punishertruther - Tumblr blog

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la ilusión que le hacía aquel bebé simplemente no estaba escrita. siempre había querido tener hijos pero nunca había tenido una relación adecuada para ello y ya después del accidente pensó que todo eso se había acabado para elle, pero ahora alicent estaba haciendo realidad uno de sus sueños y no podía evitar sentirse profundamente feliz. esperaba que otto fuese dándole una oportunidad, aunque fuese poco a poco, ya que quería demostrarle que de verdad amaba a su hija y podía hacerla muy feliz. terminó de recoger el desayuno con alicent y cuando estuvo todo listo, se despidió de syrax y cogió su abrigo para poder subirse al coche. "¿lista?" comentó visiblemente ilusionade, esperando a que alicent se pusiese el cinturón para finalmente poder arrancar y apoyar una mano y su vientre. "¿estás nerviosa?"

ver aquella sonrisa en los labios de rhaenyra hizo que una sonrisa boba se quedase dibujada en sus labios. "nuestro... tuyo y mío." poco a poco se iba haciendo a la idea de la maternidad, y no solo eso, sino que también comenzaba a ser consciente de que iba a poder compartir su vida junto a rhaenyra gracias a ese bebé. disfrutó del desayuno junto a elle, tomándose todo lo que le había preparado rhaenyra acomodada en su regazo. "creo que con eso vas a empezar a caerles mejor." aseguró riendo con suavidad, y es que aunque sabía que su padre estaría sumamente reticente de su vuelta con rhaenyra, cuando descubriese que estaba embarazada esperaba que fuese consciente de la situación y comenzase a aceptar a rhaenyra. tras aquel beso, sonrió de nuevo al notar las caricias en su vientre y se incorporó con suavidad para ayudarle a recoger las cosas del desayuno y dejarlas en el lavavajillas. "cojo mi bolso y mi abrigo y nos vamos." comentó yendo a por esas cosas y al volver fue directamente al coche.

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sabía que a naerys le preocupaba el asunto de terminar siendo una madre ausente como viserys lo fue con con ella, pero en su caso, estaba completamente tranquila ya que solo había que ver como estaba siendo la piloto en su día a día para saber que iba a ser una gran madre y que en absoluto iba a actuar como su padre biológico. entre la excitación que ya tenía, la mano de su futura esposa en el cuello y las penetraciones no le iba a costar mucho alcanzar el orgasmo pero ya en cuanto sintió la estimulación en su clítoris se deshizo por completo, gimiendo el nombre de su prometida en voz alta. cuando naerys también alcanzó el orgasmo, dejó que se tumbase a su lado y rápidamente se giró para acunar su rostro entre sus manos y besar muy despacio sus labios. "eso ha sido increíble." murmuró risueña.

toda la familia tenía completamente asumido que el ojito derecho de naerys iba a ser su hija, al igual que nadie la iba a consentir tanto como ella y es que aquel bebé era el mayor regalo que podría haberle dado la vida. ante aquella mirada, no pudo evitar presionar muy suavemente su cuello, apenas ejerciendo presión para no sobrepasarse, terminando por llevar su mano libre hasta su entrepierna y comenzar a estimular su clítoris para darle más placer y un orgasmo más intenso. cuando las uñas ajenas se hundieron en aquel punto de su anatomía, dejó escapar un gemido de placer entremezclado ligeramente con dolor, pero al notar como alcanzaba el orgasmo, le admiró totalmente excitada y no le llevó mucho alcanzarlo ella también, eyaculando en su interior mientras dejaba una embestida más firme y terminaba tumbándose junto a ella tras unos segundos, con la respiración totalmente descontrolada.

