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El derecho a la identidad de género sancionado con sangre

Activistas de ATTTA luchan por sus derechos y en contra de cirugías estéticas clandestinas que les han dejado secuelas irreversibles y un gran índice de mortalidad por pertenecer a una minoría aun discriminada en muchos aspectos.

Marcela Romero, presidenta de ATTTA

La presidenta de ATTTA (Asociación de Travestis, Transexuales, Trangénero de Argentina) Marcela Romero y la activista Romina Bustamante ofrecen charlas en la agrupación para que otras travestis tomen conciencia de la gravedad del caso. “Cuando me inyectaron aceite de avión en las lolas me colocaron una especie de corpiño de elásticos… En un determinado momento me desmayo y vuelvo a tomar conciencia sin poder respirar, en un hospital con un médico que me dijo: “o te corto el elástico o te morís” contó Romina. Sin embargo confesó no haber aprendido la lección y dos a��os después volvió a realizarse la misma práctica clandestina. De la primera experiencia, el líquido colocado migró hacia los pulmones y padece neumonía crónica. Por su parte, Marcela Romero se colocó hace muchos años el mismo producto pero en caderas. A los cuatro meses de dicha intervención comienza a tener fiebre sin poder bajarla. Según su relato le apareció una herida al costado de su pierna la cual se le infectó hasta explotar.

“Cuando explotó yo puse la pierna en una palangana apretándome para que todo el líquido saliera. Era aceite hirviendo. Luego tuve que recurrir a un doctor para que me emparejara las caderas, ya que una había quedado más ancha que la otra. El producto dentro del cuerpo se convierte en una especie de piedra que no solo te duele sino que te va lastimando de adentro hacia fuera”, recuerda la presidenta de ATTTA.

La asociación lucha por los derechos constitucionales y recursos de amparo, para una mejor calidad de vida a este grupo social que tantos años fue víctima de represiones, agresiones físicas y mentales, discriminación y abuso de todo tipo. Por lo general su promedio de vida es entre 40 y 50 años de edad, ya que no cuentan con un sistema de salud, educación y seguridad como cualquier otro ciudadano común. La gran mayoría no terminó la escuela secundaria por las mismas razones y su cuasi único medio de supervivencia económica es la prostitución.

Romina Bustamante, activista de ATTTA

La marginalidad social los llevó indefectiblemente por su condición de “diferente” a buscar su identificación de género en la clandestinidad, sin saber que ello podría llevarlos a un camino solo de ida. A esos laberintos furtivos lejos de las condiciones de higiene correspondientes, los instrumentos especializados, las tecnologías apropiadas y los diplomas habilitados y autorizados como corresponde por Ministerios de Educación de la Nación etc, etc, etc, se suele llegar por el “boca en boca”. “Hay muchas compañeras que fallecen y no se sabe, la última compañera murió hace dos años aproximadamente en el Argerich por migración de silicona en los pulmones. El líquido una vez que encuentra el lugar por donde escapar migra hacia todo el cuerpo”, recordaba la activista.

Cada persona que -sin chequeos y análisis previos como así lo requiere cualquier tipo de intervención- llega a manos de una Travesti “amiga”, es absolutamente responsable (sin derecho a denuncias) de lo que pueda llegar a suceder en el recinto a efectuarse la práctica en total ignorancia por parte de la víctima, ya que su única fuente de información fue una compañera que resultó ilesa en la ejecución de semejante atrocidad.

En una entrevista a la famosa vedette Casandra Crash cuenta que se realizó intervenciones estéticas clandestinas hace 25 años para redondear sus caderas en una época que estaban prohibidas las travestis en las clínicas de belleza.

¿Cuál fue el procedimiento y en qué lugar te practicaron la intervención? Yo en esa época, trabajaba en un Casino de Brasil como Vedette. En el camarín un día vino una travesti con un bidón de 5 litros de silicona, unas 30 jeringas que las iban llenando y poniendo en un vaso, una camilla portátil y con un lápiz de ceja me marcó los puntitos donde tenía que inyectar.

