notsopersonally
Eclesiastés 11:9
28 posts
Podría ser mas personal.
Don't wanna be here? Send us removal request.
notsopersonally · 8 years ago
Photo
Tumblr media
T. C. Experience: Aún no Conocido. - Un pedazo menos de mí (on Wattpad) http://my.w.tt/UiNb/LMVKtGkWCw "¿Se puede caminar en sentido contrario al mundo? Si pudiera volver el tiempo atrás, lo haría." En medio de la amargura y la soledad, Zoé divisa entre las penumbras un umbral que le servirá para escapar del declive y regresar a aquél que siempre estuvo allí, mas ella nunca creyó necesitar.
¡Y por fin (*Redoble de tambores*)... el primer, segundo y tercer capítulo de mi primera novela completa!
*Aplausos por lástima*
Denle un vistacito, es una novela “politico-cristiana” y “semi-autobiográfica” que me ha costado un mundo hacer.
¡Doy gracias de antemano! Y lo advierto: los cristianos-venezolanos no somos tan aburridos.
0 notes
notsopersonally · 8 years ago
Text
¡La novela está en proceso!
Desde inicios de agosto más específicamente.
Estoy muy emocionada porque llevo algo más de la mitad, y ya pronto la podré subir a Wattpad completa.
No es que esté en espera de que sea un mega éxito y así, pero si de por lo menos poder contar mi testimonio de una manera más indirecta (porque sí, realmente sólo está “basado” en mi historia, hay muchas cosas que exageré acerca de mi misma).
Pero hay un detalle importante que me gustaría recalcar de ella: casi todo lo que he puesto hasta ahora acerca de la situación actual de mi país es cierta. Excepto, tal vez, el desenlace final. No sé, ya lo veremos.
Eso sería todo en resumidas cuentas.
#CasanovaOut
PD: Quiero estar en los Watty.
En el nombre de Jesús espero que así sea.
1 note · View note
notsopersonally · 8 years ago
Text
Te pido perdón a ti que estás leyendo ésto si alguna vez he hablado mal a tus espaldas, ahora entiendo que ése no es mi trabajo, eso no fue para lo que el Señor me llamó. Él me llamó para buscarte, no para juzgarte. Para ayudarte, no para hundirte. Para levantarte, no para pisotearte cuando ya estés en el suelo. Espero que podamos empezar de nuevo, y ten en cuenta que si necesitas alguien, aquí estaré para ti.
0 notes
notsopersonally · 9 years ago
Text
Hay momentos especiales y esos que me ofrece el Señor♥
0 notes
notsopersonally · 9 years ago
Text
Hasta entonces estoy perfectamente bien entregándole mi soltería a Jesús, luego le entregaré mi noviazgo y mi matrimonio. Pero todo tiene que tener a Jesús de por medio.
0 notes
notsopersonally · 9 years ago
Text
Pronto vendrá esa persona que querrá invertir más que sólo dos minutos de su tiempo en mí, lo sé.
0 notes
notsopersonally · 9 years ago
Text
Que no se pierda la hermosa costumbre de pintarse las uñas cada dos días, y postear cada dos siglos♥
Casanova Out.
0 notes
notsopersonally · 9 years ago
Text
Une pequeña opinión de una no-tan-pequeña fan:
La verdad llevo esperando The Jungle Movie desde el 2010.
He estado esperando esa película desde hace mucho tiempo, firmando peticiones, uniéndome a paginas de FanArts y noticias acerca de Hey Arnold y la película en sí. 
Me siento muy emocionada ya que es mi Cartoon favorito, y cuando dieron la noticia de que iban a llevarla a cabo casi muero.
- Esta vez no quiero morirme pensando en cómo puedo hacer un buen post. Estoy en modo Extreme Fangirl .-
Mas me tiene preocupada el tema del doblaje al latino, y que la película esté dividida en dos partes. No es que me moleste, pero viendo cómo ha sido el cine de ambicioso haciendo películas en dos partes en los últimos años, y también el decepcionante resultado, la verdad es que me da algo de pánico que la película termine siendo... Monótona. Si, monótona. Aburrida, pues. Llena de relleno innecesario.
Aunque también me calma un poco que al ser una película tan larga, pues se podrían responder todas aquellas incógnitas que llevamos años esperando que nos sean reveladas. Craig Bartlett, sorpréndeme.
Por lo de la parte del doblaje. Sé que la mayoría o casi todos los actores de doblajes originales estarán inmiscuidos en el proyecto, más no sé si será así con el doblaje latino. Y si es así, pido de todo corazón que dejen a Enzo Fortuny doblar a Arnold. Fue y es mi voz favorita de todas las temporadas. Y no sólo eso, sino también es mi actor de doblaje favorito.
Sexy Voice. Te amo, Enzo Fortuny. 
Algún día doblaré una película mala contigo.