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"nuestro bebé..." repitió con una sonrisa de oreja a oreja y es que todavía no podía creerse que fuese a ser adre junto a alicent, que era sin lugar a dudas su alma gemela y el amor de su vida. mientras desayunaba con alicent en su regazo, cogió un pedazo de la manzana que se estaba comiendo y se lo dio a syrax al tiempo que se acababa el café. y el resto del desayuno. "ah pues perfecto. les cogemos eso así con un buen café y se lo llevamos, que léan siempre dice que el café que tienen en el taller es malísimo." obviamente quería ganarse al padre de alicent y a su tío porque sabía lo importante que eran para su amada, así que esperaba que teniendo esos gestos, le permitiesen mostrarles lo mucho que amaba a la periodista. besó con cariño sus labios y acarició despacio su cintura y su vientre para terminar rozando su nariz con la de ella y robarle otro beso. "¿nos vamos?" estaba impaciente por conocer a su bebé y no podía ocultarlo.

"puede, pero yo estoy convencida de que tiene algo que ver con nuestro bebé." aseguró con una sonrisa en sus labios, acercándose a dejar un tierno beso en sus labios y acariciando su nuca con suavidad. disfrutó del desayuno junto a rhaenyra, sonriendo al ver a syrax desayunar junto a ellas y por último se tomó el zumo. ante las palabras de rhaenyra, no pudo evitar esbozar una amplia sonrisa al ver sus intenciones por ganarse a su padre y a su tío. "ellos casi siempre suelen ir a comer a un pub que hay cerca del taller, pero hay un sitio que hacer unas tartas que a ellos les encantan. es más, me atrevo a decir que son sus favoritas, y como además pasamos de camino al taller al salir de la tienda del vestido, podemos comprar unos trozos y llevárselos." comentó con una amplia sonrisa, rodeando su cuello con sus brazos y acercándose a dejar un tierno beso sobre sus labios antes de terminar abrazándose a elle con suavidad.

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solo con ver como cuidaba de ella ya sabía que naerys sería una madre estupenda y siempre que tenía la oportunidad, se lo hacía saber. las dos iban a cuidar y a querer a jahaera por encima de todo, pero ya estaba convencida de que la pequeña que esperaban iba a convertirse en la consentida de su madre y no iba a negar aquello le encantaba. gimió más alto a medida que las embestidas se hicieron más fuertes, no dudando en retarle con la mirada a que apretase un poco más su cuello. naerys hablando en alto valyrio era su punto débil de ahí que al escucharla hablar en aquel idioma acompañado de todo el placer que estaba sintiendo hicieron que el orgasmo estuviese cada vez más cerca. sus uñas se hundieron en la parte baja de su espalda y a penas le hizo falta un par de embestidas más para deshacerse por completo en un orgasmo increíble que sacudió todo su cuerpo.

no le costaba nada tener aquellos detalles con su prometida, y es que todo lo que fuera ayudarle a que la situación fuese más llevadera lo haría más que encantada. en caso de que jaehaera padeciese los mismos rasgos que léan, estaría igual de encantada en cuidar a su niña y ayudarle a que su vida fuese más fácil aun a pesar de todo. a medida que las embestidas comenzar a subir de ritmo y firmeza, también lo hicieron los jadeos que escapaban de ella y se entremezclaban con pequeños gemidos. tener así a léan era increíble, de ahí que disfrutase tanto de entregarse a ella una y otra vez. una de sus manos se aferró a su muslo, mientras la otra ascendía por su abdomen hasta llegar a uno de sus pechos y comenzar a estimularlo con suavidad, para ascender hasta su cuello y rodearlo con sus dígitos sin hacer presión, pero aumentando la firmeza de las embestidas. estaba tan sumamente nublada por el placer que comenzó a hablar en alto valyrio, pronunciando lo bien que le estaba haciendo sentir y lo cerca que comenzaba a notar el orgasmo.

