#ByronSociety

[cometelafresa]

Byroniana

Me respondieron de la Byron Society. De hecho, me respondieron casi de inmediato. No puedo creer que hayan pasado más de dos años y no me haya dignado a consignarlo por escrito hasta hoy.

Podría copiar y pegar el mensaje de la persona que me informó, pero solo el misterio nos hace vivir y se dice el pecado pero no el pecador.

El amable susodicho me contestó a una consulta que remití a la Byron Society para esclarecer una duda sobre el vello de los amantes de Byron. ¿Es cierto que Byron guardaba una colección de sobres con muestras de vello púbico de sus amantes o solo tenía el que le envió Carol Lamb, su «salvaje antílope»? 

Me dijo que sin duda Byron conservaba vastas colecciones de pelo de diversa índole, pero que carecían de pruebas de que compilara vello púbico —afición que, según mi informador, parecía más propia de Carol Lamb— y —siempre en opinión de mi interlocutor— tampoco había pruebas de que Byron estuviera interesado en esa clase de trofeos, por mucho que se jactara de sus proezas sexuales.

Sí había oído —y yo leído— que sus pulmones yacían sepultados bajo su estatua en Missolonghi, y que él mismo —mi confidente— había contemplado aquel lugar con el debido respeto, aunque por otro lado había leído que tampoco aquello podía asegurarse sin atisbo de duda —y no me refiero aquí al debido respeto que le profesó mi informante, sino a que los pulmones estuvieran efectivamente enterrados allí—.

Luego prosiguió diciendo que sí es verdad que parte de sus entrañas se trasladaron por separado a Inglaterra y se expusieron también por separado en su cortejo fúnebre.

Siguió contándome que Diego Saglia desveló que Teresa guardaba toda clase de recuerdos de Byron, entre ellos varias castañas que el poeta recogió en un paseo que dieron juntos y —algo más raruno para el gusto moderno:— cierta cantidad de piel —de Byron— que se le había pelado quemada por el sol. Y que esos pedazos de piel están sin lugar a dudas en el Palazzo Guiccioli de Rávena. A continuación —y esto fue lo más delicioso—, añadió: «Pero no quieren exhibirlos (yo y muchos otros tratamos de convencerlos para que lo hicieran), al parecer porque, pese a su reputación, los italianos son unos remilgados con esas cosas».

Y «eso es probablemente todo cuanto sé sobre los macabros hechos de su señoría (salvo por el célebre tamaño de sus genitales, basado en la exhumación de su tumba en la década de 1930)».

Se disculpó por no poder ser más preciso y me dijo que Peter Cochran era una Fuente inagotable de saber sobre el asunto pero que, por desgracia, ya no se hallaba entre nosotros.

Le agradecí su inestimable mensaje con el debido respeto, pero ignoro por qué no inquirí, esta vez, sobre el supuesto tamaño de los genitales byronianos. Quizá lo haga un día de estos.

[aniketosomina]

Sunday afternoon reading, on the anniversary of Byron's birth. #georgegordonbyron #byronsociety #byronjournal #childeharold #donjuan #manfred #ageofbronze #lordbyron #poetry #romanticism #inpensivemood #sunday #winterafternoon #bookstagram #bibliophilia