Y bueno eso, estoy emocionada y no puedo esperar a que sea 2017, eso incluso si sé que ése año cumpliré 20 y aún no puedo aceptarlo. Me siento vieja. Aún así que la gente me confunda con niñas de 5to de bachillerato.
Tantos años esperándolo, y por fin♥
Sé que redacté pésimo, pero como dije: #ExtremeFangirlModeON.
0 notes
notsopersonally · 9 years ago
Text
No es que ajá, pero si.
0 notes
notsopersonally · 9 years ago
Text
¿Por qué me ponen a dar consejos amorosos cuando tengo tres manchas negras en mi expediente de tres líneas?
0 notes
notsopersonally · 9 years ago
Text
Por mis amigo soy capaz de todo, excepto levantarme temprano.
1 note · View note
notsopersonally · 9 years ago
Text
Me alegra que al final su corazón esté seguro.
0 notes
notsopersonally · 9 years ago
Text
En realidad, sólo necesito a Dios. Y que él sea el encargado de decirme si lo hago bien, o no.
0 notes
notsopersonally · 9 years ago
Text
Porque como no tengo trabajo, ni estudios y tampoco amigos, mato mi tiempo haciendo esto:
Estaba aburrida y me puse a jugar con la herramienta de dibujo de Word2016, es divertida, úsenla sabiamente. O bueno, yo no sabia y la usé. Como quieran.
- ¡Niña, dibujas terrible!
Lo sé.
- ¡Y escribes pésimo!
También lo sé.
- ¿Entonces por qué lo haces?
Me aburro en mi casa.
- ¿Y por qué lo subes? ¿Acaso te gusta pasar pena?
No, lo hago porque no le hace daño a nadie.
- ¡Si! ¡A mis ojos!
Tápatelos.
Tumblr media
HD: JAI DEFINISHON. Lo sé, pero mi captura de pantallas es malísima.
1 note · View note
notsopersonally · 9 years ago
Text
Ways of Loving (Fue una colaboración con mi prima, pero ninguno de sus capitulos están aquí): (Creada el 09/02/2014)
Historia: “Peligrosa obsesión”
Capitulo: 1… (Capitulo 2 en la continuidad de la novela)
“Primero es la amistad”
Miraba el paisaje a través de la ventana de aquél auto, sin fijarme realmente lo que acontecía afuera. Era uno de esos momentos en los que estaba en la realidad sin estarlo, fuera totalmente de mí. Sin cuerpo, solo alma; agonizaba sin agonizar, lloraba sin llorar y amaba sin demostrarlo… Después de todo ¿Quién más lo vería si no era yo? ¿Quién más lo sentiría? Tengo una respuesta para ello: Nadie.
Aunque había llorado hace solo unos segundos atrás en aquél mismo asiento, sentía como se acumulaba la rabia e impotencia dentro de mí. No lo sé, saber que perdí lo que había estado buscando durante cinco largos años en solo tres meses pareció algo totalmente ridículo. Más a sabiendas que lo había perdido en un momento totalmente inesperado. Todo figuraba estar bien, nada apuntaba a una posible quiebra de algo que parecía tan fuerte como el hierro, pero al final, fue tan frágil como el cristal.
-          ¿No eres un poquito joven y hermosa para los problemas amorosos? – Preguntó el conductor anónimo, sacándome de mi ensimismamiento – Con esa carita tan bella puedes conseguirte los que tú quieras – Continuó - ¿Cuántos años tienes?
-          Dieciséis – Logré musitar y me incorporé en el asiento, este era el punto del viaje en el que el conductor se aburría del total silencio y buscaba cualquier excusa (Así realmente no le importara, como mi estado de ánimo) para hablarme.
-          ¡Dios mío! – Exclamo fingiendo sorpresa – Me parece que no debería estar así, señorita, debería estar disfrutando la juventud y belleza que posee – Vale, ya estaba empezando a incomodarme tanto halago, después de todo, el 90% de lo que decía seguro se lo debía decir a las demás chicas que suben a su auto, como todo hombre desesperado por amor. Bueno eso, y que obviamente me daba miedo estar en el mismo auto que un posible ped��filo; preparé mi teléfono en caso de emergencia  – Y no es que me le esté insinuando, porque estoy felizmente casado con el amor de mi vida – Dijo mostrando un anillo localizado en su dedo anular de la mano izquierda - Pero jamás me ha gustado ver a la niñas lindas como usted en ese estado de ánimo – Bajé la guardia y aparté la mano de mi bolsillo.
