#› 𝗞𝗜𝗦𝗦 𝗠𝗘 𝗔𝗡𝗗 𝗕𝗜𝗧𝗘 𝗠𝗘 \ jeremy.

[vienitas]

#   locación 𓂃 𝓷. zona de habitaciones.

mira cómo la pelota va de un lado a otro, sus brazos están cruzados a la altura de su pecho. ¿no se cansaban? suspira pesado cuando vuelve a ver el siguiente boteo, ¡falta! ¿o no? a quién le importa ‘ kurorin ’ regaña, su voz suena demasiado seria para el ridículo apodo que usa en su contra para desconcentarlo. ‘ punto para jer ’ mueve su cabeza en dirección al coreano, como una forma de pedirle que devuelva la pelota para que volviese a sacar. el apodo de su otro compañero no es tan ridículo como con el que ha titulado al japonés. ‘ iré por algo a la máquina expendedora, ¿quieren algo? ’  * @jcrcmy & @hirochis

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no confía en palabras que llegan con tanta facilidad, existían dos caminos: se encontraba frente a un mitómano o un don juan, y ninguna tenía un buen desenlace según su experiencia. ‘ jamás me negaría a alguien como tú, jer ’ se permite continuar con un apodo que no ha sido autorizado, tampoco negado, ¿pero le importaría de ser el caso? no. eleva una de sus cejas ante la efusividad, podría utilizarlo un poco más para ver sus límites, pero tampoco quería jugar con fuego tan rápido. ‘ aceptar con tanta facilidad te transformará en mi presa favorita, uh, ten cuidado ’ si es verdad o mentira lo esconde para ella, pero lo entona como si de una broma se tratase, mientras comienza a subir la escalinata para llegar a la puerta del hogar compartido con el resto de samhain. se aprovecha de que la puerta está junta para entrar primero y se hace a un lado para permitirle a él pasar. apenas profesión es proclama, se enciende una alarma en su cabeza, así que es eso: ‘ lastimosamente, quizás hayan cosas que no pueda responder, ¿estás bien con eso? ’ dulce es su vociferación, junto a la expresión inocente que viste de pronto sus facciones. ‘ no me gustaría decepcionarte ’ estira su mano para posarla sobre el brazo impropio y le da un suave apretón; le es fácil fingir que está interesada en terceros, aunque no pueden importarle menos. 

' no soy bueno mintiendo, me temo, ' se lleva una mano hacia el pecho con toda la sinceridad que puede ocupar aquel cuerpo... que no es mucha, realmente. ' ¿y para qué hacerme el duro? correr el riesgo de que te niegues suena como algo de lo que me terminaría lamentando, ' suelta un suspirito con el mismo humor tonto pisándole los talones. aunque intenta verse levemente abochornado, deja que su rostro sea iluminado espontáneamente por la buena noticia. ' ¿en serio? ¡perfecto! ' saldado el trato, se deja llevar por aquel impulso original de ayudarle con la maleta, misma que termina siendo arrastrada sin mucho esfuerzo de su parte. ' de todos modos, espero que no por ello te niegues a mi invitación. seguirá en pie para otro día, hay muchas cosas que quiero saber de alguien que ha sido miembro de las fuerzas especiales tailandesas. '

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# 𝐆𝐈𝐌𝐍𝐀𝐒𝐈𝐎 𓂃 𝐬. jeremy salpica a venus desde la piscina techada.

@jcrcmy › sentada en el borde de cerámica, manos toman su cabello aún seco y lo lleva hacia un costado, no tenía intenciones de tirarse aún a la superficie acuosa. sin embargo, sus pretensiones de mantenerse seca son interrumpidas de golpe y sin aviso. ‘ una pregunta, jeremías ’ pudo escucharse la molestia en su voz y en sus manos pasando por su rostro, quitando los restos de agua. ‘ ¿te gusta que te amenace, uh? porque un día — ’ levantó su pierna rápido para buscar salpicarlo con agua de vuelta, antes tirarse a la piscina y amenazar con hundirlo de ser necesario. ‘ lo haré en serio ’

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🚆 para un starter en Bahnhofplatz con @jcrcmy

‘ sabes que no te vas a deshacer de mí tan fácilmente, ¿no es así? ’ lo miró de soslayo, algo tenía el norteamericano que despertaba una parte que pensaba muerta en su corazón. sus brazos estaban cruzados a la altura de su abdomen y su mentón estaba igual de erguido que siempre. ‘ si te desapareces, iré a buscarte donde sea que estés y te encontraré ’ lo amenazó, aunque su rostro estaba serio y su voz sonaba monótona, algo en sus orbes mostraba rastros de emoción. ‘ no se te ocurra tocarme o te reventaré un huevo ’ mintió, lo decía para que la abrazara. odiaba necesitar a un hombre al final del día. más a un jeremy. ‘ tienes prohibido volver a irte o desaparecer, ya me acostumbre a que existas ’ 