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"puede ser. o puede ser que seas muy guapa ya por si sola." comentó con una sonrisa pilla, dejando que se sentase sobre su regazo y pasándole un brazo por la cintura para poder acariciar su vientre mientras iba desayunando. aprovechó para tomarse la medicación con el café y dejó un tierno beso sobre su hombro mientras le miraba con dulzura. "vale, nos pasamos por ahí sin problemas. ¿él, tu padre o tu tío necesitan que les llevemos algo? o podemos cogerles algo para almorzar ya que pasamos por ahí." le propuso. no iba a negar que la familia de alicent le imponía muchísimo respeto, sobre todo los dos patriarcas de los hightower, pero esperaba que viesen que estaba perdidamente enamorade de su hija y sobrina y que solo quería hacerle feliz.

al incorporarse y ver el desayuno, no dudó en estirarse para besar con suavidad los labios de rhaenyra. "muchas gracias." comentó con una sonrisa en sus labios, sonriendo al notar las caricias en su vientre para terminar incorporándose y sentándose en su regazo, y es que aquella sensación era simplemente perfecta. "eso es que tú me ves con buenos ojos." comentó con una sonrisa en sus labios, acercándose a dejar un beso en su mejilla. "pero también es por el bebé." aseguró con una amplia sonrisa en sus labios antes de comenzar a desayunar, tomándose primero el té para que le ayudase a asentar el estómago. "qué rico." comentó dándole un trago de nuevo y dejándolo para comenzar a tomarse las tostadas. "por cierto, gwayne me ha avisado de que nos tenemos que pasar por el taller porque hoy tenía más jaleo, así que cuando salgamos de las tiendas nos pasamos por el taller."

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a pesar de los burnouts que le daban, naerys como no, había estado atenta a todo aquello y le había comprado tapones y auriculares nuevos junto con más fidget toys por lo que se pasaba el día con estos entre las manos para reducir la ansiedad que le veía provocada por los estímulos del exterior. no iba a negar que le preocupaba que jaehaera heredase aquellos rasgos de ella y es que solo quería lo mejor para su hija y que no sufriese tanto como lo hizo ella. dejó que su futura esposa le tumbase y al sentir sus dedos en su intimidad le fue imposible no jadear, elevando un poco más las caderas en busca de mayor contacto. le rodeó la cintura con las piernas y en cuanto comenzó a penetrarla le fue imposible no gemir de puro placer y es que llevaba desde que se despidieron por la mañana deseando aquel contacto. "joder, nae..." pronunció entre gemidos, apretando ligeramente las piernas alrededor de su cintura. "no pares, por favor..."

una de las cosas que había notar era cómo había afectado el embarazo en cuanto a la percepción de estímulos, de ahí que no hubiese dudado en darle nuevos auriculares con cancelación de sonido, así como tapones que reducían los decibelios y nuevos juguetes con los que tratar de mantenerse distraída. tenía la respiración acelerada cuando notó el éxtasis del orgasmo descender y tras dejar que léan se incorporase, llevó las manos a sus mejillas para besar sus labios en un húmedo y pasional beso, apegando su cuerpo al ajeno y haciendo que terminase tumbada en la cama. a sus palabras, jadeo con suavidad, acomodándose entre sus piernas, apoyada en las rodillas y llevando una mano a su entrepierna para comenzar a deslizar los dígitos entre sus pliegues mientras ella misma se masturbaba para tener una nueva erección. dejó caer un hilo de saliva sobre la entrepierna de léan, y tras deslizar su miembro para lubricarlo, comenzó a penetrarla despacio mientras jadeaba de puro placer y al cabo de unos instantes, comenzó a mover sus caderas con suavidad mientras se sus manos sostenían sus piernas a la altura de los muslos.

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si por un lado si se quedaba sola en casa durante todo el día con naerys se traducía a sexo sin parar, si se quedaba sin la compañía de su futura esposa echaba el día durmiendo y es que aunque no lo pareciese, el embarazo la tenía agotada y su sensibilidad ante los estímulos externos como podían ser los ruidos y las texturas, que ya era alta antes, ahora había empeorado y a la más mínima le causaban burnouts que hacían que se hiciese una bolita en el sofá o la cama y se quedase así hasta que naerys llegase. cuando la ex piloto alcanzó el orgasmo, se llevó consigo toda su esencia y fue parando poco a poco hasta detenerse por completo, relamiéndose los labios mientras se levantaba de su posición y se lanzaba a besar sus carmines. "quiero sentirte dentro de mi." le pidió con la voz tomada por la pasión, besando con ganas sus labios mientras apegaba su cuerpo al de ella.