-          ¿Sabe cuál es el problema? – Exclamé sin pena alguna, sería la octava o novena vez que le contaba a un taxista mis sentimientos, y ya estaba empezando a sentir algo de seguridad con ellos. Ese tipo de confianza que se le da más a un extraño que a una persona allegada – El problema es que no consigo sacarme de la cabeza a alguien que simplemente no puedo sacarme del corazón – Continué – A alguien que creí que había llegado para quedarse en mi vida, y ahora quiere alejarse. Estoy perdiendo a la persona que estuve esperando durante tanto tiempo, le entregué todo de mi (Literalmente todo), no lo valoró y se fue con alguien que simplemente no lo ama, o por lo menos, no tanto como yo... Nadie jamás lo amará más que yo – Musité entre lágrimas, mi voz se iba quebrando entre palabras, pero necesitaba sacarlo todo, todo lo que no le pude decir a él - ¿Y sabe que es lo peor? ¡Que soy una testaruda de mierda!... Que hay algo muy dentro de mí (Aparte de él) que me dice que no me rinda, que si lucho lo conseguiré. Pero también hay algo más que me genera dudas, y es que no estoy bien de la cabeza, tal vez soy yo misma la que intento convencerme de que hay algo más que me lo pide, cuando en realidad soy solo yo.
-          ¿Cómo que no estás bien de la cabeza? – Volví la cabeza hacia la ventana e ignoré su pregunta, no quería entrar en detalles – Vale, está bien, entiendo que no quieras hablar de eso, pero entonces cuéntame tu historia.
-          ¿Seguro? – Pregunté algo sorprendida, era la primera vez que un taxista me preguntaba sobre mi historia, y de verdad se le veía entusiasmado. Bueno, ¿Por qué no? De todas maneras algún día la publicaría, y mejor (O peor), sería para la posteridad. El hombre asintió sin decir una palabra o quitar la vista de la vía. Incorporándome de nuevo en el asiento, me dispuse a narrar lo que había sido mi fatídica suerte hasta hoy.
El curso de mi vida nunca se había visto alterado por problemas amorosos de ningún tipo, tal vez sí, pero no exactamente míos. Yo era una chica común y corriente, tan común que rozaba en lo extraño; No salía a fiestas (Bueno si, una vez, pero había sido demasiado salvaje, y era en parte una de las razones por las que no salía), no bebía alcohol, no fumaba, era virgen, me gustaba leer, ver anime y me preocupaba por mis estudios, o mejor dicho, me preocupaba no reprobar las materias en las que ya iba mal. En general, era una chica bastante asocial (O insociable), era despreocupada e insegura, y aunque era virgen, no tenía ningún problema en cuanto al sexo, y tampoco me daban miedo las sustancia prohibidas, aunque nunca las había probado. Yo era, como decirlo, ni buena ni mala en lo que la sociedad señalaba como inaceptable. Totalmente perdida del ojo público.
Todo comenzó en el verano del 2013. Mi mejor amiga Alice Stevens, estaba “saliendo” con un chico universitario (Comillas en saliendo debido a realmente no salían, era algo así como “Cyber-citas” pero por teléfono, debido a que sus padres no le permitían tener novio). Era un chico relativamente normal, estatura media, pelo algo largo y negro, sonrisa encantadora y un poco fornido (O quizás debería decir gordito), y al parecer era aficionado al futbol. Era un tipo guapo en la medida de lo normal, nada especial, pero ella decía que tenía algo diferente, algo que lo hacía único.
Aunque desde un principio yo no podía notar nada llamativo en él, fue hasta un día cualquiera de agosto que pude percibir esa esencia encantadora que desprendía en cada palabra. Eso que la había enganchado a ella. Aunque haya sido solamente Chat que pude sentirlo, había algo en el manejo de sus palabras que lo hacía especialmente atractivo para cualquier mujer, y no solo por el hecho de que hablara liberalmente del sexo (Que según me había dicho, solamente conmigo lo podía hacer cómodamente, ni siquiera con ella), sino porque tenía un aura de ser un hombre seguro de sí mismo, que sabía que podía tener a la chica que quisiera con solo hablarle con esa sensual voz de locutor de radio erótica al oído. Una voz profunda, vaporosa e incitante, podía cantar “itsy, bitsy araña” y aun así sonaría sensual. Pero ¿Cómo lo sabía yo? Simple, esa misma tarde, mientras me hablaba acerca de cómo mis sugerentes comentarios hacía que su miembro viril despertara de su tumba, me llamó.
Tal vez el peor error de mi vida había sido el de contestarle la llamada, porque de no hacerlo, tal vez jamás me hubiese enamorado de aquella sensual voz, a la cual le hice prometer que desde ese mismo día en adelante no pasaría una sola noche de no escucharla antes de dormir.
-          ¿Sabes? Creo que estoy empezando a sentir algo muy fuerte por ti – Leí sorpresivamente en aquella ventana de chat, era el segundo día que hablaba con él y ya lo había atrapado, y por supuesto él a mí.
-          Yo también lo siento, pero no se puede, estoy prohibida, soy la mejor amiga de tu NOVIA– Escribí recalcando la última palabra, casi podía leer su respuesta: “Ella no es mi novia”, y como si lo hubiese profetizado, respondió ante mi comentario con esas simples cinco palabras, más un bonus que me dejó perpleja y que al mismo tiempo me dejó una pequeña punzada de esperanza.
