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Lorenzo Zurzolo in Baby (2018—)

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❝  this  is  turning  into  a  lovely  evening  .  ❞ con @tarkcvskiy

“¿Lo crees así?” Pregunta con el ceño fruncido sin entender realmente la pintura frente a él— ni ninguna en toda la exhibición. El nombre de esta había sido el gancho y se encontraba decepcionado de lo que estaba en la galería. “¿Sientes algo viéndola? Son manchones y títulos vanguardistas que intentan alzar las obras mismas como si realmente fuesen.. eso.” No le importó que cerca suyo hubiesen personas fanáticas, lo abstracto no era lo suyo. 

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❝ you’d think they know that . unfortunately they’re not very bright . ❞ con @huntergeurink 

“No me sorprende, la mierda se les huele desde acá.” Exclama observando al grupo de chicos bebiendo de la lata rota por la parte inferior. “Joder, beben el puto alcohol como si comieran una polla. Terminarán acercándose para intentar pelear o terminarán intentando llevarse a una chica a casa. Como si les creciera cinco centímetros por lograr cualquiera de las dos cosas.” Levanta su vaso de agua mineral para darle un sorbo, permaneciendo en el asiento en donde había estado desde que la fiesta le había dado la bienvenida. No solía bailar, no solía beber y ahora solo vendía a los que se acercaban de manera discreta, por lo que Hunter era una compañía excelente para la reunión.

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jvdcnct‌:

@rcllianshakusky

Lo que en un principio había creído que era una idea horrible, al final había resultado bastante bien. Con la ayuda de aquel chico las cosas habían sido mucho más sencillas, por no hablar de que siempre estaba bien tener a alguien que le obedecía sin dudar. Extrañaba ese pequeño placer de dar las órdenes, pero estaba claro que estaba muy lejos de volver a ser capitán, no merecía a pena ni que se preocupase por aquello.

Al llegar al parque de bomberos aparcó la ambulancia y miró hacia el chico—. ¿Sabes? En el fondo no has sido tan inútil como esperaba —concedió saliendo del coche mientras se empezaba a deshacer de la chaqueta del uniforme—. ¿Quieres tomar algo? Tenemos refrescos en la cocina.

Habría podido arrepentirse ante las decisiones tomadas que le habían llevado a quedar como la carnada para propósito de ayuda a los afectados más era incapaz de hacerlo ya que había resultado mejor de lo que incluso había imaginado. Tenía que pararse en un lugar, seguir las indicaciones, divertirse un rato tratando de no herirse y continuar obedeciendo. 

“No soy un inútil, barba negra. Te sorprenderías.” Es suficiente agradecimiento para él escuchar esas palabras, por lo que no agrega más y baja del propio lado del vehículo. “Eres más amable cuando no hay animales a tu alrededor. No suena mal, te sigo.” Podría haber sonreído en ese momento, aunque prefiere no arriesgarse. “¿Esto es lo que haces? ¿Salvar gente y beber refrescos?” Pregunta con interés al mayor.

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maddieabbot‌

Madison miraba atacada la escena que se desarrollaba ante sus ojos; un hombre desconocido estaba yendo contra todo lo que ella habia dicho y aunque ella no quisiera admitirlo en voz alta, el llevaba la delantera. El muchacho estaba jugando bien sus cartas y molestandola con lo que mas le afectaba: la salubridad de su hogar. Miro como se tumbaba en el sofa y sintio como si de repente estaba al borde de un colapso mental, pensaba hablar, decirle algo, pero antes de poder hacerlo su telefono vibro, era Hunter. ‘’Ay, callate. – ¿Quien te crees para tratarme como tu criada? Mugroso.’’ Le respondio con enojo, pero sin apartar su mirada del movil mientras empezaba a mantener una conversacion con con Hunter por mensaje de texto. ‘’Mira, zarrapastroso, la unica manera que yo te busque un vaso de agua es que tenga cianuro para ver si te da algo y dejas de molestarme.’’ Amenazo con rabia; eran amenazas vacias, quien conocia a Madison realmente sabia que ella no era, ni seria nunca, capaz de una cosa tan grave. Siguio intercambiando mensajes con Hunter, pero la conversacion no tardo en ir mal y las lagrimas no se hicieron esperar. Madison se giro, dandole la espalda a su rehen mientras le mandaba los ultimos mensajes al moreno que tanto la confundia, rapidamente secandose las lagrimas y sintiendose aun peor de lo que se sentia antes de que su telefono vibrara. ‘’¡AGH! ¿Por que me odias Diosito?’’ Chillo para ella misma como lo hacia tantas veces en su casa, esta vez ignorando que tenia un espectador. ‘’Y ya a ver si te levantas y dejas de ser tan estupi–– ¡¿QUE HACES?! ERES UN CERDO, ASQUEROSO, INMUNDO.’’ Grito, al ver lo que hacia el contrario, tomando un pequeño adorno de madera y aventandoselo a la cabeza al chico antes de acercarse y darle un empujon, queriendo alejarlo de su sofa.

