#Memoria de polen y brisa

[jcplana]

Albert Sans - Los espíritus malignos.

Los espíritus malignos. Los mayores observaron durante varias noches de un estío, desde lejos, las sombras en la cueva inciertamente iluminada. Se reunieron en asamblea y los rollos recién escritos enunciaron que los pecados de quienes poblaban la aldea habían atraído a los espíritus malignos y cómo se habría de proceder para alejar su presencia y su influencia. En el templo fue la aldea…

[hijadelviento]

SIEMPRE GÉNESIS

No haber engendrado también es dar. Nadie pasa sin haber legado, nadie carece de sonido. No hay yermo estéril si alguien lo mira. Si se oye cantar al mirlo cuando el alba es porque un primer mirlo cantó, y fue recordado. Si el castaño está entre nosotros es porque hubo un primer polen, y fue recordado. Si el tejado existe como conciencia es porque un día hubo desnudez, y fue recordado. Si el bajar del río es su enseñanza es porque alguien aprendió del cauce, y fue recordado. Las cosas significan por su memoria, y lo que unos llaman brisa y otros alma, otros aliento, arima, —atman, psyché, es el soplo, el aire que empuja al mirlo a posarse en una teja y a escuchar como si tú llevaras la canción que le falta.

Ramón Andrés, Poesía reunida. Aforismos (2016).

[francesco-nigri]

E FU IL TEMPO DEI PAPAVERI ROSSI

Y FUÉ EL TIEMPO DE LAS AMAPOLAS ROJAS

Scritta nel 2017 in memoria e onore di tutti i giovani caduti durante la repressione dittatoriale in Venezuela di quella primavera 💚

E fu il tempo dei papaveri rossi

alla sfida dei freddi in altalena del tempo

stelati

purpurei

ventati alla vita

del nudo ai cingoli del brivido

a onorare le brezze cadute

di rugiade alle albe

come lacrime di prati violati

Il sangue del cielo infranto

dimenticò gli scarlatti incamiciati ai miti

e ne riconobbe le bugie intessute

e le toppe

violente

alle zolle numerate ai polsi

della fame alle vene

Fu il tempo dei papaveri rossi

polline alle polveri sparate ai vermigli

sorriso ai fumi dei cimiteri

apostrofo d'una terra innamorata all'alto

e ai salti delle acque alle sue fonti

Benedetti i campi

dove le battaglie diedero le vite

e benedette le vite

dove i campi diedero le battaglie

Fu il tempo dei papaveri rossi

e il mondo conobbe agli sgomenti

gli aliti materni

i vagiti alla luce

gli sbocci ai fori delle rondini

Benedette le battaglie

che diedero i campi

e benedette le vite che diedero battaglia

francesconigri©22.04.2017

Y fué el tiempo de las amapolas rojas

al desafío de los fríos en el columpio del tiempo

de tallos tensados

purpúreos

de viento a la vida

del desnudo a los cíngulos del escalofrío

a honrar las brisas caídas

de rocíos a las albas

como a lágrimas de prados violados

La sangre del cielo destrozado

olvidó los escarlatas encamisados a los mitos

y reconoció de ello las mentiras entretejidas

y los parches

violentos

a los terrones numerados a las muñecas

del hambre a las venas

Fué el tiempo de las amapolas rojas

polen a los polvos disparados a las bermejas

sonrisa a los humos de los cementerios

apóstrofo de una tierra enamorada a lo alto

y a los saltos de las aguas a sus manantiales

Bendecidos los campos

donde las batallas dieron las vidas

y bendecidas las vidas

donde los campos dieron las batallas

Fué el tiempo de las amapolas rojas

y el mundo conoció a los desalientos

los alientos maternos

los vagidos a la luz

los brotes a los agujeros de las golondrinas

Bendecidas las batallas

que dieron los campos

y bendecidas las vidas que dieron batalla

francesconigri©22.04.2017

[burakrevista]

Bailando con la escoba. Poesía reunida de Daniel Fara

“El recorrido por las distintas ventanas que abre Daniel nos lleva a respirar el aire que provee la saudade (palabra portuguesa que va más allá de la palabra nostalgia). Esa saudade no provoca tristeza ni amargura: baila con el color azul, juega a lo imposible, rubrica personajes que se alejaron y que vuelven a nuestros días gracias a la memoria poética. Personajes que se convierten en un cuadro pintado por un artista, similar al trabajo que realiza Lily Briscoe en Al faro de Virginia Woolf. Los recuerdos de estos poemas proveen felicidad: son mágicos destellos de un pasado que se acerca como el lente luminoso de una cámara”

Fragmento del prólogo de María Eugenia Fernández

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Compartimos algunos poemas del libro:

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Ángel del rincón

ángel del rincón

sombra de harina

dorabas la noche

con un bostezo de polen

yo navegaba

en tus pupilas

batía agua y estrellas

con mis remos

por las orillas

corrían desvelados los ratones

en el aliento celeste

de la estufa

crecía la onda tibia

de mi almohada

nona melina

ángel del rincón

sombra de harina

dorame esta noche

con tu bostezo de polen

*

Venecia negra

Encalló mi témpano

y tuve que nadar hasta tu jardín.

