El nombre es Luna Salazar, cuenta con veinticuatro años de edad y trabaja en una florería. Cuentacuentos a medio tiempo.
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¿Y has pensado en hacer algo más con ese hobby tuyo? ¿Quieres quedarte trabajando con las flores para siempre?
Sí, mil veces, pero no he tenido la oportunidad de hacer mucho con ello, ¿sabes? Las ofertas se me escapan de entre las manos y cuando menos lo pienso ya no existen más. La florería es simplemente una parada más en mi vida en la cual no pienso permanecer tanto tiempo, te lo aseguro.
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Qué ciudadanos te caen bien?
En resumen te diré que hasta la actualidad no me he encontrado con nadie que me desagrade en su totalidad. Puedo asegurarte que entre la lista figuran algunos nombres como: Fausto, Tadeo, Juliette, Daniel, etc.
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Tu padre era corredor de autos? Porque con esas curvas mamá
Pudo serlo, puede serlo o podrá serlo. Dejando a un lado ese detalle que desconozco totalmente, creo que el mérito debería ser entregado a mi madre y a los genes que corren en nuestra familia. Digo, ¿le has echado un vistazo? Pese a su edad se mantiene en muy buena forma.
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&.ironsaresick // flashback:
Solo lo decía — respondió arrastrando sus palabras. Agradeció su gesto amable de querer mantener su historial intacto, sin embargo, su broma personal se desvió cuando la fémina llamó su atención tan de repente y enfocó su mirada en el lugar señalado. – Uh, ya veo – musitó. No había visto ese callejón antes, quizás era porque no se fijaba bien. Le costaba recordar cosas cuando no captaban su interés. Una nueva idea apareció en su cabeza y como había hecho anteriormente cogió a alguien indefenso que aun buscaba una salida para colocarlo detrás de él entre el auto y el buzón de cartas sobrepuesto en la acera. Y después de eso siguió con grandes zancadas con dirección al callejón, siguiendo la voz de su acompañante en lo que volvía más oscuro el campo de visión. – ¿Y ahora? – habló casi por lo bajo, pero no diviso la existencia de una piedra que provocó golpear a uno de los botes de basura metálicos en el lugar. – Mierda… - masculló buscando un sitio para esconderse antes de llamar la atención.
Antes de poder responder a la cuestión formulada, el ruido provocado por el cubo de basura ocasionó que un sobresalto se apoderara de cada rincón de su cuerpo. Luna se giró en ambas direcciones, deseando conocer la procedencia de aquel sonido que pronto quedó extinguido. A lo lejos, pero quizá no lo suficiente, alcanzó a escuchar el maullido lastimoso de un gato que parecía totalmente ajeno a todo lo que se encontraba ocurriendo a su alrededor. “Ahora guardamos silencio y nos escondemos aquí hasta que se vayan,” tanteó el brazo masculino en la oscuridad, deseando guiarlo hasta el otro lado de un nuevo cubo de basura que logró ubicar en la oscuridad. La fémina se colocó de cuclillas para así lograr pasar desapercibida, su respiración volviendo a un estado medianamente normal. Lo único que lograba escuchar era los pasos desesperados y las voces autoritarias que exigían y demandaban. “¿Estás bien?” volvió a preguntar únicamente por si las dudas, deseosa de saber si se había llevado un golpe al azar entre todo aquel tumulto de cuerpos por el que habían cruzado con anterioridad. Usó las manos nuevamente, extendiéndolas y colocándolas a un costado de ella hasta dar con una superficie fría y ligeramente peculiar. Empujó y como lo supuso, la superficie cedió. “Hay dos tablas flojas por las que podemos cruzar al otro lado,” anunció en voz alta.
#( &.ironsaresick )#ooc: bueno#dice que a la salida en la esquina#lo estará esperando#que vaya solo y sin armas#que sea macho#MIRA NO TE PONGO ICON NI NADA BC ME DIO FLOJERITA COMO A TI
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Pecarías con el Padre Fausto?