todo lo que hacía por léan y el bebé, lo hacía más que encantada, pero no iba a negar que aquella evolución de hormonas que se traía léan encima era sin duda una bendición, porque nada disfrutaba más que tener a léan colmada de placer todo el tiempo que le fuese posible. dejó caer la cabeza hacia atrás ante los movimientos de su lengua, meciendo ligeramente las caderas y sosteniendo su cabellera con suavidad. podía sentir cómo el placer poco a poco comenzaba a acumularse en su miembro y es que sabía que no iba a ser capaz de aguantar mucho más tiempo de lo bien que estaba empleando su boca y su mano. "dios, mi amor..." entre sus caderas y su mano marcó el ritmo de los estímulos, gimiendo con suavidad sin apartarle la mirada y es que era increíblemente erótica la imagen que tenía ante ella. cuando no pudo contenerse mucho más, terminó culminando en su boca gimiendo su nombre de placer.

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naerys estaba todo el día pendiente de ella y de sus antojos y necesidades, así que no se le ocurría una mejor forma que recompensarla que hacerlo entre las sábanas. si ya tenía la libido alta de por sí, con el embarazo estaba con ganas todo el día y si por lo que fuese, pasaban la mañana o la tarde a solas, lo empleaba en aprovechar cada segundo con su prometida para que las dos acabasen colmadas de placer hasta que sus cuerpos dijesen basta y es que sentía que nunca se podía cansar de acostarse con naerys. continuó con los movimientos de su boca, pasando la lengua concienzudamente por la zona del glande mientras le miraba con los ojos cargados de lujuria, moviendo también la mano y dejando que fuese ella la que marcase el ritmo de su cabeza a su gusto.

había notado cómo le había subido la libido a léan de una forma importante, y lejos de parecerle un problema, ella estaba más que encantada. se había propuesto complacer a léan en todos los aspectos y aquello incluía su apetito sexual. cuando llegaron a la habitación, no tardó en quitarle la camiseta y dejar que hiciese lo mismo con su ropa, lanzándose a devorar sus labios en un pasional y húmedo beso. cuando le quitó el resto de ropa y se arrodillo ante ella, descendió su mirada totalmente fascinada y notando como la erección comenzaba a formarse en ella. aquellos besos, y sobre todo la mordida en aquel punto de su anatomía le hicieron perder la cordura, pero cuando comenzó a estimularle con la boca, dejó escapar un pequeño gemido mordiéndose el labio con fuerza y acariciando su cabellera para mantenerle la mirada clavada en los ojos ajenos. "joder..." siseó ante el placer que le estaba provocando, y no dudó en hacerle saber lo bien que le estaba haciendo sentir.

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"zumo y tostadas, hecho." le dedicó una pequeña sonrisa y dejó un último beso sobre sus labios junto con un azote en sus nalgas antes de abandonar el baño. aprovechó para vestirse rápidamente y dejar la cama hecha y se fue a la cocina con syrax. allí preparó las tostadas y el zumo pero también le hizo el té de jengibre y manzana ya que sabía que le ayudaría con las nauseas y para elle se hizo un café y por último le preparó el desayuno a syrax, dejándole el bol junto al agua para servir el desayuno en la isla de la cocina. "su zumo, sus tostadas y su té, señorita." le colocó las cosas frente a ella y se sentó a su lado, apoyando una mano sobre su vientre y acariciándolo con suavidad mientras se ponía a desayunar. "estás muy guapa, eh. tienes un brillo especial en los ojos, ¿sabes?"

"espero lo mismo." aseguró entre sus brazos, suspirando con suavidad y quedándose unos instantes apoyada en su pecho. se levantó con su ayuda, y cuando terminó de enjuagarse la boca, esbozó una sonrisa ante aquel beso. "sí, sí." asintió ante la idea de la ducha, pero en cuanto mencionó el desayuno, no pudo evitar que una mueca de desagrado se dibujase en sus labios, y aunque estuvo a punto de protestar, las palabras de rhaenyra le hicieron desistir de aquella idea y simplemente resoplar antes de separarse para meterse en la ducha. "un zumo y unas tostadas solas, por favor." le pidió mientras abría el agua y comenzaba a ducharse. realmente le vino de perlas, y cuando terminó, se secó y se vistió con la ropa que llevaría a la clínica. al entrar a la cocina, saludó a syrax con una amplia sonrisa, agachándose para acariciarle y sentándose en la mesa junto a rhaenyra.