-          En primer lugar, ella no es mi novia, y en segundo, no puedo estar con ella, a parte del problema con sus padres, también está el hecho de que ella podría ser mi prima. Mira ¿Julián Stevens, Alice Stevens? Es el mismo apellido, y ambas familias vienen del mismo lugar – Sabía el hecho de ambos tenían el mismo apellido, y de que podrían ser de la misma familia, pero aun así Alice me había dicho que si lo eran, serían parientes muy lejanos y que ella no tendría problema en luchar contra la misma sangre con tal de quedarse con él. Ella realmente lo quería, y yo estaba siendo la peor amiga del mundo con solo sentir lo que sentía. – Y no es solo eso, sino que estoy empezando a sentir algo muy fuerte por ti, estoy confundido.
-          ¿Apenas de das cuenta? – Pregunté ignorando por completo el comentario de su posible parentesco con Alice.
-          No, desde ayer ya lo había sentido. No quiero hacerle esto a ella, sé que realmente me quiere, pero hay algo en ti que me encanta – Yo si tenía idea de que era, era mi facilidad para tocar temas íntimos (Y por consiguiente también mi facilidad para llevarlos a cabo) y el hecho de que su relación conmigo se vería muchos menos complicada por factores externos; bueno si, el hecho de que ella era mi mejor amiga. - ¿Podemos tan siquiera intentarlo? – Finalizó con dicha pregunta, dejándome con un gran dilema en la cabeza: ¿Cedería ante mis insufribles ganas de tenerlo conmigo o dejaría que el continuara su ciclo con ella? Había un problema realmente grave conmigo, y era que amaba la aventura y el peligro, aunque siempre había sido muy cuidadosa, pero el hecho de efectuar algo que ante ojos de los demás se veía como algo prohibido me parecía realmente excitante.
Con dudas de realmente querer hacerlo, acepté. Se me vería algo complicado de ahora en adelante, pero simplemente no podía ignorar esa voraz necesidad de sentir algo de cariño y al mismo tiempo pasión y emoción. Él me brindaba todo eso, pero había un obstáculo: Ella. Bueno dos, ella y mi injustificado miedo al compromiso.
Historia: “Peligrosa obsesión”
Capitulo: 3… (Capitulo 4 en la continuidad de la novela)
“Estoy lista para la clase, profesor”
- ¿Otro shot? - Dije acercando mi vaso y rozandolo lentamente por sobre mis labios, algo asi como fingiendo catalizar aquella bebida, mientras le regalada una de mis miradas mataharenses... Las cuales, por supuesto, surgian efecto en todos menos en él. Era tan inmune a mis encantos.
               - Si le puedes llamar shot a otro vasito de malteada, por supuesto que si - Mi novio, Angel Yamamoto, un nipón-americano de quince años. Había estado en la FriendZone aproximadamente tres meses, hasta que un día, gracias a sus dedos magicos e indudable impetú, logró salir airoso del susodicho circulo del diablo.
               - ¿Por qué nunca me dejas actuar como una de esas chicas de las novelas de James Bond? - Dije, levantandome de aquella mesa del centro comercial, para  pedir a la chica del puesto otro par de mis shots de malteada. Aunque el bolsillo de Angel rogara que no lo hiciera.
               - ¿Entonces? Continúa... Ya entendi, fuiste una zorra y le quitaste el novio a tu mejor amiga, tipico de la adolescencia ¿Que paso después? - Exclamo casi gritando en medio del centro comercial, estoy segura de que por lo menos treinta y cinco personas escucharon.
               - Vale, continúo... - Dije colocando ambos vasos en los laterales de la mesa - Fue mas o menos asi:
Había estado aproximadamente cuarenta minutos en aquél autobus, y otros cuarenta mas esperando a que apareciera en la parada, a un lado del alquiler de telefonos. Por supuesto, había mentido para llegar hasta aquí, había dicho que estaría en el cine con mis primas (Aunque no le habia dicho a ninguna que me cubriera).  Rogando que nada se me saliera de las manos, por supuesto internamente lo  que mas deseaba era volver al calor y a la seguridad de mi hogar. Me habia invitado a su casa (Gran lugar para una primera cita), segun él queria conocerme y darme una miniclase de como mover los labios al compas de otros labios.
Al llegar, solo le pedí que partieramos a su casa, debido al gran miedo que le tenía al centro de la ciudad, era un lugar al que solo iría con mi madre o padre, pero esta vez practicamente me las estaba apañando yo sola... Quiero decir ¿De verdad podía confiar en un chico que acababa de conocer, y a parte, en la primera cita ya estaba invitandome a su casa? La mayoría de las personas con un razonamiento logico responderían que no, pero yo era Amanda Scott, la chica de los riesgos absurdos y una gran cantidad de inocencia en su cuerpo.
Su casa era algo asi como una de esas casonas de antaño pero en modelo compacto y pintada con un color azul rey bastante de mal gusto, tomando cuenta que era enteramente de ese color (Si, toda). Los muebles eran algo asi como los que tenía mi abuela en su casa del pueblo natal, definitivamente la nana y ellos habían contratado al mismo decorador. Ahora la cuestión era matarlo, sea quien fuere, por su mal gusto.
