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Marzo y Damon, parte I/III.

¿Cuántas veces uno se imagina cumpliendo sus sueños por mas pequeños que sean? ¿Cuántas veces uno fantasea con solo un abrazo o firma de alguien a quien tanto admiras?

El año pasado, en septiembre, Gorillaz anunció que iría por primera vez a Colombia, más exactamente al festival de música más grande que tenemos: El Festival Estereo Picnic.

Recuerdo que el día en que ellos iban a anunciar el line-up yo me levanté súper temprano pero no vi mi tablet porque estaba nerviosa, ya saben, de que me hubiera ilusionado y de que Gorillaz finalmente no tuviera fechas en mi país pero cuando vi las notificaciones literalmente me puse a llorar y a temblar al ver esto:

Y aquí estoy yo y mi reacción:

Sí, enloqueci, pero no tenía ni la menor idea de que su venida me daría la mínima posibilidad de poder tener cara a cara a Damon.

Cuando finalmente llegó el 2018 yo no veía la hora de que fuera Marzo. Compré la boleta en noviembre y la cuidaba como si fuera mi hijo hasta que finalmente llegó el fin de semana por el que tanto había esperado.

Quiero aclarar que yo nunca, pero nunca, jamás había ido a un aeropuerto a esperar por algún artista. Quizá porque soy muy selectiva y solo tengo a unos muy pocos músicos como personas que digo "si o si tengo que conocerlo" y eso fue lo que exactamente me pasó con Damon desde hace cuatro años cuando lo empecé a escuchar (por Blur).

Me sentía extraña, nerviosa, pero genial a la vez. Sabía que él llegaría a las 4pm porque me puse en plan de espía y gracias a las redes sociales pude saber a qué horas saldría de Chile. Yo llegué prácticamente al medio día, sola, sin tener idea porque puerta podría salir pero decidida de que no perdería la oportunidad de verlo.

Me puse a caminar y caminar viendo las pantallas donde te anuncian los vuelos con sus entradas y salidas. Yo estaba mirando eso, perdida, completamente perdida cuando una joven me llamó y me hizo una señal para que me acercara a ella y a su pequeño grupo de cuatro personas.

Soy tímida así que me acerqué despacio y ella me preguntó "¿También viniste por Damon?" mientras yo me alegré por dentro sabiendo que ya no estaba sola en toda esa locura de querer verlo.

Empezamos a hablar y mientras la tarde pasaba llegaron otros tres jóvenes quienes tuvieron la idea de que le compráramos una gorra para su cumpleaños. Sí, él pasó su cumpleaños número cincuenta en Bogotá y me siento re feliz por eso, deal with it.

Igual aclaro, el día en que estábamos en el aeropuerto era el 22 y para los que saben su cumpleaños es el 23 pero aún así queríamos tener un detalle con él. Lo que no sabíamos era que sí lo íbamos a recibir en su día especial ya que siendo las 4pm, hora en la que supuestamente él llegaría, nos enteramos por redes sociales que justo su vuelo se había retrasado y que justo él llegaría a la medianoche.

Muchos se pusieron re mal por eso y yo no entendía el por qué, quiero decir, de todos modos iba a llegar y solo por esperar unas horas más no me iba a desilusionar. Yo solo pensaba "He esperado cuatro años por verlo, ¿qué son solo seis horas más?", pero al parecer a muchos les afectó eso y se empezaron a ir.

Al final quedamos, lo que recuerdo, como unas quince personas.

Nosotros solo hablábamos, mostrabamos las cosas que habíamos llevado para que nos firmara, escuchamos ciertas canciones y asi matamos el tiempo hasta que llegó el momento de darle la bienvenida.

Recuerdo que el padre de una de las jóvenes que estaba ahí tenía una tablet y no sé qué app sería pero podías ver en qué momento aterrizaba el avión donde venía Damon. Cuando aterrizó yo no caía que estaba a una pista de distancia de él y empezamos a hablar sobre eso con los jóvenes quienes a propósito me dejaron a mi el regalo para que yo se lo entregara a él. ¡Qué honor y qué nervios la puta madre!

Yo pensaba qué decirle, cómo me iba a expresar pero mi mente estaba en blanco y aunque intentaba crear todo un discurso para él llegaban los nervios y PUM me borraban todo de nuevo. Mientras estaba en esa lucha con mi mente y mis palabras cuidando de que el regalo estuviera bien, alguien gritó algo como "Por la puerta izquierda" y sin pensarlo, todos los que estábamos ahí empezamos a correr hacia la izquierda (obvio) viendo cómo salían personas de seguridad y luego... Y luego vi una gorra amarilla muy familiar.

Yo aliste la cámara y comencé a filmar diciéndoles a todos que empezáramos a cantarle el cumpleaños. Y lo hicimos.

Él empezó a caminar lento, sonriendonos a todos pero hubo un momento en el que yo quedé cara a cara, por primera vez, con él.

No les miento, me temblaban las piernas, sonreía, me costó respirar un poco (esto es en serio), dejé de "cantar" y solo comencé a decirle "Hola Damon".

"Hola Damon", quiero decir ¿¡qué!?, por dios Paula es británico, habla inglés y yo había practicado un discurso para esto.

En el momento no caí en cuenta de eso pero luego me miraba al espejo y me sentía como el meme de "¿Por qué eres así?".

