#La Gata Borracha
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Para mi la vida no es ordenada, coordinada, planificada ni calculada, son inventos nuestros. Justamente en esa invención creo que gastamos nuestras fuerzas para dominar al caos, que es más fuerte. Imposible dominar al universo, pero mi idea es que nos esforzamos en por lo menos dominar la chacra que nos pertenece, nuestro territorio de influencia. Hasta donde llegamos ordenamos, coordinamos, planificamos, calculamos. Es la burbuja que fabricamos para fingir demencia: Mientras agendamos todo con pulcritud se larga a llover y cancelamos. Mientras ordenamos todo en su justo sitio una inundación nos obliga a escapar de nuestros hogares. Mientras calculamos nuestra jubilación nos despiden. Mientras planificamos el futuro nos pegan un tiro. Claro que con (por ejemplo) respaldo económico familiar, guardia privada y viviendo en un barrio con perímetro de seguridad, la burbuja es más fuerte. “Civilización” es por un lado un conjunto de ventajas para quienes tienen privilegios, y para el resto un filtro roto por donde se cuelan todas las catástrofes posibles, completamente indiferentes a tu esfuerzo, estudios o dedicación. Sobrevivo administrando mis fuerzas. Como le dije a Flor el otro día cuando me preguntó cómo estaba: “tuve una semana irregular anímicamente pero nada que no se solucione escribiendo toda la tarde, escuchando música toda la noche y viendo series toda la madrugada”. ¿Viste cuando hay algo muy pesado que no podés mover, pero si aplicás palanca entonces sí? Con lo anímico creo que a veces sucede lo mismo. Tal vez no pueda conseguir trabajo, ni mantener mi vaso con whisky siempre que quiera, ni pagar la casa donde vivo, ni descubrir la enfermedad de mi gata a tiempo para salvarla. Pero mientras pueda escribir, escuchar música, ver series y películas, mientras Nita me mande reels que solo a ella y a mi nos causan gracia, Joe me escriba borracha, Ale sobreviva a su embarazo y Flor me pregunte como estoy cada vez que hablamos, puedo hacer palanca y mover cualquier montaña de mierda.

Acostumbradoalfindelmundolandia: linktr.ee/acostumbradoalfindelmundo
#acostumbrado al fin del mundo#vida#existencia#vivir#vinculos#fuerza#fuerzas#caos#universo#ordenar#coordinar#planificar#calcular#civilizacion#privilegios#catastrofes#peso#palanca#nita#joe#ale#flor
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Capítulo 120 - CLHIDCSC
Capítulo 120 (Epílogo) – CLHIDCSC Laritte, que estaba borracha de la Fiesta Imperial, regresó a la residencia del Ducado. Ian se bajó del deslumbrante carruaje y la escoltó. Aterrizando suavemente en el camino que se extendía hacia la mansión, parecía una niña traviesa. Los empleados y caballeros que vinieron a recibir al Duque y la Duquesa encontraron la sonrisa de Laritte ligeramente burlesca. Pensaron al unísono. ‘¡Está borracha!’ A la señora no parecía gustarle el alcohol, entonces, ¿qué pasaba? No sabían que Laritte continuó bebiendo el fuerte vino que ella pensaba que era una bebida ligera, aunque eso hizo sonreír a todos. ‘Ella era tan linda, ¿qué podemos hacer...?’ “Ojalá tuviera un niño tan encantador. Si el miembro más joven de los Caballeros regresara repentinamente a su ciudad natal y tuviera que cortar leña durante tres días, definitivamente compraría algunos pastelitos y me iría a casa.” (Caballero) Dijo casualmente el caballero con una gruesa túnica de cuero. El caballero que estaba a su lado trató de burlarse de él: “¿Primero revisa tu temperamento antes de querer un hijo así?” La doncella Alice puso un chal sobre los delgados hombros de Laritte, diciendo que hacía frío porque era el comienzo del amanecer de primavera. Ava, que había criado a Ian desde la infancia, lo culpó mirándolo fijamente. “Mientras la señora estaba así, ¿qué hizo el Duque?” (Ava) “No seas demasiado duro conmigo. Ella es linda. Además, la niñera no sabe cuántas cosas pasaron en la fiesta.” “Ese anillo de flores en el dedo anular de la mano izquierda… ¡De ninguna manera!” (Ava) Ante esas palabras, los empleados rodearon a Ian y Laritte y los saludaron con una palabra. Un ambiente familiar y sin malas intenciones calentaba el frío amanecer de primavera. A través de un hueco, Laritte vio una mansión magníficamente construida al final del camino. Sus ojos, o tal vez la mansión, brillaba como estrellas. “Esta es mi hogar, Ian.” (Laritte) Laritte pronunció otra palabra que impresionó a Ian. Un arbusto cuadrado bellamente decorado por un jardinero. Un sendero que conduce al jardín. El sonido de un arroyo estrecho con peces nadando. Una mansión blanca parecida a un castillo mantenida sólo por unas pocas docenas de empleados. Laritte corrió con fuerza hacia la mansión, incluso con zapatos altos Mary Jane*. (N/T: *Un estilo de zapato con taco grueso y pasador en el empeine.) La doncella, o los vasallos, cumpliendo con su deber en el pasillo, reían y hablaban. No había nadie que frunciera el ceño ante el hecho de que la señora estuviera actuando como un bebé. “El olor a licor… ¡Dios mío! Señora, ¡debe haberlo pasado bien!” (Vasallo 1) “Hoho, ¿dónde se divirtió tanto?” (Vasallo 2) Su expresión feliz prevaleció. “Ahora que estoy en casa, tengo que saludar a mi hija.” (Laritte) Naturalmente, sólo había un gato, Lavigenice, al que Laritte llamaba así. En su habitación, un gato de pelo blanco con ojos como joyas daba vueltas sobre la cama. Cuando la puerta se abrió de golpe con un ruido sordo, Lavigenice… Mariposa se despertó sorprendida. “Nuestra encantadora Mariposa. Mamá está aquí.” (Laritte) En lugar de expresar alegría porque finalmente había llegado la persona que había estado esperando, Mariposa acurrucó su cuerpo sobre la seda. Su cola se agitó salvajemente como si sintiera una atmósfera extraña. ‘¿Qué le pasa a mamá? ¿Ella no es el tipo de persona que puede reírse así?’ – La gata tenía esa mirada. A Laritte no le importó, se arrodilló en la alfombra debajo de la cama y abrazó a Mariposa. Ian, que la siguió, quedó atónito y contuvo la risa. “Pffff.” Vio a Mariposa sentada en la cama, apenas metiendo la cara entre los hombros de Laritte. “Miauuuu. Miauuu…” La expresión del rostro de Mariposa estaba llena de insatisfacción. Si esto sucediera con Ian, el segundo favorito de Mariposa, lo eliminaría. Laritte también notó la presencia de Ian, abrazó a Mariposa y giró su cuerpo hacia él. “Mariposa, si eres una buena niña, también deberías saludar a papá. Saludemos a papá, que gana mucho dinero, para ganar más dinero en el futuro.” (Laritte) “Miauuu.” “Papá, hola. Dame mucho dinero. Por favor dame un collar. Los anillos están bien, pero no pueden ser falsos como el anillo que le diste a mamá.” (Laritte) Laritte agitó la pata de Mariposa de aspecto hosco. “Sí. Tomo el saludo. Ya es suficiente, ¿no dejarás ir a Mariposa?” - Ian intentó detener a Laritte por el bien de Mariposa, pero... El problema era que, en estado de ebriedad, Laritte seguía repitiendo las mismas palabras. Ella puso la expresión ‘¿qué? No acabo de hacer eso’ y vio a Mariposa en su mano. Entonces vio a Ian parado frente a ella. Él pensó. – ‘Por favor no.’ “…Deberías saludar a papá, Mariposa. Papá, ¿has vuelto?” (Laritte) “De… detente…” “Mariposa. Di que él…” (Laritte) Ian se agachó y contuvo la risa. Esto lo estaba volviendo loco. “Vamos a decir hola.” (Laritte) Mariposa perseveró hasta el final, incluso cuando su expresión se volvió cada vez más sombría a medida que Laritte la molestaba. Ian agarró suavemente el hombro de Laritte. No podían seguir repitiendo esta situación. “Vamos, Laritte. Me acabas de saludar con Mariposa. ¿Qué vas a hacer ahora?” Ahora que ella había agotado su energía luego de viajar un largo camino, era hora de detener todo hoy. Ian esperaba la respuesta de Laritte de que ahora dormiría. “…Tienes razón. También debería saludar a Bertrand.” (Laritte) Bertrand, el caballo favorito de Laritte, también era como su hijo. Le dio las gracias a Ian, pensando que él le había hecho recordar a Bertrand. Ian se dio una palmada en la frente, pensando que esa respuesta podría llegar. * * * Los emocionados pasos de Laritte se dirigieron hacia el establo esta vez. El establo estaba en el lado opuesto de la puerta principal de la residencia del Ducado, por lo que el atajo era por la pequeña puerta trasera de la mansión. Laritte entró a la habitación utilizada como almacén con Ian para pasar por la puerta trasera. Furtivamente, como un explorador explorando un mundo desconocido. Ian movió sus pies con cuidado, siguiendo a Laritte. Y, en el momento en que estaban a punto de volver a salir por la puerta del otro lado... Laritte, que estaba al frente, frunció ligeramente el ceño. “... ¿No hueles los establos?” (Laritte) “De ninguna manera.” El olor del establo no era algo que pudiera sentir una persona común y corriente. Fue porque tuvieron que caminar unos minutos después de salir de la mansión para llegar a la puerta de madera del establo. Además, Tom, el cuidador del establo, era un joven sincero que hacía lo mejor que podía. El establo se limpiaba cinco veces al día, por lo que el interior siempre estaba en buenas condiciones. Ian, que tiene sus cinco sentidos sensibles, todavía sentía sólo el aroma fresco de las flores en la mansión. “¿Estás diciendo que puedes oler los caballos?” Aunque estaba claro que Laritte estaba equivocada, Ian preguntó fielmente. Eran los únicos en esta pequeña habitación, por lo que no podía confirmarlo con nadie más. “Mi buen Bertrand… Ni siquiera puede salir en todo el día, siempre ahí… en ese lugar maloliente. Debería haberlo llevado a caminar.” (Laritte) Como referencia, Bertrand disfrutó de una vida placentera dando un paseo en un terreno baldío exclusivo a horas regulares todos los días. Una sola lágrima cayó sobre las pálidas mejillas de Laritte. De repente se puso muy, muy triste. “Debería haberlo llevado a caminar…” (Laritte) Las cejas rectas del caballo blanco dominaban la cabeza de Laritte. Sus lágrimas aumentaron gradualmente en número y, finalmente, lloró profusamente. ‘Es realmente Laritte... ¿Cómo puede llorar así sin una expresión?’ Ian estaba triste porque ella estaba triste, pero esta situación era divertida y, al final, fue tan divertida que se echó a reír. Mordiéndose desesperadamente el labio inferior para no ofender a Laritte. Intentó controlar sus emociones mirando los estantes de la pequeña habitación y contando el número de viales. Laritte ya estaba mirando fijamente. “Ni siquiera puedes sentir el dolor de Bertrand. ¿Cómo puede ser esto gracioso? Eres un delincuente. Eres como un psicópata sin la capacidad de empatizar con lo que estaba en la portada del periódico.” (Laritte) “Lo, lo siento… Jajaja. Ups.” “Bertrand…” (Laritte) Ian no podía soportar el sentimiento de simpatía que le subía hasta la punta de su cuello. De alguna manera tenía que deshacerse de este sentimiento. Al momento siguiente, tomó suavemente la mano de Laritte, que refunfuñaba golpeándole el pecho. Entonces… “¿Ian?” (Laritte) Con la pregunta de Laritte, su boca tocó su mejilla. Lágrimas transparentes tocaron su labio inferior. Ian se alejó por un momento, secándose las lágrimas que habían corrido por su rostro. Sus ojos enrojecidos llenaron los ojos de Ian. – ‘Realmente parece un conejo.’ “¿Disculpa, esposa?” Antes de que ella pudiera decir algo, él volvió a bajar su amplio torso. Le pidió a Laritte que tomara sus manos y las escondiera detrás de su espalda. Sus cálidos alientos tocaron los rostros del otro. El corazón de Laritte latía rápido, incluso cuando su espíritu revoloteaba por la borrachera. Sin embargo, a diferencia de ella, que no se daba cuenta, este hombre, que estaba lleno de emociones limitadas a ella, estaba lleno de entusiasmo. Ian sintió que la situación era realmente de mal humor. Besar a alguien que lloraba por los olores del establo. Quizás sean la pareja más inusual entre los nobles de la ciudad. ‘Incluso cuando estaba completamente preparado para un beso, fallé y resultó así.’ Aunque estuvo bien. Su gran mano rodeó la parte posterior de la cabeza de Laritte. Tenía miedo de que su cabeza golpeara el estante. En poco tiempo, la parte superior del cuerpo de Ian descendió más profundamente. Dos labios calientes se cruzaron como leña ardiendo en una chimenea. Dos cuerpos se tocaron. “...” “...” Laritte, completamente sumergida en el enorme cuerpo de Ian, parpadeó y cerró sus ojos de conejo. Quería decir: ‘Ambos estábamos haciendo ruidos extraños. ¿Por qué es esto?’ pero no pudo porque estaba completamente asfixiada. Más tarde, cuando Ian escuchó lo que ella quería decir, pensó: ‘Me alegro de haber tapado su boca.’ * * * Poco después, Laritte fue a los establos y se disculpó con Bertrand durante una hora. Las lágrimas inexpresivas podrían haber llenado un balde. La historia detrás de esto hizo que Ian casi muriera al contener la risa nuevamente. •❅──────✧❅✦❅✧──────❅• < Fin – Historia Principal > Nameless: Estimados lectores(as) hemos terminado la historia principal de ‘Cuando la hija ilegitima del conde se casa’, estarían pendientes los extras que son 18 y los estaré publicando a partir de la próxima semana (todos los Lunes). Espero que disfruten este dulce final. Atrás Novelas Menú Siguiente Read the full article
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QUIERO ESTAR SOLTERA, PERO CONTIGO
Quiero estar soltera contigo.
Quiero que vayas a tomarte una cerveza con tus amigos, para que al día siguiente tengas resaca y me pidas que vaya a verte porque te apetece tenerme entre tus brazos y que nos acurruquemos. Quiero que hablemos en la cama por la mañana de todo tipo de cosas, pero algunas veces por la tarde; quiero que cada uno haga lo que quiera durante el día.
Quiero que me hables sobre las noches que sales con tus amigos. Que me digas que había una chica en el bar que te ponía ojitos. Quiero que me mandes mensajes cuando estés borracho con tus amigos para que me digas chorradas, sólo para que puedas estar seguro de que yo también estoy pensando en ti.
Quiero que nos riamos mientras hacemos el amor. Que empecemos a reírnos porque estamos probando cosas nuevas y no tienen sentido. Quiero que estemos con nuestros amigos, para que me cojas de la mano y me lleves a otra habitación porque ya no puedes aguantarte más y tienes ganas de hacerme el amor ahí mismo. Quiero intentar permanecer en silencio porque hay gente y nos pueden oír.
Quiero comer contigo, que me hagas hablar sobre mí misma y que tú hables sobre ti. Quiero que discutamos sobre cuál es mejor, la costa norte o la costa sur, el barrio occidental o el oriental. Quiero imaginar el apartamento de nuestros sueños, aun sabiendo que probablemente nunca vivamos juntos. Quiero que me cuentes tus planes, esos que no tienen ni pies ni cabeza. Quiero sorprenderme diciendo: "Coge tu pasaporte, que nos vamos".
Quiero tener miedo contigo. Hacer cosas que no haría con nadie más, porque contigo me siento segura. Volver a casa muy borracha después de una buena noche con amigos. Para que me cojas la cara, me beses, me uses como tu cojín y me abraces muy fuerte por la noche.
Quiero que tengas tu vida, para que decidas irte de viaje unas semanas por puro capricho. Para que me dejes aquí, sola y aburrida, deseando que salte tu carita en Facebook diciéndome "hola".
No quiero que siempre me invites a tus juergas, y no quiero invitarte siempre a las mías. Así, al día siguiente puedo contarte cómo fue la noche y tú puedes contarme la tuya.
Quiero algo que sea simple y, a la vez, complicado. Algo que haga que, a menudo, me haga preguntas a mí misma, pero que, en el momento que esté contigo en la misma habitación, desaparezcan todas las dudas. Quiero que pienses que soy guapa, que estés orgulloso de decir que estamos juntos.
Quiero que me digas te quiero y, sobre todo, poder decírtelo yo a ti. Quiero que me dejes andar por delante de ti para que puedas ver cómo se mueve mi culo de lado a lado. Para que me dejes arañar tu espalda con mis uñas de gata.
Quiero hacer planes sin saber si al final los realizaremos. Estar en una relación clara. Quiero ser esa amiga con la que adoras quedar. Quiero que sigas teniendo el deseo de tontear con otras chicas pero que me busques a mí para terminar la noche juntos. Porque quiero ir contigo a casa.
Quiero ser esa a la que le haces el amor y después te quedas dormido. La que te deja en paz cuando estás trabajando y a la que le encanta cuando te pierdes en tu mundo de música. Quiero tener vida de soltera contigo. Porque nuestra vida de pareja sería igual que nuestras vidas de solteros de ahora, pero juntos.
Un día, te encontraré.
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PARTE UNO:
Me despierto una hora antes que el despertador. Puteo. Necesitaba esa hora extra. No quiero comenzar el día aún. Este día. EL DÍA.
Agarro el teléfono casi por inercia. Maldita costumbre. No es sana. Lo desbloqueo. El Facebook está abierto y lo primero que veo es a ÉL. Su cara. Su sonrisa burlona. Yo le saqué esa foto. Fue en su cumpleaños. (“Me hiciste pasar vergüenza toda la noche. Todos te miraban con cara de orto por las boludeces que dijiste. ¿Tan borracha podés ser? ““Pero si tomamos todos y yo no tomé tanto” “Sí, más que el resto. Pero bueno, si vos querés que la gente te vea así. Por eso mi amigo no te banca. Se te re notó que seguro te querés coger a mi otro amigo. Mucha sonrisita. Y tu amiga se fue re enojada con vos. Las caras que ponía a tus espaldas. Le cayó re mal todo lo que dijiste. Yo te lo remarco por vos.”).
La palabra VIOLADOR está escrita sobre su cabeza. PEDÓFILO es la otra. Me empieza a doler la cabeza y trato de no llorar. (Fue en esta cama. En MI cama. Acá donde estoy acostada. Siento su respiración en mi nuca).
Las gatas me piden comida. Las perras quieren salir. Me levanto. Les doy de comer. Abro la puerta. Las perras salen. Los gatos de afuera me lloran. También tienen hambre. “Los machos afuera”, pienso. Y me da bronca. Ellos no tienen la culpa. Pero les pongo poquita comida. No me alcanza para darle un puñado entero a cada uno.
Reviso los zapallos. Algunos están grandes, pero aún verdes. Otros recién asomando. Les pido que se apuren. Los necesito. Pero no los puedo apurar. Todo a su tiempo.
Entro. Elijo la ropa para hoy. Vestido negro. Una bombacha que de lo vieja está llena de agujeros, pero bueno. No hay plata para nuevas. Un corpiño. Los odio, pero si no lo uso, me duelen las tetas. Mi habitación es un asco, lo sé. Pero no quiero estar acá ni un minuto más de lo necesario. Un short viejo. Mi camisa favorita. Tiene verde. Justo para hoy. Me la regaló él. (“Te dije que acá iba a haber ropa para gordas. ¿Ves? Bah, no sé. Capaz que ni te prende. Eso que es el talle más grande”). Me empiezo a vestir rápido y luego recuerdo que me quería bañar primero. Me saco todo. Me pongo el vestido de anoche. Un solero de bambula. También verde. Ése no me lo regaló él.
“Debería pasar el trapo”, recuerdo. Así que hago eso. No me gusta. No lo hago bien (“Sos tan inútil para limpiar. Menos mal que yo te hago el favor. ¡Dejá! Para limpiar así, ni limpies. Para eso estoy yo. ¿Ves cómo te cuido? Sos una desagradecida. Yo hago todo por vos”).
Ahora sí, entro al baño (el baño en el que el viernes DESPUÉS me puse a temblar llorando luego de que ÉL me enviara un texto con la palabra “yendo”, mientras me arrancaba los pelos y me rasguñaba los brazos, gritándole a nadie:”No quiero que venga. No quiero que venga. ¡NO QUIERO QUE VENGA!”). Ya casi no pongo música al ducharme. No sé por qué. Solía ser mi costumbre. Me olvido ahora, qué sé yo.
