Tumgik
huellasliterarias · 11 months
Text
Revelaciones
categoría: Microcuento
El hombre, estragado por la sed, dejó su recua de mulas para correr veloz hacia el declive de un arroyo. Hundió la cabeza en el agua, y al levantarla, vio que una de sus mulas se acercaba y le decía:
—Dios es servido de darte de beber en tu garganta sedienta. —Todas las cosas están llenas de Dios —dijo él. La mula asintió y dijo: —Dios es misericordioso. Pero los animales no hablan.
Tumblr media
Por: Geison David Román Díaz
0 notes
huellasliterarias · 11 months
Text
La hoja en blanco la aterraba
Categoría: Relato
¡La hoja en blanco la aterraba! Había intentado hacerla menos blanca, menos vacía, pero con cada intento sentía que se condenaba. No sabía que escribir. Tampoco tenía mucho tiempo para pensarlo. Creyó que sería una tarea más fácil y la dejó de lado por mucho más de lo que imaginó. Además ¿De qué puede uno escribir si no ha vivido nada? Se cuestionaba. Por eso prefirió hacer otras cosas; como salir con amigos e irse de fiesta, con la esperanza de que alguna de aquellas aventuras pudiese ser registrada sobre el papel. 
Eran las 8 de la noche y debía entregarlo al día siguiente ¡Ya no había tiempo, tenía que escribir algo o perder la materia! Cada minuto que pasaba lo hacía todo peor, si antes desechaba cada idea que venía por considerarla tonta o infantil, ahora era mayor el miedo al querer empezar una historia con “había una vez…”.
…El miedo se hacía cada vez mayor, y frente a la hoja en blanco, siempre tan llena de posibilidades, era incapaz de tomar una elección…
Frustrada, repasaba sus opciones. Podía buscar algún cuento de un autor desconocido y modificarlo lo suficiente para que nadie sospechara. También pudo haberle pagado a alguien para hacerlo, pero esa no era una opción realmente, pues no tenía dinero. Simplemente, ya no sabía que hacer, solo sabía que no quería perder ¡Llegó incluso a pensar en seducir al profesor! Pero está idea la repugno tanto que rápidamente la descartó.
En su desespero recordó un viejo mito; que todos los grandes escritores en algún momento recurrieron al alcohol. Viendo la situación en la que estaba, decidió intentarlo esperando que esa misma desinhibición que la llevaba a bailar y hablar con todos en las fiestas; sacara de alguna parte oculta, su voz literaria. Quizás con la dosis adecuada, descubriera en ella un García Márquez o un Cortázar, pero con tal de no llegar con las manos vacías, bienvenida era cualquier pluma capaz de escribir tres párrafos con sus respectivas seis líneas.
Al día siguiente se despertó con resaca, se alisto como pudo y entregó el trabajo que tanto le costó hacer ¡Y Contra todo pronóstico, sacó la mejor nota! ¡Pero vaya sorpresa! ¡No es que lo que escribiera fuera bueno, es que el profesor sintió pereza de leer, puso la misma nota a todos y se fue a beber!
Tumblr media
Por: Paola Andrea Moreno
0 notes
huellasliterarias · 11 months
Text
El tucú del Amor
Categoría: Poema
En el vientre materno, un susurro eterno, surge el latido del amor, dulce y sincero.
Crecen los sueños en cada palpitar, un regalo de vida, un milagro sin más.
Tucú tucú tucú, el corazón palpita, una sinfonía mágica y hermosa, que nunca se agita.
El bebé danza al ritmo de esa melodía, una promesa de amor que en el alma se guía.
Las manitas se abren como pétalos en flor, una personificación de inocencia y esplendor.
Los ojitos cerrados, sueñan en su lecho, con un mundo de aventuras, en su pequeño pecho.
En cada embarazo, un poema se crea, un poema de amor que en el corazón se anhela.
Un latido que une, que llena de alegría, un vínculo eterno, que nunca se desvanece en la vida.
-Para mí hermosa Alicia
Tumblr media
Por: Yerick Tatiana Muñoz Medina
0 notes
huellasliterarias · 11 months
Text
La vida así es.
