".
—Sí, papá, es carpaccio, debe estar crudo.
Tenía 14 años. Ni mis papás ni mi hermano entendían porqué no pedía una hamburguesa con papas y ya. A decir verdad, yo tampoco lo entendía, but I always had a thing for new stuff, for the unknown.
Clavé mi tenedor en las delgadas rebanadas de salmón, mientras mis mejillas absorbían el calor de Miami y mi cabello ondulado bailaba con el viento. Podía oler el mar, que estaba a unas calles de ahí.
Ahí comprendí que lo que quería de mi vida era mucho más que quedarme en un solo sitio, con las viejas cosas conocidas. Quería viajar a todo el mundo, quería conocer el aroma de los diferentes lugares, a qué sabía la cultura de San Petersburgo, cómo se veía el alma de Mykonos y cómo se sentía el calor de Venecia en verano.
Comprendí que tal vez estaría sola en el camino, que probablemente era demasiado para seguirme el paso: demasiado infantil, demasiado caprichosa, demasiado testaruda, demasiado veleidosa. Pero definitivamente lo prefería, a quedarme en el mismo sitio, con la misma gente, y las mismas mentes, con sus pensamientos pequeños. No quería ser pequeña.
Tenía 14 años pero supe, mientras estaba sentada en las sillas de plástico del restaurante mediterráneo, que no quería ser pequeña.
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El enredo de mi vida - Capítulo 2
— Él empezó. — se encogió de hombros sin parar de subir las escaleras.
— Es... una larga historia, pero por ahora creo que los pantalones de Raúl necesitaran de tu ayuda. — le digo apuntando el lugar dañado del pantalón.
Ella baja su vista dirigiéndola al hoyo del pantalón de Raúl — hay Dios mío, entren veré que puedo hacer.
Entramos a la casa y de inmediato se sintió un olor delicioso a poyo frito, un olor que siempre se sentía cuando regresaba de estudiar, me traía mucha nostalgia ese aroma, nos sentamos en la sala mi tía le trajo unos pantalones, que justamente había comprado en una paca y había pensado en dárselos, para así arreglar los que había roto aunque por la cara que hizo no tenían arreglo, nos sirvió una rebanada del pie de limón a cada uno.
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Capítulo 6 ‘‘¡Qué viva el amor!’’ Parte 2/4
He aquí la segunda parte jeje.
Zoe: Alma, antes de que sigas, que quede claro que a pesar de lo que pase voy a estar a tu lado. Eres muy importante para mí y no quiero perderte por nada en el mundo.
Alma: Todo va a estar bien, eres mi amiga, me gustas y también deseo que continuemos juntas pase lo que pase.
Zoe: Ok, entonces déjame amarte, cumpleañera. Te creo. Y mi respuesta es “También me gustas demasiado, Alma”.
Alma: Con que demasiado, ¿eh?
Zoe: Ay, pero es verdad, me encantas un montón. No sabes por cuánto me lo he estado guardando.
Alma: Zoe… Zoe: Es que cómo es posible que te la pases por ahí siento tan genial y linda y no sé cómo esperabas que yo no me enamorara, porque…
Y Alma besó a Zoe ;o;
Su confesión de amor, su primer beso, todo en el mismo día. Zoe se sorprendió al sentir como sus labios tocaban los de Alma y se sorprendió más al darse cuenta de que no era un sueño, su amor era real.
Después de ese primer beso tan bonito, Alma corrió a soplar las velas de su pastel antes de que se acabara la fiesta. El espacio era muy reducido, por lo que salió de la habitación en la que se encontraba el pastel para transicionar a su siguiente etapa de vida. Ya es mucho mayor nuestra fundadora ;o;
Alma: AY, me estoy volviendo más vieja D:
Pero sigues estando muy guapa :3, así que no te preocupes Almita, tú sigue con tus fiestas y aprovecha tu nuevo amorcito. Alma: Claro que sí, me queda mucho por vivir todavía.
Es la única foto que pude tomar del pastel u_u, iba a ponerle velas antes de que tomaran la primera rebanada para que pudieran verlo así bien bonito, pero Nina no se tardó en tomar su rebanada.
Alma consiguió su primera plata de su adultez, luego se fue a casa junto a Zoe. Como pueden ver Alma toma cualquier oportunidad para dedicarle coqueteos a Zoe, lo que le gusta un montón a Zoe, pues es realmente un amor correspondido, uno muy dulce, por cierto.
Alma: ¿No me veo muy vieja para ti?
Zoe: De qué hablas, Almita. Pronto será mi transición a la adultez también, solo me ganas por unos días.