¿Cuántos te inyectó? Son noventa y pico de pinchazos en cada nalga, se sentó, agarró las jeringas y yo le dije:”hay!!! Que gruesas son, duelen?” y me explicó que no, porque eran jeringas de veterinario, ya que la silicona es tan espesa y gruesa que no pasa. Es como una aguja de cocer lana, así de gruesa, que las cortan en diagonal. Tenía como 4 y las hirvió un rato en agua caliente porque en esa época no había descartables.

Según Casandra no tuvo inconvenientes después de las aplicaciones ya que supone que al ser silicona pura y tomar todos los recaudos posteriores no se le desparramó por ningún lado.

A continuación, haciendo click sobre la imagen, el testimonio de Casandra Cash en primera persona.

Pero no todas cuentan con la misma suerte. Las experiencias de activistas de ATTTA mostraron en sus dichos todo lo contrario. Por lo general lo que aplican es silicona común de esa que se utiliza para limpiar muebles o aceite de avión o cualquier material que se asemeje. Este tipo de productos son introducidos en el cuerpo mediante inyecciones, pero previo a ello se les coloca en el caso de los senos una especie de elásticos simulando los bordes de un corpiño, apretado de tal forma que al momento de la aplicación el fluido quede contenido dentro del sector mamario o zona pectoral. En caso de las caderas o glúteos luego de la inyección se colocan una especie de calza tipo faja.

Tanto Marcela Romero como Romina Bustamante se encuentran a total disposición y de forma gratuita para cualquier persona que quiera informarse sobre los diferentes tratamientos hormonales que deben hacer antes de cualquier cirugía, sobre las cirugías concretamente, sus derechos legales y las consecuencias que ellas padecieron por no haber tenido asesoramiento en ese momento.

De qué sirve la vida si no se puede vivir como uno lo siente. Y no es una cuestión que tenga que ver con cosas materiales sino con algo tan simple como el poder ser respetado y dignificado como ser humano y con la identidad de género que cada uno elija dentro del cuerpo que mejor se luzca ese reflejo del alma.

Si bien cada individuo tiene biológicamente ciertas limitaciones dentro de los parámetros de la salud, la ciencia ha evolucionado para que esa brecha se acorte cada vez más. Sin embargo más allá de los avances médicos lo que cuesta evolucionar es la apertura mental de una sociedad que aún en los tiempos que corren, sigue a la sombra de una mediocridad por prejuicios injustificados con mentiras de un pasado obtuso sin fundamentos sólidos donde apoyarse.

Por ello todas las asociaciones que representan y luchan por la identidad de género también velan por una educación, trabajo y salud como la de cualquier ciudadano. Ya que sin acceso a ello no pueden llevar una vida digna.

Casandra Cash, Vedette que se realizo varias intervenciones estéticas hace 25 años

La ley de identidad género de Argentina que lleva el número 26.743, permite que las personas trans (travestis, transexuales y trangéneros) sean inscriptas en sus documentos personales con el nombre y el sexo de elección, además ordena que todos los tratamientos médicos de adecuación a la expresión de género sean incluidos en el Programa Médico Obligatorio, lo que garantiza una cobertura de las prácticas en todo el sistema de salud, tanto público como privado.

Después de la sanción de dicha ley hubo un cambio por lo menos en la ciudad de Buenos Aires, no así en el conurbano e interior del país que siguen con un pseudo rechazo a esta minoría, que en la mayoría de las intervenciones en las que perdieron la vida podrían haber tenido una esperanza a sobrevivir si las hubieran atendido en el momento justo. La lucha a la no discriminación tiene que ver en todos los aspectos pero en el plano salud es fundamental que puedan ingresar a hospitales y salvar sus vidas.

Para conocer más sobre esta historia, te invitamos a hacer click sobre la siguiente imagen.