               - Y bueno... ¿Empezamos? - Me preguntó pícaramente, obviamente sabiendo que yo entendería a lo que me refería. ¿En serio? Si, definitivamente si, pero sentía que me presionaba, a dar un paso al que definitivamenteno no me sentía lista, a volar cuando ni siquiera sabía gatear.
               - ¿Ahora, ya? ¿Y el romance? - Dije vacilando un poco, a lo que me respondió con un gesto burlista que esperaba que no fuera tan tipico en él.
               - ¿Acaso se necesita el romance para entrar en acción? - Dijo acercandose a mí de forma imponente, amenazante.
               - Deberias saberlo ¿No? Eres virgen - Levante una ceja segura de mi misma, no dejaría que me ganara.
               - Touché, mon amour... - Dijo, al parecer, dandose por vencido - Pero cariño, eso nunca me detiene - Tomó de mi cintura bruscamente, atrayendome de tirón hacia su cuerpo. Rozando su nariz levenmente con la mia, su mirada me consumía, era intensa y sofocante - Dejate llevar, se que lo deseas tanto como yo... - Susurro sobre mis labios, era insitante. Podría, tal vez, dejarme llevar, pero ¿Hasta que punto? Solo era una clase de besos, mi primer beso.
Me empujó suavemente hasta la repisa de libros, sin dejar de mirar desafiante a mis ojos, quería que cayera, que me rindiera ante él, y estaba apunto de conseguirlo. Mi respiración se agitaba cada vez mas, mi corazón se aceleraba hasta tal punto que parecía que iba a salirse de mi pecho y mi sangre parecía transformarse en fuego... Yo lo deseaba, lo deseaba a morir, y parecía que estaba apunto de hacerlo. Nuestros rostros se acercaban cada vez mas, hasta que...
               - ¡Julián, ven a ayudarme con las bolsas! - Dijo una voz femenina de edad saliendo del garage de su casa, ¡Su madre! (Lieramente), excelente momento para interrumpir.
               - Ya voy, mamá - Dijo apartandose rapidamente de mí - Y dime ¿Quieres quedarte a cenar? - Disimuló.
               - Si, claro. Pero no debo quedarme hasta tan tarde, mi padre piensa que estoy con mis pri - Me interrumpió un sonido estrepitoso en mi bolsillo, es una llamada, lo saco de su lugar y reviso el indentificador de llamadas... Mierda. - ¡Mi mamá!
Historia: “Peligrosa obsesión”
Capitulo: 5… (Capitulo 6 en la continuidad de la novela)
“”
- ¡Maldita sea!... - Grité azotando la mesa fuertemente con mi mano - ¡Me corté el puto dedo! - Apreté mi dedo pulgar, del cual desprendía un liquido café-rojizo y espeso. Lanzando el cuchillo de cierra en el cajón de los utencilios, me dispuse a mojar mi ensangrentado dedo en el lavamanos. Estaba segura de que en cualquier momento moriría de una hemorragia.
               - Aveces puedes ser tan exagerada - Se burló Alice - Solo te falta tirarte al piso gritando "¡Dejame aqui, sigue tu, sálvate!" - Dijo, dedicandome un codazo de muerte en el brazo, por supuesto sin olvidar su clasica risita de bruja. Los muertos se levantaban de tan solo oirla - Y por cierto, vaya manera de cortar la historia en la parte mas emocionante.
Yo creo que más que resalta cómo se desarrolló mi prosa durante los años, hay que resaltar dos cosas:
Mi era de las hormonas hiper-sexualizadas. Al rededor de 4 de cada 5 oraciones en un solo párrafo contenía por lo menos una insinuación sexual. Era como querer estar gritándole al mundo: “¡Mundo, préstame atención, por fin he tenido sexo!”. Si, era una mocosa tonta de 16 años, según mis cálculos.
El valor del compromiso en mí, a diferencia de mi estatura, fue creciendo a lo largo de los años. Hasta el punto en que en ésta oportunidad no dejé la historia en el capitulo 2, ¡Si no en el 3!. Aplausos, por favor.
*Clap, clap*
No hay más que quiera añadir aquí, más que ésta era la última historia que encontré en mi PC. Pensé que tenía One Shots, me equivoqué.
0 notes
notsopersonally · 9 years ago
Text
A 370Km de Tí: (Creada el 16/09/2012)
-         Bésame – Dije tomándolo del brazo para que no se apartara de mí.
-         Quisiera poder hacerlo, pero no.
-         ¿Por qué? Yo te amo, tú me amas. ¿Por qué debe ser tan difícil?
-         No lo entiendes – Dijo mientras se sentaba en aquél banco de pintura blanca algo gastada. El viento volaba su melena negra de una manera sensual e incitante, ese chico sin duda alteraba todos mis sentidos.