Categoría: Microcuento
Y, a tan corta edad lograron vencer esa gran tormenta, pero no sabían nada de las que se avecinaban.
Solo un sueño
Él tocaba el violín con una pasión que le quemaba el alma, pero nadie lo escuchaba. Ella lo amaba con una pasión que le dolía el corazón, pero él no la miraba. Un día, él dejó de tocar y ella dejó de amar.
Tumblr media
Por: Brayan Galindo
0 notes
huellasliterarias · 11 months
Text
Almas Diluidas
Categoría: Monólogo
Todavía recuerdo el tono hermético de su voz, cuando me anunció que tenía planeado casarse con otra mujer a finales de noviembre. Ante mí imperturbable silencio, retomó el hilo de la conversación y, de forma resuelta, hablaba como si estuviéramos decidiendo quién debía sacar a pasear los perros que jamás tuvimos. Mientras miraba ensimismado por la ventana y sorbía ruidosamente su amargo café, me decía: «Fernanda, estoy convencido de que Dios unió nuestras almas con un propósito». Ahora noto que, en toda la conversación, no hubo un solo momento donde nuestros ojos se cruzaran. Durante 35 años de matrimonio, esa sería la única muestra de confidencia que llegaríamos a compartir como pareja. Sin embargo, me sentía completamente ajena a su fe, como si estuviera habitando la piel de un extranjero errante. De nuevo la urgencia en su voz al dirigirse directo a mí: ¡«Fernanda, dígame algo, usted nunca se queda callada»! Ese hombre, de inescrutables ojos almendrados, estaba incluso más confundido que cuando prometió amarme hasta que nuestros corazones se detuvieran. Nuevamente insistió ¡«Fernanda, ¿sí se acuerda de ella? Yo se la presenté en esa fiesta de año nuevo; usted dijo que tenía una cara muy bonita, como de azafata»! En sus cuerdas vocales, sentía el desespero por arrancarme una palabra de confirmación. Por suerte, no teníamos hijos ni tampoco un lugar al cual llamar hogar. Lo siguiente que replicó fue suficiente para volver mi atención hacia él: «¡Fernanda, yo a usted la quise mucho, siempre la voy a admirar! ¿Se acuerda cuando leíamos poemas? ¡Vivía solo para que llegara la noche y encontrarnos! Amaba su mirada abrasadora cuando las palabras danzaban sobre tus carnosos labios!». Era tan extraño verlo ahí, intentando convencerse de que había tomado la decisión correcta. Y aún hoy, mi mente recuerda cuanto soñaba un futuro con aquella linda muchacha de profundos ojos celestes, cuyo nombre traigo tatuado en el alma ¡Cuánto lamenté haber sellado las argollas con un hombre al que jamás logré amar! Ahora creo que nunca olvidaré su angustia al preguntarme «¡Fernanda! ¿será que estoy haciendo lo correcto?!»
Tumblr media
Por: Marianne Checa Pardo
0 notes
huellasliterarias · 11 months
Text
AQUEL DÍA
Categoría: Microcuento
Yo no escogí este camino, ni él. Estar viviendo en un mundo tan ajeno, es difícil. Él sufre cada vez que voy creciendo, y entre más grande me vuelvo, más me odian por ello. Solo desearía nunca haber despertado, en este ser humano TAN maravilloso. No sé que día fue; pero sí sé, que un día, nos quedamos dormidos.
Tumblr media
Por: Yudy Murcia
2 notes · View notes
huellasliterarias · 11 months
Text
Adiós
Categoría: Poema
¿Sabes? dijeron una vez en susurro que entre hola y adiós el tiempo es incierto. Dejamos atrás el hola es un hecho seguro, mas el adiós persiste, como ancla en mi desierto.
Dicen que la vida sigue sin mirar atrás, después de que te alejas un capítulo se cierra.
Pero la verdad persiste en susurros fugaces quedando de pie, enfrentando las horas vacías como un eco distante que en el alma avanza.
¡Te quise tanto! Que hasta la poesía nos tenía envidia.
