#EquilibrioYProductividad
Explore tagged Tumblr posts
magneticovitalblog · 1 year ago
Text
Productividad sostenible: 11 técnicas de Equilibrio
Tumblr media
Vivimos en una sociedad acelerada, donde la productividad se ha convertido en una característica de éxito personal y profesional. A menudo, nos vemos invitados
a hacer más
a maximizar cada segundo de nuestro día
a ser más eficientes,
La productividad no es solo sobre el rendimiento; es también sobre bienestar, satisfacción y propósito.
Activar nuestra productividad es un viaje personal y profundamente individual. No se trata de conseguir una eficacia implacable, sino de descubrir el ritmo y las prácticas que nos permitan trabajar de manera óptima, manteniendo un estado de bienestar y cumplimiento.
La verdadera productividad fluye de un equilibrio entre mente y cuerpo, y se sustenta en la congruencia de nuestras conductas con nuestros valores.
Así que mientras buscamos la productividad, tengamos en cuenta que la meta no es simplemente hacer más, sino ser más:
más presente,
más consciente
más congruentes con el propósito y la pasión que da sentido a lo que hacemos.
Las 2 caras de la Productividad
Por un lado, está la eficiencia, la capacidad de realizar tareas rápidamente y con calidad.
Por otro, está el bienestar mental y emocional, que a menudo sacrificamos por la eficiencia.
La verdadera productividad no solo se mide en resultados tangibles, sino en cómo esos resultados están alineados con nuestros valores y objetivos a largo plazo.
Reconozcamos nuestra singularidad
Cada persona tiene
su propio ritmo y único,
un conjunto de habilidades
un umbral de energía
a respetar.
El primer paso para activar tu productividad es conocernos a nosotros mismos:
Establece objetivos con significado
Conviene que nuestras metas resuenen con lo que realmente valoramos y la comunidad a la que pertenecemos, porque son las que más motivan.
Definamos nuestros objetivos no solo en términos de logros externos, sino también en cómo estos contribuyen a nuestro crecimiento personal y al bienestar de los demás.
Crea Espacios de Trabajo Saludables
Un entorno de trabajo no es simplemente un lugar físico; es un espacio psicológico también.
Es importante disponer de entornos que promuevan la concentración y la creatividad,
asegurando momentos de reflexión
incorporando la naturaleza
reduciendo las distracciones
Un espacio de trabajo saludable nos recuerda nuestras metas y nos motiva a alcanzarlas.
Practica la Autocompasión
La autocrítica excesiva es uno de los mayores enemigos de la productividad. Practicar la autocompasión significa tratar con nosotros mismos con amabilidad. Ello no incluye indulgencia o baja exigencia, sino reconocer nuestros esfuerzos y aprender de nuestros errores sin castigarnos emocionalmente.
Encontremos nuestro equilibrio
El equilibrio es entender y respetar estos ciclos, asegurándonos de que, a largo plazo, estamos cuidando todas las facetas de nuestra vida.
Algunos días requerirán un esfuerzo mayor, mientras que en otros convendrá que nos recuperemos.
La Conexión Social como Fuente de Energía
Los seres humanos somos intrínsecamente sociales.
La conexión con otras personas es una fuente de energía y motivación.
Tengamos en cuenta el valor de una conversación estimulante, la colaboración o simplemente la compañía silenciosa. Estos momentos no son solo recreativos; son parte fundamental de una productividad sostenible y enriquecedora.
Cultiva la Flexibilidad
Activar nuestra productividad no es seguir rígidamente un sistema, sino desarrollar la habilidad de adaptarnos a los cambios con agilidad y resiliencia.
La flexibilidad nos permite ajustar nuestras técnicas y expectativas ante las nuevas circunstancias, lo que es clave en un mundo en cambio constante.
Ser productivos no es hacer más cosas en menos tiempo, sino hacer las cosas correctas de manera que enriquezcan nuestra vida y reflejen quienes somos.
Nuestra productividad es función de nuestra felicidad y realización personal.
Tumblr media
¿Cómo activar una productividad que se sostiene en el tiempo sin sacrificar nuestro bienestar?
La psicología moderna ofrece estrategias para optimizar nuestra capacidad productiva al tiempo que cuida de nuestra salud mental. Por ejemplo:
1. La Técnica Pomodoro, que consiste en dividir el trabajo en períodos de 25 minutos de duración, separados por breves descansos de 5 minutos; para mantener atención y prevenir la fatiga mental.  
2. La Regla de los Dos Minutos. Según David Allen en su método ‘Getting Things Done’: si una tarea requiere dos minutos o menos, hagámosla inmediatamente, para promover la acción inmediata en tareas pequeñas, evitando que se acumulen y se conviertan en una carga mental.
3. Establecer Objetivos que sea específicos, medibles, alcanzables, relevantes y con un plazo de tiempo, para disponer de una hoja de ruta concreta y motivadora para nuestra productividad.
4. Técnica de Visualización del éxito no solo es motivadora, sino que también prepara psicológicamente nuestra mente para abordar las tareas que se avecinan, alineándola con los estados mentales y emocionales que deseamos conseguir.
