Tumgik
LENA
Y cambió los tenis por los stilettos…
(Parte 2)
Esa mujer de bajo perfil que todos conocían en su alrededor fue desapareciendo, se quitó las balerinas y su subió a unos tacones, como aquel guerrero que sin saber a dónde va ni en qué se ha metido, alza la cabeza, postra la mirada en el horizonte sin saber dónde está y se alza en armas aunque no sepa usarlas, pero para los demás, es el hombre valeroso dispuesto a todo, porque lo sabe y lo puede; algo así hizo Lena, cuando era estudiante sufría al dar una presentación, su calzado cómodo y sus pies sin sufrimiento eran invadidos por unos tacones de 5 cm y casi podía jurar que le sangraban. Ahora esa mujer se subió en unos de ¡7 cm! imagínense el río de sangre que pasaba por su cabeza. Fue pasando de 7 cm a 14 cm, y en ocasiones especiales 17 cm, pantalones ajustados, acampanados que enmarcaban sus caderas, blusas con ligeros escotes, vestidos coquetos y elegantes, pantalones con raya en gis y sacos de oficina, bisutería de acuerdo a la ropa y a la ocasión, cabello sedoso, uñas cuidadas y maquillaje avanzando a la perfección.
¡Oh mi Dios! 
Aquellos que habían seguido la vida de Lena como esa mujer agradable y desenfadada no reconocían lo que de pronto se cruzaba ante ellos. Lena pese a toda su autocreencia de sí misma, tenía algo a su favor y que pocas mujeres de talla grande se atreven a experimentar, era grandiosamente sensual, coqueta y suficientemente amena para saber distinguir con quién y en dónde hacerlo. Se había ganado uno que otro seguidor. 
Su vida transcurría entre el trabajo, su relación con el pardo, su relación con la vida y sus amistades, que básicamente en esa época solo destallaba July. Se divertían cada anoche a partir de los viernes, y en ocasiones el fin de semana para ellas era desde el jueves. A pesar de sentirse falsamente enamorada podía sentir atracción hacia otros hombres y experimentar esos encuentros que algunos hombres tienen durante toda su vida aunque existe una mujer en casa. Nunca se sintió culpable y de hecho nunca se dijo a sí misma que la fidelidad no era para ella, hasta parecía que la palabra no existía en su amplio vocabulario; son como esas palabras que de pronto no sabes ni cómo usarlas en una oración <<per se, a priori, fidelidad>>. 
Pero de pronto las cosas fueron cambiando cuando el pardo se dignó a decirle lo que tanto había esperado ella, le dijo que la amaba; ambos se disculpaban inconscientemente de la falta de compromiso y fidelidad que no había entre ellos, pero cuando el pardo empezó a notar que su novia ni él mismo la reconocía, postró sus ojos más sobre ella, sus caricias empezaron hacer más seguidas, sus citas como enamorados parecían de todos los fines de semana, se decían que a determinada hora tenían que partir a casa, estuvieran donde estuvieran, porque al pardo se le despertó un apetito voraz que Lena disfrutaba tan gratamente que todos los viernes tenía un ritual de belleza en el tiempo de comida que en el trabajo le daban. Ahí fue donde el pardo se percató que la mujer que tenía a su lado estaba a punto de alejarse de él, ¡¿y cómo no?! si ninguno de los dos veía en el otro la persona con la que quisieran estar siempre, por eso la fidelidad, el compromiso y el gozo no existía entre ellos. Y para poner más en claro las cosas, el pardo aún era un hombre casado (por eso al principio aclaré que Lena se había adjudicado un marido), con 3 hijos de matrimonio y cuentan que 1 fuera de ello. 