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algo que se había incrementado durante el embarazo era su deseo y es que si ya antes estaba todo el día buscando a naerys para darse un revolcón, ahora tal y como tenía las hormonas era todavía más notorio. rozó con suavidad sus dedos contra su abdomen y suspiró al notar la firmeza de este ya que nada le gustaba más que los abdominales de su futura esposa. "pues a cumplir." bromeó riendo, dejando que le cogiese en brazos y rodeando su cintura con sus piernas para que le llevase a la habitación mientras le besaba con ansias. cuando llegaron al dormitorio, le quito rápidamente la camiseta y cuando se bajó de su cintura, aprovechó para llevarse el pantalón y los bóxers consigo, aprovechando aquella postura para acabar de rodillas frente a ella y comenzar a besar su abdomen, bajando poco a poco por su cuerpo y dejando un mordisco donde tenía el tatuaje para finalmente llevarse su miembro a la boca y comenzar a estimularlo a la vez que usaba la mano.

asintió con una sonrisa en sus labios, no pudiendo evitar reír con suavidad. "lo sé, cada día me mandan una foto de cómo va." aseguró riendo con suavidad. para cuando jaehaera llegase al mundo, oficialmente sería como una velaryon, y nada le hacía feliz que aquello, porque por fin corlys sería su padre de forma legal. tras darle la cerveza, dejó un pequeño beso en sus labios y se sentó junto a ella para comenzar a cenar. "otro día me dices con más tiempo y te lo hago." cuando terminaron de cenar, terminó por recoger todo en un momento y dejar las cosas en el lavavajillas. justo cuando acabó, notó los brazos de léan alrededor de su cintura y se giró para quedar frente a ella y esbozar una sonrisilla. "mhm, puedo hacerme una idea." una de sus manos descendió por su cintura hasta llegar a su trasero, terminando por suspirar cuando comenzó a notar los besos en su cuello y las caricias en su abdomen. en un rápido movimiento, cogió a léan en brazo, haciendo que sus piernas rodeasen su cintura y caminase hasta la habitación, besando sus labios con suavidad pero pasión.

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"espero que cuando llegue a la adolescencia cambie." bromeó, rodeando a alicent con sus brazos y dejando que se apoyase en su pecho todo el tiempo que necesitase. se incorporó despacio con ella, pasándole un brazo por la cintura y cuando hubo terminado de enjuagarse la boca, dejó un casto beso sobre sus labios. "no te preocupes, no pasa nada." aseguró mirándole con dulzura a los ojos. "¿por qué no te das una ducha mientras hago el desayuno? seguro que te sentará bien." le propuso, cogiendo uno de los taburetes que había en el baño para acomodarlo dentro de la bañera y que se pudiese sentar cómoda mientras se iba recuperando. "y no me digas que no quieres desayunar, porque tienes que desayunar." le recordó, dejando un suave toque sobre la punta de su nariz mientras le miraba con dulzura.

aquellas nauseas iban a acabar por completo con ella, y es que yo no era la situación en si de despertarse cada mañana y lo primero que tenía que hacer era echar hasta la primera papilla, sino que aquello le drenaba por completo de energía y le llevaba un buen rato recuperarse. era consciente de que aquello era por un buen motivo, pero realmente lo pasaba fatal cuando le daban, y esperaba que la ginecóloga pudiera darle alguna solución o consejo para que no fuesen tan fuertes. "joder..." murmuró recuperando el aliento una vez rhaenyra tiró de la cisterna. en esos momentos, y tras limpiarse con la toalla, se tuvo que apoyar por unos segundos en su pecho. "no te ha hecho mucho caso, eh." murmuró apoyada en su pecho y esbozando una pequeña sonrisa en sus labios. cuando se encontró mejor, se incorporó y lo primer que hizo fue enjugarse la boca un par de veces y terminar abrazándose a rhaenyra por unos segundos. "buenos días, aunque siento haberte despertado así." suspiró abrazándole y escondida en su pecho.

