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No le sorprende lo hábil que es con sus movimientos habiendo escuchado de sus hazañas en el pasado, interesándose más cuando el nuevo proyecto para vencer a los kaijus había llegado a su antigua plataforma y donde un omega sería el centro de todo, pero sí está fascinado sobre la actitud de este, demostrando que sus palabras son ciertas, jamás había estado con alguien que no pudiese mover a su antojo. “Estás en lo correcto, hyung, aunque el hecho que eres diferente al resto me atre más.” Junto a su belleza única y voz, aquella que ha imaginado susurrando otras palabras más deliciosas o incluso su propio nombre y que rara vez se dirigía a él durante el día. El alfa se apoya en una pared de brazos cruzados, sin quitarle la mirada encima al mayor y ocultando bajo su rostro serio la molestia de ser comparado con unos inútiles, eso incluyendo a su mejor amigo. “Por lo que veo y oído, haz logrado conectar o estás muy cerca de hacerlo con dos, Minsu no será difícil, no cuando actúa inocente con tal de obtener tu atención.” Esos ojitos de cachorro y gestos que otros desconocidos podían encontrar tiernos o confundirlos con un omega no solían irritarle hace años, hasta que presenció cómo los usa a su favor para adelantarse y tener al omega más bajo entre sus sábanas. “Pero yo no soy como ellos, soy directo y no miento cuando digo que estoy interesado en ti, de lo contrario no estaría aquí platicando contigo.”

Juega  con  el  bastón,  moviéndolo  entre  sus  delicados  dedos  al  igual  que  lo  usa  para  hacer  estiramientos  de  los  músculos  de  su  espalda  y  hombros,  riéndose  cuando  vuelve  a  escuchar  al  otro  tan  seguro  de  las  tonterías  que  dice.  -  —No  le  pertenezco  a  nadie,  Yejun-ssi.  Soy  un  alma  libre,  que  toma  decisiones  a  su  antojo  y  deseos,  un  concepto  que  seguramente  te  parece  raro  de  un  omega.  ¿Estas  acostumbrado  a  los  sumisos  y  que  hagan  todo  lo  que  dices?  —  -un  sexista  seguramente,  que  se  creía  mejor  y  más  grande  que  todos  los  demás  por  ser  un  alfa.  Honestamente,  no  sabía  de  donde  su  padre  sacaba  que  podría  ser  compatible  con  él  si  era  la  persona  más  intolerable  de  la  base.  -  —No  te  encuentro  tan  interesante  como  Taeyong  o  tan  encantador  como  Doyoon,  mucho  menos  adorable  como  Minsu.  El  tiempo  que  te  regalo  deberías  atesorarlo,  aquí  el  que  va  a  hacer  lo  que  yo  diga  y  se  moverá  bajo  mis  ordenes,  eres  tú,  alfa.

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El más bajo sonríe ante la respuesta de su novio, palabras capaces de aliviar los celos unos minutos. “Ya eres el hombre más atractivo del mundo, mi amor, por eso todo el mundo te observa.” Hanbin se pone ligeramente nervioso al sentir la extremidad sobre su piel, sabiendo qué sucedería de no estar en un lugar repleto de gente y que, dependiendo de cuánto desea tengan por el otro, podrían llevar a cabo una parte en el auto antes de regresar. El beso se siente fugaz pero eso no evita que ambas flores de su aroma rodeen a ambos mientras comprueba lo que dice el más alto al alejarse, enojándose aún más con la mujer y los dedos de la diestra se enredan en torno a los cabellos oscuros de Junseong. “Es una lástima, porque no pienso compartir a mi dragón ni ahora ni nunca.” Recalca la posesión sobre el otro, los sentimientos en su pecho están hablando por su cuenta y guían a Hanbin hacia otro contacto más profundo, donde el choque es más desesperado y abre la boca lo suficiente para que la lengua propia baile con la del alfa, su cuerpo comienza arder producto de la mezcla de sus celos y toque de vergüenza al estar en público. “Eres—mío, solo mío.”