Alma: ¿Me amarías si fuera una lombriz?
Zoe: Mi amor, estás hermosa, si quieres ser una lombriz también te amaré de esa forma.
Zoe: ¿Lo entiendes? Te amo.
Y Alma sintió una corriente por todo su cuerpo, inmediatamente besó las manos de su amada.
Zoe: ¡Ah! Eso no me lo esperaba, mi vida.
Alma y Zoe entraron a la casa, en cuanto la puerta se cerró Alma se lanzó a los brazos de Zoe y la besó apasionadamente. Era tan natural para ambas, aunque apenas se estaban conociendo sus labios, el amor sincero hacía que la inexperiencia no fuera problema para ellas.
Alma: Quédate.
Zoe: ¿Huh? No me iré, no me voy a ir.
Alma: Gracias, bebé.
Y Zoe se quedó a pasar la noche, el cuarto de Alma necesita muchos arreglos todavía, pero parece que eso no le importó ni un poco a Zoe. Las novias estaban felices y solo podían pensar la una en la otra.
Y LA FUNDADORA TUVO SU PRIMER ÑIQUI ÑIQUI. Para cerrar su día de cumpleaños con broche de oro.
Al día siguiente tocaba trabajar, por lo que después de un cambio de look de cada atuendo, Alma se puso su traje de inversionista.
Zoe: ¿No puedes tomarte otro día de vacaciones?
Alma: Hoy necesito volver al trabajo, nos vemos luego Zoe, ¿oki?
Zoe: Hmm, está bien.
¡Alma sigue viéndose muy hermosa! Además que el cabello recogido le queda muy bien, ¿no? :D
Alma: Gracias por el cumplido, jeje n.n
Ese día, después del trabajo, Alma fue al gimnasio a perder los kilitos que había ganado en su cumpleaños. Se encontró a su novia e inmediatamente le mostró cariño.
El resto de la semana también aprovechó para ir al gimnasio luego del trabajo, corriendo en la caminadora hasta apestar.
Uno de esos días su radio se descompuso, por lo que llamó al servicio de reparaciones y Amparo se quedó un momento a charlar con ella. Después de su amor fallido parece que pueden ser buenas amigas, Alma simplemente es una persona a la que no se puede odiar.
Y no solo fue al gimnasio, sino que también aprovechaba para ir a la biblioteca a jugar ajedrez con su amigo Antonio, para después realizar algunas consultas del trabajo en la computadora.
En el último día de la semana, Alma llamó a Zoe para tener una cita. Ambas se verían en el parque de Willow Creek, Alma no quiso perder un minuto más en casa y llegó en cuanto pudo a su destino. Hay que mencionar que esta es su primera cita.
Alma: He estado pensando tanto en ti, mi amor.
Zoe: ¡Y yo en ti! Te amo mucho mucho.
Alma y Zoe se sentaron en una banquita, no tardaron en darse cariñitos. Se nota que se aman mucho. Como pueden observar en el rostro de Zoe, ella ya ha pasado a la adultez y sigue siendo igual de bonita.
Alma: Tenemos que volver al gimnasio un día de estos, me gusta mucho ver tu carita mientras corro.
Zoe: (Entre risas) ¡ALMA! Jajaja, soy muy… jajaja… sensible... a las cosquillas.
Alma: Tienes una risa muy bonita, ¿ya te lo había dicho?
La mujer perfecta para Alma, había estado asustada por la posibilidad de crecer sin encontrar al amor, al punto que intentó enamorarse de alguien incompatible para ella. Alma, una mujer con poca experiencia, no sabía que el amor no debe forzarse, sino que este llegará en el momento indicado, con la persona indicada, con Zoe.
Los ojos de Zoe brillaban, Alma se dio cuenta de que lo que sentía era recíproco. Un amor tan puro e inesperado, jamás habría pensado que la admiración y cariño que su amiga le daba llegaría a tener un significado más intenso. La vida de Alma estaba cambiando, tanto ella como Zoe habían cambiado, encontrándose en un punto en el que no se necesitaban, sino que se complementaban.
Entre besos y caricias, Alma disfrutaba del momento, de repente pensaba en todo lo que tenía planeado para su cita y los nervios regresaban. Mientras sus dedos recorrían el hombro de Zoe, poco a poco su mente se despejaba de nuevo. Alma estaba muy emocionada. Alma realmente se había enamorado.
Zoe: ¿Prefieres el parque de Willow Creek?
Alma: ¿Huh?
Zoe: Tu cumpleaños fue en Oasis Spring, pensé que nos veríamos en el mismo parque.