¿Para qué había llevado

en bandolera

el arcabuz de los buenos tiempos?

¿Para quién mi antigua mirada

prisionera

tras los barrotes de mis pestañas?

(Un heraldo de la muerte a contraluz

había clavado la noticia en mi joroba.

Fue cosa de salir latiendo fuerte,

de navegar hacia tu casa

sobre el oleaje de las esquinas mal dobladas)

Una brisa negra me abrió la puerta,

retrocedió el sollozo violeta

por tu amado perdido

¿Y qué pude hacer yo

salvo aceptar que tus lágrimas

formaran curso lejos de mi pañuelo?

Sí, quise retar a duelo

a mi nuevo rival, el Destino,

pero el guante se hundió en tu herida

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y el sol en mi taza de café.

Te di el pésame,

recuperé la calle, el frío

Dejé atrás la góndola encallada

y avanzando en los zancos de mis remos

lloré por mí,

que ni siquiera había muerto

para convertirme en fantasma.

*

Dos estrellas

Amanece.

Dos estrellas se demoran

conversando

en el mostrador del cielo.

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Nostalgia, belleza, cierta ternura de la infancia, el dolor y el amor, el amor y el dolor. La vida misma reunida en un edición muy cuidada. Algunos temas con los que trabaja Fara, también la naturaleza y los sueños, nos llevan de paseo por recuerdos que todos tuvimos o tenemos. Es muy interesante su obra poética. 

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La obra reunida donde se lee este fragmento, en el primer poema del libro, Como si fuera un prólogo: A raíz de un malentendido Si uno quiere escribir un poema / lo escribe / en la oficina / en la ladera de un pecho / o en la cuerda de su horca / y no se ausculta a cada rato / el corazón / para saber si le duele o no le duele / lo escribe / en el último renglón de su conciencia / alumbrado por el miedo a lo imposible  

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Para comunicarse con el autor o con la editorial hacen click en sus nombres.

Bailando con la escoba. Poesía reunida

Daniel Fara

Gayheart Ediciones, 2022

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[gojorgeworld]

“BUSCÁNDONOS DE A DOS” Hoy salí a buscarme, convidé a mi mente a que paseáramos  juntas las calles del pasado tomándola del brazo. Me dijo, estamos viejos, mi paso es lento, me agito fácilmente envuelto en el cansancio, y son muchas las calles que quieres recorrer hurgando en los rincones de vetustos ventanales con cerrojos  rotos, en puertas carentes de antiguas cerraduras que se abren con el viento crujiendo en un sonido que anuncian el dolor  mezclados con el canto de algún viejo fantasma. Me tienes todo el día detrás de tus antojos, y cuando estas dormido me obligas a soñar. ¿No piensas detenerte? ¿No vez que estoy cansada? ¿Qué mi espalda está curvada, de tanto cargar con tu equipaje de nostalgias? Ve sola, yo te esperaré sentado en el portal de la mansión del tiempo. Quizás hasta me invite a tomar un café en el sillón del patio, en ese que tú adoras, porque pasas las horas dibujando palabras que le robas a mi silencio, para darles vuelo como a los pájaros. Ve, no te detengas, pero hazlo  lentamente, observa con cuidado los espacios, no te asustes con las sombras que oscurecerán tu andar, ni con el llanto quejumbroso de los pinos invadiendo tus oídos, tampoco tiembles si te hieren las espinas de las rosetas en los pies, no grites si te cruza una serpiente, sólo esquiva su ponzoña, más de una vez lo has hecho, pero ahora tu cuerpo, igual que yo, tiene lento los reflejos. Ve cantando una canción así sabré por donde andas, que tenga ritmo alegre y baila, baila con los duendes de tu imaginación, de tu mundo de ensueños, pídele  a la rosa su perfume e imprégnalo en tu pelo, canta con los grillos , salta con las ranas del estanque donde dejaste jugando a  tu niñez ,y vuelve a danzar en los brazos del viento, y que tu vestido tenga colores de un arco iris que la lluvia te bajó del cielo y suavidad de brisa sean tus movimientos. Ve, no te detengas, dobla las esquinas sin miedo, habrá una calle, y otra, y otra, muchas, cientos, todas asfaltadas de recuerdos, algunos feos, otros bellos, pero estarán dormidos en el lecho del pasado, y hoy es presente, no pueden volver, resbalarán como gelatina entre tus dedos, serán suaves gotas de rocío, tus recuerdos. Asombrado, mareado de tantas palabras, comencé mi andar solitario. Tenía razón mi mente, y cuando recorrí la última calle, regresé al lugar donde la había dejado. Con una humeante taza de café en su mano, conversaba con el tiempo, al verme, depositó la porcelana sobre la deslucida mesa, se despidió, y vino a mi encuentro. Desde el jardín, el anfitrión levantó su mano a manera de saludo, contesté agitando la mía. Tomé a mi amiga, la levanté en brazos y la cargué sobre mis hombros  para que no se cansara. La necesito fresca, despierta, inquieta, ágil, feliz. La necesito para seguir viviendo sembrando mis poesías y para encontrarme cada día, viviendo en su vida. Si mi mente se pierde, no volveré a encontrarme por más que camine todas las calles. Me preguntó ¿te encontraste? Sí…le contesté y mientras una lágrima besaba mis labios la otra besaba sus mejillas. ¡Nunca dejes de soñar, ni recordar, porque soñar es el principio de un sueño hecho realidad! Y recuerda: todo lo que sucede, sucede por una razón. Como un maratonista he corrido y seguiré acelerando mi marcha hacia mi destino final. Como un ave he volado  en busca de una antigua aspiración del hombre, la de remontarse a las alturas como los pájaros. Y ese placer de seguir subiendo ¡más arriba! hacia el sereno azul del firmamento…es la vida. Siempre más arriba! ¡Más alto hacia el cielo azul! Porque siempre se puede. He aprendido que de la mano de Tata Dios todo se puede. Que una mano amiga y el beso de un hijo y el amor de tu mujer es la perla más preciosa que se puede pedir y la parte  más  delicada del increíble arte de vivir como un hermano. Brindo para que la sed de los malos recuerdos tengan lluvia de olvido. Brindo para que  al tiempo difícil  le aguarde el color  de la ilusión. Brindo por el verdor de los cuerpos, el sexo de las flores, el polen de la risa y todas las estrellas confundidas en el universo como  gotas de lluvia. Brindo con mi compañera memoria que me acompaña en el olvido por la vida que es lluvia, fuego que arde, viento, trueno y sol que da luz. 

