Don't wanna be here? Send us removal request.
Photo
Ejercicio de observación. Meter el pie izquierdo en una cubeta con agua caliente y el pie derecho con una cubeta con agua fría, cambiar. Describir las sensaciones, pensamientos, sonidos presentes durante el ejercicio.
0 notes
Text
Cadáveres Exquisitos
Sincrónico II. ATLAS
Sábado 14 de mayo de 2016 / Módulo V. Viajes y Literatura
Cadáveres Exquisitos
María José Sesma, Joshua Jobb, Paola Fernández, Daniela Libertad.
I.
El inicio de un ritual amable entre dos personas.
Olía a sal y un parpadeo, duraba lo que dos vueltas a la calle.
Una segunda voz ocupó el espacio y a diferencia de la primera, ésta me invitó.
Siento que le debo algo que aún no sé que es.
Si no con un dedo, sí con varios.
No hace mucho, en uno de los varios intentos por observar al objeto de cerca.
Como las historias de éxito; dicen más de lo que dicen por cómo están contadas.
Un viaje en el que las monedas hablaron.
II.
La voz desapareció o mejor dicho; cambió.
Sin querer golpeé las columnas, atardecer azul violeta, amanecer rojo.
La penumbra que forjaban dos manos.
Y lo hice de barro…
Quisiera hacer una pieza sobre la información sin adornos 1+1=2 y lo que esto implica.
¿quién dice que no se puede tapar el sol así?
En su lugar una segunda voz ocupó el espacio.
La primera mordida de un pan recién horneado con un pedazo de queso brie, sentí a mi ser bailar de alegría.
No pude hacerlo estando allá.
Lo Austiniano, mejor, lo Austiniano me ha gustado.
Viví un año en el bosque, reemplazando a un guardabosques que buscaba su libertad.
Nos obligaba a erguirnos una vez más.
III.
No logro describir qué es eso que recuperé, como una energía que no puedo describir más que inicial, creo que recuperé un inicio.
El cambio era suave no como en la ciudad por la electricidad y la jornada.
Fuera de esa sábana que por un rato fue nuestro hogar.
Paso a paso y segundo a segundo perdía interés por el rinoceronte y por su blancura.
Sonreí con un gusto crecido de mañanas previas.
El acento norteamericano caminando con chanclas y chongos altos.
Un valor estático, un rinoceronte se mármol.
El mundo volvía a quemar.
Una tercera voz irrumpió diciendo: ¡haz otro! Uno igual pero distinto.
IV.
Como hologramas que sólo podía ver con los ojos acostumbrados a la oscuridad.
Y sin querer golpeé las columnas que sostenían ese cielo.
Ese objeto era tan valioso y nadie lo tocaba, nadie lo movía o hacía algo con él. ¿un valor inmoldeable?
Voz ronca y pesada.
Lleno de una frescura tibia e inmóvil.
Después de aquello, creí entender algo. Tal vez dejé de entender algo.
Nota emocional.
La ternura de escuchar a un gringo decir: La idea de asumir se presenta de vez en cuando.
Qué cómodo es estarse en el propio cuerpo.
Algo le debo que no sé muy bien qué sea ni cómo pagarlo.
V.
Paso a paso y segundo a segundo perdía interés
Pensamos que no había nada, porque los huecos eran más grandes que nuestra capacidad de ver
Con los ojos cerrados pude observar lo siguiente:
Pasar de una etapa a otra brincando sin temer a descifrar-la
toda en su naturaleza y composición, en su imagen,
enigma… un enigma compartido y…
así caminé, brinqué cada punto y luego paré
poco tiempo después, un segundo respiro nuevo
se siente comer de esta forma, para lograr una figura
que se va al cielo, voz que se va al cielo, un hálito del universo que nos envuelve
al no tocarnos, para hacernos saber que también estamos
a las 5 de la tarde.
Siempre amanece.
VI.
Un temblor al amanecer me despertó
Y posó su atención en lo blanco, lo duro, lo frío
Que nos llama tanto la atención.
Que se pierde al tratar de constituir algo que no vemos
Como los ciegos, con la fuente, con el cuerpo que se enfrenta al universo.
Uni verso. Uni lateral. Uni dad.
Estructuras arbóreas floreciendo y creciendo.