La familia del pardo estaba dividida, entre los que estaban del lado de Lena y los del lado de la aún esposa, Graciela. La realidad cualquiera la veía, Lena era una mujer académicamente preparada y que seguía preparándose, se encontraba estudiando un posgrado, trabajaba y le iba medianamente bien en caminos de crecimiento, con educación y valores (aunque no siempre los ocupaba), era refinada, culta, elegante y coqueta innata que disfrutaba pasar en frente de todos y esos “todos” les encantaba esa belleza; Lena se sabía sacar provecho para conseguir lo que le hiciera falta. Graciela era un poco diferente, académicamente solo tenía un preparación media superior, de familia humilde y cuya educación no era precisamente la más refinada, no era culta porque tampoco le gustaba serlo, se casó muy joven con el pardo, ella de 25 y él de 20, a los 6 meses de casados ya estaban separados, la primera separación de 4; al primer aniversario Graciela ya estaba esperando al primer hijo, descansaban 2 años se separaban y cuando regresaban anunciaba la siguiente espera, y así se dio 3 veces, pero en esas 3 veces hubo una separación un poco más larga, donde el pardo conoció a alguien y se dice que de ese <<alguien>> tuvo <<algo>> pero que él mantenía sin aceptar ni desmentir. Graciela no era agradable, y por recomendación de su mamá la única meta que debía mantener era conseguir un esposo, tener hijos y su futuro resuelto; ella manejaba al pardo a su manera y si no conseguía algo entonces ocupaba lo que casi cualquier otra mujer ocupaba, los hijos...
Entonces la familia del pardo se fue dando cuenta de los 2 tipos de mujeres que tenía su hijo; para los que estaban a favor de Lena, veían una mujer que iba a luchar por conseguir siempre algo mejor, que ayudaría al pardo y que podían contar con el respeto de ella, ya que ella trataba de no tener mucho contacto con ellos, mientras que en Graciela veían a la mujer conformista y acostumbrada hacer del pardo un inútil y exprimirlo como limón, hasta la última gota de dinero. Pero los que estaba del lado de Graciela lo que veían era una mujer que aún era su esposa y con la que tenía a sus hijos, por consiguiente ahí tenía que estar, y en Lena veían una mujer que no entendían por qué su afán de seguir estudiante, una mujer que entre más preparación menos iba a saber llevar una casa, atender a su marido y criar a sus hijos; y la verdad, que la única que pertenecía a éste último bando era la mamá del pardo. Una mujer con rencor por el abandono de su esposo y que años después regresó cansado, sin dinero y enfermo, doña Macarena no quería lo mismo para su hijo, sentía que de alguna o de otra forma era casi similar la historia. 
Entonces Lena continuó su vida conformándose en la sombra de Graciela, si del pardo hablamos, pero en cuanto al resto de su vida, brillaba con luz propia. Pero cuando te arrancan un pedazo del corazón, se desprende con todo y alma, y ese vacío no es llenado por nada, y te conformas con los momentos a escondidas que tu amante te regala, que le sobra. En eso se convirtió la relación de Lena, el pardo regresó con su esposa pero seguía viendo a Lena, claro, a “escondidas”, en secreto, un secreto del que todos sabían, hasta la propia Graciela.
Aunque Lena se transformó de acuerdo a las épocas que vivía nunca dejó de sentirse menos en cuanto a las relaciones, siempre se conformó y siempre se adjudicó que eso era lo que le había tocado vivir.
Su vida nunca se detuvo, salía y se divertía con July, aparecía uno que otro amante de ocasión, y lo disfrutaba aún más, porque quería que a pesar de todo el pardo se enterara para tener que decirle, gritarle y reclamarle que en realidad no eran nada, y que el pardo ahora se había convertido en un amante más, pero ahora de ella.
¿Podría seguir una vida llena de indecisiones? ¿De conformarse? ¿De errores y desaciertos?
Te veo y te leo... Besos
1 note · View note
LENA
Y cambió los tenis por los stilettos...
(Parte 1)
Lena era una chica con ansías de comerse el mundo -no es broma, es en serio-, ella sentía que había desperdiciado mucho tiempo en el periodo en que cualquier joven estudiante ya sabía qué camino seguiría, pero ella no, se tomó más del tiempo promedio en adivinar lo que quería. Esto la llevó a tener que vivir muy aprisa, trabajaba, estudiaba, se adjudicó un marido del que pocos sabían y lo no menos importante: se divertía, se excedía.