5. La Teoría del Flow según el psicólogo Mihaly Csikszentmihalyi, representa uno de los conceptos más influyentes y transformadores en la comprensión moderna de la productividad y el bienestar personal. El estado de flow se refiere a una sensación de estar tan concentrado en una actividad que nada más parece importar; la experiencia en sí es muy placentera. El estado de flow se caracteriza por:
Concentración Completa en la actividad, con una claridad de objetivos y retroalimentación inmediata sobre el progreso hacia tales objetivos.
Pérdida de la Autoconciencia inhibidora del yo, permitiendo una conexión más profunda con la actividad y reduciendo el miedo al fracaso.
Distorsión del Tiempo de manera que las horas pueden parecer minutos.
Equilibrio entre Habilidad y Desafío, de manera que a actividad no parece ni demasiado fácil ni difícil.  
Aplicación en nuestro día a día:
Identificar las Actividades que Inducen el estado de flow.
Equilibrar Desafío y Habilidad en función a nuestro conjunto de habilidades actual. Buscar formas de incrementar el desafío de las tareas rutinarias o de desarrollar habilidades para abordar tareas más complejas.
Establece objetivos claros, concretos y viables para nuestras tareas puede ayudar a entrar en el estado de flujo.
Diseñar nuestro trabajo de manera que consigamos una respuesta rápida y clara sobre nuestro desempeño, al objeto ajustar en tiempo real y mantener el foco en la tarea.
Minimizar Interrupciones negociando con las personas que nos rodean periodos de trabajo ininterrumpidos o usar técnicas como la de Pomodoro para estructurar el tiempo de concentración.
6. Identificar y cambiar patrones de pensamiento negativos nos sabotean.
7. Técnicas de Relajación como la respiración profunda para gestionar el estrés y mejorar la concentración.
8. El Hábito de la Priorización: Psicológicamente, no solo mejora la productividad, sino que también puede aliviar el estrés. Cuando identificamos y nos enfocamos en lo que es verdaderamente importante, reducimos la sobrecarga de decisiones y la ansiedad que viene de sentir que todo es urgente. Además, trabajar en tareas que se alinean con nuestros valores y objetivos a largo plazo genera una sensación de propósito y logro, importantes para nuestro bienestar. Utiliza métodos como la Matriz de Eisenhower para distinguir entre tareas urgentes e importantes para enfocarnos en lo que realmente impulsa nuestro progreso. La Matriz de Eisenhower viene del presidente Dwight D. Eisenhower, según quien «Hay dos tipos de problemas, los urgentes y los importantes. Lo urgente no es importante, y lo importante rara vez es urgente.»  
Cuadrante 1: Tareas Urgentes e Importantes que requieren atención inmediata y también son críticas para tus objetivos a largo plazo o para el mantenimiento de nuestras responsabilidades fundamentales. Son las crisis, los plazos inminentes y los problemas que necesitan una solución rápida.
Cuadrante 2: Tareas Importantes, pero no urgentes que ayudan a alcanzar nuestros objetivos a largo plazo, pero que no tienen un plazo inminente. Suelen ser las más descuidadas, pero son clave para el crecimiento y la prevención de crisis futuras.
Cuadrante 3: Tareas Urgentes, Pero No Importantes. Estas son las tareas que requieren nuestro tiempo y no contribuyen significativamente a nuestros objetivos personales o profesionales. A menudo son las interrupciones de otras personas o tareas que se han convertido en urgentes por falta de planificación.
Cuadrante 4: Tareas No Urgentes y No Importantes. Son actividades que no tienen un beneficio claro y que no tienen relación con nuestros objetivos. Pueden ser distracciones o tareas que realizamos por costumbre o como forma de procrastinar.
Se aplica como sigue:
Listar todas las tareas pendientes para liberar espacio mental.
Clasificar cada tarea porque no todo lo que parece urgente es verdaderamente importante para nuestros objetivos a largo plazo.
Programar nuestro tiempo en consecuencia, priorizando las tareas del Cuadrante 1 para ser abordadas de inmediato.
Planificar bloques de tiempo en nuestro día o semana para abordar las tareas del Cuadrante 2, fundamentales para el progreso sostenido.
Limitar el tiempo dedicado a las tareas del Cuadrante 3 y considerar delegarlas si es posible.
Eliminar o reducir al mínimo las actividades del Cuadrante 4.
9. Establecer una rutina diaria, que respete nuestros ciclos naturales de energía y descanso, aumenta significativamente nuestra eficacia al proporcionar estructura y previsibilidad.
10. Ejercicio Regular porque tiene efectos positivos en la cognición y la resistencia al estrés.
11. Mantener una actitud de crecimiento, aprendiendo de nuestras experiencias fomenta la resiliencia y una actitud proactiva ante los errores, en lugar de una fijación en ellos
Tumblr media
Post original de Cristian Cherbit ; psicólogo online https://christiancherbit.com/
Cortesia de : @magneticovitalblog
2 notes · View notes