Alma: Ah, la verdad el cambio a un lugar más verde me ha hecho mejor, el desierto es familiar para mí, pero si mi cumpleaños fue ahí fue solo porque quería tenerte cerca.
Zoe:… Te amo.
Después de conversar un rato más, Alma le pidió a Zoe que caminaran por el parque. Cada conversación profunda hacía que Alma se sintiera más segura de que contaba con la pareja perfecta.
Alma: Zoe… te amo mucho.
Zoe: Y yo más.
Alma: No, yo más.
Zoe: ¿Quieres ver que yo te amo más?
Alma: ¿Quieres ver tú?
Oscureció y Alma se separó del abrazo. Podía sentir como los nervios recorrían su cuerpo, a pesar de todo estaba más decidida que nunca. Zoe se sorprendió al ver a Alma hincarse.
Alma: Zoe…
Zoe: Ay Alma, no me lo puedo creer.
Tremendo cliffhanger xd.
(Continúa PARTE 3/4)
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Hoy fue la primera vez que me hiciste sentirme mal… genuinamente quería llorar
Pero no es tu culpa
Es culpa de los onvres que me han tocado, es culpa de mi falta de convicción ante la palabra “no” y es mi poco respeto hacia mi misma
Me lastimaste pero no fuiste tú
Fue mi memoria y el cómo te acercabas a esa línea horrible llamada “Fuck mates” solo quiero ser amada y quiero amar
Me gusta coger contigo y amo mucho hacerlo pero hoy genuinamente sentí que era solo un pedazo de carne, un poco de pastel y una rebanada de pan, espero me ames aún
Y no por decirte la verdad se vuelva en un aspecto que no quieras tocar
Sé que eres caliente
Yo igual
Pero hay días en los que quiero sentirme amada de una forma no sexual
Te amo
Amo estar contigo
Amo mucho tu forma de ser y al mismo tiempo amo mucho como eres
Te perdono de manera genuina y profunda, porque noté tu interés ante mi suspensión anímica y el como mi mayor defecto avivaba el momento, agradezco genuinamente que te dieras cuenta… me demuestra que estás conociéndome
Me demuestra que te intereso
Y me demuestra que me amas
Genuinamente te perdono
Y yo sé que voy a estar bien
Ya estoy acostumbrada al daño emocional… por otro lado eso me hace sentir un poco más viva, porque demuestra que así si estoy sintiendo por ti
Te aprecio
Te amo
Y quiero una vida larga contigo
Amo tus ojos verdes y tu sonrisa, amo tus manos y tus hombros, amo tu abdomen, tu espalda, tus brazos y tus labios, tu cara y tu voz
Genuinamente me importas
Y me importa tu estado emocional
Te amo
Y no me lastimaste
Eres el amor de mis últimos días
Espero y podría decir de mi vida
Porque sé que tú quieres darme el trato que yo quiero y por otro lado yo quiero tratarte como mereces de la mejor manera
Te amo fuckkkkk
Nos vamos a casar
Y ay si
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“Mi esposa”. Decidí que el apodo de novia quedaba demasiado corto a comparación del amor que te tengo, un día desperté y decidí que no deseaba darte un título menor. Todo lo que creía, todo lo que me lastima, se deshizo en un instante cuando tus ojos decidieron mirarme con amor, cuando decidiste que sería yo a quien besarías de por vida.
Por ti renunciaría a la última rebanada de pizza, reservar la última toma de café para ti, guardar el agua caliente por las mañanas y desearte suerte cuando salgas por la puerta. No hay cosa a la que no renunciaría para que la tuvieras tú, mientras yo exista, no te faltará nada que necesites de mí.
Decidí que llamarte “esposa” es lo más adecuado, decidí que juntos podríamos formar un nuevo concepto de amor, decidí que te amaré por el resto de mi vida, te amaré incluso cuando creas que es imposible hacerlo, cuidaré de ti cuando no puedas contigo, firmaré tu yeso cuando te rompas algo, cambiaré tu vendaje en caso de ser necesario, haré todas y cada una de las cosas con tanto amor que olvidarás que fuiste amada antes.
Y así es como te aseguro que quiero que seas la última persona en mi vida, mi último amor.
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ㅤㅤㅤㅤㅤㅤ. . ❲ 𓋼𖤣𖥧𓋼𓍊 ❳⠀ . .