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‘ lo dije porque pensé que eras de los otros equipos y me da igual si a ellos les cae una maldición ’ aunque su voz suena serena, nunca había conocido a alguien que fuese más insoportable que ella. tenía ganas de lanzarle una almohada en la cara. acomoda el prendedor nuevamente en su chaqueta, una sonrisa de suficiencia descansa en su rostro, odia que intenten pasar los límites jocosos que ella traza y proclama como inexistentes cada vez que puede. es una hipócrita. ‘ ¿qué dicha? ¿la de matarte? ’ eleva una de sus cejas, ríe entre dientes mientras mueve su cabellera hacia atrás y comienza a caminar hacia el armario. ‘ no le digas kurorin, tienes que ir al menos a dos citas con él para hacerlo ’ exagera, ni siquiera fue ese tipo de salida ni mucho menos fueron dos. ‘ yo te mataré mientras duermes, jer, si te llevas una de esas cosas feas ’ lo mira con una sonrisa en sus labios, demasiado inocente y casta para el significado que cargas sus vocablos. devuelve su atención al gran mueble y tira de sus puertas para ver el interior. ‘ ¿cuántos ganchos tienes sin usar en tu armario, uh? ’ porque ella ninguno, pero quiere saber si es personal o una elección a propósito. 

' pero venus... ' rogó de su nombre con especial ahínco. ' acabas de decir que podía llevármela, que no le dirías a nadie. pensé que sería nuestro secreto, ' ladea la cabeza, plenamente consciente de que las palabras ajenas se balanceaban entre la advertencia y la orden. en un principio, ni siquiera había tenido interés de hacerse con ninguna muñeca. el que la mujer la trajera a colación sólo había abierto la posibilidad de un tonto juego que sólo parecía más divertido con la reticencia de la otra. ' y... ' la barbilla se eleva pocos milímetros ante el frío material rozando su piel. su manzana sube y baja al ritmo que empuja saliva abajo. ' ¿quién tiene esa dicha? ' opta por preguntar de vuelta con las sonrisas. aunque sólo se tratara de un prendedor, el background de la tailandesa era un recordatorio de que un día podría ser otra cosa. ' ¿valeria? ¿kurorin? ' por supuesto, la otra pregunta le entra por un oído y le sale por el otro. ' ¿incuestionable? '

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se sintió una estúpida. una imbécil. una tarada. un fallo. era un fallo en el sistema, porque pronunció cada sílaba sin pensarla demasiado. porque se abrió ante él de golpe y sin pensarlo dos veces. era una tonta. entre toda las personas con las que podría haberse abierto, ¿por qué lo eligió a él? ¿habrá sido culpa? no. fue porque le molestó que le molestase que le mintiera, porque eso significaba que le interesaba lo que le dijese. y que no le crea, es la peor herida que podían darle al orgullo de la tailandesa. ‘ me doy cuenta ’ presionó su mandíbula y mordió el interior de su boca, fue brusca. estaba furiosa. con ella y con él. sobre todo con él. sus preguntas se agolparon en sus oídos y entendió todo, hacia dónde iba, pero no por eso dejaba doler menos. cuando lo conoció, vio en esas profundidades castañas un reverendo estúpido, alguien a quien utilizar. pero a medida que se encontraban, una y otra vez, vio en él el reflejo de sí misma. sus burlas, como ocupaba sus mismos chistes, como se desligaba de todo y le restaba importancia. ella, por su lado, es más de ignorar. ¿no era parecido al final del día? ‘ ¿sabes jeremy? ’ miró hacia un lado, podía sentir una especie de película acuosa sobre sus profundidades castañas. ‘ cuando te conocí pensé que podría jugar contigo como quisiera ’ chasqueó su lengua contra su paladar y sonrió de lado. ‘ luego me di cuenta que eras un juguete indisciplinado, que se dejaría llevar por sus ideas y no las mías ’ se refirió a él con las palabras que pensaba realmente en los demás. dio un paso hacia el frente y otro más para rodearlo y verlo directo a la cara. por su mejilla se deslizó una lágrima acuosa. ‘ y te vi como un igual ’ también lo hizo con el japonés, que aunque no se negaba a nada, terminó transformándose en una persona para ella. ‘ y no me equivoqué, uh ’ levantó una comisura de sus labios y limpió el camino salino que se trazó sobre su mejilla, quería que se hiciera cargo de lo que hizo. ‘ podría golpearte ahora mismo, me pica la mano para hacerlo ’ y se rió con algo de amargura. ‘ pero eso es lo que quieres, ¿no es así? ’ inclinó su cabeza hacia un lado, en su lugar, subió su mano hasta la mejilla contraria y le dio una suave caricia con la yema de su pulgar. ‘ no eres el villano que te pintas ser, no te creas la gran cosa ’  y le dio un par de palmadas sutiles sobre su piel, como si estuviese ayudándolo a despertarse. ‘ las personas no decidimos de quien nos preocupamos, sólo pasa, y no porque intentes herirme dejaré de importarte ’ lastimosamente para el inglés, venus era demasiado segura de sí misma para dejarse engañar; aún cuando le causa tristeza lo que le ha dicho. aún cuando le da lástima que tenga esa imagen de sí mismo, ni siquiera quiere preguntar las razones. bajó su mano hasta su hombro y le dio una nueva palmada. ‘ tú serás un cretino mentiroso, y yo soy una asesina, y aquí estamos, uh ’ y lo confesó. lo dijo en voz alta por primera vez. ‘ no vuelvas a mentirme o te rajaré la garganta ’ la amenaza fue vacía, pero así como inició estaba dispuesta a terminar. dio un par de pasos hacia atrás y se giró sobre sus talones.