La carrera de Lena la había dejado insatisfecha a tal grado que no sabía qué hacer con ella, a dónde dirigirse o tan siquiera por dónde comenzar. Un mañana cualquiera, de un día cualquiera y de una fecha sin importancia Lena encontró trabajo y paseando por la vida y coqueteando con los excesos se encontró a July, y una amistad “diferente” nació. ¿Por qué diferente? en la vida de Lena pocas mujeres existían, además de su mamá, su abuela y sus hermanas, la siguiente mujer dominante era su mejor amiga, Nadine.
Nadine era aquella mujer que bien podía identificarse como la "consciencia”, la “sensatez” y la “realidad” de Lena. Cuando July y Lena se conocieron se dedicaron a lo único que pensaron tenían en común: divertirse. La diversión era salir los fines de semanas con sus días y sus noches enteras, con sus cigarros y sus alcoholes, y a veces con algún amante de ocasión.
El marido de Lena era poco conocido para los demás, un sujeto que pocas veces saltaba a escena, en esporádicas ocasiones se hacía presente y en minuciosas circunstancias emprendía la huída. Se supone que ninguno de los dos se sentía enamorado por el otro, pero no era cierto, esa promesa nunca se cumplió y ella se enamoró como aquella muchachita que deslumbrada por la belleza de una rosa se marchita esperando ser correspondida, deshojándose con el paso del tiempo y cuya espera llegó a un punto crítico. “El Pardo” como era conocido, “David” como fue bautizado, venía de un entorno familiar muy difícil, su papá les abandonó por la vecina, su mamá en condiciones de enfermedad tuvo que empezar a trabajar y sus hijos tuvieron que ayudar, con el paso del tiempo el papá del pardo regresó, su mamá lo aceptó, su hermana se casó y al pardo le tocó la plaza que su papá dejaba en la empresa, algo así como una “herencia” en vida; el papá regresó en la ruina... y enfermo. Todo eso carcomía por dentro al pardo porque al final tenía que agradecer de alguna o de otra forma al hombre que le dejó a temprana edad porque ahora ese mismo hombre fue quien le dio la oportunidad para tener un trabajo estable, y su forma de sanar sus heridas y manejar su conflictiva vida familiar era su refugio en el alcohol, mismo refugio que le presentó a Lena y aunque ella ya había visitado el refugio mucho antes de estar junto al pardo, esta vez le encontró el amor.
Lena era encantadoramente sarcástica, cuyo humor negro era algo innato, como aquellas mujeres que nacen para parir y ser mamás encantadoras, de ella lo único que podía expulsar eran esas contestaciones cargadas de amenazadoras verdades y que al final no sabes si es broma o es en serio, que rozan entre la verdad y la fantasía pero que al final cuando no es dirigido para ti puedes soltar las carcajadas. Era una mujer inteligente, intelectualmente interesante, lo mismo podía expresar una broma que una charla de política pero a su vez era sencilla, sobre todo en su forma de vestir, muy práctica, pantalones de yoga, pants para hacer ejercicios, coordinados con sudaderas y en raras ocasiones unos jeans y blusas tipo Polo, zapatos bajos como balerinas o zapatillas de ejercicio, con maquillaje básico; 1.57 mts de estatura, 70 kgs de peso, tez morena, ojos redondos y profundos, caderas con buen soporte, donde cualquier podría agarrarse y ese vaivén que su trasero dejaba en cada paso, era esa mujer en la última escala de los 20´ donde aquellos hombres maduros y casados la atracción por una mujer como Lena era casi inmediata pero ella siempre de bajo perfil, ya saben, por el pardo.
Lena se describía sí misma como una persona poco atractiva, que su principal fuente de atracción era su sustancioso trasero y caderas profundas, que con el movimiento natural y la suma de su inteligencia la habían hecho vivir grandes y sorprendentes experiencias; describía a la perfección aquello que cita “He tenido mala suerte en el amor, pero me he comido lo que he querido”.
Esa era ella... Esa era Lena
Te veo y te leo, besos.