Una risa irónica sería la única respuesta al insulto de la rubia, hundiéndose más en el asiento que le correspondía mientras ella continuaba tachándolo de mugroso. No tenía que comprobarle su estado de sanidad o de bañarse en cloro e incluso seguramente haciéndolo, recibiría los mismos insultos; razón por la que había preferido permanecer en silencio con esos labios retándole con el gesto. “Tú me ofreciste el agua, rubia inmaculada.” Lo decía en doble sentido, ya que ella estaba tan enfocada en la limpieza que seguramente su alma estaría igual. Ni siquiera la veía, mensajeaba con su amigo y reía cada vez con más diversión. “No quería un vaso, pedí una botella de plástico; hermética, estéril. ¿No era plástico lo único que me ofrecías? ¿He escalado al vidrio?” Preguntó, ladeando el rostro en el sillón para verla un par de segundos. No tenía miedo a las amenazas, las había escuchado lo suficiente en su vida. La vería retirarse y de nuevo, en segundos, escucharía como rezongaba. Le llamaría la atención uno de los cojines y como niño pequeño, lo acercaría a sus labios para dar una pequeña lamida, después una segunda ya que el sabor era bastante... limpio. No se percataría de que ella le veía hasta los gritos. “Joder, necesitas aprender a como dar un golpe. ¿Las uñas se te arruinarán?” Ya que el empujón ha sido más una caricia que un gesto de agresión. Toma asiento, viéndola a los ojos. “¿Estás— loca? Me tiras los waffles, estoy por largarme y me metes a tu puta casa; eso se llama secuestrar. No satisfecha me tiras los waffles de nuevo e intentas que me siente en el puto suelo ¿nunca recibes visitas?” Agrega rodando los ojos. “Le gritaste a tu sala, me gritaste a mí. Hay demasiados psicólogos, rubia; deberías ir a uno. Ahora, dame un puto vaso con agua o abre la puerta y quédate llorando sola mientras voy a ver a mi amigo.”

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fcksybil‌

Agradece no ser atacada con preguntas, sabe que debe respuestas a su inminente aparición, pero por ahora no tiene muchas ganas de hablar. “ No, solo agua ” tiene la garganta algo seca, aunque desconoce si es por sed o por la violencia en los eventos de aquella tarde. Aún estaba reciente y simplemente reza por no tener marca alguna en su cuello, de ser vistas seguro que tendría que responder a muchas cuestiones. Conoce el camino a la habitación ajena, por lo que se toma la confianza de llegar hasta ella y sentarse en la cama. “ ¿Puedes dormir conmigo? ” cuestiona, algo nerviosa a lo que estaba por pedir. “ Abrazarme y esas cosas ” carraspea, ni ella se reconoce en aquel momento. Había explotado, estaba cansada y reconocía que necesitaba un contacto afectivo más allá del sexo. “ Esto es raro, lo siento ” juguetea con el reloj en su muñeca y actúa con una timidez inusual en ella, siquiera podía observarle a los ojos por más de dos segundos. Porque demandar follar con alguien era una tarea normal en su vida, pero cierto era que no estaba acostumbrada a demandar cariño de esa forma. 