quisiera darle crédito a lo que escucha, pero no puede. si lo piensa bien, parece que otra persona se ha metido a mover el cuerpo de la tailandesa cual títere porque la venus real no habría admitido que le importa, ni siquiera en un millón de años, ni siquiera al borde de la tortura más extrema. por una parte, tenía un ego que se lo impediría. por otra, ¿qué había hecho él para ganársela alguna vez? ante la incredulidad sonríe, pero no con diversión. sonríe porque aquello se siente como un universo paralelo donde todo se ha puesto de cabeza. ' no estás hablando en serio, ' desacredita la confesión y la disculpa ajena con un simple gesto negativo de su cabeza. él y venus no eran así. tampoco había estado dentro de sus planes llegar a serlo... en algún momento. ' deberías reconsiderar dos veces los vínculos que intentas formar con los demás. o quiénes son esos demás. ' expulsa una exhalación amarga cuando le aparta la vista y gira sobre los talones, mirando en otra dirección. a decir verdad, sí se había molestado un poco con ella, incluso si no quiso admitirlo. hacerlo le obligaría a reconsiderar qué tan auténticamente le importaba la mujer... y, en teoría, eso no era posible. jeremy no podía tolerarse desarrollando vulnerabilidad auténtica por nadie. no cuando su presencia en reverie tenía un objetivo muy específico. ' ¿sabes quién soy? ¿sabes qué soy? además de mi nombre, quizá mi profesión, di algo de mí. ' no habría nada que se le podía ocurrir, del mismo modo en que él tampoco podría mencionar algo de venus. aquello, que había comenzado como un juego entre ella, hiro, él, no podía convertirse en algo más. ' no te encariñes con un desconocido que no es más que un cretino mentiroso. te ahorrarás... muchos momentos como este. ' y aquello sería lo más honesto que podría aconsejarle.

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‘ en inglaterra deben tener una fotografía de él con un se busca ’ baja su mirada hasta su bolso y tira de la cremallera, saca su espejo oscuro y mira su reflejo al otro lado del cristal. perfecta, como siempre. sólo quedaba ese fantasma de orbes ligeramente enrojecidos, y agradece no recibir preguntas de parte de su (ex)compañero de equipo. ‘ seguramente sí, debe tener memorizados sus lunares o posición de su pelo, tiene cara de obsesivo ’ si es que el perro era verdaderamente suyo, aunque no lo duda, sobre todo por el ridículo nombre que le había puesto. ‘ mi compañera dijo que podría estar en un spa con él, pero pasé a ver a uno cerca y no vieron a ningún hombre con un perro ’ suspira pesado, cierra su espejo de golpe tras limpiar con borde de su uña el costado de su ojo izquierdo y lo devuelve a su lugar en su bolso. ‘ no podemos seguir en categoría c, jeremy ’ aunque su voz suena fría, cuando devuelve su mirada hasta él, le sonríe. ‘ así que espero que seas de los neandertales que comen rápido ’ suelta con gracia, da un par de pasos en su dirección y se voltea para quedar a su lado, toma con seguridad el brazo masculino para que la guiase al lugar. ‘ tengo ganas de un filete, así que espero que me lleves a un buen lugar ’ su voz suena mandona, como siempre. ‘ nada con muñecas o te mato ’ recuerda amenazar, pero cierta burla se esconde tras su vociferación.