Ahora mismo, pensando con claridad y cierta lógica, mi respuesta sería totalmente negativa. Me parece a mí que es muy dedicado a lo que hace y que además le gusta, así que no puedo verle fuera de esa faceta con la que le he conocido. Aunque la vida da mil vueltas, supongo.
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Alguna vez has fantaseado con el párroco Fausto?
Mhm, en realidad no. Y ni siquiera había pensado en eso hasta ahora que sacaste el tema a flote.
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¿Crees que hay razones para que seas juzgada y castigada por el fantasma de las Doherty? ¿Hay algo que no te deje dormir?
Me gusta pensar que no existe ninguna razón para que las cosas sean así, y hasta hace unos días ese era mi firme pensamiento en relación a dicho tema. Sin embargo, haber estado presente en la fiesta que se llevó a cabo hace unos días me obliga a replantearme cada una de mis ideas. Siento que las he perturbado de alguna forma, que les he faltado al respeto por haber detenido mi andar justo en ese instante. Pese a eso, intento que este factor (ni ningún otro) no me arrebate una de las pocas cosas que puedo permitirme a lo largo del día.
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Oye mami, necesito riegues unas flores acá abajo ;)
Te puedo facilitar la lista de precios y de los servicios que prestamos en la florería. Si el que deseas no se encuentra dentro de la ya mencionada, entonces podríamos llegar a un acuerdo.
#( &.honest hour )#Anonymous#ooc: *suena propuesta indecente de fondo* ahr no#*niegA*#*todo está en doble sentido* ah mentira#hay preguntas difíciles en el buzón *los mira feo*
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HONEST HOUR TIME.
Un juego, sí, sí, hora de sacar ciertas verdades a la luz. Tú dale reblog si deseas que anónimos lleguen a tu buzón para preguntarte cositas, sólo hay una regla: que sólo se debe decir la verdad.
¡Recuerda mandarle a todos para que se haga más interesante!
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&.sarfgxido // flashback:
Ahora lo sabía, la paz tan frágil, la tranquilidad constante, aquella burbuja no podía ser perfecta, un hueco lóbrego crecía para comerse a mordiscos la careta de perfecto paraíso, lo triste era disfrazarse detrás de tres pobres tragedias de huesos y carne con tal de conseguir sus objetivos, ¿y cuál era el final, la desesperación compartida en una multitud, las lágrimas de alguna que otra muchacha víctima de un pánico interminable, un par de moretones en los desafortunados, despertar a tres fallecidas de sus tumbas? Bah, su cabeza funcionaba demasiado rápido como para dedicarse a hallar respuestas a la catarata de incógnitas que lapidaba su curiosidad— Eh—se mordisqueó la mejilla, sus ojos moviéndose en el frenesí de luces azules y rojas, en la fuga de corazones acelerados, un mal palpito surcaba su cuerpo, un mal presentimiento—, por allí. —se prendió una luz, metafóricamente hablando, cuando notó un estrecho callejón que, quizá gracias a la penumbra, funcionaría como buen escondite pasajero, todas las tormentas daban tregua en algún momento. Y tomó nuevamente el brazo femenino, le dio un empujón por la cintura, la respiración ligeramente agitada y eso que ni había empezado a acelerar la velocidad. Fue el primer error de su noche, el primer renglón para escribir su propia condena. Tal vez la imagen fue mal vista, tal vez se coronó como culpable sin darse cuenta, los malentendidos eran pan de todos los días, eran puras suposiciones, la única seguridad que hubo fue la que tuvo el tono de voz que penetró el aire. — ¡Eh, tú, suelta a la chica! —y la luz de su linterna los atrapó de inmediato, casi lastimó la mirada. Su segundo error de la noche fue no soltarla, al contrario, puso el cuerpo femenino detrás de él, no alejar sus manos. No lo sabía, pero para los ojos amenazantes del uniformado él era uno de los culpables, era uno de los malos, de los que movió los hilos de aquella broma, uno que se estaba metiendo con una inocente jovencita en aquella trampa que era la oscuridad en la noche— Mira, creo que esto lo podemos…—discutir, no, las palabras no eran útiles en un caos de violencia y pulsos acelerados. No, otro grito amenazante y pasos peligrosos acercándose hacia los dos— Oh, vamos, ni siquiera tienes cara del típico corrupto…— entre el hilo entrecortado que era su respiración, tuvo que reírse: fue el tercer error de la noche. Golpe en la rodilla y de inmediato su cráneo sintió la dureza del asfalto darle la bienvenida, mejilla apoyada por aquel campo de batalla que vio correr un sinfín de pies, el polvo le llegó hasta la boca, hasta las fosas nasales, y la capa de sudor sobre la espalda se hizo más fría— ¿La has lastimado, eh? Cierra la maldita boca.