Hay un amor, ese amor para todas las vidas, ese tan sublime, sagrado y pleno que no se cansa de amar, que no se cansa de besar la misma alma por toda la eternidad... Ese amor único, ese amor incondicional, ese amor que brilla en el gozo, que no sabe de tiempos, que elige sin cesar esos únicos latidos que por siempre ha de amar.
"You - you alone will have the stars as no one else has them...In one of the stars I shall be living. In one of them I shall be laughing. And so it will be as if all the stars were laughing, when you look at the sky at night...You - only you - will have stars that can laugh..."
Si señores, el amor de mi vida, de quien no supe nada durante 13 meses porque estuvo a 10.000 kms de aqui, por una jugarreta del destino volvió a mí, volví a oír su voz y su risa, mi alma pudo tener sosiego y recibí ese regalo que creí inalcanzable.
Me pensó, me extrañó, pasé por su alma de vez en cuando, sin embargo, el destino es tan perfecto que fraguó lo mejor para él, para que pueda cumplir sus sueños y se irá de nuevo.
Yo, lo amo tanto que solo puedo ser feliz al verlo cumplir sus anhelos, y pedir al universo cada día como lo hice todo este tiempo, para que sea todo lo feliz que se merece, tan feliz que no lo pueda creer.
Esa sensación agridulce es difícil de expresar, pero el amor, como dice la canción amigos míos, es mucho más fuerte.