El  lobo  en  el  interior  de  Junseong  deja  salir  un  ronroneo  de  satisfacción  al  saber  que  efectivamente,  su  novio  estaba  celoso.  Comúnmente  era  al  revés,  porque  el  abogado  mejor  que  nadie  sabía  que  Hanbin  atraía  personas,  era  gentil  y  dulce,  todos  querían  robarse  su  atención  y  tener  al  omega  para  ellos.  Los  celos  para  él  no  eran  acto  de  inseguridad,  sino  de  un  amor  profundo,  sentirse  deseado  y  adorado  por  el  más  bajo  le  produce  un  gran  placer.  -  —Para  poder  igualar  e  ir  a  la  par  con  tu  abrumadora  belleza,  te  mereces  una  pareja  que  sea  igual  a  ti  —  -su  palma  se  extiende  aun  más  por  la  cintura,  sintiendo  la  piel  debajo  de  su  dermis  y  las  vertebras  moverse  en  cada  respiración.  No  podía  esperar  en  llegar  a  casa  y  arrancarle  aquel  vestido,  hundirse  en  él  hasta  el  día  siguiente.  Su  atención  vuelve  al  otro  cuando  toca  sus  labios,  cuando  habla  sobre  como  hacer  que  todos  dejen  de  mirarlo  y  una  sonrisa  ladina  se  dibuja  en  su  faz,  Junseong  cayendo  directamente  sobre  esos  labios  que  le  fascinan,  saboreando  el  licor  que  ha  tomado  y  el  brillo  labial  que  acrecentaba  la  dulzura  de  su  omega.  Como  hombre  famélico,  aquel  manjar  le  saciaba  de  inmediato,  suspirando  cuando  se  separa  ligeramente.  -  —Creo  que  aun  tengo  miradas  encima,  bésame  de  nuevo.

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El traje negro y pulcro de Minsu es decorado con manchas carmesí a su alrededor, una mano libre envía un mensaje con su ubicación al resto de guardaespaldas aunque no necesite su apoyo, pues suele tomar misiones por su cuenta. La otra extremidad arrastra por el pasillo un cuerpo atado con el rostro cubierto, ignorando los sonidos que provienen de este, carne fresca y enemigo de quien le rescató cuando el mundo le dio la espalda a corta edad y había aceptado un destino cruel en las manos de un desconocido. Minsu tenía la costumbre de ir por enemigos o personas que hablaban más de la familia Jun, sobre todo del heredero de esta para impresionarlo junto a los mayores, que lo vean como el único alfa digno capaz de proteger al omega principal, alimentando así la obsesión que tiene por ser el centro del Universo para Sakmin. Pero también va por otro tipo de presa, aquellos que han compartido cama con su amo y tenido el privilegio de estar entre las piernas de la belleza en forma humana, aquella que el chico de cabellos oscuros solo podía tener en sueños. El más alto deja al pobre hombre sobre la mesa de comer, como ya es común en sus cacerías solitarias, encontrándose en ese lugar solo con su salvador y al cual muestra total respeto arrodillándose a sus pies. “Le he traído un preciado obsequio, Sakmin-nim, si desea entretenerse con él más tarde ordenaré que sea encerrado cuanto antes.”

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Caleb Ryu, 15/09/????, virgo, vampiro.

Es omega, su esencia es a incienso y violeta.