—no, no tenía derecho a responder ni quejarse, ni siquiera del ardor en cada centímetro de la cara. Y ahí los músculos de los brazos llorando por la innecesaria fuerza de más, sus muñecas cosquilleando por la gélida sensación de las esposas, llegando hasta sus huesos. El peso de la rodilla masculina sobre su espalda cuando ni siquiera ejerció un segundo de fuerza para escaparse— No tienes documentos.—las palabras en su cabeza se tradujeron como estás jodido— Los dejé en el maldito motel.—el tono amable, calmo se fue al mismo infierno.
Cada una de las preocupaciones de la fémina se esfumaron cuando sus orbes se encontraron con el conocido estrecho callejón por el cual doblaba cuando no deseaba caminar largas distancias, o cuando simplemente quería llegar antes a casa. Escasos metros los separaban de su objetivo, Luna evadiendo los cuerpos sudorosos que parecían controlados por la violencia y por sus más bajos instintos. No se detuvo ni un solo instante, permitiéndose guiar por la figura contraria y confiando en que el agarre efectuado era suficiente para mantenerlos dentro del mismo camino. No sería bonito que alguno de los dos fuese atrapado por los cuerpos danzantes que pasaban a los costados, siendo arrastrados a zonas desconocidas que quizá resultarían ser el doble de peligrosas que la que se encontraban pisando actualmente. Las palabras salidas de entre los labios ajenos de un tercero pasaron desapercibidas durante un momento, la muchacha siguiendo el camino hasta que la luz de la linterna la obligó a cerrar los ojos y a ubicarse instintivamente detrás de la figura masculina. Como si la situación no fuese lo suficientemente mala, la florista permitió que sus dedos se aferraran a la prenda superior que portaba el forastero aquel día, cual si desease mantenerlo bien agarrado en caso de que llevaran a cabo un movimiento en falso y optaran por llevárselo en uno de esos vehículos parpadeantes. “Corramos,” un susurro apenas audible para su acompañante, sus pensamientos dejando de ser coherentes y dejándose controlar por la desesperación que en ese mismo instante se paseaba de un extremo a otro. Era demasiado tarde y la cercanía de las figuras uniformadas servían de señal para indicarles que estaban metidos en un gran lío, porque Luna se consideraba tan culpable como Gvido (si es que el delito podría considerarse el haber consumido una cerveza en una fiesta ilegal), pero por algún extraño motivo resultando la víctima frente a los ojos de los cuerpos policíacos. “Me estaba ayudando,” añadió en uno tono de voz moderado. “No me ha lastimado, me estaba ayudando,” insistió con la intención de hacerse notar. Cámara lenta, fuerza innecesaria, la violencia siendo protagonista de la escena. Luna exclamó algo que no logró entender, sus ojos grandes abiertos de par en par al observar a la figura masculina en aquella posición sobre el asfalto. “¡Lo están lastimando!” fue entonces cuando un par de brazos la sujetaron por la cintura, manos escurridizas obligándola a permanecer firme sobre el punto aquel. Ni siquiera se había dado cuenta de sus intenciones por interferir en la escena hasta que la autoridad soltó un forzado: “Quédese quita, señorita Salazar” que ocasionó en Luna una oleada muy poco común en su vida. Se sacudió del agarre, fracasando en el intento. “¿Por qué lo lastiman si solamente me estaba ayudando? ¡No ha hecho nada malo!” y lo repetiría mil veces si así era necesario. “¿Gvido?” el tono de voz escondiendo el tono alarmado, cuestiones silenciosas que deseaban saber qué podía hacer para ayudarle.