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"¿sabes que tu padre y él le están haciendo una cunita en forma de barco?" le contó riendo y es que corlys y laenor se habían vuelto locos con la noticia del embarazo y algo que le hacía muy feliz es que legalmente corlys fuese a ser el abuelo de jaehaera. "me conformo. gracias, cariño." cuando le acercó lal cerveza, aprovechó para besar sus labios con suavidad y se puso a cenar con ganas ya que como le había dicho, llevaba todo el día con aquel antojo. "está riquísimo, aunque obviamente cuando haces tú el caldo ya es superior." reconoció riendo mientras iba cenando. cuando hubo terminado, se comió uno de los mochis que habían sobrado del antojo que tuvo a media mañana y finalmente se levantó para abrazarse a su prometida. "¿sabes qué toca ahora, no?" pronunció con una sonrisa pilla, comenzando a besar su cuello despacio mientras colaba las manos bajo su camiseta. "que antes nos interrumpieron..."

"sí, me ha avisado porque le comenté que había estado mirando uno. aunque también te digo, ¿qué no nos va a regalar mi hermano a este paso?" comentó riendo con suavidad y es que era de los que más se había volcado con su futura sobrina. tras dejar todo preparado, no pudo evitar reír con suavidad y se acercó hasta la nevera para coger dos cervezas sin alcohol para ambas. "esto es lo que te puedo ofrecer. no es lo mismo, pero da bastante el pego." comentó tras abrirlas y ofrecerle una a su prometida. en menos de cuarenta y ocho horas estarían casadas, y nada le llenaba de felicidad tanto como eso. dejó que echase la carne, y tras darle la cena a las mascotas, se sentó junto a ella para coger un trozo y tomarlo. "¿está rico?" cuestionó mirándola con una sonrisa y acercándose a dejar un beso en su mejilla. "pues antojo satisfecho."

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"y yo a ti." murmuró estrechándola contra su cuerpo. tras tomarse la medicación, se quedó despierte un rato más viendo la televisión desde la cama pero no tardó demasiado en dormirse. había estado un tanto estresade porque sentía que alicent le evitaba pero ya no tenía esa preocupación encima, así que pudo dormir toda la noche del tirón con la periodista entre sus brazos. notó cuando alicent se despertó por lo que salió corriendo tras de ella para ir al baño y poder sujetarle el cabello mientras vomitaba además de acariciar su espalda despacio. "ya está, cariño. ya pasó." susurró mientras mojaba una toalla y se la acercaba a la boca para limpiarle despacio. le encantaría poder quitarle aquellas nauseas pero sabía que era algo por lo que simplemente tenía que pasar hasta que el embarazo avanzase más, así que simplemente le abrazó con suavidad y cuando hubo terminado, tiró de la cisterna.

no pudo evitar reír con suavidad a sus palabras, disfrutando de aquel momento tan dulce que estaba teniendo con rhaenyra y su futuro bebé. puede que aquel bebé no hubiese sido planeado, pero desde luego que lo iba a querer y cuidar con rhaenyra. se apoyó con suavidad sobre el pecho de rhaenyra mientras se lavaba los dientes, sonriendo cuando notaba las caricias en su vientre. en cuanto se metió en la cama y rhaenyra hizo lo mismo, no dudó en abrazarse a elle y apegar su cuerpo al ajeno, suspirando profundamente del gusto y disfrutando de la sensación de calma que inundó su interior. "buenas noches, nyra." susurró acurrucada en su pecho, cerrando los ojos con suavidad y sonriendo al notar a syrax. "te quiero." fruto del estrés se aquellas semanas, termino cayendo profundamente dormida. durmió toda la noche del tirón, pero de nuevo las nauseas matutinas volvieron a hacer acto de presencia y tuvo que separarse ligeramente de rhaenyra para salir de la cama y terminar vomitando.