Dr. Jorge Bernabé Lobo Aragón

María Isabel clausen – Marisa - (Mic)

#Tucumán #Córdoba #Argentina #España

[poetoftheshadow-and-knight-mer]

Girando sin el mundo.

Gire alrededor del mundo, viaje en pleno vuelo de la juventud. Creyendo tener todo lo que ansiaba: conocimiento, cultura, oportunidades, nuevas luces que se me iban a dar. Mi objetivo era buscar algo nuevo, ya saben algo normal de la juventud, tratando de encontrar su piedra filosofal perdida, su cáliz de la vida eterna, buscando un cambio único y capaz de orientarlos. Así me aventure un dia de invierno a buscar entre la escarcha de un crudo noviembre, con no mas que un par de millares de papel y una emoción ciega, aún recuerdo lo helado del día en que me fui, llegue veloz al aeropuerto como un relampago. Llegue a admirar su estructura, un lugar mágico capaz de darme una aventura tras otra, entre las fronteras de cada uno de sus mundos, cada uno tan distinto, peculiar y tétrico como el anterior. Antes de abordar me dio un dolor en el pecho, un punzada y luego sentí que paso, pero ahora vivía con una sensación adormecida sin saber que esa sensación se quedaría sellada, petrificada, como si el frío hubiera llegado alli y se hubiera plantado, generando un criogenización espontanea. En esa punzada se había esfumado algo, que sabía bien ya no volvería, pero no me importo di los pasos aún ansioso con mi mochila al hombro buscando mi lugar en la ventana. Al alzar el vuelo en el avión pude vislumbrar lo veloz que todo pasaba, el suelo aceleraba; mientras yo me quedaba inmóvil viendo aquel espectáculo; incapaz de ver nada más que la increible velocidad en que esta nave de acero se alejaba de su hogar, de lo veloz que era sin saber a donde iba, dejando todo atras sin nada por lo que volver, solo le bastabam sus alas bien altas para dejar que el mundo girase en sí; como si el mundo nunca hubiera notado que una pequeña parte de él se había ido; que ahora estaba encima de su cabeza y que en esos momentos era ajeno a él. El mundo siguio girando y no comprendí como eso era posible.