Suena la alarma. La apago. Otra vez reniego de la hora que perdí. Aunque algo hice.
-Por lo menos me pude levantar de la cama-, le comento al baño. Escucho a la gata que me responde. Su gata. Pero no me responde en realidad. Quiere tomar agua de la canilla. Es una mañera. Le abro la canilla para que tome. La acaricio. Cuando termina, me pide salir. Le abro la puerta y sale. Me tiene adiestrada. Como él me tenía.
“¡Basta!”, pienso. De nada sirve.
Me desnudo. No me miro. No me gusto para nada, pero no hago nada al respecto. No tengo la energía para hacerlo.
Mientras espero que salga el agua caliente, me depilo el rostro con la pincita (“¡Qué raro que te depiles! Para mí no lo hacés. No sé, fijate vos quién estarás buscando que te mire tan de cerca. Igual se te nota el bigote jajajaja. Yo te amo igual.”).
Entro a la ducha rogando que aunque sea quede un poquito de acondicionador. No tengo plata para más y mi pelo ya está pajoso. Uso el poquito jabón que queda. Al lado de mi cabeza, la ventanita del baño (El sábado DESPUÉS, se asomó por ahí para hablarme mientras me bañaba antes de ir a la feria, porque no quería que lo escuche mi prima. “La nena no quiere ir al cumple del hermano. Así que no la voy a llevar. Dice que se quiere ir con vos porque la pasa mejor y te quiere. Yo las espero acá.” “Pero si ya estaba lista y hasta le hizo un dibujo.” “Dice que ahora no quiere ir. Pero bueno, si vos no la querés llevar… ¿Le digo que no te puede acompañar?”).
Apoyo la cabeza contra la pared y lloro.
Y lloro.
Y lloro un poco más.
Ruego a la nada misma que mi hija no me oiga.
Me descargo todo lo más que puedo. Siento que me ahogo. Tengo miedo. Siento vergüenza y pavor. El dolor es insoportable.
Lloro.
Y lloro.
Y lloro un poco más.
Entonces se me viene a la cabeza una frase que leí una vez:
Ser adulto responsable es llorar en la ducha para ahorrar tiempo.
Me saco una sonrisa y dejo de llorar.
Termino de bañarme. Me seco. Me acomodo los rulos. (“Cuando yo te conocí tenías el pelo planchado. ¡Cómo me la pusiste! Encima más flaquita. Igual yo te amo así. Vos quedate como quieras.”).
Voy a mi habitación. Tiro el vestido en la pila gigante de ropa sucia. El lavarropas se rompió y no hay plata para arreglarlo. Comienzo a vestirme. La bombacha rosa rota, el corpiño violeta, el short gris viejo, el vestido negro. Me siento en la cama. “Maldita cama”, pienso. Me pongo las medias blancas y las zapatillas que me regaló mi prima. Todavía no me pongo la camisa. Salgo de la bendita habitación de una vez por todas. Quiero vomitar.
No lo hago.
Voy a despertar a mi hija. Ya está despierta y con su teléfono en la mano. Qué raro. Le doy muchos besos. Es el amor de mi vida. Sus cachetes de puré. La amo tanto.
Levanto la persiana para que entre la luz y miro los dibujos pegados en la pared. Ya quedan pocos espacios vacíos. Su talento para el dibujo me asombra cada día más. Escucho a mi gata entrar maullando y cazando un bichito. Una vez que se lo come, va a la cama con mi nena.
-A las 9 te tengo que llevar a la casa de tu amiga. ¿Vas a querer desayunar antes?
-No, mamá. Gracias- contesta, con una sonrisa en su rostro. Es tan dulce. Hasta sus expresiones más automáticas me llenan de orgullo.
Voy a la cocina. Pongo la pava. Mientras tanto hago el engrudo. Nunca hice. Al menos no lo recuerdo. Tal vez para alguna tarea del jardín, pero fue hace tanto. Uso la licuadora porque se me arman muchos grumos. Lo pongo una botella. Busco la brocha. Va todo en la mochila.
“No me tengo que olvidar de los papeles”, pienso. En la carpeta están todos. La denuncia. El original de la notificación para el comisario. La perimetral (Lo vi pasar dos veces frente al Juzgado mientras esperaba a que decidan si otorgármela. El empleado de la Mesa de Entrada se había equivocado en un número, provocando que demoraran en atenderme. Me puse a gritar de la desesperación. Al empleado le temblaban las manos. Me la otorgaron para ese mismo día).
Me hago un té. Quiero café, pero no tengo. Así que me conformo. Recuerdo que es un día largo. Me caliento el poquito arroz que quedó de anoche y lo como junto con el té. (El último tiempo en el que ÉL estaba acá, mi café del desayuno era 50% alcohol. No soportaba la vida de otra manera. Mi cabeza no me funcionaba ya. Todo eran gritos, reclamos y culpa. Si estaba borracha y callada, él se quedaba tranquilo. Sabía que no iba a salir de mi casa así. Y eso le gustaba).
@locura-de-palomas
PARTE DOS
#Locura de Palomas#relato personal#tw#violencia de genero#violacion conyugal#ni una menos#feminismo#mi relato#me pasó a mi#esta es mi terapia#voy a publicar por partes
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Qué raras se sienten algunas madrugadas! Cuántos recuerdos!
Pareciera que se abriera una ventana a la melancolía. Si quizás tomé algunos tragos. Y tengo algunos aromas a perfumes ajenos. Tal vez algunos besos escurridizos.
Me pongo a meditar las paredes que me rodean. Lo que escuchan y ven. Pinturas, charlas.
Alguna vez me escucharon decir que amaba a alguien. Me vieron llorar por ese mismo. Hasta también destruida en mi propia miseria. Enterrada en odio. Borracha de odio.
Y hoy todo es diferente. Yo lo soy. Tengo una aptitud impenetrable. Que me acompaña. Me banca.
Yo misma.
La soledad es mi amuleto. Mi arte es la suerte.
Siempre fue fácil refugiarme en lastimarme. En herirme. En buscar razones para destruirme. Era muchísimo mas fácil amar por amar que enfocarme en lo realmente importante. Ésta alma rota.
Ésta alma rota que vagó por todos los rincones oscuros. Que enfrentó la muerte más veces que la vida. Que lloró más bailes que un escenario. Un teatro interminable.
Hasta que entendí. Qué era cuestión de encontrarme. Escucharme.
Había una alarma sonando constantemente.
Era la intuición de bruja loca.
Necesitaba salir de todas esas andanzas.
Satánicas.
No voy a ser frágil y mentir. La realidad es que en los huesos me arde un eterno ácido sabor a corazón roto.
Si... En mil pedazos.
De seguro muchas de mis canciones hablan de esto. Aunque lo oculte. Me disfrace de damisela con fortaleza.
En realidad tengo los sentimientos atados con un nudo duro de cemento. A veces un agua viva se me mete la tripa y duele tanto que saco unas lágrimas.
Acaricio a mis gatas. Escucho canciones. Tengo sexo sin intenciones. Para tapar voces interiores.
Fumo en los sillones, me revuelco en personajes. Entre posiciones me desvanezco. Recuerdo que prefiero disfrutarme sola.
Y me voy volando como un ave fénix.
Total, es mi vida.
Elijo la partida.
#mambos#una chica solitaria#una chica rota#una chica escribiendo#una chica enamorada#chica insegura#desamor#amor
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¿Conoces a ROOS DE VRIES? es una estudiante de EDUCACIÓN en St. Vincent’s College, viene de HAARLEM, HOLANDA y tiene DIECIOCHO AÑOS. Es POSTULANTE de las ÁGUILAS y se le ve bastante entusiasmada con la competencia ya que también es parte del CLUB DE CARIDAD y asiste a todos los eventos escolares.
Nacida en el primer minuto del primer día del doceavo mes en el seno de una familia de economía estable; primogénita y la mayor de tres hermanos, única fémina en la familia además de su madre y una gata blanca de nombre Koekje (galleta, en neerlandés).
Estar al cuidado de sus dos hermanos menores le incitó a inclinarse por la educación, pues a pesar de lo que muchos puedan decir encuentra en la docencia y en el trato con los niños algo relajante y placentero.
Antes de entrar a la Universidad estuvo un tiempo como Au Pair en Alemania, motivo por el cual domina el alemán a la perfección.
Sabe que la casa de las Águilas no sea su mejor opción, dada la personalidad dinámica y enérgica que posee, pero está postulando para la misma como un reto personal. Quiere demostrarse que puede ser un miembro modelo si realmente se lo propone.
En ocasiones consume cantidades exorbitantes de alcohol para una chica de su edad, pero solamente cuando se siente en un buen ambiente y en confianza con su entorno. Borracha pero buena muchacha. A pesar de provenir de un lugar donde el consumo del cannabis no está penado nunca ha probado la hierva, no es algo que llame su atención.
Pansexual, aunque la gente diga que ese término no existe.
Tiene un oso de peluche con el que siempre duerme, es uno de sus más preciados tesoros.
Es la friend mom que ninguno de sus amigos necesita.
A puppy ™
Looks like a cinnamon roll and is actually a cinnamon roll.
DESEOS
Ser parte de las Águilas, obviamente.
Waffles.
Poder desarrollarse como educadora en países donde el acceso a a educación no sea tan sencillo para toda la población. Quiere ayudar a los que menos posibilidades tengan.
Un mejor amigo, se siente sola en la vida.
#stvncts:intro#c:águilas#mañana roleo con esta señorita; lo prometo#me voy a dormir que ustedes no saben lo complicado que es mi día de mañana
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§ 2.640 El luchador (Darren Aronofsky, 2008)

Siempre he tenido a Mickey Rourke como un actor mediocre. Y seguramente lo sea, pero en esta película da un tono bastante razonable y adecuado. Derrota, alcohol, enfermedades, oportunidades perdidas, un pasado mejor, ningún futuro, remordimientos, mala conciencias, pobreza, marginalidad, drogas... En realidad Rourke vivía de esa manera cuando hizo la película. Una especie de "enfant terrible" de la industria, mitad un juguete roto, mitad un héroe caído. Su aspecto físico, sus tatuajes, la ropa que lleva, todo concuerda para llevar a buen puerto un papel difícil y comprometido. Pues todo eso y algo más es el "bestiario" que aprecias en esta cinta, bastante mejor de lo que, en principio, pudiera parecer. Más que nada porque la última (y única) que he visto de su director "Pi, fe en el caos (1998)" me pareció abracadabrante... directamente una película muy mala. Marisa Tomei tiene ese punto de salvaje gata latina tan atractiva para un tipo de público muy cerrado en sus gustos y sus certezas. Tiene su gracia. Consigue darle un aire de borracha empedernida, entre ángel caído y redentora de almas más que creíble. No la he visto en otro papel tan comprometido como en este.