Por Violeta Lo Re violetalore2020@gmail.com @Violeta LR

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Aníbal Pachano en busca del equilibrio perdido. De eso se trata la vida

Arquitecto, artista, creativo, director, bailarín, padre, amigo, prolijo, meticuloso, perfeccionista, profesional y  bicho de ciudad. El artista asegura que después de haber vivido en varios barrios de la ciudad de Buenos Aires es en Belgrano donde encontró su lugar en el mundo.

De Tostado a Carlos Paz, inmigrando finalmente en el año ´69 a Bs As, mantiene vigente la memoria de sus progenitores en cada relato, por ser su padre no solo un gran referente sino también un hombre del 1900 muy emblemático que se maquillaba y depilaba, con una cabeza tremendamente amplia, político de primera línea con Frondizi, odontólogo súper exitoso y como él lo llama: “El Dandy del Tabaris”.

A si también su madre. Devenida de una típica nena bonita de pueblo, millonaria y que formaron entre ellos una historia de amor de películas, con una autoestima y una fortaleza envidiable Aníbal Pachano habla fiel a su estilo y sin pelos en la lengua, de política, de su salud y su relación con el medio.

¿Qué hecho considerás como bisagra en tu vida? 

Varias cosas, pero y principalmente fue el HIV. Nunca cambié la forma de mirar la vida desde que me enteré, al contrario siempre fue positiva. Que dicho sea de paso me han hecho análisis de células y está indetectable, o sea que está impecable!

¿Te sentís un referente?

Siento que hoy tengo una función social como más fuerte y hace que esta enfermedad crónica se transforme en un hito y que Stamboulian me dé el permiso para que yo sea la cara de su fundación  Helios, me da mucho placer. Hoy estoy en una situación de poder transmitirle a la gente algo positivo, enseñarles a que no tengan miedo. Pero nunca fue un tema que a mí me haya afectado psicológicamente, al contrario fue un clic.  Entender por qué me había pasado, cómo, cuándo, dónde, sin que eso me provocara un reproche. Sino que al contrario, era como que tenía que pasar y si tenía que pasar, por algo habrá sido.

¿Es verdad lo del enfisema?

Sí, eso sí porque yo fumé desde los 14 hasta los 45 años. O sea  que en un físico como el que tengo que soy chiquito, tengo más nicotina que otra cosa. Y a demás en ese momento era sedentario porque era arquitecto y estaba todo el día sentado. Después cuando empecé Botton Tap sentía que algo me pasaba  y no entendía bien que era. Y en el año 2000 cuando me entero del HIV, me hago todos los estudios y ahí saltó que ya estaba complicado mal. Tardé tres años en dejar de fumar. Hasta que un día tomé la decisión, me la banque una semana solito y me hice el laser, bajé la ansiedad y nunca más volví a tocar un cigarrillo.

  Si bien confiesa que la televisión también fue una bisagra en su carrera profesional, no todo le gusta de este medio. Por un lado siente que la fama lo aleja de muchas cosas pero lo acerca a la gente que lo hace sentir pleno. Se siente amado por todo tipo de público de todas las generaciones y clases sociales y por ser tan versátil, no le importa el contexto en el cual se desarrollen situaciones. Puede estar en un palacio como también estar charlando con cualquiera en el cordón de la vereda.

¿Y lo de Norma Pons como te tocó?

Lo de Norma me pegó mal, más allá del enfisema, me pegó mal que falleciera en un momento emblemático, donde ella estaba cumpliendo el sueño de cualquier artista de ser reconocido y aplaudido, igualmente no tan reconocida como debería haber sido para mi gusto. Me choqueo  porque era una persona que yo conocía primero de chiquito como espectador y luego por tenerla enfrente después de muchos años, llorando en la platea con “Divain” y con todo lo que me dijo.

¿Cuál era tu relación con ella?

 Ella era muy generosa habló muy bien de mi trabajo, como que había visto la nueva revista, como que ella veía que yo hacía cosas que se habían hecho en los ´70 y que por ahí esta generación no sabía y que estaba equivocado el concepto con lo que se estaba haciendo. Tuve mucha relación durante el verano que me la fui encontrando en todo momento hasta que se descompuso y yo le decía que dejara de fumar, que me dijeron que estaba complicada, que se dejara de joder, que a mí me pasó lo mismo y que cuando lo dejé  la verdad es que me ayudó muchísimo

¿Y ella que te decía?