ㅤㅤ ㅤ ㅤ ㅤ |ㅤ그들은 입에 숨어
ㅤㅤ ㅤ ㅤ ㅤ |ㅤ셀 수 없는 꿈
ㅤㅤ ㅤ ㅤ ㅤ |ㅤ그리고 엄청난 슬픔
ㅤㅤㅤ ㅤ ㅤ ⸻ #cr_lepusepistulae ⸻
ㅤㅤ ㅤㅤㅤㅤ#VITOBER 500words
ㅤㅤ ㅤㅤ ㅤ ㅤㅤ"Mayordomo"
ㅤㅤㅤ
ㅤㅤㅤ ㅤ ㅤ ㅤ ㅤ ㅤAlberto. (2)
ㅤㅤ ㅤㅤㅤㅤ
ㅤㅤ ㅤ ㅤㅤㅤㅤㅤㅤ ㅤ𝑆𝑒𝑒 𝑚𝑜𝑟𝑒
ㅤㅤㅤㅤ ㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤ﹀
No hay noción del tiempo cuando te consume la noche. El escozor se ha ido, el dolor desapareció, el pecho no le aprieta y es capaz de respirar con una normalidad que extrañaba. La suavidad la rodea y un aroma familiar le otorga paz.
— ¿Buenos días?
La negación la golpea, puede jurar que siente una mano deformándole el rostro con una dolorosa bofetada. Esa voz se le interna en la cabeza, le enrolla los pensamientos, carga de estrés la oscuridad completa en la que se había refugiado. Finalmente la obliga a abrir los ojos para encontrarse con la vieja habitación de su casa familiar. Envuelta en la ropa de cama que usó los últimos diez años antes de mudarse bajo el techo de su esposo.
Se le hunde el pecho.
Le duele el corazón.
A su lado alguien carraspea, le toma unos segundos tomar el valor de voltear la mirada para encontrarse con el rostro preocupado de su afeminado mayordomo. En las manos una taza de té y en la mesa del costado un recipiente de cerámica con agua y retazos de tela.
— Buenos días, Enrique. No quería despertar ¿Por qué me interrumpes?
— Es su madre. Vendrá a visitarla, póngase presentable por favor.
No sabe si es por frío, por malestar o el absoluto terror que le causa la seguridad de que su madre tiene algo que decir sobre el incidente, pero tiembla. Tiembla hasta las uñas, los cabellos enmarañados. Cada nudo le vibra contra el cráneo y los ojos se le desenfocan otra vez. El aliento se le escapa, la fantasía de la muerte reaparece y se va en un instante cuando la mano del hombre le toca gentilmente la espalda.
— Gracias.
Reúne el valor para levantarse de la cama cuando sale de la habitación. El batón que le cubre la triste desnudez hace apenas nada por ocultar la protuberancia que ya se asoma en la parte inferior de su vientre. Toma la taza de la mesa esperando que la infusión sea suficiente para liberarla de su predicamento. Reza porque una caída le arranque la vida o el miedo. Se disculpa con su dios mientras se pasa el trapo húmedo por la piel como si al quitar los rastros de sudor quitara también las culpas insertadas en los poros.
No funciona.
Se desespera.
De nuevo siente que se asfixia cuando las doncellas entran en su habitación y preparan para ella un vestido para vestirla. Ellas desvían la mirada, el secreto es demasiado obvio para ocultarlo pero sabe que rebuscan cualquier método para evitar verse comprometidas en la próxima confrontación.
Pesa casi tanto como el otro, pero al menos éste vestido no le comprime las entrañas ni le retuerce la espalda. Es capaz de caminar tranquilamente y trasladase a la antesala de su habitación. La mesa de postres comienza a decorarse con tazas elegantes, con platos bellos traídos del comedor principal y rebanadas de un pastel de carne de pato y cerdo.
Y en la silla, obviamente molesta, su madre.
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Ver tu rostro iluminarse con la luz de las velas que puse en tu pastel… me miras y veo ese deseo que estás a punto de soplar, esos anhelos acumulados hacen brillar aún más tus bonitos ojos, yo te sonrío mientras apunto la cámara para capturar como resplandeces a tus ahora 35 años… te cohibes un poco porque estás acostumbranda a estar del otro lado del lente, veo que encojes tus hombros y te sonrojas, la gente que más quieres a tu alrededor sonríe y te festeja y yo durante ese cruce de miradas muevo mis labios para que solo tú te enteres del mensaje “feliz cumpleaños cariño” veo como tus hombros se relajan y entonces soplas, foto*
Cuando termino de repartir las rebanadas de pastel me siento en tus piernas para comerlo, me dices en el oído que ya quieres que estemos solas y yo te sonrío dándote un beso lleno de merengue…
Nos aguardan muchos otros deseos de cumpleaños, muchas más fotos, siempre querré que tú sepas que celebro tu vida, que festejo tu existencia, feliz nueva vuelta al sol, te amo All.