¡Te quise tanto! Que las palabras perdían el sentido y quedaban a merced de nosotros.
En este punto de partida y despedida, las lágrimas ocultan palabras sin vida; en cada latido un eco de recuerdo, con un adiós silente y un vuelo hacia lo incierto.
Tumblr media
Por: Darling Julieth Rozo Martínez
1 note · View note
huellasliterarias · 11 months
Text
Carla y Carlo
Categoría: Fábula
En un rincón del Caribe colombiano, existe el arrecife coral de Punta Tebada, donde la marea se convierte en una poesía tropical desde que los caballitos de mar, Carla y Carlo, comprometieron su amor para trazar amplios destellos de luz en el escenario coral.  Ninguna criatura marina cuestionaba la razón de este mágico suceso, con sólo prestar atención a la marea, se lograba descifrar el rastro de aquellos cuerpos enamorados que danzaban en un delicado compás.
No obstante, en la aleta dorsal de Carla reposaba una cicatriz que le comprometía su equilibrio y resistencia. Un día de julio fue sorprendida por una corriente tan implacable que sus esfuerzos por mantenerse firme terminaron por arrebatarle su último aliento. La partida de su amada dejó en Carlo una herida que no parecía dejar de sangrar. Sus días se tornaban grises, su corazón se había arrugado como una uva pasa y ya no existía razón para bailar; su único deseo era reunirse con su amor.
Freddy, su mejor amigo, empezó a notar que la vida de Carlo se marchitaba y preocupado le dice:
— “entiendo tu dolor y está bien llorar, pero a veces en la vida existen situaciones que están destinadas a pasar. Aunque no asimilemos el dolor de la perdida de la misma forma. Creo firmemente que la mejor manera de amar a quienes nos han dejado en vida, es permitiendo que vivan en nosotros como un recuerdo hermoso…Recuerda que nuestros seres queridos solo mueren cuando nos olvidamos de ellos, pues el dolor no redime, ni devuelve a quienes amamos" — 
En la noche, el solitario caballito de mar seguía muy sorprendido, no dejaba de pensar en cada palabra que Freddy le había recitado con tonos sabios y empáticos. Así, con tristeza en el alma, decide aceptar la partida de su gran amor, para dar inicio a una nueva historia que comienza, sin duda, por el baile.
Tumblr media
Por: Sara Montenegro
1 note · View note
huellasliterarias · 11 months
Text
Alma Rota
Categoría: Poema
Recuerdo mi alma rota…Sí… como no recordar aquellas noches frías y oscuras, donde mi alma deambulaba sola por las calles inundando de llanto aquel pasado diciembre; imaginando tu rostro con esa deslumbrante sonrisa. ¿Dolor? ¡Claro, como si una gran ráfaga de viento me soplara! Y así la muerte llegó: tocó la puerta de mi alma para llevarse gran parte de mi ser con mezclas de miedo, impotencia y decepción ¡No! ¡No pude hacer nada para salvarte, para recuperarte!
Fue así, sin aviso alguno, solo verte allí en aquel cuarto frío produjo en mí un deseo de abrazarte, besarte y con un leve murmullo entre llanto y desolación decirte: ¡Mi amor profundo seguirá intacto por ti! Quedé sola y con mi alma rota, pero sé que todo pasa y todo queda; es lo que día a día mirándome al espejo me repito para seguir con mi camino, camino que sé te hubiese gustado que siguiera recorriendo; como el tuyo amada Madre.
Y finalmente, así termina todo, en un túnel sin fin, pero con una frase y un cliché más de la existencia: “es tan corta la vida y tan largo el olvido” que mi alma, aunque rota esté; el recuerdo de tu sonrisa reparará poco a poco mi ser.
Tumblr media
Por: Chary Rodriguez
0 notes
huellasliterarias · 11 months
Text
Momentos
Categoría: Relato autobiográfico
Tres veces la había visto en persona, tres ocasiones completamente diferentes, solo nos unía la amistad que llevo con su hijo. Para ella quizá; era solo un muchacho más, un amigo de su crío, un compañero de experiencias, de alegrías, de apoyo y poco más, quizá. Para mí; la familiar, la vida, el polo a tierra, la sonrisa, la causa y me atrevo a decir, ella era el todo de mi amigo. Y digo era porque se fue, y digo el todo, porque ahora que no está; mi amigo está en la nada.