“Y… no puedo!” Y no, no pudo. Le ganó su ansiedad y también creo que ella estaba en un momento emotivamente sobrepasada. Se había cumplido todo lo que ella soñaba y no podía creer lo que le estaba pasando. No podía creer los premios, no creía que en la platea estuviéramos todos aplaudiéndola de pie, que el periodismo reconozca su trabajo de muchos años. Y a mí me provocó tristeza, mucha tristeza. Encima ese día coincidió en que yo bailaba y más la presión mía de cómo salir a la pista, lo que iba a decir el jurado que me conocía. En fin.

Porque se armó como una polémica al respecto…

Se armó una batahola bastante desagradable. Que todavía me cuesta sacarla. Pero creo que esas cosas tienen que ver con la importancia que le dan a uno. Porque nadie puede pretender que mi pulmón hoy sea cero Km. No lo podrá ser nunca y para eso se necesita un trasplante de pulmón, que no necesito.

Aun le quedan muchos sueños por cumplir. Entre tantos le encantaría poder realizar una recorrida por Europa que según él nunca se la permitió. Irse en tren como si fuera un adolescente, con un grupo de amigos. Y artísticamente su sueño es tener un espacio propio y no depender de nadie más.

¿Cómo te llevás con el ambiente artístico?

Hay gente que se mete mucho en la vida privada de las personas y he sido el tipo más atacado de los últimos tiempos. Eso tiene una “sublime obsesión” (como diría mi mamá) conmigo, porque debo ser muy importante o  muy atractivo. A mí me da lo mismo. No le da lo mismo a esta gente, porque a ellos no les sucede. Y a todo este gaterío barato en el cual son unas promiscuas totales, como diría mi vieja “estas chinitas” y este chirusaje que muestran las tetas, el culo y se preocupan por mí.  Yo no jodo a nadie. Tienen como una obsesión, porque yo no necesito acostarme con Tinelli, yo me acerco a Tinelli por arte o por carisma o por buena onda.

La gente no conoce mucho a este Pachano…

Es que ahora estoy distinto, casi tres años que estoy distinto. Después de hacer Carlos Paz me vi filmado y me empecé a no gustar. El medio saca lo peor porque se mete en lugares que no les importa. Yo no les pregunto a ninguno de éstos lo que hacen y hoy están en la TV cosas siniestras de lo que están pasando las personas que manejan los medios amarillistas.

¿Cómo te sentís ahora bailando?

A mí me dolió entrar a la televisión pensando que era un juego de Disneylandia y se me transformó en una problemática, que después la pude superar. Cuando vino la propuesta del bailando estaba que si y que no. Finalmente cuando dije que sí, se me vino todo el mundo encima y hoy no lo pueden creer, están todos descolocados. Y como a mí me está haciendo bien me dure lo que me dure, me importa un rábano. Moví el cuerpo desde un lugar distinto, tengo la sensación de que estoy como activo y también estoy mostrando otra faceta haciendo cosas que no he hecho en mucho tiempo, agilizar la memoria, entre otras cosas que a mí eso me alimenta el alma.

Ahora que está de moda famosos y política. ¿Te interesa?

Mucho. Mi viejo era político, en la casa donde nací estaban gobernadores, intendentes, diputados y gente muy fuerte cercana a Fondizi, políticamente muy de avanzada.. Con un viejo muy justiciero, con los mismos modismos que yo “andá a llorar al campito”, muy caracúlico, muy inteligente, un odontólogo impresionante y en política se recibió, como digo yo de honestidad, de ser fiel a su partido, a sus amigos, de no traicionar.

¿Para qué partido te inclinas hoy?