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Un tesoro
Me cuesta mucho arrancar en las mañanas.
Tengo palabras que no son mías en la cabeza.
Ayer un jugo de mango me tiró a la cama.
Me siento débil, o demasiado sensible, o quizá es esta situación,
Pensé que podía dejar de moverme tanto o a cada rato, y si bien lo logré, hoy debo mudarme de nuevo, y me da entre paja y ganas de tener poderes reales que me hagan pestañear y que mi desorden sólo esté en el nuevo departamento.
Desde que estoy aquí he vivido en nueve lugares, en cuatro barrios. He hecho mi maleta no sé cuántas veces.
Llegué al depa de una pareja mapuche que no estaba, pero no tenían gas ni internet. El amigo que me recibió me ofreció moverme a su depa porque entonces él viajaba a Chile. Lo hice un día que llovía, mi paraguas se dio vuelta en la calle y yo cargaba mis cuarenta kilos sola buscando un taxi. Luego el tipo volvió y tuve que moverme a un hostal que miré solo por internet y era una mierda, mi puerta o no cerraba o se trancaba y todo olía a humedad. Después volví a ese departamento y me moví a la pieza donde viví la mayor parte del 2016 en Villa Crespo, mi barrio favorito, cerca de Palermo y del cementerio, cerca de una estación de tren, frente a un parque. Igual ese año fui a Lima y a Oaxaca y no me atrevería a decir que todo fue tan malo, pero sí todo fue difícil. Hubo un momento en que sólo empecé a salir sola y sin miedo porque no había otra forma de salir. Además esta ciudad es demasiado segura. Y los colectivos pasan toda la noche, y eso es lo que más voy a extrañar.
Cuando volví ese año a Santiago de visita ya noté que estaba más loca. Demasiado tiempo conmigo misma leyendo. Me corté todo el rubio que me quedaba de pelo y resolví mi soledad diciendo que había lugares del mundo donde estaba menos sola, como ese. Fue un verano de amigos y citas, además estaba más joven, y lograba moverme por varios escenarios en el mismo día. Me gustaba vagar, un día fui a la casa de mi amigo escritor de quien me enamoré ese verano a tomar chela y fumar pito que hoy por hoy parece ser mi actividad favorita en el mundo. Me extendí en su casa, que es lo que hago siempre, extenderme en las vidas de los otros, hasta que ya era tarde o yo ya estaba aburrida de escucharlo hablar y solo me paré a su lado y le dije dame un beso, a lo que él dijo que tenía polola, que estaba enamorado y yo le dije estar enamorado, qué bonito debe ser.
Me fui altiro y como estaba borracha fui a buscar a otro loco que me gustaba, que trabajaba en una botillería. Lo esperé hasta el cierre y a regañadientes él aceptó fumarse un pito conmigo en la calle, pero estaba demasiado deprimido porque su papá se había muerto y terminamos hablando de eso y del amor, un sentimiento que para él ya era extraño e insignificante.
No importa, hubo noches mejores, y ese verano hubiera sido el segundo mejor si no se hubiera muerto el papá del Leo, mi mejor amigo, el hombre que yo amo. Fue demasiado triste y demasiado inesperado y ocurrió apenas llegamos de un paseo a la playa que sólo fue bueno. Hacía demasiado calor y ese día él solo ganó la corona del que más sufre, un premio que todxs lxs niñxs chilenxs disputan cuando se quejan de sus tristes vidas, pero que en realidad nadie quiere tener.
Volví a Buenos Aires, me caí en la calle el primer día. Ese verano viví con una brasileña loca y depresiva pero buena persona. Trabajaba en un call center y tenía un gato que comía mejor que ella. Ella comía una mezcla de arroz con carne molida todos los días. Además para cocinar solo teníamos un horno eléctrico. Ese verano solucioné mi vida con un amante, que con la distancia me parece lo más similar que tuve en ese tiempo a una pareja, aunque ni siquiera terminamos, un día solo me fui de su casa y luego no volví.
Él era músico pero vendía helados y le gustaba Bjork.
En marzo me moví a un departamento de una mujer que estaba en Francia o Italia sin fecha de regreso. Había una gata llena de pulgas. Ese mes tuve que decidir si vivir con alguien o vivir sola, y luego de estar sola vi lo difícil que era ser persona cuando nadie estaba cerca para mirarte, sobre todo si tu actividad se limita a leer y a escribir.
Un día el Pelayo me fue a ver porque estaba en la ciudad grabando una película. Llegó con caña y una bolsa del burger king y nos dedicamos a tomar cerveza. Se supone que teníamos que conversar de nuestro proyecto pero no lo hicimos. Al día siguiente me junté con un ex que también andaba en la ciudad pero solo me fumé tres cigarros con él en una plaza y lo despaché porque quizá ahí decidí que me interesaba la gente que estaba en mi vida en el presente y no la que había estado en el pasado, aunque me cueste.
En abril me mudé al departamento de río de janeiro que ocupé hasta este mes, aunque ya me fui virtualmente de ahí. Siguen mis cosas, pero yo ya no estoy. Y vi que omití de toda esta historia a mi ex amiga, mi ex mujer, mi ex compañera de casa con quien todo simplemente se derrumbó. Hace dos días nos juntamos a hablar los términos de nuestro divorcio en un café cerca del congreso y fue raro verla así, fuera de ese espacio viciado en el que se convirtió nuestra casa. Me dio un poco de pena, me dieron ganas de preguntarle cómo estaba, me dieron ganas de ser su amiga. Pero ya no somos amigas y hay cosas que simplemente no se pueden forzar.
Se llama Lais, es de Curitiba, y como soy ridícula ahora todo lo que tiene que ver con Brasil me produce entre tristeza y rechazo. Creo que aún no estoy preparada para hablar de ella.
Pero soy un gato, o un ángel como me dijo la semana pasada mi amigo nuevo cuando llegamos al único bar que seguía abierto a las 3 am. Entonces nunca llego al escenario de mi miseria, o lo soluciono antes. Voy a vivir con el que fue mi mejor amigo en la universidad, que ahora trabaja en Buenos Aires. Voy a ser un apéndice de su vida, el gato de la casa, o simplemente la mujer, un papel que me viene bien. ¿Sabes cómo sé que tengo tristeza? Porque no me dan ganas de cocinar ni de comer. Y me encanta cocinar, es mi forma de demostrar cariño y ganas de vivir. Ahora solo he podido hacer fideos o echar en un sartén las verduras picadas que venden en la verdu. Sé que voy a estar mejor, porque al final nunca me encerré, sino que salí, salí, salí. Fui una vagabunda, aunque ya lo frené porque también tengo que sentarme a escribir. Nunca seré la mejor estudiante porque convierto mis cuadernos en diarios de vida, y todos mis diarios de vida son cartas de amor. Yo también tengo algo así como una pareja, pero vive en Conce y nos queremos a distancia, que me pregunto si es realmente una forma de querer o qué. Seguro lo es, y en verdad ahora es lo más cómodo para mí. No tengo espacio para el amor, o no tengo espacio para sufrir por amor, o por amores nuevos. Debe ser triste dejar a una pareja, a mis últimas dos parejas no las dejé, solo me fui. Primero de Chile, luego de una casa. Es difícil no ser mala, hace poco le dije a mi madre: en el amor o someto o me someten. Ahora someto, soy la tirana, solo porque cuando alquien te quiere se ilumina un altar que es difícil no ocupar. Y yo lo ocupo. O quizá sólo me divierto. He sentido deseos de ser ameba y no provocar nada en nadie, los sentimientos siempre terminan siendo un problema, y lo digo porque tengo demasiados y toda mi vida la vivo de forma emocional. Mi novia quiere que sufra por ella, pero sólo sufro por una mujer que fue mi amiga y ya no lo es. Ella es el único conflicto actual de mi vida, y me tiene consultándolo todo, porque hasta ahora las relaciones tormentosas siempre habían sido patrimonio de los hombres, de yo y los hombres. Ahora me dan ganas de acostarme con un hombre para sentir seguridad. Pero la verdad no tengo tiempo, no tengo ánimo de invitar a alguien a salir, aunque quizá sólo me falta estar borracha de madrugada y con el celular en la mano.
Ahora estoy viviendo y durmiendo con mi amigo. A partir de septiembre viviremos en un hermoso departamento en Recoleta. Creo que al final la vida me dedicará una sonrisa, pero me cuesta tanto vivir el presente, abrir los ojos, mirar otra cosa que no sea mi cara en el espejo. Escribir algo que no sea triste.
Igual no puedo negarte que este mes la he pasado increíblemente bien. Es así, ¿no crees? No puedes reconocer la felicidad si no tienes el sufrimiento.
Voy a guardar este saber como un tesoro.
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Me diagnosticaron ansiedad a los 9 años xd
Imaginate siento que nací con ansiedad
Desde que tengo memoria me he mordido los labios y los dedos hasta que me sangran o se me infectan. Me pregunto cómo será sentir ansiedad por primera vez? Cómo será vivir ella? ¿Te das cuenta? Tuve ansiedad antes siquiera de aprender a andar en bici o aprenderme las tablas de multiplicar
La depresión crónica me la diagnosticaron a los 15. Pero sospecho por mis diarios y escritos de antes que debí haber caído en depresión como desde los 9 o 10 años cuando empezaron los abusos sexuales de Raúl Rodríguez solapados por Citlalli Fernández (padrastro y mi madre)
Llevo mas de un mes sin poder dormir. No soporto verme al espejo la mayoría de los días.
Arturo me ha recibido en su casa hasta que pueda pagarme una. A menudo pienso en mis emociones, en mis trastornos... En cómo no ahogarme en ellos. En cómo apagar mi cabeza para poder ser normal. No puedo y me canso.