-         Trataría de entenderte si me lo dijeras – Me senté junto a él y apoyé mi cabeza en su hombro, como de costumbre – No entiendo por qué me rechazas, si dices que me amas. Solo intentémoslo, no vamos a dañar a nadie.
-         Eso es lo que tú crees – Acarició mi mejilla – Te amo, pero no puedo permitirme hacerte daño, no puedo, no otra vez – Besó mi frente y se apartó de mi lado otra vez, de nuevo huía de mí.
-         ¡No te vayas! – Dije halándolo del brazo nuevamente y mirándolo a los ojos – No entiendo por qué dices “otra vez”, nunca me has dañado, desde que llegué aquí, tú has sido mi mejor y único amigo.
-         Si lo he hecho y lo volveré a hacer, estoy seguro, aunque no quiera – Dijo soltándose de mi y dándome la espalda para irse – Que tengas buen viaje, princesa. Te amo, nunca lo olvides.
-         ¡No! ¡Quédate! ¡Julián! Por favor, ¡Julián! – Grité y corrí tratando de alcanzarlo, pero no podía siquiera moverme del lugar donde estaba.
La luz se desvanecía poco a poco, y aquél parque de grandes arboles verdes y pájaros cantores se iba esfumando para abrir paso a una oscuridad total. El silencio era agonizante, lo único que podía escucharse en aquél lúgubre lugar era el sonido de mis sollozos llamando al chico de cabellera oscura que había huido de mí, de nosotros, del amor.
-         Julián… Julián… Vuelve… Por favor… Julián.
-         Amanda, despierta, amor… ¿Amanda? ¡Amanda! – Grité al escuchar la voz de mi madrastra.
-         ¿Qué? ¿Ah? ¿Fue un sueño? ¿Qué pasó? ¿Ya llegamos? – Pregunté restregándome los ojos con fuerza, sin duda esa pesadilla me había dejado algo alterada.
-         Sí, mi vida, ya llegamos – Me acarició la cabeza – ¿Estabas teniendo una pesadilla? – Solo asentí, no tenía deseos de hablar, después de todo, aquél sueño había sido demasiado traumático para mi.
¿Quién era ese chico? ¿De donde le conocía? Y sobretodo ¿Porqué Huía de mí? Entiendo perfectamente eso de que nunca tuve mucha suerte con el sexo masculino, pero tampoco me creía tan fea como para ahuyentar a un chico desconocido de tal manera, aunque en mi sueño parecía conocerlo de años.
Bajé de golpe del auto una vez mi padre lo estacionó en el pequeño garaje de aquella casa de verano, no le tomé mucha importancia a su estructura desgastada y vieja, lo que tenía en mente en aquel momento era tomar mis maletas, dejarlas dentro de la casa e ir inmediatamente a donde tenía planeado desde un principio: la playa.
Me tiré de golpe en la cama, no era la primera vez que estaba en ese cuarto, había estado allí dos años antes con una expareja de mi papá y su hermanita, sin duda el mejor verano de mi vida, me había enamorado a primera vista de un chico que trabajaba en el muelle de la ciudad, no sabía su nombre y tampoco recordaba bien su rostro, solo recordaba cómo me hizo sentir; esa sensación de mariposas en el estómago y repentina aceleración de mi corazón simplemente no se podían olvidar, menos sabiendo que las empecé a sentir apenas lo volteé a ver, y es que, ese chico de cabellos oscuros, con corte bajo y abdomen bien marcado para su corta edad, tenía algo más atractivo a parte de su obvia belleza, algo que se podía notar a simple vista, o al menos para mí fue así.
El sudor corría por todo mi agotado cuerpo, mi respiración era agitad, mis músculos estaban cada vez más tensos, mí vista en ocasiones se nublaba y solo quería que esto acabara de una vez; Creo que nunca había odiado los rayos del sol tanto como este día.
-         Papi, ¿Puedes ayudarme con la heladera? Está demasiado pesada – Dije, lo fulminé con la mirada mientras dejaba caer aquella pesada caja llena de hielos y cerveza – Además, tú deberías hacerlo, eres el caballero.
-         ¿No que eras una niña grande y fuerte? – Dijo sin siquiera voltearse a verme, odiaba cuando tergiversaba mis palabras – Además, ya casi llegamos al muelle, soporta un ratito más ¿Si, mi cielo? – Rio.
-         Si claro, papi bello, como tú digas – Dije sarcásticamente, por suerte este día ya estaba terminando y por fin iba a ver la atracción que más me importaba de la playa: él.
El fuerte viento volaba mi cabello de forma violenta, mientras que los granos de arena jugueteaban entre mis dedos causándome una molestia infinita, eso sin mencionar los fuertes rayos UV, que al parecer ese día tenían como objetivo dejar mi delicada piel cual sabanas de mujer cada 28 días al mes.