Por ahora los que más me gustan son Massa y Scioli. De todas maneras la función de Macri en la Capital no me pareció para nada equivocada por más que haya gente que no le guste. De hecho me han buscado del Pro y también me buscó Massa.

¿Y te ves en política?

Yo me veo siempre y cuando haga cosas como las que estoy haciendo en la fundación. Ayudar a las personas desde la salud convocando festivales, cenas, unir artistas que es lo más difícil, ayudando a tanta gente que lo necesita, ayudar a las chicas embarazadas que están con HIV que pueden hacer que sus nenes nazcan sanos. Me preocupa eso hoy. Y como dijo Stamboulian “eso te va a sanar más el alama”, él veía en mí que yo no llevaba una carga sino que llevaba una misión, y me parece que eso es lo bueno que me pasa ahora.

¿Crees que hacer cosas para la gente tiene que ver con un partido político?

No, eso me lo enseñó Stamboulian. Yo tengo que ser apolítico, todos los gobiernos de cada lugar tienen que apoyar mi proyecto. Sí me gustaría que se cambie esta cosa de que si no soy K se me marque, porque en definitiva yo trabaje durante todo el proceso K, crecí económicamente, lo admiré a Kirchner, el día que murió me di cuenta que tal vez me había equivocado en algún pensamiento, voté a su mujer pero a mí no me gusta que me reten, que me den órdenes, a mi no me gusta que todo el tiempo está todo divino. Porque no está todo divino. Si estuviera divino estaríamos como cualquier lugar de Europa, Alemania, pero no estamos ni si quiera como Chile que está impresionante. Pero porque se llama Viva Chile y acá se llama Viva el bolsillo del político de turno, y eso que los chilenos se han bancado a Pinochet.

¿Sos objetivo?

Creo que este gobierno hizo muchas cosas bien y muchas cosas mal. Yo no quiero más pasado, ya está, ya fue. Basta de tanto muerto, basta porque yo ya lo viví y fui a la Universidad en ese proceso, entonces me dolió, a mí me duele en carne propia. No me van a endilgar a mí por estar vivo y los otros muertos, que yo tengo parte de culpa porque no me di cuenta, porque no denuncié, naa!!... la pavada se la guardan en el bolsillo, porque había una guerra de bandos que también hay que contar. Se agredían mutuamente, se decían cosas mutuas, se mataban mutuamente. Me parece que hay que tener un poquito de eje.

¿Crees que no son consecuentes en política?

En un país donde se habla de tanta corrupción que nadie diga nada y que nadie se altere me llama la atención. Me llama la atención que Menem siga siendo el único culpable de este proceso. Después de Alfonsín el Peronismo estuvo en el gobierno y estaban todos con los mismos y entonces no entiendo cuál es el criterio. Es más fácil ponerle a Menen todo que distribuir la culpa. Grave error de los Radicales, y eso que vengo de una familia radical. De la Rúa un mamarracho, la oposición está tan débil, que no saben para qué, no saben para dónde, hoy estoy acá mañana me cruzo, no eran que se mataban todos con todos?

¿A quién ves en el 2015?

Me encantaría que venga un presidente joven y empresario Massa, Scioli, Macri y tomen al país como una empresa, que no necesite robar más, aunque ya se han robado todo.

Ping Pong:

Un defecto: A veces no escuchar.

Una virtud: Ser un muy buen amigo

¿Sos fiel?: Si

¿Mentís?: No

¿Qué odias?: Odio la mentira y la injusticia

Un amor: Por ahora fue Ana

¿Sos rencoroso?: Y memorioso.

¿Orgulloso?: También (risas)

¿Tenés cábalas?: Si

¿Cuáles?: Hacer un “Mierdas” general antes de empezar el espectáculo y cuando aparezco en escena me hago la señal de la cruz e invoco a mis viejos y a mi ex suegro que han sido tres personas emblemáticas.

¿A quién extrañas?: A mi mamá, mucho

¿Un mensaje desde el corazón? Que hay que tratar de ser feliz como se pueda…

¿Lograste el equilibrio en tu vida? No se… uno lo busca todo el tiempo, hoy estoy en eje. 