0 notes
Somos lo que queremos ser
0 notes
Tumblr media
10K notes · View notes
La historia está hecha de aquellos que nunca se conformaron con un NO
0 notes
Tumblr media
¿Será que todas las cosas están hechas con amor?
No lo sé, nadie lo sabe… todos lo saben; lo único cierto es lo que cada uno de nosotros somos capaces de hacer y de priorizar, de sentir y de creer, no podemos intercambiar esto y tenemos que terminar lo que hacemos y aceptar lo que ganamos, sea positivo o negativo.
Déjame empezar a contarte un poco lo que he hecho y lo que he escuchado…
Hace tiempo conocí a alguien, una mujer que me dejó ver que era casi lo más similar a mi, lo más cercana en cuanto apoyo y sobre todo la disponibilidad que externaba a casi todas sus amistades, ¿su nombre? “LENA” 
Tal como pasa con todos, el tiempo avanza y la vida continúa, te llena de situaciones, errores y aciertos, experiencias y bendiciones; dentro de ese vaivén llega a mi vida en el encuentro de lo casual una nueva persona, “JULY”; tan encantadoramente engorrosa, “subida de tono”, magistralmente te envuelve y caes.. Así era ella, ERA…
Luego siguió la que tendría que decir era mi némesis, “MARCELL” conocida coloquialmente como “La mima”. No quiero anticiparme, pero entre La mima y yo éramos el claro ejemplo viviente de que las mujeres nos podremos destruir y TAMBIÉN NOS PODEMOS HACER DAÑO. 
Y la cuarta persona pero no por eso menos importante, al contrario, la mejor de todas en llegar a mi vida, “SARA” Tan atenta, tan confiable, tan llena de vida y tan certeramente incapaz de amarse a sí misma.
Antes de todas estas visitas en mi vida debo cerciorarme de especificar que hubo un antes y un después en mi cuando fueron apareciendo en escena cada una de ellas.
Por ellas y por esas vivencias se que todo lo que hacemos lo PODEMOS hacer con amor, pero como bien sabemos no es lo mismo #Querer que #Poder
Te veo y te leo aquí… Únete, nos divertiremos. 
Un beso
Saludos
1 note · View note
Tumblr media
¿Será que todas las cosas están hechas con amor?
No lo sé, nadie lo sabe... todos lo saben; lo único cierto es lo que cada uno de nosotros somos capaces de hacer y de priorizar, de sentir y de creer, no podemos intercambiar esto y tenemos que terminar lo que hacemos y aceptar lo que ganamos, sea positivo o negativo.
Déjame empezar a contarte un poco lo que he hecho y lo que he escuchado...
Hace tiempo conocí a alguien, una mujer que me dejó ver que era casi lo más similar a mi, lo más cercana en cuanto apoyo y sobre todo la disponibilidad que externaba a casi todas sus amistades, ¿su nombre? “LENA” 
Tal como pasa con todos, el tiempo avanza y la vida continúa, te llena de situaciones, errores y aciertos, experiencias y bendiciones; dentro de ese vaivén llega a mi vida en el encuentro de lo casual una nueva persona, “JULY”; tan encantadoramente engorrosa, “subida de tono”, magistralmente te envuelve y caes.. Así era ella, ERA...
Luego siguió la que tendría que decir era mi némesis, “MARCELL” conocida coloquialmente como “La mima”. No quiero anticiparme, pero entre La mima y yo éramos el claro ejemplo viviente de que las mujeres nos podremos destruir y TAMBIÉN NOS PODEMOS HACER DAÑO. 
Y la cuarta persona pero no por eso menos importante, al contrario, la mejor de todas en llegar a mi vida, “SARA” Tan atenta, tan confiable, tan llena de vida y tan certeramente incapaz de amarse a sí misma.
Antes de todas estas visitas en mi vida debo cerciorarme de especificar que hubo un antes y un después en mi cuando fueron apareciendo en escena cada una de ellas.
Por ellas y por esas vivencias se que todo lo que hacemos lo PODEMOS hacer con amor, pero como bien sabemos no es lo mismo #Querer que #Poder
Te veo y te leo aquí... Únete, nos divertiremos. 
Un beso
Saludos
1 note · View note