-         ¡Al fin! – Esbocé una sonrisa al llegar finalmente al primer muelle – Ya mismo me quito estas asquerosas sandalias – Si había un lugar en el mundo donde debían hacer obligatorio el uso de zapatos, ese lugar era la playa; Digo, era el lugar más lógico para hacerlo entre tanta arena.
-         A menos de que quieras terminar con una enfermedad aún desconocida por los científicos, es mejor que te las dejes puestas – Dijo mi “sabio” padre. Aunque quitármelas era lo que más quería en ese instante, era mejor prevenir que lamentar.
-         ¿Cuándo llega el bote? – Pregunté obstinada. Más que salir allí, lo que necesitaba en ese momento era volver a ver su sonrisa.
-         No seas impaciente Amandita – Dijo con dulce voz mi madrastra, ella era la única persona, además de mi padre, de soportarme en mis momentos de caprichos – Es más, allá viene el bote – Dijo señalando una pequeña figura a la distancia.
-         Si no te gusta la playa ¿Para qué quisiste que viniéramos? – Preguntó mi padre algo alterado, obviamente ignoré su pregunta, “chicos” no es exactamente un tema fácil del qué hablar con un padre.
Había muchas razones por las cuales odiaba la playa, aparte de lo ya antes mencionado por supuesto, y una de esas tantas razones son los botes; Definitivamente tener que volver a subirme a uno en el mismo día no era la cosa más relajante que podía pasarme por la mente, pero si eso era lo único que podía sacarme de aquella mini-isla llena de bañistas descontrolados y uno que otro pervertido sexual, pues ¡Que venga el olor a madera sucia y mojada!... Nada podía ser más atractivo en ese momento.
Después de haber llegado el bote, procedimos a subirnos a él y dar marcha a nuestro extremadamente corto viaje marítimo. Sorprendentemente, esta vez no me encontraba tan incómoda a comparación de veces anteriores, no sabía exactamente si era porque esta vez el botero tuviese un poco más de delicadeza en el tema del arranque, o si era por el hecho de que estaba a tan solo unos pocos minutos de volver a sentir lo que hacía ya mucho tiempo no sentía.
Miraba sin siquiera parpadear a aquél punto en el horizonte que cada vez se iba acercando más y más a nosotros, o mejor dicho, nosotros a él; No importaba el choque del agua y del viento contra mi cara, simplemente no iba a despegar mi vista de ese lugar, no quería perderme un solo segundo de divisar lo que había estado esperando todo ese tedioso día.
-         ¡El muelle! – Exclamé al momento de haber llegado, todo estaba exactamente igual como había estado hace dos años; Los botes, las cuerdas, el moho producido por la humedad, todo estaba en lugar, pero algo faltaba… ¡El chico! ¡El chico atractivo de aura encantadora ya no estaba! Era mi única oportunidad de volver a verlo, de conocerlo, y la había perdido, y lo peor de todo es que las razones eran completamente ajenas a mí, solo había desaparecido del mapa ¡Y ya! Es todo, no había nada más que hacer.
Tomé nuevamente la pesada heladera, y cabizbaja emprendí mi camino de vuelta al auto, escuchando como mi padre se quejaba del terrible servicio a los turistas que prestaban en aquél lugar. Bueno, debía resignarme a no tener una historia emocionante que contarles a mis posibles futuros hijos, después de todo, a ese paso lo único que iba conseguir era quedarme como la tía solterona que consiente a sus sobrinos.
-         ¡Alberto! ¿No sabes donde se metió Julián? Ese desgraciado no ha venido a trabajar en 3 días – Escuché a la distancia, rápidamente giré mi cabeza como reacción instantánea, tenía que corroborar lo que había escuchado.
-         ¿Julián? – Musité, atónita.
 ¿Julián? ¿Julián? Ese nombre lo había escuchado antes, en mis sueños… ¿Podría ser que estuviera soñando con el amor de mi vida todo este tiempo y no lo supiese? Tenía que averiguarlo de una forma u otra. Al parecer el cosmos o lo que fuese que me estuviera conduciendo a vivir este culebrón, me estaba dando una nueva oportunidad para encontrar al chico del muelle.
Caminé lo más rápido que pude para dejar la heladera en el auto, y dando una excusa poco elaborada a mi padre, me dispuse a poner en marcha mi improvisado plan. Detrás de uno de los bajos muros que rodeaban la playa hasta llegar al muelle, me senté a espiar al hombre que había mencionado el nombre del chico que estaba buscando.
Después de una larga platica de estos dos hombres acerca del mal trabajo que Julián hacía la veces que si quiera se dignaba a asistir al trabajo, escuché como claramente uno de los hombres decía que iría a buscarlo, y aunque me asustara un poco el tema de seguir a un hombre completamente desconocido través de una que podría ser o no peligrosa, debía armarme de valor e ir caminando poco a poco ocultándome entre las sombras de los árboles y palmeras cercanas.
Mientras más me adentraba en los oscuros barrios de aquél pequeño pueblo, veía como el sol y los arboles iban despareciendo poco a poco, viéndome obligada a esconderme entre los escasos callejones y botes de basura que me encontraba en el camino.