' empiezo a creer que ese perro es agente especial de la interpol, sabe esconderse mejor que nadie, ' exageró con una seriedad inusitada, fingida, que sólo era conveniente porque no sería tan descarado para abordar directamente una vulnerabilidad. ' eso o sabe trucos de magia y el que mejor se le da es el de hacerse invisible. ¿crees que piers se de cuenta si agarro el primer poodle que se me cruce? de esos abundan. ' va acercándose con un caminar lento que sólo detiene cuando logra una distancia prudencial, estudiando las vidrieras a la derecha. desde allí observa el reflejo de la tailandesa. ' o podríamos hacer cualquier otra cosa. bimbo puede esperar una hora más mientras almorzamos. '

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‘ ¡qué bueno! espero que hayas tenido que viajar con un niño atrás de ti golpeando tu asiento todo el camino ’ lo había visto en películas, hasta llegar a berna nunca antes había viajado en una clase que no fuese la primera o ejecutiva. sin embargo, ¿lo diría en voz alta? no. esperaba que las personas lo supieran por su cuenta, y estaba segura que jeremy lo tenía claro. ‘ ¿qué cosas? espero que te haya raptado un mickey mouse drogadicto del central park ’ o una rata gigante del metro. o que no le hubiera pasado nada, además de haber perdido su teléfono y, con ello, su número de teléfono. en el fondo — aunque no lo diría — esperaba que nada malo le pasara jamás. lo quería demasiado para soportarlo. 

contra todo pronóstico, se dejó abrazar de vuelta. le costaba dar esos pasos, esas muestras de afecto que sólo el japonés y el norteamericano habían logrado provocar, además de las personas que la conocieron antes de ese día.  y más él. que era la única persona que conocía su secreto, ese que había jurado llevarse a la tumba y mantuvo como una duda entre quienes la vieron ingresar al pabellón de la cárcel de alta seguridad tailandesa. ‘ no sé si estás siendo un asqueroso o si me estás cumpliendo un capricho ’ murmuró, algunas melodías jocosas cosquillearon sobre sus cuerdas vocales, enterró sus dedos en su chaqueta y la apretó un poco, sin importarle si sus uñas lo herían de alguna forma. se lo merecía, por tonto, por hacerla dormir con una sudadera gigante que decía que amaba la ciudad más asquerosa del mundo. ‘ te voy a matar ’ lo amenazó, pero no lo soltó, en su lugar acomodó su cabeza hacia un costado y apoyó su oído en el pecho masculino. 

‘ claro que me extrañaste, soy maravillosa ’ chasqueó su lengua contra su paladar y empezó a aflojar el agarre, se tiró un poco hacia atrás y lo miró, con sus ojos entrecerrados, como si estuviese estudiando que no se tratara de una especie de trampa barata que estuviera allí. un juego de esos talismanes y gente extraña. ‘ yo también te extrañé ’ estiró su cuello y puso sus pies de puntillas, para darle un corto beso sobre su mejilla. solía tener esas muestras de afecto solamente con hiro, porque jeremy, constantemente, estaba jugando con sus límites, pero esta vez era diferente. ‘ te voy a matar igual ’ sentenció, mientras quitaba sus manos de su lugar. limpió el rastro de lágrimas con el dorso de su mano, su mirada se encontraba sobre el mar que chocaba contra el roquerio. ‘ vuelves a desaparecer así, te iré a buscar yo misma y tendrás que pagar por preocuparme y por hacerme pisar ese país de mierda ’ su amenaza iba vacía, pero el sentimiento que la albergaba era tan real que quemaba en su pecho. jeremy era su karma. entre todas las personas que podía querer en el mundo, eligió al idiota incapaz de enfrentar sus emociones. pero era su idiota. ‘ ¿ya te pusiste al día con el caso? tienes que ayudarnos a kurorin y a mí a investigar, nos tocó con gente poco seria ’ por no decir que inútiles.

Aunque los manotazos no se sentían lo suficientemente fuertes como para hacerle daño, Jeremy se dejó retroceder. Sabía que el recibimiento no sería precisamente efusivo, ya se había mentalizado de ello desde antes de buscarla; si le quedaban uno o dos moretones se sentirá afortunado.