Como una colmena habitada e abejas jóvenes, inaugurando
Ese espacio que no conocía,
Sabía lo que no era y eso es también conocer
El poder de la tierra, territorio, magnetismo, pertenencia, gravedad
De una manzana que no resiste la delicia de su peso.
VII.
Inició un periodo en la historia en el que sólo queríamos jugar
Con las nociones de un espacio que nos afecta
Pero lo entendemos y así hablamos en plural
Guardando el sentido común
Como un ciego mascando chicle así de común logró distender
La atención, erosionando el sentido de lo que ya no es,
Ahí hay un presente y un ya,
Insistiendo una y otra y otra y otra vez,
No me gusta estar sentada con los oídos cerrados y el cuerpo
Que se aligera al andar paso a paso…
Hay que dejar que reposen los colores.
#atlassincronico#alumnos47#piezasincronicoatlas#cadaver exquisito#texto#mariajosesesma#joshuajobb#paolafernandez#danielalibertad#ModuloLiteraturadeViaje
0 notes
Photo
Cadaver
0 notes
Text
Todo estaba ahora de color azul. Paola Fernández
Todo estaba ahora de color azul, pero uno nebuloso que si uno se distraía parecía
violeta, violeta porque el sol se resistía a penetrar la penumbra que forjaban dos
manos, ¿quién dice que no se puede tapar el sol así?, si no con un dedo, sí con
varios.
Olía a sal y un parpadeo duraba lo que dos vueltas a la calle, éste lugar era suave
¡qué cómodo es estarse en el propio cuerpo!, en ese todo lleno de una frescura
tibia e inmóvil.
Sin querer golpeé las columnas que sostenían ese cielo, comenzó a caer sobre
nosotros, sólo nos acarició la cara al caer,
nuestras manos tuvieron que emerger de nuevo al sol, fuera de esa sábana que
por un rato fue nuestro hogar. El mundo volvía a quemar, era rojo de nuevo; nos
obligaba a erguirnos una vez más.
Paola Fernández
0 notes
Text
Escribiendo en la Ciudad de México. Daniela Libertad
0 notes
Video
tumblr
Detrás de una conversación. Zapotitlán Salinas, Puebla. 2016
#atlassincronico#danielalibertad#zapotitlan salinas#mauriciodelapuente#josemariarubio#joshuajobb#enriquejezik#alumnos47
0 notes
Video
tumblr
El día que fuimos al billar.
Videito de Carolina featuring Irak.
0 notes
Photo
0 notes
Video
vimeo
Tetecho-Tartamudo JMR
#alumnos47#atlassincronico#valle de zapotitlán#JMR#video#animación#amanecer#viento#cactus#piezasatlassincronico
0 notes
Photo
0 notes
Photo
0 notes
Photo
0 notes
Text
Uno igual, pero diferente - Texto Joshua Jobb
Después de aquello creí entender algo o tal vez dejar de entender algo... recuerdo un objeto blanco en una mesa a la orilla de un cuarto, un objeto con un valor desconocido a mi razón, no lograba entender porque ese objeto era tan valioso y nadie lo tocaba, lo movía o hacía algo con él. ¿Un valor estático?¿Inamovible? ¿Inmoldeable? En cada intento por acercarte a su blancura, con intenciones vagas de decifrarla, una voz ronca y pesada se hacía presente con un grito espeluznante, alejándote por completo. No hace mucho, en uno de los varios intentos por observar al objeto de cerca, la voz desapareció, o mejor dicho cambió... En su lugar, una segunda voz ocupó el espacio y a diferencia de la primera, ésta me invitó a tomar el tan preciado objeto. Poco tiempo después al tenerlo entre las manos me di cuenta de que esa blancura pertenecía a un rinoceronte de mármol. Paso a paso y segundo a segundo perdía interés por el rinoceronte y por su blancura, pero sabía que pronto tendría que devolverlo a su sitio, por ahora vacío, antes de que la voz ronca y pesada regresara.Sin saber qué hacer con él debido a su rigidez, decidí regresarlo sin más, pero... poco antes de lograr este cometido, una tercera voz irrumpió diciendo: Haz otro, uno igual pero distinto, uno con otro material... Y lo hice de barro.
0 notes
Photo
0 notes
Photo
0 notes