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cuando naerys le besaba de aquella manera todo a su alrededor dejaba de tener importancia. los besos de la ex piloto sencillamente le dejaban con un hormigueo agradable en el estómago y eso había pasado desde el minuto uno. "puede ser. laenor me ha dicho que no compremos el esterilizador, que nos lo va a regalar él." le parecía adorable como los hermanos de naerys se habían volcado en el embarazo y es que llevaban lo de ser tíos con muchísima ilusión. mientras su prometida preparaba todo, cerró el bote de pepinillos y lo metió de vuelta en la nevera para volver a sentarse en su sitio y coger los palillos para las dos. "hombre por faltar faltaría un buen vino o una cerveza, pero por mi parte como que no." bromeó, pero si naerys quería podía beber lo que le apeteciese. cuando el caldo se puso a hervir, introdujo los primeros trozos de carne en este para que se cocinase y después se lo llevó a la boca. "ay que gusto, llevaba todo el día con el antojo, eh."

no dudó en corresponder aquel beso, dejando una tierna caricia en su abdomen mientras una sonrisa boba se dibujaba en sus labios. "perfecto. yo me encargo entonces." aseguró con una sonrisa en sus labios, volviendo a besar los ajenos con mucha suavidad mientras sus manos viajaban a sus mejillas y acunaban su rostro con suavidad, para terminar dejando un beso en la punta de su nariz. "yo creo que incluso tenemos unos cuantos para darles a rhaenyra y alicent." y es que sus hermanos se habían venido arriba a la hora de comprar cosas para su hija. cuando sonó la puerta, caminó para abrir la entrada y tomó las bolsas, dándole una propina al repartidor. al entrar de nuevo, se acercó hasta la cocina y sacó los recipientes con la comida. colocó la placa de inducción portátil y vertió el caldo en un cazo y poniéndolo para que este comenzase a hervir y poder preparar las carnes. mientras tanto, tomó los cuencos con la cena de ambas mascotas, y tras dejarlos en el suelo, no dudó en darles unos trocitos de la carne para que también disfrutasen de la cena. "¿falta algo?"

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"soy su adre, no debería empezar a a llevarme la contraria tan pronto." bromeó, continuando con las caricias y los besos por todo su vientre. aunque no habían planificado nada de eso, aquel bebé iba a ser adorado por todos y tendría su primita con la que jugar desde muy pequeños, que era todo lo que importaba. rió cuando alicent gritó su nombre pero eso no le impidió seguir llevándola hasta el dormitorio. aprovechó elle también para lavarse los dientes y la cara mientras le abrazaba por detrás e iba acariciando su vientre con suavidad. cuando les dos estuvieron listas, volvieron a la cama y elle, al igual que alicent, se desnudó del todo y la rodeó con sus brazos, dejando también hueco a syrax para que pudiese estar cerca de la reportera. "buenas noches, cariño." besó su frente con dulzura, dejando los labios ahí apoyados para ir dejando pequeños besos por toda la zona.

una sonrisa se quedó dibujada en sus labios al saber que a rhaenyra le gustaba aquel vestido para la boda. "vale, sí." asintió con suavidad. cuando rhaenyra se acomodó de aquella manera, no dudó en acariciar su nuca y acomodarle el cabello con suavidad. "espero que ti te haga más caso que a mi." comentó riendo con suavidad mientras mantenía las caricias, para terminar dejando que se acomodase cuando dejó aquel beso. se acurrucó junto a elle, apoyando su cabeza en su pecho y cerrando los ojos por unos segundos para disfrutar de aquel momento. sin embargo, cuando quiso darse cuenta estaba de nuevo en los brazos de rhaenyra. "¡rhaenyra!" se aferró a elle mientras terminaba por dejarse llevar hasta la cama. una vez en esta, se incorporó ligeramente para acomodarse en la cama y dejó escapar una pequeña carcajada. "vale, vale." comentó riendo con suavidad y acariciando a syrax. "pero deja que me lave los dientes por lo menos." se levantó de la cama y fue al baño, lavándose los dientes y la cara antes de meterse en la cama tras quitarse la ropa, y es que había echado de menos a rhaenyra y el dormir piel con piel.