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Momo for Onitsuka Tiger ⋆ ˚｡⋆୨୧˚

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Una cálida sonrisa, aquella que solía mantener oculta a todos, se dibuja en sus labios al ver al otro actuar de esa manera tan adorable, dejando que el aroma que lo distinguía a Siyoon aparezca, envolviendo al omega. “Siempre aviso en caso que deba salir, hyung.” Agrega, pasando un brazo alrededor de la espalda del mayor y sujetarlo con más fuerza a su cuerpo. No le gusta dejarlo por mucho tiempo, sobre todo cuando tiene encargos sin parar que solo pueden encontrarse al regresar a casa durante la madrugada, sin embargo y con el hecho que su hermano está cerca, intentaría permanecer más tiempo a su lado y protegerlo de otro reencuentro. Rowoon no lo ha visto desde que el corazón del omega fue lastimado, enfrentándose al otro alfa a golpe hasta quedar satisfecho, molesto porque no cumplió la promesa de hacerlo feliz por ambos, por lo tanto la idea de tener otra plática de ese estilo está presente en su cabeza. “Podemos pedir comida a domicilio para el almuerzo y cualquier otra cosa que desees.” Moonhyuk podía traerlo de regreso de sus pensamientos, sacándole una suave risa por lo necesitado de afecto que lucía, girando el rostro y dejando un beso en la sien y frente ajena. “Pero primero debes comer algo, Monnie, prometo cargarte en brazos si deseas regresar a la cama y estar conmigo hasta que te aburras.” Actuaban como pareja cuando no lo eran, en parte es su culpa al no ser directo con las palabras y preguntar si quería salir con él formalmente, pero en el fondo sabe que tiene miedo al rechazo y ser visto como una copia de quien fue el amor de su vida. “O quizás alguien necesita caricias para despertar completamente.” El más alto sujeta con la mano libre el mentón del contrario, frotando sus narices antes de unir ambos labios en un profundo beso.

Moonhyuk  había  tenido  los  días  más  tensos  y  largos  en  muchos  años  gracias  a  la  presencia  bien  conocida  de  alguien  de  su  pasado,  una  persona  que  deseaba  no  volver  a  ver  y,  aun  así,  en  contra  de  sus  propios  deseos,  solía  ver  día  con  día  en  el  reflejo  de  Rowoon.  Pronto  tuvo  la  certeza  de  que  no  eran  la  misma  persona,  las  personalidades  siendo  completamente  diferentes  hicieron  que  el  menor  de  los  Hwang  se  asentara  en  su  una  parte  de  su  corazón  y  se  volviese  su  lugar  seguro  para  volver,  especialmente  luego  de  un  interrogatorio  tenso  y  aprensivo.  Sigue  oliendo  a  cuero,  pero  ahora  del  aroma  del  café  tostado  se  anteponía  por  mucho  a  la  tinta  de  Siyoon,  persiguiendo  esa  misma  esencia  hasta  la  cocina  mientras  se  tallaba  los  ojos  deseando  abandonar  el  cansancio  que  le  consumía  en  ese  momento.  -  —Aquí  estás…  pensé  que  había  salido  a  trabajar  —  -comenta,  arrastrando  los  pies  descalzos  por  el  suelo  de  aquel  departamento  hasta  alcanzar  al  más  alto  y  besar  su  mentón,  acurrucándose  como  un  gatito  en  contra  de  su  cuello  y  hombro,  abrazándolo  por  la  cintura.  -  —Me  gusta  la  idea  de  quedarnos  en  casa  todo  el  día  —  -no  quiere  mencionar  que  se  siente  estresado  por  el  regreso  de  Siyoon,  que  se  siente  abrumado  por  la  muerte  de  dios-sabe-quien  en  su  recinto  de  trabajo  y  claro  estaba,  que  podía  percibir  las  feromonas  alteradas  de  Rowoon  por  el  regreso  de  su  hermano.  Moonhyuk  era  el  primero  en  decirle  que  podría  reconciliarse  con  su  familia,  ahora  que  aun  podía  hacerlo  estando  todos  vivos.  Pero  ahora,  no  quiere  tocar  ningún  tema  estresante.  -  —Tal  vez  más  tarde  tenga  ganas  de  salir,  por  ahora,  solo  quiero  estar  contigo.