Sé que Arturo debe sentir asco de ver como paso todo el día en la cama viendo tiktoks y fotos en ig. Hasta yo me doy asco. Quisiera estar borracha todos los días pero no hay dinero para alcohol y que bueno. Me emborracho de Internet y vidas ajenas. Me emborracho de morras que creí mis amigas haciendo fiestas y cosas lindas sin mí. Me gusta el tiktok porque hace que el día pase rápido. No sientes las horas ahí. Toda la gente se ve tonta. Me gusta guardar recetas de cocina, pienso que un día recuperaré todo y podré preparar latte de lavanda y galletas glaseadas. Extraño mi horno eléctrico, me lo regaló mi amiga Nahuatl. Extraño mis platos y el sarten que me compraron los papás de Ximena. Dejé todo. Salí con mi gata y ropa para la playa, porque fui a la playa por el cumpleaños de mi abuela.
Últimamente que esta de moda el tdah me pregunto si no lo tendré también porque siempre me desvío xd también me pregunto si no tengo estragos sociales por la pandemia. Si antes hablaba demasiado siento que ahora hablo de más. No sé callarme y no es a propósito. Solo las palabras me salen como vómito. Quizá he vuelto a ser esa niña del kinder y la primaria con quien nadie quería jugar por rara o porque siempre estaba enferma. Nunca entendí porque no querían estar conmigo. Siempre apesté. Por no llevar el uniforme completo, por mis papás divorciados, porque mi papá me mandaba despeinada a la escuela, porque sabía muchas cosas raras porque leía y veía documentales, porque Era bonita pero rara.
Me desvíe de nuevo. Siento que he pasado demasiado tiempo sola. En mi cabeza. En las camas.
Mi extra se entrega mañana y no tengo idea ni ganas de hacerlo. ¿Tendré covid? Todo el mundo tiene covid. Sólo quiero acabar la universidad, me tiene harta. Sé que soy más lista que cualquier cosa de la escuela por eso me da hueva pero ahora me siento estúpida. Debí hacer acabado mis créditos hace tres años casi ya. A la madre no mams. Un vergo. La universidad ahora se burla de mí. La escuela. Otra vez, como cuando no podía aprender a dividir en 3o de primaria o cuando hice 10 veces el extra de física en la prepa. No es que no pueda. Es que se hicieron demasiado grandes en mi cabeza y me asusté. Como la depresión y la ansiedad. Como no poder comer.
Poder/querer querer/poder
Veo a las amigas en el instagram. Las veo rapeando, trabajando, viajando... Aferrándose a la vida y me dan ganas de gritarles "ey esperen, no se vayan sin mí. Todavía estoy viva, no he muerto aún. No he cerrado mi feretro, aún puedo jugar con ustedas" pero las veo irse como cuando estás en el torniquete del metro con el boleto atorado y el metro se va.
No es que no me importe nada, es que ya no entiendo nada. Como si todo lo que tenia sentido se hubiera desplomado. Como un castillo de cristal que me dejó suspendida en la nada pegajosa y oscura o líquida y de luz cegadora, depende el día. Siempre abrumadora. Barras, barras.
Busca ayuda. Llama a la línea de prevención del suicidio. En instagram creemos que puedes estar en riesgo y hemos encontrado estos números de apoyo. Lo único que se me antoja es un frasquito de rivotril pa poder dormir. Pero esa mierda ta re cara y sabe rico no? A mí me gustaba como sabía. Siempre me andaban subiendo la dosis y soñaba muchas cosas muy lúcidas y luego yo ya no sabía que era sueño y qué no.
Sólo quiero dormir y caminar y tomar fotos. Mi mamá siempre tira a la basura mis cosas. Pero a mí me gusta recolectar cosas. Siento que son como tesoros de una expedición. La primera vez que me quise suicidar de verdad, Amaranta me dijo que pensara que conocía un extraterrestre y que le recomendara experiencias humanas. Esa lista de recomendaciones era por lo que valía la pena el viaje. A mí me gusta pensar que el extraterrestre soy yo y juntar cositas. Por eso me gustan las fotos, son como recortes del mundo. Como si la vida fuera una revista. La adicción a coleccionar. Además me gusta compartir esas cosas después. Con los amores y las amoras. Les enseño el lobito de felpa que me compró mi papá afuera de juzgados familiares cuando las primeras audiencias para la guardia y custodia. Les enseño el libro que me leía mi abuelo d e niña, los retratos que me hacía Pavel antes de estudiar pintura... Son muchas cosas. Muchas fotos. Mucha vida. Mucho camino y dolor.
Ah sí, un extraterrestre. De ahí viene el "de neptuno" sabían? La mardeneptuno pensó en neptuno por su relación con el mar como su nombre, luego supe que en neptuno los días duran semanas y pensé que no podía ser más adecuado. Siempre he necesitado más tiempo que el resto. O no más, solo mi tiempo es diferente. Mardeneptuno. También hay una historia bonita de eso, ese salvavidas se construyó a la par de un amorcito de prepa que tuve por ahí y él y yo nos inventamos cuentos y planetas. Ahí lo tienen. Un secreto menos.
Me gustaría pensar que si alguien llegó hasta acá es porque escribo chido xd aysi no pues sí llegaron hasta acá que hueva. Su vida y la mía. La suya pa perder tiempo leyendo esta mamada madrugal y la mía porque otra vez estoy mal. ¿Será que peor?
Ah sí, la ayuda. Wey qué me van a decir? Los y las loqueras que me han atendido siempre dicen que soy demasiado inteligente. Demasiado. Para todo. Demasiado para estar tan triste, demasiado para saber que mi mamá no va a cambiar, demasiado blabla
A estas alturas siento que ya hasta me sé reprogramar la choya sola. Sólo que ko alcanzó a salirme de mi cabeza. Necesito un banquito.
A veces pienso que ora sí ya me deschabete porque llevo mucho tiempo en este estado mental de poposeada (k martirio encontrar formas de que el fb no te banee) luego pienso "no ma mija ora sí te me fuistes. No hay pedo, ahí vienes de regreso" pero no regreso banda.
El otro día vi que Arturo ya no quiere estar conmigo. Yo ya sabia eso hace rato pero desde niña aprendí a buscar y encontrar. Y me lo confirmé y me sentí tranquila namas por tener la razón. Hasta se me olvidó que vivo con él y que debería quererme para que funcione que vivo acá. O sea sí me quiere pues, me ama. Solo ya no como novia. Me gusta verlo dormir. Ya sé cómo ronca y todo. A veces me pega dormido, como ahorita. Pero le pegué de vuelta porque me enojé que estoy chillando escribiendo y me interrumpe. Ni se despertó xd ese wey podría tener una guerra al lado y seguir jeton. Dice que es porque creció en una unidad y ahí siempre hay ruido. Me gusta verlo dormir porque parece bebecito. Siempre siento que parece bebecito por su cara pachona. Me gusta verlo dormir porque pienso que así se hubiera visto nuestro bebé dormido si lo hubiéramos tenido. Todo cachetón, todo chiquito y todo panzon.
Y no logro evitar recordar entonces que no tuve un bebé porque todo el mundo dijo que no iba a poder por razones bien tontas la verdad. Pero les creí. La razón más fea fue que porque estoy loca. Que porque tengo tlp, depresión crónica y ansiedad no podía tener un bebé así de la nada. Sino que debía seguir mi terapia y prepararme por años, que tenía que planearlo. Cuando te diagnostican un trastorno como el tlp te dicen que no se cura. Que se trata pero no se cura. Te condenan al estigma, la locura, el rechazo y la incomprensión. Nadie quiere ser nada de la loca que no se calla ni se controla. De la loca que puede dejar de dormir y comer tres días seguidos. Y aparentemente no dormir más de 4 horas diarias por mes y medio amistades, mi récord actual.
A veces pienso en el bebé, le puse Chícharo de cariño aunque era mas chiquito que eso. Pienso en que sería lindo tener un extraterrestre chiquito con quien compartir este viaje extraño. Alguien de adentro que no me tuviera miedo por estar mal de la cabeza. Que no pensara que necesito años de terapia conductual y pastillas para poder ser su mamá. Yo lloré mucho cuando estuve embarazada y siempre sentía que el Chícharo ni se inmutaba. Se acomodaba a bajito de mí, en el tambache. Y ahí se acurrucaba y me abrazaba tranquilo. También me acuerdo cuando mi papá me quiso matar y no tuve miedo ni el chicharin loco porque se puso pesado pesado y las piernas no me temblaron. Tipazo de criatura. Siempre le pido a la diosa que me deje un día encontrarle de nuevo. Cuando yo abandone este cuerpo. Pero pienso en eso, en que quizá ente extraterrestres que nacen de extraterrestres nos entendamos. A veces pienso que el Chícharo sí hubiera querido estar conmigo aunque no fuera yo "normal".
Y vuelvo a pensar ¿qué se sentirá la ansiedad por primera vez? ¿Qué se sentirá que tu cabecita no se pierda? ¿Qué se sentirá no joder relaciones? ¿Qué se sentirá no sentirse al borde de la locura? Me gusta pegarme en la cabeza cuando tengo crisis. Contra las paredes. Fuerte. Me imagino que si me pego muy fuerte se me va a romper el cráneo y me voy a poder escapar. Escapar de mi cabeza. Y cuando siento el dolor y me aturde el golpe es como desconectarme de mí. Ah el alivio. El nombre le queda bien. Una siempre está en el límite. En la borderline de valer verga o salvarte. De estar loquita o arrepentirte de lo que hiciste cuando estabas loquita.
Siempre me da miedo que nadie me quiera. Todos se cansan de esto. Y se van porque pueden no les juzgo. Yo también me iría si pudiera, no me gusta esto que hicieron de mí. No nací así. Me hicieron. Le hicieron los adultos que debieron cuidarme y me abusaron. Me hicieron los hombres violandome desde niña. Me hizo el sistema y sus mil aberraciones. Diana, la última psicóloga, decía que un trastorno de personalidad era como un super poder. Una habilidad extrsnormal del cerebro para protegerse en condiciones extremas de peligro. Decía que no todas las mentes se atreven a la locura para salvarse.
Voy a hundirme hasta tocar fondo. Hasta atravesar el espejo. Hasta que pueda sentir la ansiedad por primera vez.
Siempre he pensado que los extremos se tocan en algún punto. No se puede ir lejos lejos sin llegar al punto de partida eventualmente.
