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satounokeshiki · 9 months
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Olivia Satou
Julie Han fr KISS OF LIFE
「佐藤オリビア」
Her Basics 「オリビアの基本的だ」
25 yrs | 21日4月 | taurus | infj
single n' bisexual
1,65 | 54kg
🖌🎷🍌
Her favourite song:
Una joven creativa, melómana y torpe que desea convertirse en una pintora extraordinaria viviendo en el departamento 2C
Curiosities 「好奇心」
Su carácter es algo temperamental, esto gracias a su madre quien realmente tiene una voluntad de acero al igual que una forma algo tosca de hablar; de su padre heredó la paciencia para hacer las cosas, de ahí viene su amor al arte principalmente.
Sabe hablar tanto japonés como español, sin embargo, definitivamente un idioma que se le facilita más es el español en ocasiones, después de todo su madre casi la obligó a hablarlo perfectamente, mejor que el japonés por lo menos.
Le encantan las películas animadas, su favorita es El increíble castillo vagabundo de Ghibli, al igual que Spiderman into the spiderverse, de hecho, de ahí adoptó la frase de dar saltos de fé.
Su comida favorita son el katsudon y las enchiladas verdes, después de todo el sazón que tenía su madre era increíble, y gracias a todos los dioses ella lo heredó, por lo que siempre se preparará la comida ella. Tanto japonesa como mexicana.
En sus tiempos libres suele cantar, bailar y tocar el violín, de hecho, suele subir mucho contenido a Tiktok, realmente no le importa si a la gente no le llama la atención, ella es feliz mostrándole al mundo su talento.
Se enorgullece de ser parte japonesa principalmente gracias al manga, el anime y la música de allí, es por eso que cuando llegaban a molestarla por ello siempre procuró defenderse, por supuesto que no siempre lo logró.
History 「歴史」
La música siempre sería la principal conexión entre la gente, y un claro ejemplo de ello era el feliz matrimonio de Mónica y Hikaru, dos personas que a pesar de pertenecer a culturas completamente distintas terminaron por casualidades de la vida enamorándose.
Mónica era una pianista mexicana algo famosa, la mejor en su clase sin duda, alguien que se había dedicado completamente a la música toda la vida a pesar de que su familia le hiciera saber de mil y un formas que no tenía futuro alguno.
Por otro lado, Hikaru era un joven japonés que disfrutaba de la música, jamás tuvo el talento para ello, sin embargo, siempre se lograba escapar de sus entrenamientos de natación para poder disfrutar un poco más de la vida, después de todo era un nadador empedernido, alguien que disfrutaba enormemente del deporte, específicamente de la natación.
Ambos se conocieron por mera casualidad durante un concierto de la mexicana en la ciudad natal de Hikaru, se podría decir que fue amor a primera vista de parte del nipón, aquella mujer le había cautivado con su belleza y su música sin duda alguna; por ello fue por lo que hizo todo lo que pudo para acercarse a ella y conquistarla, algo que logró rápidamente pues aquella mujer también sufrió de una especie de flechazo cuando conoció al tímido hombre.
Los años pasaron y finalmente lograron tener a una niña a quien decidirían llamar Olivia, después de todo Hikaru había insistido en que su pequeña tuviera un nombre cercano a la nacionalidad de su madre, la cual le parecía bastante hermosa.
La pequeña Satou creció más que feliz en un entorno lleno de música, y si bien aprendió desde muy pequeña a tocar el piano y el violín, también se inclinó por el hip-hop, r&b y el rock, realmente aquellos tres géneros eran los que más le llamaban la atención. Sin embargo, algo que tomó desprevenido a sus padres fue que su retoño desarrollara el sueño de ser una artista plástica, nada más y nada menos que una pintora.
Ambos lo respetaron, pues ellos mejor que nadie sabían lo importantes que eran los sueños, fue por ello por lo que se esmeraron de sobremanera para lograr que su pequeña aprendiera todo lo que pudiera para cumplir aquella meta que se había formado en su mente.
Por supuesto que Olivia pasó su vida entera en las nubes, era alguien risueña cuando se le conocía mejor, y muy abierta con la gente a quien consideraba cercana; claro que aprendió también a ser cautelosa, después de todo no quedó fuera de ser un objetivo de bullying en la escuela, algo que la dañó considerablemente en su momento, sin embargo, que fue sanando poco a poco. Por supuesto que todo aquello dejaría una huella algo dolorosa en ella, una que de vez en cuando le acecharía.
Los años pasaron y pronto la joven Satou encontró la oportunidad perfecta para estar cerca de lo que más amaba: el arte. Encontró una vacante en la galería de Windenburg, un poblado que parecía ser de lo más tranquilo; y así fue como comenzó su vida sola, sus padres la despidieron entre lágrimas y promesas de llamarle cada semana.
Ella se mudó con la gran esperanza de cumplir sus sueños.
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