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“Creo que están algo equivocado, mi estimado, aún en esta situación tengo más ventaja que tú, mi hogar sigue intacto.” Es directo, echando un vistazo a su colorido y bien cuidado jardín. Minjun se ríe con fuerza, sujetando su estómago exagerando la reacción, pero no por eso le parecía menos divertida viendo de él. “Esa fue una de tus mejores bromas, Youngdae y perdóname si ofendo tus sentimientos, si es que aún tienes, pero preferiría mil veces morir en la hoguera a casarme con uno de ustedes.” Ya tuvo esa plática con Junseong, cuando el dragón le propuso las ventajas de ser su esposo y entre ellas estaba algo que el omega ansiaba desde pequeño, ser libre al fin y no un títere que sus padres movían a su gusto o beneficio propio. No obstante, el príncipe del zafiro jamás aceptaría un matrimonio arreglado pues su corazón ya le pertenece a otra persona. “Puede presentar el alfa que quiera y yo seguiré rechazándolos, así que seré un dolor para él hasta que se aburra y muera.” Ojalá pronto, la guerra ha vuelto al rey más paranoico haciendo alianzas con los reinos más fuertes y Minjun no tenía paciencia, odiando que se resguarda tras la armada y su propio hijo como ticket a la estabilidad del reino. “Buena suerte a ti con encontrar pareja, la necesitarás.”

Youngdae siente un deje de adrenalina sabiendo que ahora estaba del lado de los ganadores, pero la conversación no le permite sentirse completamente victorioso cuando una pequeña espina aparece entre ellos dos. No son mejores amigos como antes, eso es evidente, todos han cambiado y seguramente para mal. ❝ Mi reino se declaró neutral con todos, no fue mi culpa, fue culpa del estúpido de mi padre ❞ que una jugada idiota como esa, también la espera del padre de Minjun y probablemente pronto. Aunque con el poder que Junseong se estaba ganando y luego de someter este golpe de estado de color rojo, nadie tendría ganas de pelear con él. ❝ Y ve donde lo dejó su neutralidad, en cenizas. No te culpo Minjun, tú tienes tanto poder aquí en tu reino como yo en el mío… es nulo ❞ Sus ojos se fijan en el omega, recargándose en su silla y formando una sonrisa ladina, sutil. ❝ ¿Tu querido papá ya tiene ideas para tu alfa? Rechazaste la oferta de Junseong y no tengo que preguntar para saber que lo harás conmigo, tus padres tampoco querrían que yo fuese tu esposo por mis condiciones. ❞

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DESIRE: UNLEASH - JW VER.

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No sabía tratar a otros de manera gentil aunque lo intentase, importándole poco si dañaba sentimientos ajenos o no, sin embargo esta es una ocasión especial y, aunque su forma de expresarse sea tosca, realmente deseaba que a Yohan le encantase su regalo. “Mi tiempo es demasiado valioso como para buscar la presa perfecta, tómalo o déjalo, es tú decisión.” Exclama de inmediato, su lobo interior contento por el halago al tamaño del animal perfecto para satisfacer el hambre del más alto por días o alimentar a su grupo, cualquier opción estaba bien con tal que lo aceptase. “No mucho, estuvo persiguiéndolo entre los arbustos por casi media hora hasta que tuve la oportunidad de atacarlo desprevenido. No cazo porque no sepa, si es lo que piensas, sino porque prefiero quedarse en mi cómodo hogar en caso que alguien me necesite.” Seungwon cruza los brazos, sigue ansioso por la reacción del otro theta, recorriendo con sus ojos oscuros los movimientos del otro y sobre todo, lo bien que le quedan los lentes, provocando que sus facciones propias se tiñan de rojo y termine por mirar hacia abajo. “Entonces… ¿Sí te gusta?”