-         ¡Eh niño! ¡Julián ven acá! – Gritó el alterado hombre que estaba siguiendo… ¡Era él! ¡Era el chico al que estaba buscando hacía años! Aunque estaba vestido con harapos y algo sucio, su apariencia descuidada no empañaba su obvio atractivo físico; Su hermosa melena negra, su abdomen bien marcado, musculosos brazos y hermosa cara ¡Que espécimen de hombre tan sensual! ¿Qué edad tendría? ¿17- 18? De todas maneras pronto lo averiguaría - ¿Por qué carajos no te has aparecido? ¿Dónde coño estabas? – Dijo el hombre agarrando al sexy joven de su camiseta sucia y despegándolo de un solo tirón del suelo.
-         Estaba tomándome unas pequeñas vacaciones, cabrón – Sonrió cínicamente, estaba aparentemente muy relajado a pesar de la reacción hostil de aquél hombre – ¡No tienes derecho a tratarme así, soy tu ayudante no tu esclavo! – Dijo soltándose bruscamente de las manos de aquél hombre – Además, ni siquiera puedes botarme, ya sabes porqué – Dijo mientras tomaba un cigarrillo y lo encendía ¡Dios mío señor! Nunca había visto a alguien que se viera tan sexy actuando como Gángster fumando cigarrillo.
-         Más te vale venir mañana a trabajar, o no me va a importar quien seas, ni quien sea tu suegro ¡¿Me escuchaste?! – Dijo el casi desquiciado hombre… Su suegro… Su suegro… Esa palabras habían quedado como eco retumbando en mi cabeza ¡Tenía novia! O peor, estaría casado ¡Imposible! No se veía de más de 17, digo ¿Cómo podría estar un chico de aproximadamente 17 años casado? No podía ser verdad, era una maldita pesadilla - ¡Ya lo sabes cabrón, te veo mañana en el trabajo! – Dijo el hombre mientras se alejaba, rápidamente me escondí detrás de un basurero cercano y procedí a seguirlo sigilosamente, de nuevo.
-         ¡Eso si me da la gana de ir! – Logré escuchar a lo lejos, al parecer era un chico bastante cretino y maleducado… Que sensual. Al parecer es cierto eso de que a las mujeres nos gustan los hombres malos.
Hundida en mis pensamientos, caminé lentamente detrás de aquél animal abusador de menores… ¿Estaría casado? ¿Tan joven? Más que importarme el hecho de que tenía cara de no ser muy buena junta, me tenía pensativa la posibilidad de que pudiera tener una relación sentimental, o marital, con otra mujer, otra que no fuese yo.
-         ¿Va a alguna parte, señorita? – Escuché al frente de mí ¡Me atraparon!
Me da risa la manera en que está escrita, se nota bastante que estaba empezando y que aún era demasiado amateur en la escritura. Y sin embargo sigue siendo mejor que cualquier cosa que haya hecho actualmente.
Esto, según mi PC, fue escrito entre el 16/09/2012 y el 13/09/2013. Tenía entre 14 y 15 años. Un año para lograr hacer dos capítulos a causa de la flojera. Y nunca más lo seguí.
0 notes
notsopersonally · 9 years ago
Text
Actualización random - especial:
Traté de subir un cover hoy, la verdad estoy pésima de la garganta, y antes seguir pasando más pena prefiero esperar hasta mejorarme.
Así de que decidí hacer una actualización especial:
*Redoble de tambores*
Subiré aquí todos los capítulos de novelas no terminadas y One Shots que me quedan en la PC.
“¡Hurra!”
Al rededor de la mitad los borré o los perdí. Había un One Shot en específico que yo amaba y que me había quedado bastante bien para ser mío.
Lo borré en un ataque de:“no soy lo suficientemente buena, lo que escribo es basura”. Y todavía lo creo, la verdad. Pero ese en especial no era tan malo.
Subiré los que me quedan, y ése, si algún día lo recupero.
AVISO: He de aclarar una cosa antes de publicarlo, por si alguna vez alguien lee ésto: 
Todos las historias que hice son de cuando aún estaba en el mundo - no era cristiana - son seculares. Y era muy común que en mis historias se tocara mucho el tema del sexo, alcohol, drogas, fiestas, asesinatos, entre otros temas polémicos y prácticas que no son de agrado para Dios.
Y sobretodo muchas, MUCHAS palabras ofensivas.
Eran otros tiempos, ya no soy igual. Más al leerlos me entra algo nostalgia creativa y me gustaría compartirlos a la nada, a pesar de que tengan esos no-tan-pequeños inconvenientes morales como contenido recurrente.
Sería también de ayuda para conocer un poco más de mi pasado antes de Cristo.
Última vez que publico algo así, lo prometo.
Más allá de eso, como siempre, no tengo nada más para agregar.
Muy bien, leggo.
0 notes