Si habían preguntas por hacer, las realizaría de manera posterior y con sutileza, sin estar interesado en los motivos en el presente; solo en la manera de hacerla sentir mejor. Asiente en silencio, separándose para ir por un vaso del líquido cristalino y al volver, la encuentra sentada en el borde. Toma asiento a su lado jugueteando con el vaso sin mencionar palabra alguna hasta que este silencio es interrumpido por la pregunta, no responde de inmediato, por lo que escucha lo atropelladas de las palabras de Sybil a continuación; alarga el brazo con el propósito de depositar el vaso en un pequeño taburete y respira un par de veces siendo tan nuevo en aquella área como ella. Sabe que lo que necesita es un amigo, recuerda las noches de mierda en las que él también deseaba alguno, su instinto le anima a acercarse y abrazarla de manera torpe. “No lo sientas, hay días jodidos Syb.” Ladea su rostro para depositar un beso en la cabellera ajena sin tener más intención que ser reconfortante. “¿Shani sabe que estás aquí?” Ya que no quería que la menor se preocupara por la ausencia de su hermana. “Puedes acomodarte y buscaré una manta para cubrirte — ¿de acuerdo?” Su mirada es bastante ilegible, una mezcla de preocupación e inexperiencia.

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fcksybil‌

“ Solo me importan los halagos que provengan de los labios adecuados ” peca un poco de mentirosa, sonrisa en alza tras la frase pronunciada. Bien sabido era que a Sybil le encantaba ser halagada, admirada, que resaltasen ya no solo su físico, también sus aptitudes. Cómoda con la postura adoptada, escucha con el ceño fruncido parte de la historia que conforma al joven. No es expresiva con ello, pero está sorprendida al conocer la difícil situación que tuvo que pasar Rellian de joven. Observa entonces la cicatriz ajena, aún no emite palabra y en mitad del silencio de la noche, la yema de sus dedos otorga una delicada caricia a la marca que decora el cuerpo del chico. “ Ahora soy yo la que quiere meterlos entre rejas ” con un afecto inusual en la joven, lleva a cabo un camino de besos desde la cicatriz hasta el rostro, atravesando la sensible piel del cuello contrario. “ Podríamos hacer algo, meter a esos hijos de puta en la cárcel e irnos lejos de aquí ” susurra, aquello no era más que la idealización de un plan que quizás nunca se llevaría a cabo, pero en aquel momento podría reconocer que de querer darle un susto a sus padres, ella acudiría a sus contactos sin pensarlo. Por él. “ Podríamos ser Bonnie y Clyde, pero más guapos ” sonríe y lo observa nuevamente, meditando si abrir parte de uno de los capítulos de su vida. “ Quiero explicarte bien a qué has venido, así que te lo resumiré… Mi padre perdió los nervios y dejó hospitalizado a un hombre, por la paliza que le pegó. Lo pillaron y estuvo unos meses en la cárcel ” encoge sus hombros, no quiere darle mucha seriedad a lo contado, por lo que no tarda en volver a alzar una sonrisita. “ Ahora sí, por fin puedo decirte a qué has venido… ” en un movimiento, sus labios encuentran los ajenos para colisionar en el beso que llevaba buscando desde un principio. Comienza suave, pero es inevitable que la temperatura suba y que su lengua haga juego con la del joven, su cuerpo buscando una mayor cercanía en movimientos traviesos y peligrosos.