Yohan  en  toda  su  vida  no  esperó  tener  que  comenzar  a  planificar  cuales  serían  sus  obsequios  de  cortejo,  puesto  que  no  tenía  intensión  alguna  de  unirse  a  ningún  omega,  sino  dedicarse  toda  su  vida  a  mantener  sana  la  manada  de  Suyeong  y  traer  al  mundo  cachorros  de  otros.  Por  ende,  cuando  apareció  Seungwon  y  los  dos  parecieron  conectar  hasta  el  punto  donde  su  heat  y  rut  se  sincronizaron,  y  con  los  alfas  dando  su  consentimiento  para  iniciar  el  cortejo  —uno  más  feliz  que  el  otro,  claramente—  es  que  las  cartas  estaban  sobre  la  mesa.  El  lobo  dorado  había  abierto  la  puerta  de  su  cabaña  temporal  en  la  manada  de  Seungwon,  donde  también  ejercía  su  trabajo  como  theta,  observando  el  animal  muerto  tendido  en  su  entrada.  -  —Me  impresiona  que  condiciones  si  me  gusta  o  no  algo,  y  me  amenaces  a  no  salir  a  buscar  otra  cosa  para  mi  cortejo  si  no  es  de  mi  agrado  —  -la  diversión  se  nota  en  sus  vocablos,  acomodando  las  gafas  de  marco  delgado  sobre  su  puente,  optando  por  analizar  la  presa.  -  —Es  grande,  ¿Cuánto  te  costó  derribarlo? 

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El menor asiente varias veces, pues no había criatura más encantadora y linda que la niña, imaginando que a futuro se volvería alguien muy similar a su padre omega. “Mis padres me enseñaron a luchar por lo que amo, noona, no puedes enojarte conmigo por quedar impregnado de ti.” En realidad, no era algo que pudiese controlar en aquel momento, sus pensamientos rondaban alrededor del delta y sus pasos inconscientemente iban hacia él, ganándose constantes advertencias del primer mate hasta llegar a una inevitable pelea entre ambos. Cualquier valentía de tocar cierto tema disminuye al sentir los labios más suaves y dulces del omega contra los suyos, pintando las mejillas de rojo y bajando la mirada hasta Micha y su adorable forma de reclamar mimos. Podían pasar diez años y aun así, Doyoon no dejaría de experimentar mariposas en el estómago ante cada roce. “L-Llevaré un canasto, de paso le construí uno pequeño a Micha para que pueda sujetarlo sin problemas… puede estrenarlo ese día.” El menor espera que Sakmin deje un beso sobre ella y luego frota su nariz contra la sien de la más joven, recibiendo otra sonrisa y borrando totalmente cualquier amargura de sus facciones, marcándola con su esencia. “A veces la miro y no entiendo cómo creció tan rápido si ayer era una cachorrita que no podía siquiera transformarse… es increíble, no solo su nacimiento, sino que también tú has cambiado el mundo para nosotros, Minnie.”

Que  Micha  haya  elegido  la  flor  más  grande,  especialmente  para  él,  le  llena  el  corazón  de  un  calor  natural  que  solo  le  producía  la  más  pequeña  en  brazos  del  otro.  Doyoon  le  enseñaba  de  flores  y  frutas,  al  parecer  siendo  la  forma  en  que  tanto  el  otro  como  su  cachorra,  demostraban  su  amor.  -  —Es  realmente  hermosa  mi  cielo,  pero  nada  es  más  precioso  que  tu  —  -comenta,  tomando  su  flor  y  acariciando  la  punta  de  la  nariz  de  la  otra  con  su  índice,  arrancándole  una  risita.  -  —Un  lobo  insistente,  que  sin  importar  los  gruñidos  que  recibiera  de  Taeyong,  no  paraba  de  buscarme  —  -el  recuerdo  es  algo  agridulce,  pero  al  final  del  día  las  cosas  funcionaron  para  los  dos,  lo  que  orillas  a  Sakmin  ahora  a  inclinarse  y  dejar  un  beso  en  los  labios  del  otro,  un  suave  cosquilleo  en  la  marca  sobre  su  cuello.  Micha  no  tarda  en  exigir  su  atención,  tomándolo  de  los  collares  en  su  cuello  y  jalar  de  ellos,  haciendo  un  puchero  en  sus  labios  y  pedirle  un  beso.  El  pelinegro  se  inclina  para  besarla  en  la  frente,  dejándola  contenta.  -  —Me  encantaría  ir  con  ustedes,  tal  vez  pueda  bordar  algunas  margaritas  en  su  ropa  del  otoño,  para  nunca  olvidar  este  momento. 