No me da miedo que piensen que estoy loca, creo que voy a ahogarme en esa locura el tiempo necesario hasta que me escupa cuerda o me trague por completo. En cualquiera de los casos no va a importar xd eso me da mucha risa y paz.
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I
No escribo, ya no escribo, ni siquiera sabías porqué escribías. Hace meses que dejé de escribir, el tap tap tap tap tap del teclado retroiluminado ya no va más, ya no existe. La conmoción antes del choque: ¿recuerdas qué pasó?, no, nunca tenías tiempo, siempre había algo más importante. Yo apenas si juntaba mis letras chuecas sobre el papel amarillo de líneas azules claras para mostrarte lo que hacía pero siempre respondías «-ahora no, Victoria, yo sí trabajo, yo sí; después». Entonces volvía al cuarto para convertir en collage lo que antes había sido texto. Mucha marica yo. «Ahora no, Victoria, yo sí trabajo, yo sí», siempre respondías la misma mierda, siempre; claro, no romperse el culo litigando no es trabajo, Andrés. Juntar palabras, saber palabras, entender palabras, comprender la vida a través de conceptos eso para qué, si supongo que ser profesora de literatura es poca cosa. «Ahora no, Victoria». Ya no escribo más, ya se me olvido e igual a quién le interesa leer lo que alguien escribe con una lapicito que si apenas tiene filo y que se parte más de lo que sirve. Siete meses después apareces para decirme, con tu carita de imbécil «—pero por qué no me escribiste, porqué, sabes lo importante que es ella para mí». Un malparido, eso es lo que sos. Un rufián. Un truhán. Un pedazo de mierda.
II
A lado de la cama una pila de libros con las hojas onduladas que garabatiaste toda la noche hasta que la ginebra hizo efecto y ¡plaf!, funcionó, te dormiste. A la mañana siguiente, ese mundo que da tumbos porque ahora tienes 35 y no 25 entonces por fin sabes lo que es tener resaca y vivirla en todo su esplendor. No había más nada. La leche fuera dela nevera, la ropa sucia tirada porahí, la radio prendida (te dormiste con la radio prendida, esa factura va llegar carísima) y un olor que entra por el vano de la puerta. ¿Qué se pudrió porallá afuera si se supone que la que se descompone soy yo?, ¿qué es lo que hiede?, ¿a quién matarían? Arrastras los pies, te medio arreglas el pelo, aprietas el cordón de la bata y abres la puerta para que la luz te ciegue. Ay, esa criatura ahí tendida toda inflada por el aire por el sol por las moscas que las sobrevuelan. No, cómo se le ocurre a alguien hacer algo así. Qué necesidad. Esa gata atigrada sí dañaba los jardines de porahí, pero qué necesidá de hacer algo así, algo tan terrible. Ni la amarraron bien, eso quedó medio puesta en ese crucifijo. Qué esperpento la vida, Victoria, qué maltrecho es el existir, qué porquería es el mundo
III
Le confiaste la vida a ese malparido y te jodiste. ¿Por qué fue que lo dejaste entrar a la casa?, ¿es más, por qué es que te casaste con él? Ah, sí, las miserablezas de la soledad y la arrechera. Siempre supiste que la galantería de un cualquiera era innecesaria y prescindible, pero no, no hiciste caso. Tenías que ponerte ese vestido blanquísimo cual si fueras un merengue para que luego «te entregaran» y para que después el tirar desdichadamente se sintiera menos pecado y más como consideración, ni a premio, alcanzaba. La cagaste, Victoria, qué necesidad había de meterse con ese malparido.
IV
Le esculcaste el teléfono y encontraste lo que querías ver: las tetas de otra y las líneas sexuales que nunca tuvo contigo. Era apenas obvio, ¿no? Fingiste durante días, matarlo para qué si eso es mucho encarte; escracharlo requiere mucho esfuerzo y eres una borracha y perdedora, qué más da. Ya verá. Ya va ver.
V
de: [email protected] para: @[email protected]
«Cuidado con lo que hacés. Y hácelo bien por primera vez en la vida»
VI
Vos sabías que así iba a volver y que verlo en el césped, llorando, era la forma de hacerle honor a tu nombre. Ganaste. Por fin. El triunfo es tuyo. Hay más ginebra en el minibar.
María Fernanda Ampuero: una mañana de pandemia encontrás a tu mascota crucificada en tu casa y luego en tu casilla de correo descubrís un mail que te escribiste a vos mismo con la frase "Cuidado con lo que haces".
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Arriba las gatas rompe hogares y las viejas borrachas! 🤠
You guys are a bunch of gatas rompehogares.
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Diacronía
Conocerte fue una bocanada de aire fresco en este apestoso lugar donde habito.
Un lugar donde nunca estoy sola, eso es cierto, siempre hay visitas incomodas, de esas que quieres decirles adiós pero sabes que no puedes, sabes que no se irán, porque prefieres tenerlas ahí, a estar realmente sola.
Y es que hablar de mi soledad es hablar de como me gusta ahogar mi vacío con alcohol, alcohol y comida, alcohol y fiesta, alcohol y amigos, amigos y charlas triviales, descargar tinder, regocijarme con mis predisposiciones mientras hablo con extraños, idealizar a algunos y darme cuenta que no tengo nada que decir, o mejor dicho, que no tengo la confianza para decir lo que quiero, buscar pretextos para impedirles la entrada, darme cuenta que ellos están igual de vacíos que yo y por eso los rechazo, fingir que todo fue un error de borracha, borrar tinder, ignorar que yo misma me niego, darme cuenta de que Marisol no es suficiente, que no siempre tengo la razón aunque me encanta sentir que sí.
Pero me doy cuenta que no todos mis prejuicios son acertados y tú fuiste una sorpresa.
Porque automáticamente te guarde en un cajón, pero lo abriste y decidiste que no debías ser almacenado.
Me demostraste que tu contenido no era para hacer mis clásicas conservas.
Que este era para ser cultivado y que tendría que aprender a sembrar para cosechar tus frutos.
Tan dulces eran las palabras de tu boca y yo tan gustosa disfrute de todas.
Cada anécdota era algo nuevo para mí.
Todo en tí era territorio inexplorado,
y yo me sentí Indiana Jones.
Pero con la novedad viene la incertidumbre.
Con la duda viene la desconfianza.
Con la sospecha llega el miedo.
¿Sabes lo poco que me interesa explorar nuevas tierras?,
¿sabes lo poco que ensucio mis manos para trabajar por alguien más?,
¿sabes lo poco que bajo mi guardia para dejar entrar a alguien nuevo?,
¿sabes lo poco que dejo a un lado mi orgullo?,
pero no, claro que no lo sabes,
porque no me conoces,
porque tienes tus problemas,
porque tienes tu vida,
porque renaciste y estas descubriéndote a ti mismo.
Pero yo soy una gata vieja que ya se cansó de ser altanera y sentirse superior.
Porque yo ya viví mi re-descubrimiento.
Porque yo ya hice las pases con los fantasmas de mis amores pasados.
Porque yo ya no quiero estar sola.
Porque yo ya no puedo esperar.
Que lástima es esta discordancia en el tiempo,
pero cada cosecha trae nuevas recompensas,
y darme cuenta de que no todo es como yo quiero creer es la mía.
Que las oportunidades son valiosas, aunque no siempre precisas.
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#UnDíaComoHoy: 11 de junio en la historia
El 11 de junio es el día 162 del año en el calendario gregoriano. Quedan 203 días para finalizar el año. A continuación te presentamos una lista de sucesos importantes que ocurrieron un día como hoy 11 de junio
-1184 a. C.: según Eratóstenes, ocurre la caída de la ciudad de Troya, uno de los hechos más importantes del mundo antiguo. Según la mitología y literatura griega, en especial las epopeyas de Homero, La Ilíada y La Odisea, la Guerra de Troya fue uno de los hechos más importantes del mundo antiguo. En las leyendas, todo comenzó luego de que Paris de Troya le robara la hermosa Helena a su esposo, el Rey de Esparta, Menelao. Los enfurecidos Aqueos (los griegos) reunieron a sus soldados, navegaron hacia la ciudad de Troya, donde Paris tenía a Helena, y la destruyeron. En cuanto a la fecha 11 de junio de 1184 AC, se basa en los cálculos de Eratóstenes, un famoso erudito griego del siglo III a.C. Se consideraba que fue la primera persona en calcular la circunferencia de la Tierra, la distancia que existe entre la Tierra y el Sol, la utilización del año bisiesto y la práctica de la cronología científica.
-1641: en Venezuela, un terremoto destruye Caracas y deja más de 10 mil muertos.
-1770: el explorador británico James Cook descubre la ‘Gran barrera de coral’ en Australia.
-1895: se celebró el primer rally de la historia: París-Burdeos-París. Un año antes el periodista Pierre Giffard de la revista Le Petit Journal organizó un evento al que bautizó con el nombre de «la carrera de carruajes sin caballos» [Concours des Voitures sans Chevaux], en la que se podía apuntar todo aquel que quisiera y para ello se abrió un plazo de inscripciones entre diciembre de 1893 y abril de 1894. Fueron más de un centenar los participantes inscritos, pero para poder participar primero tuvieron que pasar una serie de pruebas eliminatorias hasta la fecha en que se disputó, por lo que tan sólo 21 vehículos tomaron la salida. El ganador de aquella primera competición automovilística fue un tractor con motor de vapor conducido por el Conde Alberto de Dion. En segunda posición llegó el Peugeot alimentado por gasolina de Albert Lemeitre a 5 minutos del Conde. El tercer puesto fue para otro Peugeot a gasolina, el de Auguste Doriot a 10 minutos del primer clasificado. El cuarto puesto fue para el Panhard et Levassor, también con motor de gasolina, conducido por Paul Panhard, a 23 minutos del vencedor. Así hasta un total de 17 clasificados, no habiendo llegado a la meta otros 4 vehículos por diferentes averías. A pesar de haber obtenido el primer puesto el Conde de Dion fue descalificado por los jueces que lo acompañaban, entre otras cosas por tener que emplear un fogonero. Por lo tanto el primer clasificado pasó a ser el Peugeot de Albert Lemeitre. Un año después, el 11 de junio de 1895, el conde de Dion organizó la famosa carrera París-Burdeos-París.