"Hey, hey, con cariño, el viaje fue largo y todavía tengo el cuerpo adolorido, ¿por qué carajos las misiones siempre son tan lejos de Berna?" Bromeó, sin hacer mucho para protegerse del ataque. Había desaparecido, y sin esforzarse en mantener el contacto que prometió, estaba bien el escarmiento. Aunque, a decir verdad, tenía una explicación, pero desconocía si eso apaciguaría la ira ajena, así que no intentó ofrecerla. "Lo siento, ¿de acuerdo? Sólo... Pasaron muchas cosas," se mantuvo apenas sonriendo hasta que las lágrimas empañaron el rostro de la fémina y algo en su interior se contorsionó con violencia del dolor. ¡Detestaba hacerla llorar! Detestaba recordar que no era indiferente para ella y que todavía tenía un corazón que sufría por los demás. Más por ella que por cualquier otro, por ejemplo. "Ya, ya, estoy de vuelta, en serio, esta vez no me iré," balbuceó con rapidez, repentinamente nervioso y envolviendo su figura con sus propios brazos. Quería hacerla bien de algún modo y desconocía si tan siquiera existían las opciones al alcance. Así que... Inhaló profundo, con ese aroma tan Venus inundando sus pulmones, la zurda acariciando los cabellos de su nuca. Maldito blando, eso es lo que era. "Te dejaré que me castigues todas las veces que quieras..." Murmuró para después hacer una pausa corta. "Aunque si me abrazas el tiempo suficiente, quizá deje de oler tan feo." En un impulso que sabía sería sancionado después, aplasta un besito rápido contra su cien. "Te extrañé muchísimo, eso no es una mentira."

¿Acaso lo sabía? ¿Que siempre sería su favorita?

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‘ esa es mi respuesta ’ rectifica con una amplia sonrisa en sus labios, capaz de enseñarle parte de la dentina femenina. lastimosamente para jeremy, venus ya lo había elegido como uno de sus perros. ‘ ¿eres fácil de alegrar? debiste haberme mentido, así le ponía un poco más de esfuerzo ’ izquierda toma la parte superior de la manilla y la tira hacia abajo, sería más fácil tomarla de esa forma. ‘ ¿invitarme tú? ¿no se supone que eres tú quien tiene que recibir algo? ’ era tan estúpido, no se daba ni cuenta. tierno. pone un mechón de su cabello tras su oreja y viaja la mirada hacia el comedor comunitario. ‘ déjame invitarte yo, por tu esfuerzo, pero no vayamos aquí — hay una cafetería bajando la calle que podríamos probar, ¿qué te parece? ’ termina de preguntar cuando vuelve su mirada hacia él. le convenía tenerlo cerca. 

al escucharla hablar apenas y enarcó las cejas en un gesto leve. ' ¿esa es tu respuesta? ' siguió sin inmutarse, incluso si algo en su interior le clamaba apurar el paso y actuar como ese caballero que realmente no era. ' nadie ha dicho que tengas que rogar. sin embargo, un trato es un trato: ¿qué recibiré a cambio? soy fácil de alegrar. incluso, hasta te podría invitar algo caliente más tarde. '

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‘ no te la vas a llevar ’ suena como una orden pronunciada desde lo más profundo de su vientre, casi puede sentir el escalofrío en su nuca ante la simple idea de encontrarse con la muñeca en suiza. ‘ ¿quieres que alguien intente asesinarte, jer? ’ eleva su mentón para encontrarse con su rostro, una vez que lo tiene cerca. diestra va hacia amuleto que carga en su chaqueta, como un prendedor, es suficientemente frío para distraerlo. una sonrisa traviesa brilla en sus carnosidades, apoya una de las alas de la mariposa contra su cuello ‘ ya está tomado ese lugar ’ voz suena como un murmuro, debido a la cercanía, tan pronto como afonía llega a su garganta, se aleja nuevamente y devuelve mariposa a su lugar. ‘ denegada solicitud de llevarte a una de estas ’ las señalas con un movimiento de su mentón. ‘ ¿ya viste en el armario? ’

' ¿cómo me leíste la mente? pensaba llevármela al dormitorio. ' dejó de revisar la pequeña libreta que encontró en la mesita de noche para dirigirse hasta venus, con la muñeca dedicándoles una cándida sonrisa desde su asiento. ' ¿qué mejor compañero de habitación que una annabelle que intenta asesinarte noche tras noche? ' ladea le cabeza, sonriéndole al artículo. ni siquiera parecía tan tétrico.