Durante mis viajes encontre increibles aventuras, en donde pude conocer sobretodo gente de otros mundos, viajantes con su propio idioma extraño y su pensamiento peculiar, ajeno al mio y aún asi, compatible de alguna extraña manera que no puedes explicar; porque hablar con ellos, era hablar con juegos de fonemas desconocidos, como si los dos fueramos unos compositores completamente distintos uno del otro, cada uno sus notas, componiendo en el camino de manera espontanea y clara, aún si saber si la siguiente nota sería la correcta. Tambien encontré nuevos mundos donde la tierra no era húmeda y gélida, en vez de eso, se había hecho cenizas, se habia incinerado, tostado de una manera increible, generando unos polen acumulados entre las dunas de su mismo material; todos estos granos de gélida tierra tostada a la luz de la luna; viajaban de manera independiente libre. Sentí que era una pequeña representación de mi mismo viaje, donde el viento los hacia danzar unos entre otros, mientras el arduo sol los bañaba con sus rayos, calentando sus ánimos y dandoles un brillo aún mas tostado y brillante. Otro de estos paisajes extraterrestres era el de un mundo fangoso, con una espesa mezcla marron y negra como base, capaz de poder atrapar tus zapatos y tratar de roerlos, carcomer o erosionar; en ocasiones esa espesa masa alcanzaba más que el zapato. En ese ambiente hóstil llegaba siempre la depresión, un aviso del cielo el cúal dominaba todo lo invadía, tratando de refrescar la ardua tierra que había sido castigada por el calor intenso.

Viaje entre tantos mundos, comi, vi experimente y aún asi nada encontre, no vislumbre ningun calíz ni piedra; no había una serendipia. Pero es hecho no hacía que me bastace para dejar de intentar de encontrar mi piedra filosofal entre los infiernos, los cielos y los misterios del mundo. Entre los mas grandes bajíos, montañas y llanuras. Mientras tanto, el fragmento de mi carne petrificado, infestado por la plaga de la desgracia, gélida e incompasiva entre los viajes de su portador, no se conmovio; decidio crecer hasta el punto en donde el mundo olvidase que alguna vez giro su creador. Indecisa la víctima y sin mas que una parte de suerte decidio, abandonarlo todo, olvidarlo y solo perderse así mismo, dispuesto a ser comido por la fúnebre sensación de gélida expresión.

Cuando regrese, al fin, de una larga travesía, como un viajero exhausto tratando de encontrar una parada, una salvación en una posada, o un aventón en una autopista muy larga. Salí de la sede de mis viajes y cuando abri la puerta me dio la bienvenida una ligera brisa con una sensacion helada en la tez de mi rostro, pero esta no era una sensación de familiaridad, mucho menos la de un hogar; sino mas bien una de un saludo distante y frío, casi de un desconocido andante que no sabe ni que ha pasado; como la de un viejo pariente que nadie conoce ni extraña nunca, olvidado o dado por muerto, que llega desesperado pero sólo encuentra un saludo estupefacto pero no amistoso. Abri mis ojos a al lugar en el que alguna vez vivi y entonces vi todo tan distinto, tan chico, tan ajeno a mi. Vi las cosas distantes , algo que yo había perdido, entonces me di cuenta que esta sensación gélida en mi pecho no era mas que un aviso, un advertencia a las maravillas del mundo, que giro sin mi, me engaño y me quito lo que una vez tuve y no pude ver. Empezaron a brotar las lagrimas en mi rostro que con el ambiente gélido se congelaban al momento de nacer pegandose a mi carne, castigandola con un ardor que era agradable para la memoria, como si fuera un algo auto impuesto o necesario. Pues buscando lo que nunca pude encontrar, me perdí, tanto que ya no encontre nada en el lugar donde fui concebido; lo que alguna vez fue mi hogar y me convertí en un errante. Porque el mundo ya había decidido, como yo alguna vez, girar sin mi.

Poetoftheshadow

[jcplana]

El trueno y el oleaje.

El trueno y el oleaje. El ruido de la ciudad comparte clasificación con el silencio. ____ © Protegido.

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Albert Sans - Los espíritus malignos.

Los espíritus malignos. Los mayores observaron durante varias noches de un estío, desde lejos, las sombras en la cueva inciertamente iluminada. Se reunieron en asamblea y los rollos recién escritos enunciaron que los pecados de quienes poblaban la aldea habían atraído a los espíritus malignos y cómo se habría de proceder para alejar su presencia y su influencia. En el templo fue la aldea…

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Albert Sans - La puerta.

La puerta.  La casa tuvo otros moradores tras el fallecimiento de la mujer. Fue la puerta la justificación. Lo que aparentaba ser una puerta, pues no había abertura en el muro. Un marco sobre el ladrillo, un armazón de madera, un tirador, sin goznes, sin cerradura. El prado del otro lado. Nada en el plano original de la casa, ninguna remodelación.  Una factura apareció que reflejaba tal labor…

[jcplana]

Memoria de polen y brisa - Nueva obra del escritor Albert Sans en bubok.es.

Nueva obra del escritor Albert Sans:

Memoria de polen y brisa.

Descarga segura y gratuita en el síguiente enlace:

Memoria de polen y brisa en bubok.es.