Su último cumpleaños fue la primera ocasión, se alegró de verme y no conocía mi nombre. Su felicidad aquel día hacía que sus ojos no parpadearan, su aliento creció tanto que cantó todas las canciones que sonaban y su cuerpo saltando y aplaudiendo hacían parecer que quería alcanzar las nubes, mientras tanto nosotros, los invitados, los “mortales”, la veíamos desde tierra. Felicidad, alegría y júbilo que quedó marcado en la mente y corazón de los asistentes; la fiesta no era para ella, ella era la misma fiesta.
Semanas después de conocerla ocurrió la segunda ocasión, nos reunía un partido de fútbol entre amigos. Todo el encuentro se dio como si se tratara de un protocolo; los saludos, las conversaciones, el “papeleo de rutina”, todo fluyó con absoluta normalidad, buen ánimo y ritmo; todo hasta que se dio inicio al partido. Éramos catorce jugando en el campo, pero había una décima quinta persona que participaba activamente en el cotejo, fan de todos, no tenía un consentido, ni siquiera su hijo, a todos alentaba, sufría todas las jugadas y cantaba las faltas para ambos equipos; su ánimo nos contagió a todos y su presencia no se hizo pasar por alto.
Puede que esta tercera ocasión se haya dado el mismo día que la segunda, pero el lugar, el ambiente, los ánimos, es decir, el momento en sí estaba escrito para que cuente como una situación diferente.
Después del partido siempre llega el tercer tiempo, y ahí estaba ella, sentada en una escalera, vigilando todo, hablando con todos, casi como en una coreografía, o como si los reunidos hubiésemos sacado turno para charlar con ella, porque de uno en uno fuimos rotando por su lado; hablando, confesando, expresando o manifestando emociones y ella; ella atenta cual psicóloga o consejera, confidente y amiga de todos.
De ahí en adelante ya no hubo más ocasiones, solo saludos por intermedio de su hijo y poco más. Su condición de salud la mantenía alejada y en constante cuidado, de ahí en adelante el apoyo y las palabras solo eran para su hijo, quien poco a poco iba aceptando una realidad que nada ni nadie podía cambiar. Realidad que nos pateó a todos los allegados cuando avisaron, “la mamita de ***** ya no está”.
Tres momentos bastaron para llorar a alguien, tres experiencias fueron suficientes para sentir una pérdida, tres ocasiones fueron las que me enseñaron la importancia de estar, acompañar y no abandonar. Ahora solo pienso en su hijo, su momento de duelo, su cara frente al mundo y sus ánimos para poder decir “Esa fue mi mamita”.
Tumblr media
Por: Gabriel Zambrano
0 notes
huellasliterarias · 11 months
Text
Su Ausencia en Mí
Categoría: Poema
A veces creo tener la sensación fresca de tu ser, tu mirada y tu amor, pero es solo una imagen borrosa de todo lo que podría ser. La sensación de tus manos suaves acariciando mi piel, como si ese último abrazo se arrancara de mi ser.
¿Porque pasaste de estar conmigo; a habitar en mis recuerdos de domingos? Un recuerdo que me transporta a vivirlo una y otra vez, como si estuvieras aquí ¡tan presente! como el día que dejé de escuchar tu corazón latir.
A veces al extrañarte, vienen olas que me agobian; mis días se llenan de preguntas sin respuestas; y se adueña de mi ese dolor que desgarra mi alma; como aquel primer día en que me obligaste a vivir sin ti.
A veces pienso que esa sensación pasará, que ese eterno viaje que emprendiste no tendrá fin y regresarás.
Me hablan de las despedidas, veo tu fotografía y me pregunto ¿Cómo sé que ese dolor pasará? Si un "buenos días" jamás me volverás a pronunciar, ¿Cómo sé que volverás? Si en un ángel ya te convertirás.