Por Violeta Lo Re

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Odisea bajo tierra

Como todas las mañanas de lunes a viernes Juana, una mujer de unos treinta y cinco años de edad, cabellos oscuros de un negro azabache, tez blanca porcelanada, alta y de contextura mediana, dificultosamente logra despegar las sábanas y frazadas de su cálido cuerpo, tras apagar las alarmas de los dos teléfonos que deja programados para las seis treinta todas las noches. Ese amanecer aparentemente similar a cualquier otro, iba a trascender por una odisea bajo tierra.     

En su ritual matutino dando comienzo a la jornada con un aseo minucioso y la búsqueda de las prendas combinadas a su criterio y de acuerdo a su estado de ánimo de ese día, Juana se viste y comienza preparando su desayuno compuesto de cítricos, galletas de arroz con pinceladas de queso y mermelada light y unos infaltables mates, mientras prende la PC para organizar sus atareadas reuniones programadas en los diferentes puntos cardinales de la Capital Federal. Llegadas las siete y treinta y finalizando las cebadas, coquetamente se maquilla, se perfuma, reúne todo lo necesario en su bolso para mantener una jornada tranquila y equipada, se abriga y sale a la calle.     

Generalmente se encuentra en la puerta del edificio del barrio de Almagro donde vive, con Francia la portera, una mujer de origen centro americano, de piel oscura y cabellos cual resortes negros, muy simpática y siempre con buena onda, que la saluda deseándole una linda y agradable jornada. Con aun una tímida salida del sol, minutos antes de las ocho de la mañana, Juana camina a un buen ritmo tratando de hacerle frente al cambio abrupto de temperatura, con música en sus oídos y gafas tipo Ray Ban, cuando de repente llegando a la esquina de Medrano y Corrientes, una cálida y olorosa, casi putrefacta ráfaga de… vaho, la asecha despeinando su flequillo prolijamente peinado hacia el costado invadida de  interrogantes banales pero imperiosos a esa hora del día. “¿habrá mucho tiempo de demora?, ¿hay gente esperando? ¿Cuánta? ¿Por qué sale ese olor de ahí dentro?” bajando las escaleras y sacando la tarjeta sube preparada en algún bolsillo de su lado derecho entra al subte de la línea B. 

Apenas Juana cruza los molinetes, a dos metros aproximadamente y de mano izquierda se encuentra abierto el kiosco de diarios y revistas de Raúl, su propietario, un señor de mediana edad, bien presentado, educado e instruido y seguramente con más de mil historias que contar. Entre las decenas de personas que aguardan el arribo de la próxima unidad busca con sus ojos hacer contacto con la mirada del canillita a modo de saludarlo y desearle buen día. Minuto y medio había pasado. Desde lejos ya se escuchaba la bocina y se veían las luces del subte, cuando de repente las decenas de personas comienzan de manera atropellada a tratar de encontrar  un espacio rozando la franja amarilla prohibida de pisar para resguardo de los pasajeros en el andén.  

Como no podría ser de otra manera Juana y su espíritu justiciero y algo sindicalista, estaban con su celular en las manos publicando en twitter su descontento con respecto a las malas condiciones con las que deben lidiar todos los días los usuarios de ese servicio público. Muy alejada de los temores de algún tipo de arrebato o hurto del último modelo de BlackBerry, logra audaz y estratégicamente ubicarse en el exacto lugar en donde el tren frenó dejándola ubicada como primera en la puerta del tercer vagón. Casi al unísono del arribo al andén se abren las puertas y solo tres o cuatro personas salen del comprimido y estrujado furgón. Todo transcurre en milésimas de segundos. Un instante en que Juana titubeó en subir, un atolondrado la empuja, golpea su codo y sin pedirle permiso ni disculpas logra con esa colisión no solo penetrar en ese enjambre de personas, sino que además tirarle el móvil con tanta mala suerte, que calló en el vacío milimétrico entre el ferrocarril y la plataforma.    