#( &.sarfgxido )#ooc: yo siempre me siento con la responsabilidad de igualar como puede ver JEJEJJE#pero la mayoría es relleno#UN MES SE PASA VOLANDO#ahr ya
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&.tadvoularis // flashback:
Todo lo que estaba pasando recorría todos los niveles de límites aceptados por la sociedad, primero era jugar con la ficticia historia de unos espectros fantasmales siendo vengativos frente a algo que odiaban en vida, y los extremos de llegar a herir a las mismas personas que habían convocado, ya era un extremo que perdía toda noción de divertido, era una locura. Las luces fue un inicio entretenido, hasta la fiesta pudo haber estado mejor con aquel detalle sutil donde permitía la libertad de los exhibicionistas a realizar aquellas locuras que no harían con espectadores muy cercanos, quizás disfrutar de la imaginación activa de los que prestaban atención y dejar la incertidumbre si ocurría o no aquello. Esperaba que su melliza no fuese parte de todo ese circo porque podría llegar a arrancarla de cualquier persona y arrastrarla con él hasta su casa. Sabía que luego tendría que soportarla a ella gritando e insultando en el idioma que ambos entendían. Pero odiaba ver a Chryssa dejar que se aprovecharan de ella más allá de ella misma estar aprovechándose de cualquier hombre, porque sabía que podía, sólo prefería que no estuviera con cada loco que se le cruzara. “Si, no sé dónde se metió, dijo que vendría para aquí cuando lograra escaparse del trabajo” Le contó a la mujer sin importar que acababa de añadir información no requerida en la pregunta de ella. “Tranquila” Le dijo con un tono suave para que confiara en él. sabía como manejar situaciones de tensión, controlaba a Chryssa cuando discutía con su madre, eso era un logro del cual se daría mérito toda la vida. Todo lo que estaba sucediendo no tenía ninguna lógica en si, una razón o algo similar. En cuanto la chica comenzó a avanzar, Tadeo, desentendido la buscó con la mirada hasta encontrarla.”Hey, hey, hey” La tomó del codo con firme cuidado y se posicionó delante suyo. “No puedes ir hacia allá, esto es todo una mala broma si vas allá caerás y ¿Ves por allá?” Preguntó señalando las luces de las patrullas avecinando su llegada con pronta rapidez. “Créeme que no querrás que esos te atrapen” La soltó. Sabía de lo que hablaba, no por algo lo decía y habían sido encierros leves por violencia callejera, gracias a Chryssa para aclarar que sólo reaccionaba de tal manera si alguien intentaba sobrepasarse, sin consentimiento, de su melliza. “Ven conmigo” Ofreció su mano como única forma de mostrarse honesto.