Pero volviendo al momento del aeropuerto, ¿recuerdan que yo tenía el regalo? Bueno, yo estaba tan en shocked que ya me estaba olvidando de dárselo hasta que un joven al lado mío me hizo reaccionar diciéndome "El regalo, ¡El regalo!", así que intenté entregárselo pero en ese momento, justo en ese momento me di cuenta de algo que no había visto o que bueno, sí lo había visto pero mi emoción me había cegado por completo: había gente de seguridad y no nos dejaban acercarnos.

Nadie se había tomado fotos, nadie había logrado obtener un autógrafo gracias a esta gente y yo sé, yo sé que es su trabajo pero ¿qué piensan que le vamos a hacer? ¿qué lo vamos a robar o a golpear? Mira si le voy a hacer eso a ese ángel pero bueno, llegamos a la salida del aeropuerto y al darnos cuenta de eso, de que nadie había obtenido nada, algunos empezaron a "protestar" diciendo "Estamos aquí desde el medio día", "No nos hagan esto" y cosas así, pero más se demoraron ellos en hablar en que a Damon ya lo hubieran subido a la camioneta.

Yo no me sentía mal, al contrario, me sentía re feliz y lloré un poco porque lo ví, lo saludé y él me sonrió. Me sentía realizada.

Cuando la camioneta se fue fuimos a donde estaban el resto de la banda que se iban en vans diferentes y nos tomamos fotos con ellos pero también nos ayudaron a darnos pistas de en qué hotel podría estar Damon ahora... Y fue así.

Mientras saludabamos a todos y nos tomábamos fotos, una de las corista mostró un sobre que decía "Hilton" y no nos fue difícil deducir que quizá todos podrían estar en el mismo hotel así que cuando se fueron y quedamos solos (los cinco que quedamos hasta el final) hablamos y decidimos crear un grupo de WhatsApp para encontrarnos al día siguiente e ir al hotel.

Nos fuimos a casa y mientras yo iba llegando solo podía pensar "Lo ví. Realmente lo ví, le cante el cumpleaños y me sonrió".

¿Me creen si les digo que esa noche no dormí de la emoción? Solo veía el vídeo y volvía a pensar una y otra vez en que lo tuve frente a mí.

Este fue un screenshot que tomé de mi vídeo donde me sonríe en el aeropuerto.

Si quieren ver el vídeo está en mí Twitter: https://twitter.com/loneIypaula/status/977241141727899648?s=19

Ese fue el primer día de todo un fin de semana que me cambiaría la vida porque créanme, cuando estas cosas suceden uno empieza a creer en que todo puede llegar a ser posible por más imposible que uno lo imaginaba.

PD: Cuando estaba en el aeropuerto hubo un momento en el que quedé detrás de Damon y pude tocar su brazo izquierdo... Jaque mate seguridad.

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this was in my country a a a a a

i was there

@victors-dong: Is this embarrassing enough?

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2018

‘’Sal del camino, toma la ruta’‘, dice una de mis canciones favoritas y la cual identifica mucho todo lo que he vivido hasta el momento.

Mi nombre es Paula, cumplí 21 en mayo y siento que en lo que va de este año he vivido más de lo que lo he hecho en toda mi vida. Soy de Bogotá, Colombia, un país donde la mayoría de gente es alegre, extrovertida y ama salir a bailar o escuchar lo que sea que pongan en la radio, cosa que yo no puedo. No me considero alegre, al contrario, bastante pesimista e introvertida. ¿Socializar? No es mi mayor placer y salir menos. Además, pongo mucho cuidado a lo que suena en la radio y la verdad me impresiona como la gente se toma tan a la ligera lo que suena y ya lo llaman música. ¿Como le vas a llamar música a una canción de maluma? Yo simplemente no puedo con eso y creo que por esa misma razón no me hablo con cualquiera. Ya sé, suena muy tonto pero para mi la música es lo que me salvó y por eso es tan importante para mi lo que alguien escuche. Es lo que lo define.

Pero bueno, no vengo a hablar solo de lo que odio y amo. Vengo a hablar de este año en especial: 2018, que ya va para su octavo mes, pero que me ha hecho vivir experiencias únicas que pensé que solo lograría en quien sabe cuantos años más.

Voy a hacer varios ‘’capítulos’’ cronológicamente de lo que me ha ocurrido desde vivir mi primer concierto, conocer a Damon Albarn (cosa que jamas pero en serio jamas pensé que ocurriría), mi viaje hasta Argentina pasando por casi todo suramérica y mi experiencia viviendo aquí.

No quiero ser tan formal escribiendo. Solo quiero escribir las experiencias tal y como las viví, intentando transmitir los sentimientos que sentí con cada cosa que me pasó.

No soy escritora, tampoco pretendo serlo, pero esta es la mejor forma que encontré para expresarme porque o si no tenia la idea de hacer vídeos pero créanme, no me da la cara para hacerlo (literariamente no me da la cara porque tengo muy baja auto-estima y me quedaría congelada frente a la cámara así que escribir es mejor... nadie puede verme al fin y al cabo).  

No siendo más y ya tomando esto como introducción les doy la bienvenida a mi 🅱log.

Disfruten y si no, bueno, arriba en la esquina derecha de sus pantallas hay una ‘’x’’.