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‘ ay, jer, no puede ser ’ se detiene de golpe, maleta corriendo tras de sí y decepción —falsa— se dibuja en su semblante con tanta naturalidad, que podría reírse internamente. ‘ primer día y ya estás intentando sacar ventaja ’ suspira pesado, sus hombros caen por la presión y detiene el andar de las ruedas, dejándola a su lado. quieta. ‘ ¿me ayudarías con los escalones? ya me duele los brazos de tanto subirlas ’ y sin quererlo, allí en su labio inferior, se forma un puchero que termina de romper con una sonrisa. ‘ no me hagas rogarte, deberías ser más caballero ’ 

📍 dormitorios.

' ¿día atareado? ¿te hacen falta manos extras con eso? las mías se encuentran a disposición por un módico precio. '

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apenas escuchó la vociferación masculina, se tensó y una mueca se formó en sus labios. tomó una nueva calada de su cigarrillo y miró de reojo a su lado. además de mentiroso, era un cobarde. ‘ no quiero hablar contigo, jeremías ’ aunque utilizó su apodo, estaba profundamente irritada. ¿con él? no, no esperaba menos tampoco. era con ella misma, por haberle creído y ¡peor! porque le importa que le haya mentido. ¿por qué estaba creando lazos donde se prometió sólo ir de paso? dios, le contó de él a gala. quería vomitar. ‘ ¿tus adulaciones son mentira también? ¿te caigo mal realmente? ’ preguntó si desviar su mirada hacia él, su mano estaba tiritando de la rabia y tomó otra calada para tranquilizarse. ‘ no ’ aún así soltó una negativa y se dio vuelta, no quería estar enojada con él, pero lo hacía tan difícil. sobre todo cuando vio esa cara de imbécil unos pasos más atrás, al voltearse. ‘ no me gusta que la gente que me importa me diga mentiras ’ su rostro era una roca incapaz de generar una sonrisa o cualquier tipo de expresión. se levantó de su lugar y se volteó para verlo, dio una última calada al cilindro de nicotina antes de apagarlo contra la suela de su zapato. ‘ y no debí decirle a arabella lo que me dijiste, lo siento ’ sus disculpas no iban vacías y tampoco quitó su mirada del rostro masculino, no era justo que fuese solamente él quien se acercara entre los dos. sacó una caja metálica de su bolsillo del pantalón y metió en su interior la colilla extinguida. ‘ y me irrita, profundamente, que entre todas las personas en este campamento, me importes tú ’ en realidad, cualquiera, incluso la existencia de hiro le molestaba un poco, a estas alturas. ‘ ¿vamos a alimentar al kraken? ’ quiso cambiar el tema, moviendo su cabeza en dirección al bote. 

' qué manera tan romántica de pedirme que entreguemos nuestras vidas a un monstruo legendario hambriento de almas humanas. ¿quién crees tenga un mejor sabor? ¿tú o yo? ' jeremy siguió caminando hasta detenerse a pocos metros por detrás, manos en el fondo de sus bolsillos y una postura apenas encorvada. tenía que ser cauteloso, sabía que la mujer estaba enojadísima con él... y esa era su manera de hacerlo. ' yo diría que tú. nadie iguala tus encantos, ' soltó con una dulzura excesiva, apelando a las adulaciones para que las ira de venus no fuese máxima cuando le viera. de momento, guardaría esa misma distancia hasta convencerse de su propia seguridad. ' y... ¿cómo estás? ¿esperando a alguien? '

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‘ ¿eres de los tradicionales, jer? ’ la utilización del apodo que usa en contexto más serios no es más que una estrategia para confundirlo, molestarlo un poco. divertirse a su costa. ‘ vale, iremos a una cita — pero ya que yo invito, elegiré yo cada detalle ’ la sonrisa torcida fue filosa, casi sardónica y traviesa, estaba dispuesta a volverlo su peor pesadilla sólo por encontrar un momento de dispersión y dejar nuevamente su mente en blanco. por suerte, su ex compañero de equipo ayudaba. ‘ uh — déjame pensar en los otros imbéciles que conozco ’ su índice chocó con su mentón, una, dos y hasta tres veces; en una espera que se traduce en el avance del segundero de un reloj. ‘ sí, tu categoría es única ’ se refería al nivel de estupidez que lo caracterizaba, pero tenía razón. junto a hiro, era una de las personas con las que más disfrutaba pasar tiempo, aunque fuese de una forma enfermiza, si se lo permitían. el salpicar agua de vuelta, no fue más que una sentencia de la venganza que vendría luego. ‘ disculpa por desconfiar de un tarado que invita a cualquiera a su habitación ’ hace referencia sin querer a preocupación que despertó durante el ataque, y un sabor amargo creció al fondo de su boca, se ve obligaba a hundirse un minuto para tragarlo / ignorarlo. ‘ te escuchas hasta abajo ’ se quejó y volvió a tirar agua en su dirección, como si realmente le molestase haber seguido escuchando su hilo de estupideces. ‘ asco ’ hizo una mueca en sus labios y se acercó al borde de la piscina, posó sus manos sobre uno de los brazos masculinos e intentó empujarlo para poder sentarse en el borde de la piscina. ‘ córrete, quiero sentarme ’ imperativa, como siempre, suele pedir accionables banales sólo para sentir el placer de que se sale constantemente con la suya. ‘ o mejor, súbeme ’ sonríe con cierta travesura brillando en su dentina, ¿quién podía culparla por ser una caprichosa sin remedio? al menos, él no. 