🫧 Posdata: Siempre te echo de menos
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No. 3
El día de hoy es un día triste, contrario a lo que solía ser. Hoy hubiera sido el cumpleaños de Fernando, celebraríamos sus 54 años de vida, una vida llena de momentos lindos, felices, tristes; una vida normal, como todas.
A veces me cuesta mucho trabajo comenzar a escribir, porque hay días en donde no es controlable el llanto, que las emociones se salen por los poros en cada letra escrita y todo se torna oscuro. Hoy, a pesar de ser un día triste, encontré las ganas de levantarme a trabajar, en su sonrisa, sus palabras, su mirada de todo y nada, pero siempre fija en mí y en el aroma del café por la mañana. Porque el café me conecta contigo mi gordito, tú me enseñaste a tomarlo y a disfrutar de él.
Me pongo a reflexionar sobre como la muerte cambia los conceptos de las celebraciones, ahora a pesar de ser una fecha importante en mi vida, ya no es un cumpleaños, porque los muertos ya no cumplen años, ahora es un festejo de lo que fue su vida, de recordar esa vida tan linda y poder decir que fue un honor haber compartido, aunque sea un momento, tiempo contigo mi Fernando.
Me ponía a pensar mucho sobre ¿Qué se tiene que hacer ahora en el cumpleaños del fallecido? ¿Qué es lo correcto? ¿Qué palabras se dicen? ¿Cómo se festeja? ¿A quiénes se invita? y saben algo, creo que se debe hacer lo que te sale del corazón y lo que hagas en este momento, el primer cumpleaños del fallecido será de suma importancia para seguir soltando y porque no, seguir conectando con esa persona.
He decidido (por recomendación de mi tanatóloga) conectar con Fernando haciendo un pequeño ritual, como un festejo entre los dos como siempre lo hacíamos, con una rebanada de pastel de queso y una buena tasa del café de Chiapas que tanto nos gustaba, lo tomaré, como hasta ahora lo tomo, en su tasa de Talavera que tanto le gustaba, lo hare en el comedor, con música suave (de Juan Gabriel por supuesto), su foto me acompañara y porque no, una vela que nos conecte entre los dos mundos, le platicaré lo difícil que han sido estos tres meses desde su muerte, le contaré que planes tengo para mi vida, a donde quiero viajar, le contare además que extraño la playa, le contare de las terribles lluvias que he vivido últimamente, le diré que lo extraño, que lo amo y que estoy siendo muy fuerte, como nunca antes, viviendo sin él. También daré un espacio de silencio para escucharte dentro de mí, para recordar tu voz, para recordar tus consejos, tu risa, para recordar cómo me decías que me amabas, para recordar el sabor de un beso tuyo y sentir el abrazo de tus brazos. Ese pequeño ritual en donde te recuerde me dará mucha paz, liberará lagrimas que no han salido en días y me dará tu protección. Si me animo, abro esa botella de mezcal “Creyente” y me tomo una a tu salud, porque siempre me acuerdo de cómo me decías “échate uno mi amorcito” haciendo referencia y animándome a que me tomara un caballito de tequila blanco en los momentos importantes.
También te dedicaré un poema, como los que solía regalarte, tal vez no con la frecuencia que querías, pero siempre fuiste la fuente de mis inspiraciones y me llevaste a sentir el más profundo amor por alguien, ahora lo sigues haciendo de hecho.
Últimamente he andado cansado, superando el trauma de reincorporarme a la vida “normal”, estableciendo una rutina sin ti y ha sido complicado, yo solito me aplaudo de esos logros que pensé imposibles los primeros días sin ti; la vida se siente diferente sin ti, a veces no veo claro, se me nubla la vista, me siento desprotegido, me siento solo a pesar de las maravillosas personas que están a mi lado. Pero ahí voy, me preguntan ¿Cómo estás? Y yo digo “ahí vamos” y lo digo pensando en mí y pensando que estas dentro de mí, probablemente también viviendo un duelo por no tenerme, por verme llorar y por haber muerto.
Si hoy me bajas a visitar y me vez comiendo pastel, tomando café, te pido que por favor contengas tus lágrimas, no llores conmigo, abrázame, mírame y siéntete feliz de que estas enseñando a un hombre débil y con miedos a ser fuerte, ser fuerte por ti.
Feliz cumpleaños mi gordito hermosísimo.
En la imagen esta Fernando y atrás de él la isla de Aruba.
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