Llevo 26 años de mi vida sin saber cuál es el propósito que tengo de vivir, a veces trato de pensar que aún no llega la señal que me indique lo que mi vida es o será, pero en otras ocasiones siento firmemente que mi vida está condenada a ser una irrelevancia más en este mundo y que al igual que muchos solo soy la consecuencia de una mala planeación en la vida de mis padres.
Mi vida desde que tengo uso de memoria es irrelevante, nunca eh destacado en algo y hasta ahora eso me ayuda a mantener un perfil bajo, no estoy destinado a la grandeza u algo similar y me reconforta saber que solo estoy aquí para no ser visto y observado.
Los primeros días desde que tengo uso de conciencia son simples y abrumadores, siempre esperando instrucciones y tareas, rara vez intento tomar las riendas de las decisiones que puedo y no tomar, luego de escuchar me siento a observar como solo asiento con la cabeza y hago eso que tal vez no quería para complacer a los demás.
Un día te despiertas y hay unas cuantas nubes grises en tu cielo, decides ignorarlas porque piensas que mañana volverá a estár despejado, pero no, pasan los días y resultó ser que toda la semana el cielo estuvo gris, llega el lunes y sigue igual, sin embargo el martes ves por la ventana y hay un gran sol, disfrutas a más no poder, hasta caer cansado por la noche. Al día siguiente cae una llovizna que no empapa, pero si moja sobre tus hombros, lo suficiente como para hacerte sentir frío hasta tus adentros.
Pasa la temporada de lluvias y días grises, hoy es verano y todos los días sale el sol, mas sigues sintiendo el frío como en aquel día de invierno. Lo ignoras, prefieres no hacerle caso porque es algo momentáneo, tratas de convencerte de que ya mejorará.
"Solo es un día gris", pensarás mientras caen tus primeras gotas de lluvia.
Los días pasan, caen las hojas y con ellas vuelven los cielos oscuros, los días cortos y las noches eternas. Hace frío afuera, pero más dentro, te cubres con mantas e intentas mantenerte abrigado, intentas combatir cuando el combate ya está perdido.
Sigue pasando el tiempo, pero no el invierno, vuelve el sol mientras llueve en tus adentros, vuelven la risas mientras tus llantos se asientan. El cielo truena mientras tus gotas caen sin la mínima intención de parar y de repente, casi como un milagro, el cielo se enmudece pero solo para alertar; "Estás en el ojo del huracán" y aquí es vital aprender a nadar, pues las inundaciones te intentarán ahogar, y nadie te podrá rescatar pero si ayudar. Tendrás que mantenerte fuerte y abrazarte a ti mismo porque a veces será la ��nica forma de sentir calidez real, al menos hasta que el sol vuelva a brillar sobre ti.
31/8/22
Las enfermedades mentales tienen cura, pero al igual que con cualquier otra enfermedad se debe buscar ayuda. A veces no se tiene a nadie, hay otras en que incluso esa oscuridad nos mantiene ciegos de los demás.
Como sobreviviente de la depresión y la ansiedad, les digo que estár bien es posible, se puede ser feliz y volver a sonreirle a la vida, quizás no sea fácil, quizás tome mucho tiempo, pero te invito a que no te rindas. Estuve ahí por más de 10 años y vencí, pero necesite ayuda, tuve que permitir que me ayudaran a salvarme de mi mismo, así que por favor no tengas miedo ni vergüenza de hablar, algunas cargas se vuelven más livianas cuando te ayudan a llevarlas.