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"me parece perfecto." aseguró con una sonrisa. al notar que naerys se abrazaba a ella desde atrás, aprovechó para colocarle las manos sobre el vientre y girar con suavidad la cabeza para dejar un tierno beso sobre sus labios. no podía creerse que en menos de cuarenta y ocho horas se fuese a casar con el amor de su vida y que en cinco meses estarían dándole la bienvenida a su hija. "si has tomado ya las medidas, entonces sí, encárgalo. me fío de tu criterio." aseguró con una sonrisa, acariciando con cariño su mejilla mientras dejaba otro tierno beso sobre sus labios. "lo bueno es que no tenemos que comprar biberones ni nada de eso porque con lo que nos regaló mis tíos y laena yo creo que nos llega, no?" y es que al dar la noticia, les habían llovido los regalos por parte de toda la familia y todos querían aportar su granito de arena al embarazo y la llegada del bebé. en ese momento, sonó la puerta ya que la cena finalmente había llegado, por lo que aran y meleys se pusieron a seguir a naerys para ver si les caía algo.

terminó de dejar la mesa preparada, llevando también algunas salsas y una botella grande de agua para la cena, dejando que ella disfrutase de aquel antojo y estuviese relajada. "sí, mi madre también me ha comentado que tiene ropa nuestra, pero podemos ir cuando volvamos de la luna de miel, ¿te parece?" sugirió con una pequeña sonrisa. al escucharle, asintió con suavidad y dejó que cogiese su teléfono, abrazándose a ella por detrás para ver todo lo que había estado viendo. "oh, qué chulos." comentó mientras les echaba un vistazo tras coger el móvil. "ah sí, se me había olvidado, he visto uno que tiene unas cajoneras super amplias para dejar los pañales, empapadores y demás cosas, así que lo más seguro es que lo encargue ahora y que me lo traigan cuando haya terminado de preparar la habitación."

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"sí, es muy bonito." y estaba convencide de que a alicent le iba a quedar todavía más hermoso de lo que se veía en la foto. "pues primero vamos a la ecografía y después nos vamos directes a la tienda a buscar el vestido. ¿te parece buen plan?" preguntó con una sonrisa. a sus palabras le fue imposible no reír y se agachó hasta quedar a la altura de su vientre para acariciarlo con suavidad y poder hablarle. "venga, pórtate bien y no hagas a tu madre vomitar más." le pidió, continuando con las caricias por la zona y dejando un beso sobre su vientre antes de volver a acomodarse en el sofá y rodearle con sus brazos, dejando que se acurrucase a su gusto para finalmente cogerla en brazos riendo y llevarla a la cama, tumbándola con cuidado y dejando que syrax se acomodase también a su lado. "ahora a descansar."

ante aquel beso, no pudo evitar esbozar una pequeña sonrisa y ser ella quien besó su mejilla con suavidad, terminando por acurrucarse junto a elle mientras cenaban. cuando le enseño el vestido, le miró con curiosidad y cierta ilusión, esperando que le gustase. "¿sí? ¿te gusta?" cuestionó con una sonrisa en sus labios, tomándo el móvil de nuevo y aprovechando para escribirle a gwayne. "creo que sí, porque lo vi en su página asi que doy por hecho que lo tendrán." comentó, asintiendo a la propuesta de ir primero a aquella tienda. tras darle a probar la fruta a rhaenyra, aprovechó para probar ella una, y no dudó en asentir con suavidad a sus palabras. "están deliciosas." aseguró, disfrutando del postre que había preparado rhaenyra. "ahora solo falta que se me quede en el estómago." comentó riendo con suavidad, porque llevaba un par de semanas en las que era incapaz de contener algo en el estómago debido a las nauseas. "de pleno, además." aseguró, mientras se quedaba acurrucada junto a elle.