Quedó tanto por decir, pero también tanto por dejar ir. Aunque los años pasen, tus risas y tus llantos nunca dejaré de oír.
Vengo a despedirme de ti en una hoja de papel, pero sé, que, aunque lo plasme aquí, nunca dejará de doler… ¡He decidido tu recuerdo nunca abandonar de mi ser, y te seguiré amando tanto, que en los atardeceres tu rostro nunca dejaré de ver!
Tumblr media
Por: Laura Silva
1 note · View note
huellasliterarias · 11 months
Text
Capitán
Categoría: Poema
En un planeta, caminaron sin dirección dos individuos,
a la deriva, se cruzaron sutilmente en los rincones de una librería,
navegaron absortos en las estanterías de ficción y literatura universal,
se reconocieron en Saramago, Murakami, Asano y Storni,
sin llegar a notar que sus caminos se entrelazaban una y otra vez.
Sus rostros jamás se encontraron.
Años después, por cuestiones destinatarias,
se reencontraron frente a frente en la pantalla grande,
develaron sus historias y sus inequívocas experiencias;
“ser lo que quieras ser” fue el recinto idóneo para conocerse.
Uno más interesado que el otro, el otro más curioso que uno,
se mezclaron entre similitudes, banderas rojas y noches de gala,
alterando así la noción del tiempo, un mes, un año.
Una noche, acordaron regresar a aquella fachada vieja,
en donde las miradas por fin se cruzaron,
sonrisas tímidas nacieron como versos,
ya no eran solo aquellas páginas amarillentas con verdades ocultas entre sus líneas,
ni aquellas estanterías de palabras jamás dichas ubicadas al este y al oeste,
simplemente, eran ellos.
Tumblr media
Por: Lina Cubillos
0 notes
huellasliterarias · 11 months
Text
El Brillo
Inmóvil en mi sitio, como si de una estatua se tratara. Con la vista perdida en la oscuridad y en la nada. Por la costumbre y el cansancio adormecida me sentí, hasta el punto en que simplemente dejé de intentar salir. Mi entorno se ennegrecía cada que intentaba avanzar, igual que un pozo sin fondo que te engulle sin más. Y en ese momento de más solemne soledad, un resplandor a lo lejos comenzó a brillar. Hermosas melodías de dulces cantares, dieron a mi alma, una calidez inmensurable. La roca en mi espalda que mi cuerpo entumeció, al suelo ha caído ya no siento dolor. Halo que resplandece con fuerte fulgor, ilumina mi cielo como un sol abrasador. Y como si mis plegarias desesperadas, alguien allá arriba escuchara, siete ángeles llegaron de la nada. Seres radiantes, de belleza inmaculada, entonan canciones que curan el alma. Hipnotizada y dichosa en las danzantes tonadas, especial atención a la letra prestaba. Era curioso, el sentimiento que emanaban, eran casi iguales a los que a mi me atormentaban. Pero que de alguna manera ellos abrazaban. De la mano, ellos me tomaron y un largo sendero a mis ojos mostraron. Suaves susurros a mis oídos soplaron, junto con un mensaje que mi vida ha marcado. “El viaje está lejos de terminar, pero el camino hasta el cielo puede llegar. Aun si es de noche y oscuro está, igual que una estrella comenzarás a brillar”.
Tumblr media
Por: Laura Pérez
0 notes
huellasliterarias · 11 months
Text
Relato de un Exterminio
Categoría: Relato
El sonido de los golpes en la puerta sacó a Julia de sus tribulaciones, su corazón se aceleró al ver desde la ventana al coronel Granados, quien esperaba impaciente que ella le abriera. Julia recordó a sus niños, estaban durmiendo la siesta de la tarde, pensó en huir, pero desechó la idea casi en el instante en que se le ocurrió. Solo quedaba una alternativa: respiró hondo (mmmmm) y se dirigió a recibir a los hombres.