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El alfa echa un vistazo a los mensajes de su celular, leyendo felicitaciones de varios presentes tanto por la maravillosa fiesta como los nuevos acuerdos para expandir la moda, sonriendo de oreja a oreja al escuchar que en efecto, su último presente había encantado el corazón del mayor. “Me alegro saberlo, mi amor, últimamente es difícil conseguir jóvenes alfas que puedan ser manipulados, muchos ansían dominar perdiéndose el placer de estar a merced de otros.” Dice con una pizca de malicia y seducción. El saco negro descansaba a su lado, dejándolo solo con el pantalón, camisa blanca y corbata a medio deshacer, esperando que sea el otro quien termine de removerla para su deleite personal. La mirada regresa al atuendo de su esposo, ha estado embobado por horas, conteniendo con todas sus fuerzas los impulsos de saltarle encima cuando Sakmin modelaba frente al espejo o maquillaba. Las imágenes de todo lo que podría hacer en esa espalda o entre las piernas no han abandonado su mente. “Pero por ti haría lo imposible, noona.” Recibe contento el peso, envolviéndolo de la cintura con una mano mientras que la otra sostiene la copa, aceptando el choque de ambos labios y apretando sutilmente la piel sobre la tela. “¿Quieres atacar primero, cariño? Me muero de ganas por ver la reacción del chico cuando camines en ropa interior por la casa…” Doyoon sujeta el labio inferior del omega entre sus dientes unos segundos antes de separarse y beber parte del trago, el alcohol no necesita calentar su cuerpo pues ya lo está hace horas.

-  —Tu  nuevo  regalo,  me  gusta  —  -Sakmin  rompe  el  sutil  silencio  entre  los  dos,  luego  de  una  larga  noche  en  una  fiesta  donde  tuvieron  que  saludar,  sonreír  y  vestir  sus  mejores  ropas  para  seguirse  asegurando  contratos  en  las  tiendas  departamentales  de  lujo  de  Doyoon  y  sus  propios  diseños  de  ropa.  El  omega  trabaja  en  el  mini  bar,  sirviendo  Martinis  para  los  dos  y  el  sonido  de  sus  joyas  es  lo  que  interrumpe  la  seriedad  de  la  noche  en  su  hogar.  -  —Es  obediente,  podemos  enseñarles  muchas  cosas  al  pequeño  alfa  —  -el  vestido  de  satín  rojo  caía  por  su  figura  como  una  segunda  piel,  el  escote  ligeramente  prominente,  la  cintura  apretada  y  una  de  sus  piernas  al  descubierto  por  la  apertura;  lo  más  interesante  era  la  espalda  descubierta  hasta  el  inicio  de  sus  caderas,  compensando  todo  ese  espacio  vacío  con  cadenas  que  caían  por  su  columna.  Los  tacones  estaban  abandonados  por  ahí,  sus  pies  descalzos  llevándolo  hasta  el  sofá  donde  estaba  el  otro  y  busca  sentarse  sobre  su  regazo  de  forma  horizontal  a  sus  piernas,  ofreciéndole  la  copa  y  manteniendo  la  suya  cerca.  -  —Eres  el  mejor,  alfa.  Todos  tus  regalos  siempre  son  exquisitos  y  perfectos,  nadie  me  conoce  como  tu…  —  -el  omega  deja  un  beso  sobre  los  labios  del  otro,  sonriendo  radiante. 