“¿Labios adecuados es el nombre de la lista?” el tono sarcástico presente acompañando a la sonrisa traviesa de sus labios. No era una chica que pasara desapercibida para el resto, no solo lo pensaba, lo había comprobado veces anteriores en la discoteca. Intenta no prestar demasiada atención al asunto de sus padres. Era una herida que se mantenía tan presente como hace años, intentaba no estar en contacto con ello por la misma razón, el resentimiento que relucía a pesar de todo y afortunadamente la terapia tomada en años posteriores a eso había ayudado a que sus conductas mejoraran con el resto, sobre todo con él mismo. Sus ojos se cierran un par de segundos intentando respirar aún con tranquilidad ante el contacto con la cicatriz, sus palabras harían que nuevamente sus azules ojos se encontraran con los contrarios. Su piel reacciona al contacto con los suaves labios de la chica de manera agradable, terminando por erizar el cuello del chico, no se inmuta demasiado quizá por el tema tan delicado del que están tratando, quizá también por el autocontrol que suele tener de manera sobria. Su rostro nuevamente esboza una sonrisa floja ante el descabellado plan que aunque no pudiese llevarse a cabo sonaba bastante atractivo. “Suena jodidamente bien.” Susurró, agachándose para que el agua jugueteara un poco entre ambos. “Aunque ellos ya tienen suficiente cárcel con tener que pudrirse juntos.” Trataría de olvidar el tema tan personal sin querer exponer más, riendo suave ante la comparación. “Bonnie Parker tendría mucho que aprender de ti, Stavros.” Escucha con atención, no altera su mirada al estar consciente de que él en ocasiones pasadas y desagradables había tenido ataques de ira en menor intensidad a la del relato. Antes de poder responder es interrumpido por el contacto de los labios suaves de la chica sobre los suyos — no interrumpe el ritmo del beso, permite que la lengua de la morena se entrelace con la propia en movimientos cuidadosos, agradables, sin intentar precipitarse demasiado, la chica era hermosa, no solo físicamente, el interés que él tenía por ella relucía por eso mismo; no negaba que los juegos entre ambos también le gustaban. las luces de la casa prendiéndose en el ángulo que su mirada percató fueron señal de alerta para detenerse y voltear en búsqueda de sombras, algo que desde luego encontró. “creo que nos han pillado, morena. ¿sabes correr?” soltaría divertido, sabiendo que tendrían tiempo para tomar cosas y apresurarse a irse antes de que pudiesen llamar a una patrulla o esta llegara al domicilio.

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—  𝐓𝐇𝐈𝐍𝐆𝐒  𝐑𝐀𝐌𝐒𝐀𝐘  𝐁𝐎𝐋𝐓𝐎𝐍  𝐅𝐑𝐎𝐌  𝐇𝐁𝐎'𝐒  𝐆𝐀𝐌𝐄  𝐎𝐅  𝐓𝐇𝐑𝐎𝐍𝐄𝐒  𝐇𝐀𝐒  𝐒𝐀𝐈𝐃  ,  𝐏𝐀𝐑𝐓  𝐎𝐍𝐄  .

❝  won’t  that  be  a  hunt  to  remember  .  ❞ ❝  let’s  play  a  game  .  ❞ ❝  if  you  think  this  has  a  happy  ending  ,   you  haven’t  been  paying  attention  .  ❞ ❝  say  please  again  ,   and  you’ll  wish  you  hadn’t  .  ❞ ❝  terrible  guess  .  ❞ ❝  and  who  am  i  ?  ❞ ❝  you  forgot  to  ask  if  i’m  a  lair  .  ❞ ❝  everything  i  told  you  ,   is  a  lie  .  ❞ ❝  this  isn’t  happening  to  you  for  a  reason  .  ❞ ❝  i  enjoy  it  .  ❞ ❝  i  win  .  ❞ ❝  i’m  sorry  ,   terrible  timing  .  ❞ ❝  bet  you  always  thought  they  loved  you  back  .  ❞ ❝  would  you  say  it’s  your  most  precious  part  ?  ❞ ❝  this  is  mercy  .  ❞ ❝  my  mother  taught  me  not  to  throw  stones  at  cripples  .  ❞ ❝  a  little  louder  .  ❞ ❝  you’re  no  good  to  me  dead  .  ❞ ❝  you’re  just  meat  .  ❞ ❝  oh  sweet  ,   don’t  cry  .   it  will  be  over  soon  .  ❞ ❝  you  can  see  that  your  presence  has  become  a  bit  of  a  problem  .  ❞ ❝  this  is  turning  into  a  lovely  evening  .  ❞ ❝  those  creatures  who  came  in  the  night  ,   they  wanted  to  take  you  away  .  ❞ ❝  you  remained  loyal  .  ❞ ❝  some  bad  men  hold  this  castle  .  ❞ ❝  i  need  you  to  pretend  to  be  someone  you’re  not  .  ❞ ❝  they  collapse  under  their  proud  weight  and  slump  into  a  heap  of  nothing  .  ❞ ❝  you’d  think  they  know  that  .   unfortunately  they’re  not  very  bright  .  ❞ ❝  until  you’re  rotting  in  the  ground  .  ❞ ❝  remember  what  you  are  ,   and  what  you’re  not  .  ❞