Juana que logra tranquilizarse, visualizar el aparato y chequear a la distancia de que seguía compacto y no desparramado en mil pedazos. Llama a Raúl en busca de ayuda. Su primera estrategia fue tomar un secador de piso y pegarle en la parte de la goma, cinta de embalar en forma de rollitos de tal modo que al hacer contacto con el artefacto, éste quedara adherido y así rescatarlo. Pero por más que intentaron, el plan A del diariero de la estación Medrano del súbete B no dio resultado. 

Un policía de la Federal que se encontraba en la otra punta del corredor al observar movimientos un tanto extraños, se aproxima al lugar del hecho mientras arribaba el próximo tren. Juana que ya había descartado la puntualidad en el comienzo de su clase de los martes, donde estudia la carreara de Periodismo de la UAI, comienza a rezar para que no se le destruya el celular. Un poco más descomprimido bajan pasajeros y suben los que estaban esperando deseándole a Juana suerte con su odisea y el rescate de su teléfono. El policía esperó que estuviera totalmente despejada el área y habilitó a Raúl a bajar en busca del celular caído. 

Sucio, pero nada que un trapito no limpie, esa mañana Raúl fue el héroe de la jornada, dejando en manos de Juana sano y salvo su teléfono móvil de última generación y con todos sus contactos intactos. Más que agradecida despide al valiente salvador y toma el subte que la dejaría un tanto más tarde en la facultad pero feliz de haber salido ilesa de la odisea bajo tierra.  

Por Violeta Lo Re

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Frutas, verduras, preparadas, listas… Ya!

La Ensaladería de Magda comenzó como una verdulería más y debido a la gran competencia del rubro y las necesidades económicas de la crisis del 2001, su creadora hizo la primera y más popular casa de ensaladas del barrio de Almagro.

Los inicios de Magda Susanibar, mentora de lo que fue una idea, nos trasladan a unas cuadras (Av. Corrientes y Bulnes) del lugar que hoy crece día a día como Ensaladería convirtiéndose “tal vez sin pensarlo”, en una PYMES que abastece a todo el barrio de Almagro y alrededores. 

Todo comenzó cuando hace 20 años una mujercita Peruana llegaba de vacaciones a la Argentina a visitar a una amiga. Como se quedaría por tres meses y “para no aburrirme” dice Magda, se propone encontrar trabajo en diversos rubros como vendedora hasta que finalmente decide quedarse definitivamente en nuestro país. Naturalizada, solo viajaba de vez en cuando a su lugar natal de visita a su novio que la esperaba ansioso, ya que era un estudiante universitario de la carrera de Licenciatura en Administración de Empresas.  

Entre viajes y viajes pasaron ocho años, hasta que después de terminar sus prácticas académicas, el que hoy sería su flamante esposo, toma la decisión de jugársela por amor viajando, casándose y radicándose en Argentina junto a la mujer que a la distancia supo acompañarlo en su proyecto de vida. Lo que nadie sabía era que todos esos años y felizmente solo forjaron una relación basada en el amor y el compromiso con el otro, ya que el destino laboral daría un vuelco inesperado.

“Me habían ofrecido trabajar en verdulerías pero yo ni locaaa!!!... no quería saber nada de frutas y verduras” exclamaba muy segura Magda. Iniciando sus primeros pasos como matrimonio establecido por el código civil, llega la crisis del 2001 que tanto daño provocó a todos los Argentinos, no solo en materia económica como bien es sabido, sino también a nivel personal, ya que muchas familias sufrieron por la gran emigración que debieron afrontar gran parte de nuestros conciudadanos para poder sobrevivir. 

Sin embargo, estos recientes y flamantes tortolitos no dejaron nuestra quería tierra y decidieron emprender juntos un camino laboral. Es precisamente en ese momento donde, a pesar de que Magda no le gustaba mucho la idea, pusieron su primer verdulería en la Av. Corrientes y Bulnes. No pasó mucho tiempo cuando dieron cuenta de que a pocas cuadras y hasta algunos metros tenían una competencia de cuatro o cinco  negocios del mismo rubro.