' ¿oops? ¿no es un poco íntimo hablar de eso? llévame a una cita primero, ' no revela gran verdad con aquella respuesta desprovista de toda seriedad. sabe que quiere matarlo casi con la misma seguridad que no lo detesta tanto como proclama. es divertido así, sin tener que acercarse demasiado pero disfrutando de la presencia del otro con una dinámica retorcida e incomprensible. era el único modo en el que jeremy entendía y sobrellevaba sus vínculos con otros. no tan cerca, tampoco tan lejos. ' corrección: soy tu imbécil favorito. ' concede con una morisqueta elaborada donde dobla el torso con la mano apoyada en su propio abdomen. desafortunadamente para él, es el momento perfecto para que la otra le devuelva más agua. sus propios dedos peinan hacia atrás los mechones escurriendo. ' ¿qué? te llamé porque quería que me acompañaras, ' ríe, frotándose el rostro con las palmas para despejarse la humedad y verla mejor. ' ¿se te hace difícil creerlo? que no tengo segundas intenciones. ' porque entendía que no fuese exactamente confiable, pero más allá de la travesura sólo quería entretenerse un rato. ' aunque... sí diste en el clavo ahí, me encanta que me humillen, ' con un tonito exageradamente dulce retrocede hasta encontrar el borde de la piscina a sus espaldas, donde puede estirar y apoyar los brazos. ' ¿me volverías a dar el placer? '

[vienitas]

el hilo discursivo que se inventó masculino sólo la irritó más y más. iba a matarlo. era gracioso como jeremy podría provocar carcajadas y enojo en venus a la vez, incluso, ahora mismo está luchando con la idea de no salpicar un poco de agua entre risas. sentir el agua alrededor de su cuerpo antes de tiempo la pone de mal humor. ‘ porque, aparentemente, te gusta la violencia, ¿es uno de tus kinks, jeremías? ’ levantó una de sus cejas y allí, sin poder controlarlo, también lo hace una de las comisuras de sus labios. se rindió ante su estupidez. ‘ eres un imbécil ’ sus manos se metieron bajo el agua y empujó parte de la masa acuosa en su dirección, salpicándolo de vuelta. ‘ te voy a hundir, luego diré que te ahogaste porque estabas nadando como perrito, así no alcanzan a sentir pena por tu muerte ’ su amenaza fue evidentemente vacía, se pudo notar en la sonrisa divertida que de pronto se encuentra en su boca. ‘ ¿querías que me metiera para humillarte aquí también? ¿no te bastó con el pingpong? ’ jamás dejaría ir esa victoria, que si bien fue estrecha, la disfrutó con cada fibra de su ser. 

' ¿no te gustó? quería hacerte el favor de aclimatarte con la temperatura. ya sabes, para que no lo pienses tanto a la hora de entrar, ' ríe con descaro, siguiendo cada uno de sus movimientos incluso si eso no le permite evadir el agua que levanta en su dirección. bufa divertido repasándose el rostro con las palmas para ver mejor, sólo para abrir los ojos y encontrarla caminando en su dirección. quizá hoy tenía ganas de tentar al diablo. ' ¿por qué tanta violencia? ' intenta retroceder con los brazos en alto, por si necesita sostenerle de las manos o hacerse un escudo con el agua. ' ¡mírate! ' y ríe, más cretino que nunca, ' funcionó. '