Era el tercer allanamiento en dos semanas, apenas acababa de reparar el jarrón que los soldados de Granados habían roto la última vez. Registraron todo sin saber muy bien qué buscaban y luego se marcharon. Mientras tanto, el partido Unión Patriótica arrasó en las urnas y misteriosamente sus militantes empezaron a sucumbir ante las balas.
Día a día Julia escuchaba atenta la radio, esperando otro temido anuncio, uno, que traería la cruda dosis de realidad y muerte que no la dejaba olvidar el país en el que vivía ¡Y así, de repente! Se encontraba en un caudal de nombres rogando por no hallar alguno conocido.
Esa noche sonó el teléfono, al contestar, escuchó una voz grave que anestesió sus temores al instante ¡Era Heriberto, su esposo! A quien no veía desde hacía casi un mes por la apretada agenda de trabajo con la UP en los territorios. Ella esperaba contarle muchas cosas, entre ellas; las travesuras de sus hijos, la fuerte gripe que padecieron, los innumerables allanamientos y sobre todo el intenso anhelo que tenía de abrazarlo otra vez.
Pero él fue breve; con voz resignada y dura finalizó la llamada diciendo: « cuide mucho a los niños; adiós negra ».
Aquella frase trajo de vuelta todos los temores que por un instante se habían disipado ¡Él jamás la había llamado así! se sintió extraña, como si aquel no fuera el hombre que amaba; su voz, sus palabras, la frialdad… todo estaba mal. Después de esa incómoda llamada, ella cerró los ojos, se apretó el pecho intentando convencerse de que aquel horrible sentimiento, no era más que un producto de la paranoia y el estrés que le provocan los constantes asesinatos de los últimos meses.
Días después, mientras nuevamente escuchaba la radio, la voz del locutor irrumpió violentamente capturando toda su atención; y como un emisario de la muerte anunció: “¡Atención, Urgente! fue asesinado el militante de la Unión Patriótica, Heriberto Orjuela, de 23 años”.
El miedo la apretó tan fuerte que sintió que algo dentro de ella se rompía y solo pudo manifestar el dolor con un grito ahogado, antes de que el gélido abrazo de la muerte se llevara toda su cordura. Miró a sus pequeños y sólo entonces comprendió el significado de las palabras de su esposo en esa escueta despedida. Luego de aquella fatídica tarde, el miedo se hizo visitante frecuente de sus pensamientos, la rabia se mudó a su corazón y lo endureció para siempre; finalmente Julia empacó su vida y la de sus hijos en tres maletas, abandonó todo cuanto había construído en aquel pueblo sin nombre y se marchó, huyendo de los fantasmas que la arrastraban a ese abril en que lo perdió todo.
Tumblr media
Por: Vanessa Gil
0 notes
huellasliterarias · 11 months
Text
El Dilema del Pantano
Categoría: Relato
Abril, 2005
Como un estridente reloj despertador, el canto de los gallos puso fin al intranquilo sueño de Alberto Mosquera en aquella mañana lluviosa, marcando el inicio de su día como administrador de una finca productora de pasta de coca.  En este punto solo se sumaban más preocupaciones, así que tomó una decisión: {¡yo me salgo!}. Estas palabras no agradaron a su jefe, quien, con un enojo disfrazado de angustia, le ordenó continuar. Alberto aceptó temiendo una crisis que afectara la finca y las familias que allí trabajaban.
Ya a punto de ir a la cama, un aviso lo puso en alerta el «¡Ejército ya viene bajando!». Tomando una caneca llena de aquel fruto prohibido y en la soledad de la noche, empezó a caminar hacia un gran pantano. El barro bañaba cualquier trocha y hacía más lento el caminar. Su propio peso, sumado a los kilos de cocaína que traía consigo, hacía que sus botas de caucho se hundieran varios centímetros entre el lodo y vegetación muerta, y sentía como si una red le impidiera avanzar mientras caminaba con el nivel del agua en su pecho.
El chirrido de los grillos era lo único que escuchaba y a su vez le impedía oír cualquier otro ruido, sin embargo, sabiendo que no había marcha atrás, Alberto siguió con su cometido. Luego de varios minutos, había llegado al lugar perfecto, con varios árboles caídos que ocultarían la cocaína por debajo del agua. Aprovechando su entrenamiento militar, tomó aire y empujó la caneca a través de las ramas. Luego de un extenuante esfuerzo físico, aquel infinito espejo de agua guardaba un secreto en sus profundidades.