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daliasantcs‌

 Sería ella misma quien más tarde se encargaría de recriminarse la tan estúpida decisión que había tomado, sin embargo, ahora mismo no tenía sentido pensar en ello y tenía que tratar de salvarse como fuese. Pensaba en ello cuando escucha los consejos del desconocido. Desvía ligeramente la mirada para dar rostro a la voz que le hablaba y asiente lentamente, siguiendo sus instrucciones. “��Funciona toda esa mierda?” Alzó la voz, notándose algo asustada; no le parecía que nada estuviera dando resultado, pero segundos después notó que sí. “No tendrás el gusto hoy, lindo gatito,” soltó a pesar del miedo antes de apurar el paso hacia el lugar donde se encontraba el chico, apresurándose a cruzar la puerta y esperar que la cerrara después. “Necesitamos… llamar a protección animal o a la policía, o a alguien,” soltó después, todavía con la voz agitada.

No sabría si reír por lo gracioso de la situación o porque si todo salía mal la chica estaría haciendo una estupidez gracias a él. Por fortuna resultaría de manera exitosa, así que en cuanto la castaña cruzó la puerta cerraría maldiciendo entre dientes, asintiendo a las palabras contrarias. “Lo sé, joder. Lo sé.” No se daría cuenta de que sus manos estaban algo temblorosas. “Mierda, cómo estabas afuera mujer.” Recriminó sacando el móvil sin saber qué hacer. “¿Cuál es el número?” Preguntó sin poder conectar sus ideas aún, marcando al 911.

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kangetsosie‌

Cuando el chico se acercó a él e interrumpió su tranquilidad con ese comentario que para él era innecesario y había sido una mierda, su bordería se encendió, algo no muy difícil.  — Bueno, quizás prefieran tu trasero como florero, ¿quieres probarlo? ¿te ayudo a introducirlas?  — Alzó una ceja mirándolo.  

Enarcaría una ceja en contradicción a la respuesta contraria, hasta ese momento no estaba de mal humor. “¿Te llegaron muy profundas ya, eh?” En lugar de molestarse solo rodaría los ojos sarcástico. “Solo te digo que la señora que vive acá acaba de plantarlas y como puedes ver, hay mucho pasto y palos más en donde puedes sentarte, si no lo quieres ya está, yo hice lo mío.” Encogió los hombros, pudiendo divisar a la distancia a la dueña del lugar que divisaba aquella escena. Rezaría para salir de ahí antes de terminar siendo insultado por la anciana.

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m-xreed‌

Escucho la voz del chico que salia detrás de el colocando la mano en el arma. Bajo el arma para evitar que el oso se percatara mas de sus pociones. “Entiendo, pero ¿Crees que quiero matarlo?” Musito con sinceridad en sus palabras pues el era el menos interesado en halar del gatillo. “Si tienes una idea de donde encontrar lo que pides para salvarnos dímelo.” Musito bajando la mira aceptando que el chico tenia razón, que al enfrentarse con las mirada a un oso no era gran idea. 

“No sé que más podría pensar al verte con un arma apuntando al animal.” Explicaría tratando de ver a donde podrían dirigirse de manera que nadie resultara herido. “Podrá encontrarlo solo, hay que alejarnos de cualquier callejón en donde los olores sean.. llamativos. Retirarnos sin correr a aquella casa podría funcionar.” Susurraría sin tener idea alguna de si eso sería eficiente o fallarían en el proceso.

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Lorenzo Zurzolo

[rcllianshakusky]

texts — hunter & rellian.

Hunter: Cállate, imbécil.

Hunter: ¿Te importa una mierda? ¿Quieres quedarte ahí para siempre?

Hunter: ¿Qué hay del auto del pelirrojo idiota? Todavía sigue aquí.

Hunter: Meh.

Hunter: Te advierto; no vas a ganarle.

Rellian: Mierda.

Rellian: ¿TE HA DOMADO?

Rellian: Mierda, lo ha hecho. ¿El peróxido de su cabello te llegó al cerebro? Quién lo diría.