[vienitas]

lo soltó en voz alta, al vacío. odiaba haber ido allí sola. sin embargo: esa voz. esa maldita y horripilante voz. sus orbes se abrieron de par en par y sintió como su mirada se aguaba, no quería mirar y pensar que estaba alucinando. que era su cabeza la que le jugaba una mala broma, porque sería admitir que le había afectado ver ese nombre entre otros tantos que le fueron irrelevantes. su mandíbula se apretó, temerosa, miró por el rabillo del ojo y lo vio allí. con la misma cara de estúpido de siempre. ‘ ¡dame dos razones para no matarte ahora, jeremy fox! ’ nombre real y completo apareció en escena, como una materialización más de la rabia que la estaba atacando. aún así, dio un par de pasos hacia él, los suficientes para chocar con su torso, sin embargo, lejos de darle un abrazo lo empujó con sus palmas. ‘ eres un tonto, un idiota, un imbécil, quién te crees, dime ’ le dio un par de palmadas contra su anatomía, su voz resonaba en el roquerio hasta con un poco de eco. estaba histérica, ni siquiera se dio cuenta cuando un par de lágrimas bajaron por su mejilla. ‘ quién te crees para hacerme llorar tres veces, pedazo de inútil con cara de sapo ’ reprochó, esta vez detuvo sus palmetazos y lo abrazó. lo abrazó fuerte. ni siquiera le importaba si los veían y le quitaban puntos. ‘ eres tú el que huele a mierda, apestas a estados unidos ’  

COSTA ROCOSA. "Algo huele raro en el aire, como si fuera azufre." @vienitas

"¿Estás segura? Si hasta me puse mi perfume favorito. Ven, déjame abrazarte para que puedas olerlo un poco mejor." Poco a poco fue acercándose a la chica, brazos abiertos y buscando envolver su figura.

[vienitas]

‘ ¿te sientes identificado con anabelle, jeremías? ’ lo observó con una ceja en alto y palpable molestía en su rostro. estaba cansada de seguir hablando de un temor que le confió —aunque también negó veinte mil veces—. ‘ ¿necesitas también un besito en la frente? ’ decidió cambiar el rumbo de la jugarreta. golpeó nuevamente la pelota entre un par de risas tan burlonas como ese brillo que acompaña activamente sus orbes, cuando está en compañía del dúo. quiso abrir la boca, pero no fue hasta que hiro habla que tira una patada hacia atrás, a ciegas, esperando darle aunque fuese en alguna zona de su pierna o pisarlo. ‘ ¡cállate! te voy a cortar la lengua ’ molesta, volvió a golpear la pelotita está vez con un poco más de fuerza. ¿punto? ‘ no — sigue, hazme enojar, la siguiente se la apunto a su nariz ’ movió su mano para alentar al japonés a continuar con el hilo de estupideces, quizás era el secreto para anotar más puntos a su contrincante. ‘ ¿me estás defendiendo? ’ elevó una de sus cejas en dirección al masculino, entonces recuerda. ‘ uh, jer ’ el apodo que pronuncia suele ir acompañado de una alianza, más que un ataque; tiene sus códigos. ‘ sabías que kurorin ’ dio el primer golpe en dirección al masculino, dando un bote al otro lado de la malla. ‘ está de novio con arabella, la de samhain ’ encontró un nuevo rumbo, que la alejaba a ella del foco de atención un rato, al menos. ‘ ¿te contó y fui la única que no sabía o nos está viendo la cara a ambos? ’ @jcrcmy & @hirochis

' no, no hemos terminado, ' replica con una sonrisa cándida aunque su comentario no tiene un propósito más allá del más simple incordio. ' me parece que están siendo un poco crueles con annabelle. la han juzgado como a un libro a su portada, podría ser una pobre alma maldita necesitada de... afecto. un besito en la frente, algo así. sí saben qué es eso, ¿no? ' se alza de hombros en una de las oportunidades que abanica la bola hacia la mujer. la muñeca mencionada ni siquiera existía, el mismo jeremy se había deshecho de ella por si acaso. ' ay, venus, no juzgues a los pobres mortales que no están en la clase de agilidad. si en las de combate nos dieran uno que otro tip sobre pingpong todo sería mucho más— ' ¿divertido? desafortunadamente parece que aquella explicación le hace desconectar la coordinación de su brazo pues al mover la raqueta, la pelotita pasa por encima de su hombro. chasquea la lengua, meneando la cabeza. mientras espera que hiro supla una nueva bolas hacia venus, ofrece otra burlita: ' debería aprender de ti, oh, gran reina del pingpong. kurorín, toma apuntes también. esta oportunidad no se repite dos veces. ' @hirochis & @vienitas