-1910: nace Jacques Cousteau, oceanógrafo y explorador francés. En 1943, él y Émile Gagnan perfeccionaron el equipo de respiración de los buzos. Fue pionero en realizar campañas para la defensa de las especies que habitan nuestro planeta y defender el medio marino de la contaminación a que está siendo sometido. Asimismo escribió libros de divulgación del mundo submarino y realizó numerosas campañas oceanográficas con su barco “Calypso”. En 1957 fue nombrado director del Museo Oceanográfico de Mónaco.
-1928: nace Salvador Garmendia, escritor venezolano, autor de novelas y cuentos, guiones para cine, televisión y radio. Por razones económicas no pudo continuar sus estudios de preparatoria y, debido a que contrajo tuberculosis, tuvo que quedarse en cama por tres años. Durante este tiempo Salvador se dedicó a la lectura de muchos libros y así comenzó su sólida base literaria. En 1948 se quedó mudo y empezó a ser parte de un grupo literario en su ciudad natal, Barquisimeto, donde publicó en 1959 su primera novela “Los pequeños seres”. Sus guiones cinematográficos incluyen “La Gata Borracha” en 1973, “Fiebre” en 1975 y “Juan Topocho” en 1977. Sus obras más conocidas son: “Los Pequeños Seres” (1958), “Los Escondites” (1972, Premio Nacional de Literatura), “Memorias de Altagracia” (1973) y “La hija de Juana Crespo” (1977).
-1933: nace Gene Wilder, actor estadounidense, reconocida por participar en films como Young Frankenstein, Willy Wonka & the Chocolate Factory, entre muchas otras.
-1935: en Buenos Aires se firma el protocolo que pone fin a la guerra del Chaco entre Bolivia y Paraguay.
-1955: en Francia, en el circuito de la Sarthe, cercano a la población de Le Mans, durante la celebración de la mítica carrera automovilística de las “24 horas de Le Mans”, tiene lugar un terrorífico accidente al salir volando el Mercedes de Levegh, contra las tribunas repletas de público, tras haber chocado previamente contra el Austin de Macklin, a más de 200 kilómetros por hora, ocasionando un trágico balance de 79 víctimas mortales, incluido el propio piloto.
-1959: nace Hugh Laurie, actor, músico y comediante inglés, conocido por interpretar el papel de Dr. House en la serie del mismo nombre.
-1963: el monje budista Thich Quang Duc se autoinmoló en una calle de Saigón como protesta contra la persecución de budistas por parte del gobierno Católico Romano del presidente de Vietnám del Sur Ngo Dinh Diem. Más tarde, los restos de Duc se volvieron a cremar pero su corazón quedó intacto, lo cual hizo que muchos budistas lo veneraran como un bodhisattva, en el camino a convertirse en buda. El acto de Duc aumentó la presión sobre Diem, quien más adelante anunció reformas que favorecían a los budistas. Pero las reformas nunca se implementaron, continuaron las protestas y las fuerzas del gobierno comenzaron a atacar las pagodas budistas, lo cual agravó el conflicto. Más monjes budistas siguieron el ejemplo de Duc, autoinmolándose. Finalmente, a fines del año 1963, un golpe de estado derrocó a Diem, quien fue asesinado el 2 de noviembre de ese año.
-1969: nace Peter Dinklage, actor estadounidense, conocido por interpretar el papel de Tyrios Lannister en la serie Game of Thrones, también ha participado en películas como X-Men: Days of Future Past, Pixels, The Chronicles of Narnia, The Angriest Man in Brooklyn, A Case of You, entre muchas otras .
-1982: se estrena el clásico de ciencia-ficción, dirigido por Steven Spielberg, “E.T.: El extraterrestre”. El film, escrito por Melissa Mathison, está protagonizado por Henry Thomas, Dee Wallace, Drew Barrymore, Robert MacNaughton y Peter Coyote. La música del film estuvo a cargo del compositor John Williams, creador de inolvidables bandas sonoras (“La Guerra de las Galaxias”, “Indiana Jones” y “Harry Potter” entre muchas otras). “E.T.” narra la historia de Elliott, un niño que se hace amigo de un extraterrestre, a quien ayuda a regresar a su hogar. La película fue muy bien recibida por el público y la crítica, y pasó a convertirse en la más taquillera de todos los tiempos. Mantuvo este título durante 10 años, hasta ser superada por el film “Jurassic Park”, del mismo director. Entre los premios que obtuvo la película se encuentran el Óscar a la Mejor Banda Sonora y el Globo de Oro a Mejor Película de Drama. Otras taquilleras producciones de Spielberg son los films de la saga de Indiana Jones, “Jurassic Park” (1993) e “Inteligencia Artificial” (2001).
-1986: nace Shia LaBeouf, actor estadounidense, conocido por participar en largometrajes como Transformers, Indiana Jones and the Kingdom of the Crystal Skull, Ninphomaniac, entre otras.
-1992: es asesinado Rafael Orozco, cantautor colombiano, fundador de El binomio de oro.
-2001: en Estados Unidos, el delincuente Timothy McVeigh es ejecutado por su intervención en el atentado de Oklahoma en 1955 donde murieron 168 personas y resultaron heridas otras 680.
-2002: el Congreso de Estados Unidos reconoce que el italiano Antonio Meucci inventó el teléfono.
-2010: Inicia la Copa Mundial de la FIFA Sudáfrica 2010, primera en el continente africano. El primer partido fue un empate entre la selección anfitriona y la mexicana 1 a 1.
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Hace un año atras
Hace un año atrás pensé que salíamos campeones. Insulté a Di María y Huguain. Volví a odiar a Chile. Me pinté la cara de colores. Lloré porque Messi abandonó la selección. Canté canciones y las publiqué en redes sociales, soñé con conocer Disney y no me dieron las cuentas. Hace un año atrás adopté a un gato, lo llamé Ricky por Ricardo Fort y le compré una rata que colgaba de un hilo. Viajé en subte muchas veces, viví sola en Villa Urquiza y vi una luz verde en el cielo. Me senté en una plaza dos horas y vi gente sonreir, después llorar. Probé el helado de Vanshelato. Llevé a Ricky al veterinario porque pensé que tenía sarna. No me fui de vacaciones. Conocí lo que es no llegar a fin de mes. Falté un día a trabajar para mirar chiquititas. Comí mucho arroz. Me anoté en fútbol y no hice ningún gol. Perdí a una amiga. Conocí a un chico por tinder y salimos un mes. Festejé mi cumpleaños y la pasé mal. No llegué a pagar el alquiler, volví a mi casa de Quilmes. Se me rompió la tele, la notebook y el celular al mismo tiempo. Odié mi vida. Fui a desayunar a un bar. Viajé en micro con mi hermano. Conocí Córdoba. Saqué fotos. Me despedí muchas veces de un pibe al que siempre volvía a ver. Me junté con amigas y borrachas leímos nuestra carta astral. Castré a mi gato y me enteré que era gata, la llamé Ricarda. Me enfermé pocas veces. Me desilusioné varias. Vendí mi notebook y me compré un teléfono nuevo. Dejé de mirar fútbol. Empecé el psicólogo y lo abandoné. Me hice un tatuaje. Me alejé de personas que me hacían mal y ordené mi economía. Apareció alguien que cambió mi vida.
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§ 2.469. Dulce pájaro de juventud (Richard Brooks, 1962)

Amores difíciles, el paso del tiempo, la añoranza del pasado que no fue, la desesperanza por lo que va a venir. Un canto al amor de juventud, a esa inocencia que se va con el paso del tiempo...Los melodramas basados en novelas de Tennessee Williams son tórridos, desgarradores, con un punto de sexualidad animal a flor de piel. Siempre rodeados de grandes terratenientes sureños con casas tan particulares, con el calor como compañero inseparable.El poder político es un motor de ambición, La musica es de Robert Armbruster, y la pareja de actores Paul Newman, Geraldine Page es sencillamente magnífica. Shirley Knight es una cara bonita que encaja bien en la historia, pero no creo que le de ese punto desgarrador que requieren los dramones de Williams. Page tiene algo de la alcohólica de El Graduado, es mezcla de mujer madura borracha con un pasado mejor -cualquier pasado fue mejor para ella- pero con una necesidad de afectividad y pasión sexual que la domina y la desborda. Es guapa, pero es consciente que su belleza es más efímera de lo que esperaba, su vida afectiva ha fracasado y duda de como gobernar su vida.El Newman de esta película no es muy distinto que el de otra cinta de Brooks rodada antes: "La gata sobre el tejado de zinc" (1958). No es que sea el mismo papel exactamente, pero se le parece bastante. Allí estaba torturado por la amistad perdida, con claras referencias homosexuales con una mujer bellísima que necesita una atención sexual y que añora quedarse embarazada. Las relaciones con su padres, su hermano y su cuñada eran un tormento para él, y la culpa por el amigo muerto no desaparece por muchos litros de alcohol que trasiegue para hacer digerible la vida. Aquí sin embargo es otra cosa, aunque la necesidad profunda de afecto de ambos personajes es similar. Es, en realidad, el tema de los "dramones" sureños de Williams.Las relaciones entre los dos personajes principales son de una emotividad desgarradora, de esas que duele, tremendamente autodestructiva. Plantea, además, un debate que en su momento tuvo que levantar algo de suspicacia, la prostitución masculina y la compra de sexo por una mujer, una mujer mayor en este caso.
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40 segredos para um casamento de sucesso!
Siga essas lições sobre casamento para ter um relacionamento de sucesso.
1. Cultivar o desejo fora da cama O fogo do comecinho pode até não durar a vida toda. Mas um convívio gostoso, sem brigas constantes, é mais do que meio caminho andado para manter aceso o interesse sexual. Se um casal acha tudo de bom estar junto no dia a dia, vai querer é mais na cama!
2. Amar o outro tal como é Especialistas não se cansam de repetir: ninguém consegue mudar o parceiro depois de trocar alianças. Mas lembre-se: ceder um pouco pode ser suficiente para obter harmonia no casamento e ainda incentivar a cara-metade a fazer pequenos avanços em certa atitude.
3. O sexo não resolve tudo Sabe o papo de que tudo se resolve na cama? Não é bem assim, diz o psiquiatra Eduardo Ferreira Santos, autor de Casamento: Missão Quase Impossível (Claridade).
4. Saber encerrar brigas Vira e mexe alguém tem de pedir desculpa, e não deve ser sempre a mesma pessoa. Será que ele é de fato o culpado em todas as situações? Tem mais: deslizes e insultos entalados envenenam a relação. Passe uma borracha em pequenas transgressões rapidinho e poupe energia para o que realmente importa.