Rellian: ¿Crees que me importa el auto o el pelirrojo? Bad news.

Rellian: Puedes meterte el meh por el culo para aparentar que no te duele, así practicas mejor tu indiferencia.

Rellian: No me importa ganarle, si me termina corriendo del empleo o haciendo servicio comunitario, la voy a enloquecer y valdrá la pena.

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My moods brought to you by Stitch [1/4]

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texts — hunter & rellian.

Hunter: La conozco.

Hunter: No te sientes en sus muebles.

Hunter: Te hará un berrinche descomunal.

Rellian: ¿Ya te ha domado?

Rellian: Entiendo lo que dices..

Rellian: Y me importa una mierda.

Rellian: Me ha ofrecido agua y todo, no es tan berrinchuda.

Rellian: Fui amable, mis zapatos no tocaron sus preciosas telas de seda tejidas en alguna época egipcia en donde ella cree que está para creerse tanto.

Rellian: Además, ella me invitó a entrar. ¿Qué debía hacer? ¿Fabricar mi asiento? No es una puta clase de carpintería.

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maddieabbot‌

Penso por unos segundos, quiza si era tan tonta para pensar que el dinero lo movia todo, pues en su universo si, el dinero tenia el poder de mover todo a su antojo. Justo cuando se disponia a responderle, no pudo evitar escuchar la conversacion que el joven mantenia por telefono, sus ojos abriendose en asombro a la mencion de ese nombre. No dudaba de que era el mismo sujeto que ambos conocian, despues de todo no era un nombre demasiado comun. Rapidamente, lo tomo por la camisa, usando todas sus fuerzas para mover al muchacho hasta ella, empujandolo para que se saliera de su camino antes de cerrar la puerta con seguro y ponerse la llave dentro de la camiseta. ‘’Resulta que si me apetecen los waffles y quiero comerlos acompañada.’’ Dijo como si hacia segundos no lo habia tratado como un mierda. La verdad era que las ganas de molestar a Hunter eran tan grandes, que la idea de que su amigo lo dejara plantado le encantaba. ‘’Toma asiento… ¡No!, no tomes asiento; bueno si, pero no en mi sofa; puedes tomarlo en aquella silla de alla o en el piso o en cualquier otro lugar que no sea…nada de esto.’’ Menciono, mirando su sofa, alfombras, sillas reclinables y demas cosas de tela que adornaban su sala. ‘’Digo, no es que crea que eres un bicho raro ni nada pero vienes de la calle, seguro usas ese uniforme todo el dia y no puedo dejar que te sientes en mi sofa. – Es una tela muy fina, es importada asi que… busca alguna superficie de plastico, por favor.’’ Fingio una sonrisa, consciente de que sonaba como una completa loca pero su miedo a que su casa se infectara con los germenes del muchacho era mucho mayor que su deseo a caer bien. ‘’¿Quieres algo de beber?’’ Ofrecio, ignorando por completo que acababa de secuestrar al repartidor de pizzas.

Tardaría más en reaccionar que en estar dentro de la casa de aquella chica, escuchándola decir aquella cantidad de estupideces. Su teléfono en mano mensajeandose con su amigo tratando de aparentar que le prestaba atención hasta que inevitablemente, sus palabras harían que le prestara atención. “¿En alguna superficie de plástico? ¿Estás jodiendome rubia?” Sus ojos podrían haber alcanzado el cielo en esos precisos momentos. No le haría caso en esta o en otra vida, sacudiría su cabeza mientras una sonrisa nada inocente se formaba en sus labios caminando lentamente por aquella sala tan pulcra y limpia. Rellian no era un cerdo, no tenía porque soportar a alguien que sugiriera que se trataba de la persona más asquerosa del mundo. Se retiraría la chamarra depositándola encima de una silla y su mirada se posaría en aquel sofá con la pinta de ser demasiado cómodo, procediendo a caminar y no solo sentarse, si no tirarse completamente sobre él; con la gentileza de que sus zapatos quedarían colgando al aire. ¿Acaso no era un caballero? “Esto es de plástico, la tela contiene poliéster.” Murmuraría sin borrar la sonrisa. “Agua en una botella de plástico, por favor.” No podía quejarse, estaba siendo amable.