Estando de vuelta en su cuarto trató de dormir, pero le fue imposible; sus párpados no se tocaron en varias horas. Con los primeros rayos del sol el Ejército tomó la finca. Hubo pérdidas, como la quema del laboratorio donde se producía el producto y la destrucción de materiales químicos. Esto duró varias semanas, hasta que finalmente pudo regresar en busca del botín. El lodo tapó algunas marcas, pero reconoció a lo lejos un gran árbol que le ofreció su silueta como guía aquella madrugada.
Semanas después, el intercambio se dio y varios millones sirvieron para saldar la deuda con los cientos de trabajadores. Mientras veía niños corriendo en las calles polvorientas, trabajadores borrachos o algunos haciendo compras con ese dinero, no podía evadir una pregunta que invadía su mente: ¿cuántas vidas se verían afectadas durante todo el camino que recorrería cada gramo de esa cocaína?
Tumblr media
Por: Pablo Lozano
0 notes
huellasliterarias · 11 months
Text
Paralizada
Categoría: Poema
Niebla sorda, niebla muda, Espesa y oscura Que asfixia como el humo ¿Cuál será mi rumbo?
Intrusa de la realidad, Cárcel de tinieblas, Dificultosa respiración, Agitada mente en revolución.
¿A dónde iré, quién seré? Prisionera de mi voz, Esclava de su desolación, Abrumante inmovilización.
Navegante en eterna tormenta, Torrencial ira sermonea, Nocturno martirio incesante Es la vida al cerrar los ojos.
Tumblr media
Por: Elisa Cortés
1 note · View note
huellasliterarias · 11 months
Text
La Memoria de Tu Abrazo
Categoría: Relato Biográfico
En el mes de abril de 2021, en la apacible ciudad de La Paz, Bolivia, el mundo perdió a un individuo cuya sonrisa y jovialidad irradiaban felicidad a su alrededor. 61 años tenía Mauricio Velásquez ¡Tan lleno de vida que en un instante fue perdida en una clínica local debido al tan llamado virus del COVID-19!
Padre amoroso de tres hijos – Stefania, Juan David y Andrés Mauricio –esposo de Mireya Maldonado e hijo de Evelio y María del Carmen. Quien personificaba la integridad y el respeto en su hogar con acciones llenas de serenidad y esperanza para su familia.
“Mao”, como lo conocían sus amigos, tenía una pasión innegable por la música, especialmente los ritmos clásicos de la salsa, quien, en su juventud, fundó la orquesta "Los Amigos" ¡Con la campana era el alma en una celebración! Sin embargo, Más allá de su amor por la música y su espíritu jovial, se destacó por su tenacidad ante las dificultades y su naturaleza resolutiva; un mediador y conciliador nato.
Con espíritu aventurero y siendo un viajero por naturaleza, jamás perdió la capacidad de asombro, así lo recuerda su hija Stefanía, a quien a través de una llamada compartía con admiración las maravillas del mundo. Uno que ella también anhelaba explorar; pues para Mao, los límites solo eran definidos por la audacia de los sueños.
Recorrió muchos kilómetros, los últimos que trágicamente lo llevaron a un final inesperado en Bolivia. Una tierra que atesoraba recuerdos y amigos de momentos memorables en su vida, una vida que se fue cuesta abajo, donde su falta de aire quitó el aliento a todos. El 11 de abril de 2021, a pesar de los esfuerzos del personal médico en una unidad de cuidados intensivos con una afección pulmonar, convirtió la historia de Mao en una llena de recuerdos; en donde enseñó que los sueños, la música y el anhelo de oportunidades, aunque se entrelacen con el rugir de una pandemia; no podrá opacar la memoria de su atesorada sonrisa y su cálido abrazo.
Tumblr media
Por: Stefania Velásquez Maldonado.
1 note · View note