5. Aprender a negociar Segundo a psicóloga Ida Kublikowski, da PUC de São Paulo, os casais de hoje perderam essa capacidade primordial para a saúde da relação. “A negociação deve levar em conta padrões e valores de ambos”, diz. Se a sua família curte promover almoços todo domingo, mas seu marido acha isso uma chatice, que tal combinar que vão só uma vez ao mês?
6. Livrar-se da bagagem Dores de romances do passado não serão resolvidas no atual. Se não consegue esquecer um trauma, como uma traição, cogite procurar terapia.
7. De olho nas falhas Para o médico sexologista e terapeuta de casais João Borzino, de São Paulo, não é porque seu marido fica calado nas festas dos seus amigos que ele é um boçal. “Se está lá com você, está tudo bem.” Quando não estiver mais, ele demonstrará.
8. Não se apegar a tabus Quem disse que todo mundo tem de seguir o mesmo script? Um casal pode decidir dormir em camas (ou até casas) separadas, ter ou não filhos… e viver muitíssimo bem.
9. Valorizar as semelhanças Os casais felizes ressaltam o que têm em comum (“Nós dois amamos filmes de ação”), enquanto os em crise só veem os abismos que os separam (“Poxa, eu gosto é de sair, ele não sai da frente da tevê”). Melhor ficar no meio-termo. Procure e cultive compatibilidades, mas não se chateie ou trave diante das divergências. “Para tanto, recorra ao diálogo sincero”, diz a médica Cibele Fabichak, autora de Sexo, Amor, Endorfinas & Bobagens (Novo Século).
10. Continuar a ser aquela gata de sempre Pode soar ultrapassado, mas os especialistas lembram que muitas mulheres ainda cometem o mesmo erro: caprichar na aparência no começo da relação e relaxar depois de casada. Mantenha-se bonita – principalmente para você. Vai aumentar a autoconfiança, o que é muito sedutor.
11. Ser “nós” sem anular o “eu” É saudável guardar certos segredos, assim como preservar seus interesses, hobbies e programas prediletos. Toda semana você almoçava com amigas? Não pare. Ele curte ir ao estádio com o primo? Que vá. “É fundamental que cada um seja o autor de sua história para construir outra em comum”, explica Cibele.
12. Ter vida social! Cinema, shows, viagens… “Quanto mais atividades um casal fizer junto, mais próximo ficará”, diz Viviane Alves casada com Paulo Alves, ambos empresários.
13. Se divertir em casa também A empresária Fernanda de Azevedo e o radialista Adriano Adoryan transformaram as séries de tevê – antigo vício dela – em programão a dois. “Até fazemos preparativos para ver cada episódio”, conta ela. “Virou um momento nosso.”
14. Largar um pouco a cria A publicitária Raquel Franzini e o engenheiro Tiago Nascimento vivem juntos há oito anos e têm uma filha. “Depois que ela nasceu, nosso foco mudou e a maioria dos passeios é com a família toda”, conta Raquel. Mas o casal garante escapadas a sós recorrendo à babá ou à mãe dela. “Neste ano, até voltamos a viajar só os dois.”
15. Não sofrer quando a viagem for só de um Se há confiança, a distância pode fortalecer o vínculo, defende a expert Cibele. A saudade e a expectativa do reencontro são temperos para a relação. É bacana, depois de sete anos juntos, ainda sentir um friozinho na barriga sempre que ele está para chegar, diz Viviane, cujo marido, Paulo, viaja muito a negócios.
16. Rir com o outro Bom humor é afrodisíaco. Juntos há mais de quatro anos, Débora e Leandro Oliveira, uma advogada e um administrador, garantem que recorrem ao riso o tempo todo. “Chegamos a fotografar um ao outro em situações engraçadas só para tirar sarro depois!”, conta Débora.
17. Ter memória Papear sobre o que já viveram é útil para lembrar por que vocês estão juntos e o que os aproximou. Rever fotos incentiva tais conversas.
18. Reconhecer que casamento não é sempre 50 a 50 Tem dias em que você entrará com 90% e ele com 10%. Em outros, serão 25% seus e 75% do marido. O problema é se um sempre dá 100% e o outro nunca entra com nada. Juntos há quatro anos, a advogada Juliana Viera dos Santos e o administrador Gabriel Villa preferem nem fazer essa matemática. “Combinamos de não ter toma lá dá cá. A gente nunca diz ‘Fiz tal coisa outro dia, então você vai fazer isso hoje'”, afirma ela.
19. Ter um código secreto Gestos com significados privados, rituais exclusivos e referências só entendidas pelos dois estimulam um sentimento de “Eu e você contra o mundo” – ótimo para fortalecer o vínculo.
20. Encarar as grandes questões Temas cruciais, como vontade de não ter filhos, uma doença ou dívida familiar, devem ser debatidos antes de casar.
21. Entender que temos fases ruins E isso independe de ter ou não alguém ao lado. Ou seja, nem todo problema e toda tristeza são culpa do casamento.
22. Evitar tirar conclusões precipitadas Já que você não pode controlar o que seu homem faz ou diz, controle a forma como reage quando ele desaponta você. Viver brigando por bobagem desgasta qualquer relação. “Se vocês estão em um restaurante se divertindo, não perca o humor só porque ele olhou o relógio”, exemplifica o terapeuta Borzino. “Ele pode apenas estar querendo saber… as horas!” Na dúvida, pergunte (sem tom de acusação).
23. Ser mais tolerante “Não pedi para comprar suco? Por que ainda está aí parado?” Impaciência é um dos principais geradores de conflito no casamento. Entenda que as pessoas não têm o mesmo ritmo – e não é porque estão casadas que precisam passar a ter.
24. Manter a discriçao da vida de vocês Se há um conflito com seu marido, converse e resolva com ele. Nada de levar queixas para os seus colegas de trabalho. A vida de vocês deve ser protegida.
25. Não pirar nas expectativas O casamento não pode ser a sua única fonte de felicidade. Está aí um erro comum entre as mulheres: depositar expectativas excessivas na relação. Acontece que, se você aposta seu total de fichas em uma coisa só, o risco de frustração é maior.
26. Confiar um no outro Casados há três anos, a professora Vivian Nogueira e o farmacêutico André Luchessi amam aventuras. Ela adora especialmente acampar e o marido, escalar. “Para acompanhá-lo, ele me deu sapatilhas. Quando vamos escalar, deixo que o André me oriente 100%. Sei que ele domina bem a técnica e está lá comigo para o que precisar. É a nossa metáfora da confiança.”
27. Entrar em acordo com assuntos de dinheiro Não importa quem ganha mais ou se um é mais gastador do que o outro. É preciso promulgar as leis orçamentárias do casal, definindo quem paga o quê, quando e como. Ou pode haver brigas arrasadoras.
28. Nunca torrar dinheiro escondido do outro A infidelidade financeira – quando uma parte do casal gasta uma quantia alta às escondidas – é tão destrutiva para a relação quanto outras traições, dizem terapeutas de casais e experts em finanças. Por isso, Vivian e André fazem questão de transparência nessa área. “Se um precisa de algo especial, só gasta após conversarmos”, ela conta.
29. Implantar o momento do romance Nem que seja peciso abrir à força espaço na agenda dos dois. Afinal, as preocupações cotidianas e o corre-corre podem minar o clima de namoro. O casal Juliana e Gabriel criou o chamado “dia amish” assim batizado em homenagem ao grupo religioso que vive isolado do resto do mundo. “A rotina atrapalha porque costumamos chegar muito cansados, aí ligamos a tevê ou o computador e acabamos não ficando juntos”, diz ela. “Foi por isso que bolamos um dia no mês em que um cozinha para o outro e eletrônicos são proibidos. Só ouvir música é permitido.”
30. Preparar pequenas surpresas Um café na cama, um brinde ao começo do fim de semana, um presentinho fora de data…. Quem resiste a tanto mimo? “Agrados fazem parte do comportamento de conquista”, diz Ida, da PUC.
31. E fazer grandes surpresas também O empenho do outro para criar algo especial só para você encanta. A empresária Fernanda ainda se derrete toda quando conta que ganhou do marido um passeio de balão em um Natal. “Ele foi atrás de amigos para pedir dicas, viu todos os detalhes sozinho!”
32. Ter iniciativa no sexo “Homens são seres genitalizados e costumam ir direto ao assunto”, avisa Borzino. Assim, não espere que seu marido entenda convites sutis para o sexo, como velas espalhadas no quarto. Se ele não captar a mensagem, apenas ataque.
33. Multiplicar o repertório sexual As transas podem ser com uma única pessoa, mas não precisam ser iguais. Quanto mais você e ele aprenderem sobre sexo e o que dá prazer a cada um, mais variado será o menu na cama. Incentive-o a agir como um explorador, vasculhando sempre cada centímetro de seu corpo e descobrindo mais zonas erógenas e formas de acariciá-la. E faça o mesmo.
34. Amar as rapidinhas O tempo fica curto depois do casamento e, às vezes, é o que dá para fazer. Ok: o clima de desejo repentino dá um gás à autoestima dos dois!
35. Registrar seu amor – por escrito! “Às vezes, deixo recadinhos pela casa e compro cartões românticos, só para lembrá-lo que o amo e estamos felizes juntos”, diz a compradora Vanessa Conti, casada com o supervisor financeiro Gustavo Conti Ferreira.
36. Investir em underwear para os dois! “É sempre bom ter lingerie nova”, diz Vanessa, que não descuida de abastecer seu estoque – e o de underwear do marido. “Homens estão vaidosos!”
37. Repetir a lua de mel muitas vezes “A gente viaja um fim de semana por mês”, conta a tradutora Camilla de Medeiros, casada com Lucas de Medeiros.
38. Domar o ciúme “É natural ter, pois ninguém é 100% seguro”, diz Ferreira Santos. Mas não pode virar obsessão. Se você é do tipo que faz devassa no e-mail dele, a saída é o velho e bom diálogo, para expor medos.
39. Fazer só o que está a fim Na cama e fora dela. “O que é feito por concessão vai para a ‘poupança emocional’ e, depois, surge em forma de cobrança”, diz Ferreira Santos.
40. Buscar inspiração em fontes inesperadas Copie e cole na sua relação uma frase do presidente americano Barack Obama: “Open hearts, open minds, fair-minded words”. (Ou: corações abertos, mentes abertas, palavras imparciais e sem preconceitos).
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