Debido a la gran multitud que había a sus alrededores, Luna únicamente logró avanzar tres pasos antes de que el agarre fuese efectuado y antes de encontrarse con la figura masculina obstruyendo más su paso. La fémina alzó la mirada y se colocó de puntillas con la clara intención de echar un vistazo por encima del hombro ajeno, captando a un par de personas decididas a abandonar la escena a como diera lugar. “Pero puede heridos, ¿sabes? Sea cual fuese el motivo que llevó al cristal a explotar, había algunos invitados muy cerca de la casa,” frunció el ceño con ligereza. Claro, ni siquiera había sido consciente de las rocas siendo escupidas por aquella ventana, o de los seres humanos verdaderamente descontrolados comenzando a moverse en todas direcciones. Luna volvió a encogerse, permitiendo que los cuerpos pasaran a los costados de su ubicación actual sin que llegasen a lastimarla del todo. Tan pronto como la figura masculina los señaló, la fémina reparó en las luces rojas y azules que gritaban a los cuatro vientos que las autoridades estaban más cerca de lo que ella había imaginado. Observando todavía por encima de hombro masculino, Luna agrandó los ojos tras ser testigo de aquellas figuras uniformadas haciendo uso de toda su fuerza física para someter a un par de muchachos que se negaban a cooperar con ellos. Les obligaron a encontrarse directamente con el asfalto, sosteniéndolos con una rudeza innecesaria y haciéndolos lucir unas esposas relucientes ya usadas con anterioridad. Más tarde los levantaron y los metieron a un vehículo parpadeante. Sus orbes recorrieron las facciones ajenas, buscando algunas respuestas. Segundos más tarde y sintiéndose cual corazón gigante caminando entre el tumulto de cuerpos, tomó la mano contraria y comenzó a moverse en dirección desconocida. A donde quiera que volteara se encontraba con cuerpos policíacos listos para atrapar a las figuras débiles e inocentes más al alcance. “¿A dónde vamos a ir? Están por todos lados,” y su casa quedaba al otro extremo de la calle. ¿Verdaderamente tenían posibilidades de salir librados de aquella situación, de nadar hasta la orilla segura que les permitiría seguir una vía libre hasta la seguridad de sus hogares?
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&.ironsaresick // flashback:
Una vez escuchando la respuesta, asió el brazo de su acompañante con el fin de no perder de vista y se puso por delante con intención de protegerla. Él podría aguantar un par de golpes, sobretodo devolverlos. – Solo dime hacia dónde tenemos que ir — respondió al tiempo que sus fuertes hombros y codos empujaban a los residentes. La onomatopeya de las sirenas empeoraban la situación, ¿cuál era el propósito de buscar culpables cuando claramente nadie lo sabía? Ser atrapados sería prácticamente tener que lidiar con estas incómodas respuestas. – Si tu historial se ve perjudicado esta noche puedes echarme la culpa, la comisaria me conoce bien y así te librarás de lo que sea… – aseguró con cierta ironía en su voz, también con cierta verdad. La frente comenzó a sudarle por la cercanía de todos los cuerpos y claro, los últimos acontecimientos. La fiesta definitivamente no había sido común y aburrida, los anfitriones podrían jactarse de todo eso en el futuro.
Dejándose guiar por la figura contraria entre el tumulto de cuerpos que de vez en cuando lanzaba golpes aleatorios al aire, Luna aferrándose cual si la vida dependiese de ese detalle tan mínimo, que en cierta parte así era. Alzó el cuello para así poder echar vistazos del camino frente a ellos, intentando captar de inmediato el callejón por el cual tenían que entrar para lograr perderse de vista. “No habrá necesidad de hacerlo y realmente no lo haría. Parece que te metes en muchos problemas y mis intenciones no son añadirte más al historial, sino que salgamos libres de ésta,” habló en voz alta. Una vez sus orbes se encontraron con el espacio estrecho que debían cruzar, alzó la mano libre y golpeó ligeramente la extremidad ajena para llamar su atención. “Debemos doblar por ese callejón, ¿podemos llegar sin ser arrastrados por la multitud?” por el rabillo del ojo alcanzó a apreciar una figura uniformada. “Y tiene que ser en este instante porque hay un policía muy cerca de nosotros,” e incluso se movió más rápido de lo planeado.
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#( &.visage )#ooc: haré una pausa para ver un capítulo#y luego termino con Jack o/#me iré sin deber nada k#ya dije
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