“Había que hacer algo distinto, pero qué?” Era la pregunta que rodaba en la cabeza de la cara femenina del local, hasta que un buen día, da con la idea de ofrecer las verduras ya cortadas para la ensalada. Automáticamente su fiel compañero confió en su criterio y

compraron bandejitas de tergopol, papel film y comenzaron a hacer “ensaladas a la carta. Al principio costó mucho porque no se conocía y la gente desconfiaba también un poco. Recuerdo que cuando ofrecía hacerles a los clientes las ensaladas con los gustos que ellos querían, solían decirme: “lo voy a tener en cuenta”. 

Sin embargo, de a poco fueron los clientes adquiriendo esa confianza que les faltaba y el “boca en boca” comenzó a funcionar. Tres años distanciaron esa diferencia con los otros colegas y se trasladaron al local donde hace ocho años incrementa clientela, calidad, variedad y personalidad. Humahuaca casi esquina Salguero fue el lugar elegido por aquel entonces y donde entre cajones de frutas y verduras fueron instalando la verdulería. 

El estilo de las ensaladas a la carta estaba tomando tanta popularidad que algo más tenían que hacer. Fue cuando Magda dio comienzo a un condimento más… el hervir las verduras y ofrecerlas también en bandejas y a pedido. Paso a paso fueron corriendo los cajones de mercadería para abrirle paso a la primera heladera y exhibidora de carnicería. Pero en lugar de carne, habría contenedores de diferentes verduras crudas y cocidas listas para condimentar y llevar a la mesa. 

De la misma forma, fueron teniendo lugar otras heladeras exhibidoras, una más horizontal y dos verticales. Los cajones encontraron su lugar en otro sector del recinto, que por cierto hoy ya no se encuentran a la vista del público. 

Aun están debatiendo el nombre que les gustaría poner en la marquesina pero el que va tomando la delantera es el de “Ensaladería”. Debieron recategorizar el rubro, ahora es casa de comidas y/o rotisería, pero solo venden ensaladas. Cuentan con 20 diferentes gustos cocidos y otros 20 crudos, algunos sueltos y otros bi y tricolor. Se venden en bandejas de tres medidas diferentes: chicas, medianas y grandes.  Cuentan también con gustos sueltos y preparados como: chop suey, verduritas para sopa, guiso, ensalada de frutas, cazuelas, milanesas de berenjenas, de zapallitos y de calabaza, o en otra versión también rellenos de verduritas mezcladas. Las bandejas de rúcula son unas de las favoritas como de igual modo las de provenzal. Toda la mercadería es total y absolutamente natural y sin conservantes ni condimentos. Que dicho sea de paso los venden en sobrecitos individuales, como también cuchillos y tenedores descartables y bebidas sin alcohol.

Los exámenes de bromatología se encuentran en absoluto orden y dentro de todos los marcos legales, por lo que hace a un mayor reconocimiento por parte de los clientes. Les han ofrecido poner franquicias pero creen que aun no es el momento. Quieren mantenerse un tiempo más así, perfeccionarse y recién entonces tal vez pensar en cadenas de Ensaladerías.

 Durante muchos años abrían sus puertas de lunes a lunes de 8 a 21 hs, sin feriados ni fiestas. Hoy la familia se agrando, y si bien es una pequeña empresa familiar pueden modificar a conveniencia sus horarios que desde hace tres años atienden de lunes a

sábados de 10 a 15hs y de 17 a 21hs, sin sumarle claro las horas de elaboración y producción que es totalmente casero y en el día.

“La Ensaladería de Magda” es la primera, única y exclusiva casa de comidas naturales en el barrio de Almagro y seguramente la más querida de todas, ya que no solo se popularizó por la calidad en sus productos sino también por la calidez, cordialidad y amabilidad en su atención al público.

Violeta Lo Re

violetalore2020Ggmail.com