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"Minsu  era  mucho  más  sencillo  de  conseguir  por  su  personalidad  ligeramente  aniñada"

Diez puntos para Slytherin otra vez y en tu cara Yejun-cabeza-hueca-hyung(?)

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Puede sentir la ira de Jisu y ojalá no sea contra su persona(?)

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La imagen de su mate trabajando en los atuendos de la más joven con mucho esfuerzo llena su corazón de amor, haciendo que la esencia cítrica a naranja se endulce y extienda por el lugar. Doyoon se ríe suavemente y ayuda a Micha deletrear ‘margarita’ a lo que recibe una sonrisita de regreso por la pequeña. “Encontramos un prado cerca, Micha no dudó en dejar los juegos a un lado y elegir la más grande todas.” La cachorra había mencionado a Sakmin en cuanto la arrancó con cuidado, así que el más alto entendió sus intenciones desde el inicio. Mira a su hija reír un poco tímida ante su declaración, extendiendo las manos hacia el omega. “Así es, le conté esa historia en el camino… de cómo conquisté a su madre a base de flores y comida, mucha comida.” Doyoon era excelente cazando a pesar de lo que mucho creían por su personalidad más introvertida, teniendo una enorme fuerza en la mordida, por lo que preparaba constantemente recetas familiares para el más bajo y claro, su mate en ese momento. “Nuestra bebé quiere regresar otro día, por si deseas acompañarnos, estoy seguro que te gustaría ver los colores de la naturaleza antes que llegue el frío.”

El  hecho  de  que  Micha  creciera  a  pasos  agigantados  y  tener  cuatro  mates  que  le  apoyan,  habían  hecho  de  sus  viajes  y  sus  momentos  de  trabajo  en  una  maquina  de  cocer  y  un  maniquí  de  medidas,  mucho  más  sencillos.  No  tiene  que  preocuparse  por  donde  está  metida  porque  seguramente  alguno  de  los  cuatro  estaría  detrás  de  ella,  por  ende,  le  daba  tiempo  de  terminar  la  pequeña  ropita  con  pieles  y  abrigos  pesados  para  Micha,  con  el  otoño  y  el  invierno  acercándose.  Sakmin  alza  la  vista  desde  la  aguja,  formando  una  sonrisa  al  ver  entrar  al  más  alto  con  la  pequeña  entre  sus  brazos.  -  —¿Qué  traes  ahí,  mi  cielo?  —  -el  omega  deja  sus  labores  para  ponerse  de  pie  y  alcanzarlos  al  medio,  Micha  balbucea  el  nombre  de  la  flor,  alzando  su  vista  hasta  Doyoon  para  que  este  confirme  que  lo  ha  dicho  bien  y  Sakmin  puede  tomar  la  margarita  en  sus  dedos.  -  —Es  muy  hermosa  mi  amor,  si  mal  no  recuerdo  papá  me  regaló  una  de  estas  hace  varios  años.

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Doyoon adora los cachorros, recuerda cómo solía jugar con los de su anterior manada o enseñarles cosas básica para vivir, como recolectar frutas o flores. La llegaba de Micha solo aumentó ese cariño, en especial con los momentos a solas donde corría detrás del alfa o se escondía entre los arbustos para jugar. Pero había algo en su corazón, una idea anclada desde que la más pequeña de la manada ya comenzaba a balbucear y a exigir atención con sus delicadas manos y radiante sonrisa. "Micha trajo algo para ti, mi amor." dice entrando a la cabaña, con la mencionada en sus brazos y quien sostiene la misma flor que Doyoon le regaló al delta cuando su relación aún no era posible a pesar que ambos sentían una conexión única.

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Por favor, le urge tener una mejor vida por el bien del reino(?)

Ella  opina  que  hay  que  hacer  un  sindicado(?)

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De verdad necesita vacaciones permanentes, oh dioses tengan piedad(?)